Marcos abrio la puerta de golpe y observo a Draco quien estaba retorcido en la cama.

-Draco- lo movio de un lado a otro- Draco, despierta-le pego, el rubio solamente maldecia- ¡Draco Lucius Malfoy Black, levantate ahora mismo!

El rubio se levanto de golpe y se sento en la cama mientras golpeaba con un pie el piso.

-¡No mama, no quiero despertar!- grito cruzado de brazos, luego su semblante cambio y observo a Marcos- ¿Que quieres?

-¡Uy lamento ofenderte con mi amistad!- contesto el chico alzando los brazos, se sento a su lado y murmuro- Necesito tu ayuda, se trata de tu tia.

Draco fruncio el ceño y luego abrio los ojos.

-No puede ser que la tia Carlota este viva, esa vieja tenia mas de 200 años, no y no Marcos, no quiero visitarla ademas siempre me golpeaba con su baston.

Marcos se golpeo en ka cara.

-Me refiero a Bellatrix, tu otra tia- contesto el pelinegro- Voldemort ha regresado a la vida todos sus mortiferos y necesitamos saber sobre...- se quedo callado y lo observo- ¿Que son los sagrados Veintiocho?

Draco observo la ventana, la tormenta se habia vuelto a soltar y las gotas de lluvia golpeaban el colegio.

-Los sagrados veintiocho, eran las familias mas puras del mundo magico- hablo el rubio y se paro de la cama- Creian que la pureza de la sangre en primordial en la familia, muchas veces las familias puras se unian para que la sangre siguiera. Pero despues de el Cambio de Casa en Hogwarts las cosas cambiaron.

Marcos observo la lluvia mientras lo escuchaba.

-Por eso secuestra niños, quiere volver a limpiar el mundo magico- murmuro Marcos y observo a Draco- Necesitamos ir al ministro de magia.

Draco hizo cara de asco.

-¿Para que o que?-pregunto.

-Extiste un libro, los sagrados Veintiocho, ahi es donde explica todo eso de la sangre, debemos robarlo.

Draco rodo los ojos con aburriemiento  y se tiro a su cama.

-Si logramos entrar, jamas saldremos, no se quien esta a cargo del ministro de Magia ahora-contesto el rubio observando el techo.

-Umbridge, Dolores Umbridge- contesto Marcos.

Un trueno resono en la habitacion cuando  el rubio se levanto de golpe y lo miro.

-¿Esa maldita esta viva?- pregunto Draco-¿Pero como?

-Mi padre- contesto- Ha logrado revivir a sus seguidores.

Draco sentado observaba el piso, si iban a ir al ministro de magia necesitaban a una persona mas.

-Bien, iremos ahora y regresaremos antes de que amanezca- ordeno el rubio- Ve por Victor.

-¿Me estas ordenando?- pregunto Marcos.

-Si, ¿Por que?-pregunto el rubio.

-Es solo que hace mucho tiempo no veia eso, desde que te casaste te haz vuelto un mandilon- contesto riendo Marcos.

El pelinegro se levanto en busca de Victor quien dormia con tranquilidad en un sofa de la casa, camino hasta el con sigilo hasta que piso algo.

-¡Maldita sea, Naginni, me espantaste!- grito el chico.

La serpiente le mostro los colmillos con enojo y se acomodo al lado de la chimenea.

-No te vayas a quemar, serpiente del demonio- murmuro Marcos con enojo y se acerco a Victor- Oye despierte, necesitamos tu ayuda.

-Vete al demonio-murmuro el chico y se cubrio la cara con la almohada.

Marcos se cruzo de brazos ¿Como iba a despertar a Victor sin que gritara? Luego sonrio.

-Fleur sabe que dejaste los calzones colgados en el baño- le murmuro.

Victor abrio los ojos de golpe y se levanto.

-¡Ay no, debo quitarlos rapido!- contesto.

Iba a correr hacia el baño pero Marcos los jalo de la camisa deteniendolo.

-Era broma- rio el chico ante la mirada de Victor- Draco y yo necesitamos tu ayuda.

-Ay no, otra vez, la ultima vez que pidieron mi ayuda estuvimos en prision- contesto Victor señalandolo.

Draco bajaba las escaleras con sigilo.

-Callense, despertaran a todos- pidio el rubio.

-No ire a ningun lado-contesto Victor cruzado de brazos.

-Te necesitamos- pidio Draco.

El pelinegro hizo una mueca, tal vez fuera, total ya lo habian despertado.

-Esta bien- hablo- Si vamos a ir a algun lado, llevare a Naggini.

-¡No, no quiero a esa asquerosidad a mi lado!-contesto Draco.

La serpiente se arrastro hacia ellos y subio al cuello de Victor enredandose en el.

-Naggini va o nada- hablo el chico con una sonrisa.

Marcos y Draco se observaron y asintieron.

-Bien, pero la quiero dos metros lejos de mi- pidio Draco.

Victor asintio.

-Bien, tomen mi brazo- pidio Draco.

Ambos chicos lo observaron con asco.

-Ni naggini quisiera tocarte- hablo Marcos.

-¡Ya!- pidio el rubio- ¡Debemos usar un traslador si queremos llegar rapido, y Hermione me enseño a hacerlo!

La serpiente se puso al lado de Marcos quien la miraba con asco.

-Marcos, por favor, agarrala- pidio el chico.

El chico con asco puso su mano en la serpiente.

-Se siente rasposa- digo haciendo muecas.

La sala desaparecio llevandolos al ministro de Magia donde los tres cayeron al piso.

-¡Ay no, Naggini, quitate!- grito Marcos arrastrandose en el piso mientras la serpiente se movia con lentitud lejos del chico.

Victor se levanto y tomo a Naggini quien con enojo se enredo en el cuello del chico.

-Vamos- murmuro

Empezaron a caminar por el ministro con sigilo, varias veces tuvieron que esconderse de los nuevos seguidores de Voldemort.

-Busquemos ese libro pronto y larguemonos de aqui-pidio Draco mientras caminaban volteando de un lado a otro.

-Si nos encuentran, moriremos- murmuro Victor.

Detras de unos pilares Marcos observaba a las personas que pasaban, todos mortifagos y vestidos de negro, observo con atencion tres personas y luego a ellos. Tal vez tenia una buena idea.

***

-¡No, no y no!- griro Draco ante la idea se Marcos.

-¡Oh vamos Draco! la señora esta de tu estatura, ademas es rubia- contesto Marcos.

Victor observaba a los tres aurores que se hayaban inconsientes en el suelo.

-No tenemos mucho tiempo- contesto Marcos- ¿Tienes alguna otra idea acaso?

-No y Victor tambien cree que es...

-Buena idea- acompleto Victor con una sonrisa.

Draco lo miro con la boca abierta.

-¿Y quien sera la mujer?- pregunto el rubio cruzado de brazos, ambos chicos se sonrieron.

Draco maldijo.

***

-Camina derecho, asi no camina una mujer- le murmuro Victor detras de el.

-Callate- pidio Draco intentando no caer se los tacones.

-¡Amanda With!- gritaron a sus espaldas.

Lentamente estos se giraron. Una persona de rosa los miraba con una sonrisa.

-Oh no, la perra rosa- murmuro Draco.

-¡Te he estado esperando todo el dia Amanda, ahora sigueme!- grito y se giro a ambis chicos- ¡Y ustedes dos vayan a hacer su trabajo!

Dolores Umbridge tomo del brazo a Draco quien miro a los chicos pidiendo ayuda.

Ambos chicos se observaron y caminaron a una distancia considerable lejos de Umbridge.

-Ahora que- susurro Marcos

-Debemos entrar a esa sala tal vez ahi este el libro- murmuro Victor.

Las puertas de roble se abrieron y con rapidez Marcos y Victor entraron escondiendose de la gente entre las sillas.

-Busca algo diferente en esta sala- pidio Victor.

-¿Algo como que?

-Un libro- contesto Victor.

Marcos busco con la mirada algun libro, se encontro con mucha gente del ministro, muchas sillas, una mesa y una rubia candente.

-Mira esa rubia candente- señalo entre risas Marcos, Victor lo miro con el ceño fruncido.

-¿De cual te fumaste?- pregunto Victor- La rubia es Draco.

La cara de Marcos hizo una mueca.

-Lo olvide-confeso.

Tres golpes en la mesa hizo a toda la gente callar y sentarse en sus respectivos lugares.

-¡Orden!- grito el primer ministro- Ahora escucharemos a nuestra primer ministro, Dolores Umbridge.

La mencionada se levanto con una sonrisa.

-Gracias Edward- hablo-Como sabran el mundo magico ha cambiado y para bien-rio- La llegada del señor tenebroso sera un triunfo para nosotros, algo que no se esperan el mundo. Ahora nosotros tendremos mas poder, gracias a este libro- señalo- Con el la comunidad magica regresara a ser pura eliminando mestizos y muggle, tal y como lo quiere el señor. Cada muerte de un niño lo ha fortalecido y esperamos con ansias su regreso.

La sala estallo a aplausos, muchos en coro gritaban: "Larga vida a Lord Voldemort".

-Gracias primer ministro-  sonrio Edward- Ahora propuestas.

La sala volvio a hablar, unos gritaban y otros reian. Entre las risas una hizo estremecer a Victor. Una melena negra con rizos se abria paso en la multitud. Bellatrix Lestrange.

-¡Yo propongo matar a Harry Potter!- rio con demencia.

-¡No!-rugio otro-¡Ese niño es de mi Lord!

-¿Niño?- murmuro Victor- Si esta igual de viejo que nosotros.

Marcos lo jalo del brazo y siguieron caminando entre la gente, nadie se habia percatado de ellos gracias al gran alboroto que habia en la sala.

Draco observaba con atencion el libro, solo unos pasos y seria suyo. Se giro a Marcos y Victor quienes al igual que el estan cerca.

Los tres se observaron con complicidad, debian actuar rapido. Victor solto un gran suspiro. Era ahora o nunca. Los observo de nuevo y asintio.

Draco se levanto de la silla y corrio hacia el libro, el hechizo se desvanecio devido al agua que rodeaba al libro. De inmediato Marcos y Victor se pusieron a su lado.

-Victor- murmuro Bellatrix haciendo callar a todos y posando sus miradas en los tres chicos.

Los tres se giraron al publico.

-¡No los dejen escapar!-grito uno y los gritos de todos resono en el ministerio.

Victor tomo a Naginni y las manos de los chicos y cerro los ojos imaginando un lugar. Y antes de que los hechizos de todos impactaran en ellos, desaparecieron.