-¡¿Que les pasó?! -Preguntaron Tom y Sirius a Poppy, la cuál ya estaba con los nervios de punta por culpa de los dos pelinegros sobreprotectores que no la dejaban hacer su trabajo por tanta pregunta.

-Hacen otra pregunta más y los saco de la enfermería. -Los amenazó a punta de varita.

Lucius, Narssisa, Daniel, Miranda, Severus y Remus, los últimos dos habían llegado hace unos minutos con sus pelos revueltos y la ropa desarreglada. Todos aunque estuvieran preocupados no pudieron evitar soltar una risita, al ver a los dos hombres mirar aterrados a la medibruja.

Unos minutos después de silencio, solo interrumpido por la voz de Poppy murmurando hechizo tras hechizo, finalmente Poppy los miro.

-Estan bien solo se desmayaron por el estrés de la situación, en un rato despertarán y podrán ir a dónde quieran, pero nada de estrés. -Dijo mirando amenazadoramente a Tom y Sirius.

Todos asintieron de acuerdo, y Poppy se retiró a su oficina. Al rato como prometió Draco y Harry despertaron. Tom y Sirius los ayudaron a levantarse y salieron a los jardines para una tranquila y relajante caminata.

-Quiero cantar... -Dijo Harry.

-Puedes hacerlo si quieres. -Dijo Sirius.

-Digo que quiero cantar en el escenario con todos allí, para demostrarle a la cabra que no puede vencernos tan fácil, así como al trío de idiotas que no están listos para enfrentarnos ni mucho menos meterse con nuestros hijos. -Dijo Harry con una sonrisa.

-Si así lo quieres pequeño. -Dijo Miranda.

-Draco, ¿Quieres cantar conmigo la canción que cantábamos cuando todavía asistíamos a Hogwarts? -Pregunto Harry mirando a Draco con una sonrisa.

Draco solo asintió con la cabeza mientras también sonreía contagiado por Harry. Miranda chasqueo los dedos haciendo aparecer el escenario de nuevo y al público, Dumbledore y su grupo estaban atados y desarmados por precauciones.

Harry y Draco en medio del escenario con sonrisas brillantes que dejaron ciegos a más de uno empezaron a cantar.

Al terminar todos aplaudieron.

-Siempre hay que recordar que las apariencias engañan, y también que el mundo no se divide en blanco y negro sino que hay toda una gama de grises. -Dijo Draco.

-Y por favor dejen de clasificar la magia como blanca o negra, la magia es magia, y depende de cada uno el como la usemos, no hay magia buena y mala, solo personas usándola para el bien o para el mal. -Dijo Harry.

Todos aplaudieron una vez más.

Dumbledore y su grupo miraban enojado sin poder hacer nada, sobre todo porque cuando Miranda noto que iban a empezar con sus pendejadas no dudo en quitarles las bocas.

Cuando Draco y Harry bajaron del escenario, subieron Tom y Sirius.

-Esta va para nuestros maravillosos esposos y nuestros divinos hijos. -Dijeron con una sonrisa mientras miraban a los mencionados, de los cuales Draco y Harry estaban más rojos que tomate maduro.

Cuando terminaron todos Hogwarts, menos los indeseables, les aplaudieron, mientras que Harry y Draco corrieron al escenario a abrazarlos y besarlos.

-Queremos que sepan que... -Dijo Sirius.

-Sin importar que pase o que digan... -Siguio Tom.

-Ustedes son los mejor que nos puedo haber pasado. -Terminaron juntos ganándose otro beso de parte de sus parejas..

-Ustedes también son lo mejor que nos pasaron, ustedes y nuestros pequeños rayos de luz. -Dijeron Draco y Harry con lágrimas de felicidad recorriendo sus mejillas, lágrimas que fueron limpiada por besos de sus parejas.

-No lloren que nos harán llorar, y si lloramos sabemos muy bien quienes más van a llorar. -Dijeron Sirius y Tom.

Draco y Harry se limpiaron las lágrimas y les dieron sus sonrisas más brillantes.

-¡Miranda, estás manchando todo con sangre! -Dijo exasperado Damian mirando a su esposa con sangre saliendo por la nariz.

-No es la única. -Dijo Snape mirando como casi todas las mujeres presentes tenían sangrado nasal.

-Hasta Minnie tiene sangre saliendo por su nariz. -Dijo Remus no dando crédito a lo que veía.

-Es que son muy tiernos. -Dijo Bella con estrellas en los ojos y un pañuelo en su nariz.