Bajo la luz del fuego,  en bibilioteca Theodoro Nott revisaba por milesima vez el libro.

-La historia de los sagrados veintiocho, blah, blah, blah- hablaba para si mismo mientras cambiaba las paginas- Las familias mas famosas del mundo magico blah, blah, blah, familias malditas, blah blah- paso de nuevo las hojas, su cara estaba recargada en su mano derecha- Soy el conde Dracula, blah, blah, blah.

Acosto su cabeza en la mesa y observo desde ese angulo un lado a otro, todo estaba oscuro, solamente su varita iluminaba donde estaba. Cerro los ojos un momento, estaba cansado y la media noche ya habia pasado.

Los estantes del la libreria comenzaron a moverse con lentitud cosa que el chico no percato, varios libros comenzaron a caer uno por uno pero el chico no se movio, podria ser cualquier cosa, un maestro u otro estudiante. El aire comenzo a soplar con rudeza haciendo que Theo alzara la cabeza, varios libros volaban a su alrededor como pajaros en parvada, algunos volaron cerca del chico sobresaltandolo. Algunas velas comenzaron a prenderse con lentitud hasta que al final lograron verse con claridad, el aire seguia soplando y el chico miraba de un lado a otro buscando alguna respuesta de ese repentino aire.

El libro que estaba leyendo comenzo a hojearse con velocidad gracias al viento, varias estanterias cayeron causando un fuerte sonido haciendo gritar al chico, las velas se encendian y apagaban con rapideza y una vela cayo al piso causando el incendio.

Los ojos del chico se abrieron con asombro, sin poder moverse como si sus pies estuvieran pegados observaba sin parpadear. El fuego lo rodeaba pero sin lograr tocarlo, solamente el calor intenso le hacia temblar. Las llamas se comenzaron a alzar y de pronto se formo una forma que al principio no interperto pero con forme se hacia lo vio: una serpiente.

La serpiente bailo entre las llamas y volo por toda la sala, varios libros se incendiaban a su paso y Theo corrio para no ser quemado. El paso se cerro y observo de un lado a otro buscando una salida pero no la habia. La serpiente en llamas llego hasta el y mordio el libro, luego desaparecio. Una cara se logor ver entre el humo pero el chico no lo vio.

Al abrir los ojos, el castaño observo de un lado a otro y luego al libro que estaba intacto, todos los libros que antes se habian caido estaban acomodados y la luz de la sala brillaba ante sus ojos.

Fruncio el ceño observando el libro. Entrecerro los ojos pensativo. Si eso no fue su imaginacion ese libro era importante y alguien lo queria.

-Y si este libro es...- murmuro el chico para si, luego observo de un lado a otro para ver si no habia nadie- ¿Un horrocrux?

Se quedo callado pensando esa idea.  Una hoja caia volando frente a los ojos del hombre. Cayo en el suelo.

Con mano temblorosa alzo la hoja. Al lenvantarla una iniciales decian:

T.M.R.

El fruncio el ceño.