21. VISITANTES (II)
Harry se dirigió a su habitación, solo interrumpido brevemente por el llamado de Sirius para que los padres de la chica se retiraran y despidieran. Aparentemente mucho más tranquilos que momentos antes. La pelo castaño se encerró en su habitación a finiquitar su artilugio hasta que casi a las diez de la noche dió un grito llamándole.
—¡Harry!— Llegó hasta su habitación, donde entró para tomar al chico del brazo que jugaba un videojuego, sin prestar atención a la bruja en ropa interior que dormitaba sobre la cama— Lo logré.
—¿Ya?
—Bueno, estuve trabajando mucho más tiempo, ahora solo necesitaba terminar el tallado, pero el diagrama de las runas ya lo tenía hecho en un cuaderno— Sonrió la otra guiandole hasta la otra habitación. Tonks les siguió de cerca aún somnolienta.
—¿No podíamos hacer esto mañana? Ya el sueño empieza a ganarme— se quejó la peli rosa.
—Ven y colócate sobre esto, aquí— señaló Hermione emocionada mientras llevaba a Harry hasta el aro de metal.
—¿Esto es seguro?— preguntó él.
—No te voy a matar Harry, ya tienes a varios detrás de tí por eso. Y no necesito azkaban para tener el cabello alborotado— sentenció esta aún moviéndose por la habitación. Se detuvo al frente del chico y se agachó para activar las runas sobre la superficie metálica del artilugio semejante a una base redonda. Varias formas brillaron del mismo tono azulado de antes y un segundo después un número apareció en una pequeña placa de aluminio.
—¿Esto está bien? digo, es bastante alto en comparación con el mio— Se movió para que Harry pudiera ver un lindo 13568 brillando.
—¿Qué significa el número?— preguntó Harry.
—Significa que podrías lanzar trece mil quinientos hechizos aguamenti— Comentó Tonks— Quiero probarlo.
—¿Qué número tienes tú?— Preguntó Harry a su compañera de curso.
—Tengo apenas ochocientos treinta— Se encogió de hombros antes de agacharse nuevamente para activar el artificio con la otra chica— estás en ropa interior.
—Si claro, así la ropa no se interpone en mi medición— Expresó la otra con naturalidad. Hermione activó el mecanismo e hizo una nueva lectura. El número se formó sobre la placa— Debo ser poderosa, con 32356 puntos. No me sorprende tampoco, soy más poderosa que tu primo— guiñó un ojo a Harry con malicia.
—Ahora siento que debo entrenar más, Harry tiene mucho más puntos que yo— Hermione frunció el ceño cruzándose de brazos. Y Tonks tiene treinta y cinco veces mi cantidad.
—Bueno, yo hago magia casi todo el día, todos los días— Comentó la aludida bajandose— Supongo es normal que sea tan alto en mi caso.
—¿Magia todo el día?— Preguntó Hermione.
—Por esto— El cabello pasó de un rosa a un azul suave mientras que sus facciones cambiaron ligeramente y sus ojos se tornaron grises— ¿te gusta?
—¿Eres un...?
—Metamorfomago, agradezco lo mantengas en secreto. pero si, esto consume magia normalmente, no tanta como al inicio, pero aún lo hace, eso explica mis cantidades de magia. Pero las de Harry son muy altas, esperaba algo más semejante a lo tuyo.
—¿Por qué lo dices?— Preguntó Harry sentándose en la cama.
—He estado dándote algunas clases, aprendes a velocidad monstruo, y puedes replicar casi cualquier cosa que se me ocurre. No es normal que tengas tanta magia, te he pedido que crees escudos casi sólidos y mantengas hechizos por tiempos inauditos para poder agotar tu magia. Y Apenas acabas de terminar tu primer año en Hogwarts, para el tercero tendrás mi nivel, serás un monstruo como mago.
—Deberíamos enseñárselo a Sirius.
—Pero mañana, o pasado, Sirius debe estar cansado, hoy terminó la piscina y mañana llegará Karen y de seguro tu otra amiga. Es un día que considera importante y quiere que todo salga bien. Deberíamos dormir— Bostezó— todos, en especial tu Hermione, lograste algo genial, sólo espera el día de mañana para poder comprobarlo mejor. Y felicitaciones, creo que hiciste algo increíble.
El día siguiente la mañana dentro de la residencia Black fue agitada, Daphne llegó a tempranas horas en compañía de un elfo doméstico y un pequeño bolso para pasar ese día. Su permiso de estadía era de apenas veinticuatro horas.
Por otra parte Sirius estaba feliz al notar que su potencial mágico tenía el número 37452 alegando ser superior al de cualquiera en la residencia. ello a pesar de ser apenas un poco por encima que el número de Tonks. Daphne por otra parte marcaba el número 2789 como cifra. Punto que alegró a esta, pero desanimó mucho a Hermione al sentir que era la menor entre todos los presentes.
La revelación de la piscina fue el evento principal. Tanto Sirius como los elfos estuvieron trabajando en la expansión de la habitación del fondo y construcción de una alberca cuadrada de algunos metros de largo. El lugar se hallaba techado, pero la luz solar entraba iluminando el lugar.
—Luce genial— Le felicitó su ahijado antes de que el grupo se abalanzó dentro del agua a disfrutar de un día de diversión.
Karen llegó unos minutos más tarde con su rostro dulce y algo de comida preparada. Fue presentada ante Tonks, Hermione y Daphne, mientras que a los elfos se les encomendó hacer otros oficios en la casa sin ser descubiertos por la mujer.
—Es una gran piscina. ¿Seguro que esto no es terreno de la otra casa? Es extraño, nunca vi una casa tan grande como esta, menos en este barrio.
—Se compraron ciertos terrenos, la familia Black es bastante antigua.
—Lo sé Sirius, me lo has dicho bastante, aún así me sorprende ¿Por qué nunca antes me mostraste esta piscina?
—Pues no estaba limpia ni llena, era un cúmulo de suciedad— Explicó el otro.
—Es bellisima. Iré a cambiarme, no se diviertan tanto sin mí.
—¡Sirius cierra la boca!— gritó Harry desde la alberca antes de que Tonks saltara sobre él y lo hundiese en el agua. A decir verdad él no se hallaba en mejor posición. Se hallaba nervioso mientras jugaba con las chicas en el agua. Daphne usaba un traje de baño de dos piezas, mismo que dejaba ver el crecimiento que su cuerpo sufría, en especial en la parte delantera. Hermione por otra parte ahora se hallaba con un enterizo, y aún así sus piernas y la forma de su cadera era visible.
Para empeorar las cosas, no podía verlas sin recordar la representación de Tonks con ambas chicas. Su mente se hallaba divagando y sus sentidos se agudizaban en aquella dirección, pero para su gran pesar, siquiera sabía cómo acercarse a cualquiera de las chicas. Era como tener la comida frente a él y no saber cómo usar los cubiertos.
Tonks tampoco ayudaba, su traje de baño era más revelador de lo necesario y su cuerpo escultural dejaba sin aliento con facilidad.
—Lo digo en serio Hermione, muchas personas estarían interesadas en saber cuál es su nivel mágico— Daphne jugaba con el agua al borde de la piscina.
—Pero solo es un invento que hice.
—Concuerdo con Daphne, podrías venderlo— Tonks nadaba de un extremo a otro— La simple duda haría que muchos quisieran saber su nivel. Y para los aurores sería vital. Saber el nivel de magia permitiría organizar escuadrones o tener un ranking.
—Es difícil, esa muestra que hice salió en más de treinta galeones— Comentó la chica.
—Puedo poner el dinero por la mitad del negocio— Comentó Harry tratando de no ahogarse, afortunadamente se había estirado un poco las últimas semanas y sus pies tocaban el suelo.
—¿De verdad se podría? ¿Pero cómo lo vendería?
—Puedes colocar un anuncio en el profeta, o el quisquilloso y colocar el precio. la venta se podría hacer por medio de lechuzas. Muchos negocios empiezan así— Señaló la aspirante a auror.
—Yo creo que podría ser un gran negocio. No todos los días creas algo tan genial, deberías aprovechar— Agregó la Slytherin— Yo me uniría, pero la verdad en este momento mi familia tiene otras preocupaciones.
—¿Lo que me dijiste en correo?— Le siguió Hermione.
—Esa es una parte, también está otro asunto— harry sintió que la chica le dedicó una mirada— Y luego está el hecho del viaje a la granja, mi mamá decidió viajar a una de los invernaderos para revisar la producción de este año— Se encogió de hombros.
—¿Tienen plantaciones?— preguntó Tonks.
—Algo de asfodelo, ajenjo, plantas revitalizantes, la mayoría es material para pociones. Es el negocio de la familia.
Sirius por otra parte estaba deleitado con Karen y su traje de baño negro con lunares. El hombre servía algo de comida y jugos mientras que la mujer se adentraba en la piscina y saludaba al grupo más joven en el otro extremo.
—¿Crees que se casen?— Inquirió Tonks devolviendo el saludo.
—Ella es linda, creo que de verdad están enamorados— Contestó Harry.
—Parece bastante amable con él— Expresó Hermione.
—Lo es— Corroboró Harry.
—Bueno, al no saber la verdad, pueden estar seguros que no está detrás del apellido Black o la herencia.
De pronto todos voltearon en dirección a la puerta del lugar cuando se escuchó un gran estruendo. El sonido de ollas y diversas cosas de metal cayendo dejó a todos con incertidumbre y expectativa.
—Kreacher y Gali tienen órdenes de no hacer ruido— Harry salió de la alberca todo empapado y se movió hasta donde estaba su ropa. Tonks por su parte hizo lo mismo. Entonces la puerta que daba a la casa explotó y un trío de elfos domésticos entró en el lugar abrazados y girando entre sí.
—¿Qué rayos sucede?— preguntó Sirius en un grito.
—¡AHHHHHH MONSTRUOS!
—¡Un intruso amo!— Gali se hallaba sobre la cabeza de un elfo desconocido jalando sus orejas.
—¿Qué rayos es eso?— Tonks tenía la varita levantada y sin dudar casteó la magia inmobilus, sin embargo, alguna especie de barrera impidió su magia y el amasijo de elfos cayó al agua. Al instante una burbuja de aire se formó.
Karen salía del agua gritando, mientras Sirius corría detrás de ella.
—¿Qué hacen ustedes dos aquí?— Harry gritó— ¡Deténganse justo ahora!— Kreacher y Gali salieron del agua con un pequeño estallido y un tercer elfo apareció frente a ellos.
—Lo sentimos amo— Nuestra orden primordial es detener a cualquier intruso en la casa— Gali se arrodilló— Gali se castigará por esto amo, Gali no tiene palabras para describir cómo se siente. Gali intentó hacer todo lo posible para detenerlo, pero el elfo idiota no quizo detenerse, lanzó las cosas y saltó por las habitaciones.
—Elfo inutil, inmundicia que deshonra a la raza...— kreacher recitaba al lado del otro.
—Dobby lo siente, Dobby debía venir. Harry Potter, hace mucho tiempo que Dobby quería conocerlo, señor, es un gran honor.
—Parece que tienes un club de elfos fans de Harry Potter— daphne llegó dándole un codazo al chico.
—Yo iré a ver como están las cosas entre Sirius y Karen. Supongo que ya no hay nada que ocultar— Tonks se secó y vistió al instante.
—Lo siento, Dobby, pero llegaste en muy mal momento, y... — Intentó respirar mientras karen gritaba desde la cocina de la casa— No fuiste muy educado al ingresar a la casa.
—Dobby lo siente— Gimió el elfo— Dobby no pretendía causar problemas, pero la situación fue muy extraña y luego se vió atacado por dos elfos domésticos.
—¡Irrumpiste en una casa, una que además se encuentra bajo encantamiento fidelio!— Expresó Daphne.
—Calma Daph, hay que primero escucharlo, tampoco lo insultemos sin preguntar.
—¿Preguntar? ¿A Dobby? ¿Como un igual?— El elfo empezó a llorar copiosamente mientras Kreacher rezongaba aún más.
—No es normal que traten tan amablemente a los elfos Harry— Expresó Daphne a su lado. Hermione por su parte parecía deseaba lanzarse y abrazar al pequeño sujeto, pero se mantuvo a raya, conteniendose debido a lo serio del asunto.
—¿Por qué viniste hasta aquí, Dobby?
—Dobby debe advertir, aunque luego deba machucar sus orejas contra el horno. Debe decirle al señor Harry Potter.
—No necesitas machucar nada, solo explicame tus razones.
—Dobby ha oído de su grandeza señor. Dobby escuchó que recientemente el señor Harry Potter se enfrentó nuevamente con el señor tenebroso.
—Tiene que ser familia de alguien del colegio Harry— susurró Hermione, punto al cual los otros dos estaban de acuerdo.
—¿Quién te envió?
—Oh señor, nadie envió a Dobby, por eso Dobby deberá castigarse, si su familia que estuvo aquí— El elfo hizo un chillido y acercó sus manos al cuello para ahocarse— Castigarán severamente a Dobby— rompió en llanto.
—Eso es porque no deberías estar aquí, elfo inutil y maleducado, escoria de la raza— Kreacher continuaba con su cadena de insultos— Moverse sin el permiso de sus amos, la deshonra de este elfo, el oprobio...
—Con calma Harry, quizás tengas elfos muy leales, pero no todos los elfos son iguales, sin embargo, puden ser muy serviciales, si dices algo que lo coloque en contra de su familia es probable que lo suelte todo, pero tendrá que cometer suicidio después de esta reunión— Explicó daphne acercándose a su oreja.
—Bien— Aseguró el chico mirando ahora al elfo nuevamente— ¿Por qué viniste Dobby?
—Dobby— gimoteó— Dobby debe asegurarse que Harry Potter no regrese a Hogwarts este año.
—¿Qué?— Harry reaccionó de inmediato.
—Dobby escuchó señor, hay un complot para hacer que cosas horribles sucedan este año en Hogwarts. Harry Potter debe entender, no debe ir este año, será culpado señor.
—Creo que en verdad está preocupado Harry— Expresó Hermione a su lado.
—Pero no puedes prometerle nada al elfo Harry, puede ser tomado como un contrato de vínculo mágico— Expresó Daphne con cuidado. Sirius ya le había advertido sobre el peligro de las palabras frente a un ser mágico como los elfos domésticos.
—Iré a Hogwarts Dobby— Expresó él.
—No, no debe señor, Harry Potter debe jurarlo señor, no debe ir a Hogwarts.
—Pero— le detuvo— Puedo prometer que estaré más pendiente de cualquier evento en la escuela, sin contar que estoy entrenando para no tener tantos problemas. Sea lo que fuese que sucediese.
—¿Está entrenando señor?
—Lo estoy— Sonrió el chico— estoy entrenando con una auror— Mintió un poco al respecto.
—El señor es muy modesto, sigue entrenando a pesar de su victoria contra el señor tenebroso ¿puede Dobby visitarlo en otro momento señor? Dobby debe asegurarse, que al señor no le suceda nada malo. Los elfos domésticos sufrían mucho cuando estaba el señor tenebroso. aunque Dobby todavía sigue siendo tratado como basura— Empezó a gimotear, acto ante el cual Kreacher se apartó asqueado.
—Dobby, no quiero ser descortés— Expresó Harry, el elfo pareció atragantarse y gimió con mayor fuerza— pero necesito que te retires, acabas de causar un desastre bastante grande en la casa. Había una muggle cerca de nosotros.
—Dobby lo sabe señor, Dobby esperaba que el ministerio le prohibiera a Harry Potter ir a Hogwarts este año, pero los elfos del señor son muy serviciales, impidieron que Dobby tomase sus cosas, o que asustase a la muggle cuando esta se cambiaba la ropa.
—Dobby, debes irte. ¡Ahora!— Harry fue un poco más severo en su tono de voz. A decir verdad sentía que el elfo estaba restando todos los puntos de paciencia que podía tener, pero estaba consciente que no podía ganar contra tal criatura si esta se ponía seria, y cualquier acto solo empeoraría la situación. Aún podía escuchar gritos de parte de Karen desde el hogar.
El alocado elfo desapareció con el crack singular y el resto de los presentes pudieron calmarse— Kreacher, arregla la puerta y cualquier destrozo que hicieran intentando detener a Dobby. Y los dos, no quiero ningún tipo de castigo por el incidente de hoy— Expresó en tono determinado antes de que otro elfo desapareciera— gali acompáñame, hay que ver qué sucede allí adentro.
—¿Está bien que entremos? ¿Sirius no debería encargarse de esto?— preguntó Daphne.
—Sirius es genial, pero a veces puede ser un poco desastroso, y no es la persona con más tacto del mundo, si lo confrontan empieza a lanzar indirectas o argumentos sarcásticos— Explicó Harry.
No fue necesario adivinar donde se hallaban los demás. Los gritos y las ollas que volaban a la cabeza de Sirius desde la cocina eran audibles desde cualquier parte de la casa.
—¿Cuando pensabas contarme? ¿Si teníamos un hijo me lo pensabas contar cuando de pronto este volase?
—Los brujos no volamos, Karen. Al menos no normalmente, se necesita una escoba o un potente hechizo de levitación.
—¿Todo es una broma para tí? ¡Casi muero del susto cuando entraron esos monstruos!
—Te dije que no son monstruos, son solo elfos domésticos.
—¡Leí sobre los elfos en el señor de los anillos! ¡No son así!
—¡Te mintieron!— Respondió Sirius esquivando un sartén que voló a su cabeza.
—¿Tú hablas sobre mentirosos? ¿Sientes que puedes hablar sobre mentirosos?
—No quería mentirte, pero es algo complicado, hay leyes de nuestra parte.
—¡Claro, supongo que me ibas a decir al momento de firmar el documento de matrimonio! ¡Oye Karen, soy un mago, debes firmar este papel también para aceptar que no hablarás sobre magia y esas cosas!
—Pues básicamente si es así.
Karen parecía enojarse aún más por semejante respuesta del hombre, su rostro se hallaba rojo y las venas se notaban en su cuello y frente— ¿Cuando Sirius? ¿Cuándo? ¿En qué más mentiste?
—No soy tan fan de los beattles como dije, pero lo vas a entender cuando conozcas otros grupos de nuestro mundo.
—¿Por qué no los detienes?— Preguntó Harry viendo a Tonks en la puerta de la cocina observando la situación.
—Espero a que alguna olla le de a Sirius, o este se le ocurra detener alguna con magia y Karen se ponga aún más furiosa— Contestó la peli rosa.
—Voy a hablar con ella.
—No, tienes que dejar que ella se desahogue un poco. Él le ocultó algo importante, deja que grite un poco, si quisiera irse, ya se habría ido.
—¿No está molesta?— Preguntó Harry.
—Claro que está molesta, y mucho, por eso le está lanzando cosas. Pero ya lo perdonó, solo tiene que hacerle saber cuánto le duele el engaño— Explicó la mayor de los chicos.
—Entiendes bastante del amor.
—No, solo entiendo lo que es ser mujer.
—Yo te dije lo que sentía, te dije que estaba feliz de hallar alguien que me entendiera como tu lo hacías, alguien con quien podía hablar sobre cualquier cosa.
—Eso no fue mentira, sigo siendo yo. De hecho, no he hecho magia frente a tí jamás. tendría problemas con el ministerio si lo hiciera.
—¿Esas fueron tus razones para no hacer magia frente a mi?
—No, yo solo no sentí la necesidad Karen. Por favor, si me das un tiempo puedo explicarte todo lo que necesitas saber. Yo de verdad he planeado varias cosas contigo— Sirius se movía a los lados esquivando el ataque de la mujer— tengo un anillo para tí, compré los discos de música, los escuché, los libros. Por favor solo un par de minutos, con calma puedo explicarte las cosas, si aún así deseas estar conmigo, bueno, fantástico.
—Vámonos, estará bien. Es un idiota, pero dijo lo necesario— Tonks hizo que los demás regresaran a la piscina a disfrutar del resto de la tarde.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro