Porlyusica tenía una expresión atronadora. "¡Mi casa no es un escondite!", gritó, levantando su escoba, con intenciones de golpear al intruso que estaba con un brazo vendado, sostenido por una venda más que pasaba por su cuello. Habían raspaduras en su rostro y moretones, así como otras heridas.

"Señora, no haré mucho ruido. Solo necesito descansar unos minutos... mejor un par de horas. Sí, eso es lo mejor", Harry suspiró un poco. Cuando imaginó el entrenamiento de Erza, fue algo duro, con muchos golpes. ¡Pero nunca espero que esa chica fuera tan despiadada! Harry se dio cuenta que, a pesar de que pudo ganar por sorpresa y ella desató su poder mágico total, todavía se estaba reteniendo. Era increíble, casi demasiado irracional.

La anciana, frunciendo el ceño, bajó su escoba. "Escuche que ya estás casi completamente recuperado de tu amnesia. Parece que mis pociones te han servido".

"Sí. Muchas gracias. De no ser por usted, no sé lo que habría sucedido conmigo".

"¿No te molesta?", Porlyusica, resopló. Sus pies se arrastraron un poco, caminando para sentarse en su mesa, abriendo un grueso libro de portada marrón. "Ya ni siquiera estás en tu mundo".

"Un poco, la verdad. Pero no se puede evitar, ¿verdad?", Harry sonrió un poco. "No sacó nada con volverme loco. Además, me gusta este lugar. Pero, ¿por qué pregunta? Por lo que me ha dicho el maestro, usted no es de la que haga este tipo de preguntas".

Ella se quedó en silencio, hasta que levantó un poco la mirada, viendo a través de la ventana, en el bosque. "Hace años, pase por tu situación. También vengo de otro mundo".

Harry inhaló un poco, sorprendido. Desde que comprendió su situación, pensó que era el único en pasar por algo así. Makarov nunca le dijo nada, pero eso podría ser algo normal. Sin el permiso de Porlyusica, no hablaría de tales cosas privadas y más aún cuando era algo tan delicado. La existencias de otros mundos ya crearía muchas dudas en las personas normales. Y quien sabe, ¿tal vez magos oscuros intentan hacer cosas terribles con esa información?

"¿Cómo es que tales cosas son posibles?"

"¿Te cuesta creerlo?", Porlyusica arqueó una ceja. "A pesar de que necesitas conocimiento y racionalidad para manejar la magia, cuando lo piensas detenidamente, sigue existiendo en el reino de lo irracional. Tomando eso en cuenta, la existencia de otros mundos, tampoco es que sea tan raro".

"¿Cree que haya existiendo alguien antes de mi, que viajara desde mi mundo?", Harry tenía mucha curiosidad sobre eso. Demasiada, de hecho. Todavía era incapaz de entender como es que sucedió en primer lugar. En el mundo mágico de donde venía, nunca se ha registrado algo como eso.

"Tal vez", ella simplemente se encogió de hombros. "Eres un mago, ¿por qué no lo investigas?"

"Oiga, si fuera tan fácil, ¿no lo habría hecho ya?", Harry frunció un poco los labios, un poco frustrado.

"Podrías ir a la Biblioteca Mágica. Ese lugar está repleto de información".

"¿Una biblioteca? ¿Dónde se encuentra?"

"No lo sé".

"Uh... "

Porlyusica puso los ojos en blanco. "Es un lugar muy famoso, pero parece cambiar constantemente de sitio. Cuando la encontré junto a Makarov y otros ancianos, estaba en el Reino Desierto, en la forma de un palacio rodeado de ilusiones".

"¿Quién creó algo así?"

Ella se encogió de hombros, una vez más. "Algunas otras historias, dicen que la han visto en el fondo del mar, en el cielo flotando sobre una isla, o incluso sobre un volcán. Nadie puede sacar algo de ese lugar, pero mientras estés dentro, puedes leer cualquier libro. Tu maestro aprendió el Sello de Defensa Máxima de esa Biblioteca Mágica".

"¿Es una magia poderosa?"

"Bastante", Porlyusica, asintió, ahora con un poco más de seriedad. "Por cierto, ¿cuándo te irás? Ya me estás irritando demasiado. Te golpearé, mocoso".

Gimiendo un poco, Harry se levantó de la silla. "Supongo que sí. Nos vemos, señora".

"¡No! ¡No regreses más!"

Negando con la cabeza, él simplemente abrió la puerta, un poco divertido por el disgusto que tenía la anciana por las visitas. Afortunadamente, había podido descansar adecuadamente por unos momentos, y ella fue lo suficientemente amable como para reparar el hueso de su brazo.

"Biblioteca Mágica... ", murmuró con una expresión llena de interés. Las posibilidades de encontrar algo relacionado a los viajes dimensionales, era muy baja. Porque si Porlyusica lo hubiera hecho, entonces no estaría en Earth Land, ¿verdad? Pero incluso si esto no era una solución, todavía se veía como una aventura emocionante para él.

"Ah... ", Harry se detuvo al darse cuenta que se había olvidado de algo. Devolviéndose corriendo, abrió la puerta de la casa en el árbol. "¡Señora!", su gritó hizo que ella se sobresaltara. "¡¿Sabe de algo que pueda ayudarme a usar magia con los ojos?!"

"¡¡Te mataré!!", gritó Porlyusica, completamente enfurecida por ser asustada.

Tuvo que salir corriendo mientras le arrojaban un montón de cosas. "¡Lo siento mucho!", gritó mientras saltaba las raíces de un árbol que sobresalían del suelo. Pero realmente quería poder usar mejor sus ojos. Cuando usaba su segunda forma Take Over, podía petrificar a otros. Lamentablemente, no podía usar una transformación parcial en sus ojos, todavía. Por otro lado, Take Over: Phoenix, no tenía magia ocular, pero quería intentar lograrlo. Si pudo tomar por sorpresa a Erza, una maga muy experimentada, entonces, sus ojos podrían convertirse en buenas formas de defenderse de aquellos que eran más poderosos que él.

La magia era increíble, pero se tenía que entrenar constantemente. Y tampoco podía olvidar su cuerpo. Erza hizo que nunca pudiera olvidarse de eso. Si no fuera por Porlyusica, incluso tendría dificultades para sentarse.

"Aquí estás... "

"Uh... ", Harry se quedó paralizado al ver a la hermosa pelirroja aparecer desde detrás de un árbol. "¡Mala perdedora! ¡Haces esto porque te gané, ¿verdad?!", liberando parte de su frustración, apuntó con un dedo, de forma petulante.

"Sí".

"Tú... ", Harry se atragantó un poco ante la fácil respuesta que salió desde la boca de Erza. Peor aún, su sonrisa se estaba convirtiendo en una sádica. "Bien... ", bajando la cabeza, arrastró los pies para volver al entrenamiento. Y en una voz muy baja, murmuró para si mismo: "Usaré toda mi pequeña fortuna para comprar cada pedazo de pastel en Magnolia. La dejaré sin nada".

"¿Qué fue eso?"

"¡Nada! ¡Nada de nada! ¡Ja, ja, ja, ja! ¡Ya me siento mucho mejor, vamos a entrenar!", una sonrisa sincera se dibujó en su rostro, pero su corazón estaba latiendo con fuerza. Ella se le quedó mirando antes de resoplar un poco, pero se encogió de hombros cuando golpeó a Harry en el estómago. El cuerpo del pobre chico, se dobló hacía atrás antes de que fuera levantado y cargado. Erza caminó hacía el lago Scilliora con Harry en uno de sus hombros.

Ese día, Harry Potter prometió una venganza magnifica. Una de la que Erza nunca podría olvidarse en su vida. ¡Y no descansaría hasta cumplir con su promesa! ¡En serio!

. . . .

Parte 2.

Levy tuvo que apretar sus labios para no reírse de la actual apariencia de su amigo. Mientras escribía lenta, muy lentamente, Harry tenía su brazo izquierdo vendado hasta el punto en que se había vuelto el doble de ancho. Sus mejillas estaban hinchadas hasta el punto en que sus labios estaban fruncidos ligeramente hacía delante, como si estuviera dando un exagerado beso al aire. Uno de sus ojos estaba más oscuro. Rasguños en su frente, el cabello desordenado y, en ciertas partes, más corto.

"Oye, terminé", Harry la miró con seriedad, pero sus palabras, aunque claras, parecían como si tuviera algo en la boca.

"¡Pff~!", Levy escupió un poco cuando intentó ocultar su risa, pero fracasó. Gotas de saliva volaron antes de caer el suelo. Ella se tiró hacía atrás, en la cama, y comenzó a reír sin parar, pataleando constantemente. "¡Jajajajajaja! ¡Eres un tonto! ¡Realmente fuiste y le pediste entrenamiento a Erza! ¡Jajajajajaja!"

Líneas negras aparecieron en la cara de Harry. Si su poder mágico no se estuviera recuperando y sus heridas fueran menos graves, entonces habría saltado para darle una lección a la chica. Lamentablemente, no podía. "Juro que me vengaré de ustedes. En serio", murmurando, volvió a dejar su manuscrito sobre el escritorio. Habían logrado avanzar con el primer libro, estableciendo ciertas bases para el mundo mágico modificado que deseaba mostrar al público de Fiore.

En primer lugar, no sería un mundo dividido entre magos/brujas y muggles. No exactamente. Igual que Earth Land, existirían personas sin la capacidad de usar magia. De esta forma, podría comenzar a establecer la discriminación que sí existía en su mundo. A Harry no le gustaban los Sangre Pura; los consideraba una maldita plaga, pero era parte de su mundo. Además, necesitaba antagonistas, ¿verdad? Servían perfectamente para eso.

Por supuesto, como alguien que ha sido juzgado erróneamente por muchos, tampoco quería retratar a cada miembro de una familia Sangre Pura, como alguien malo. Según Levy, dejar espacio para el desarrollo de diferentes personajes, haría que el mundo sea incluso más rico en historia. Por ejemplo, alguien que realmente había reflexionado sobre su familia y sus propios actos, y por eso deseaba redimirse. O un personaje que, desde un principio, quería ser todo lo contrario a sus familiares discriminadores y extremistas. Podrían volverse un cliché en cierto punto, pero había un dicho que decía: Si es cliché, es porque sirve. A la gente le gustaba ser sorprendida en sus lecturas, pero también esperaban ciertas cosas. Mientras más cosas puedas ofrecer, sin llegar al punto de exageración, entonces es mejor.

O eso es lo que decía Levy, la autoproclamada, editora.

De repente, Harry se levantó de golpe, sorprendiendo un poco a Levy. "¿A dónde vas? ¡Todavía tienes que seguir escribiendo!"

"Sí, lo sé. Pero se me olvidó que tenía algo importante con el maestro. Lo siento, pero tendré que continuar más tarde. Gracias por ayudarme, una vez más".

Levy frunció un poco el ceño, pero lo aceptó. Si el maestro tenía cosas importantes de la que hablar, tenía que tener sus razones. Tomando asiento en donde había estado Harry, decidió leer todo lo que había escrito en estas tres horas, para poder corregir o dejar nuevas ideas. Después de todo, ese no era la cosa final que se entregaría para la publicación. Por lo tanto, podían tener muchas coas y, más tarde, ir eliminando las cosas que no funcionen o que sean considerado como demasiado.

Por otro lado, Harry tenía una sonrisa un poco astuta mientras caminaba hacía el gremio. Levy parecía muy divertida al reírse de su desgracia. ¡Pero se le había ocurrido una forma para vengarse un poco! Para eso, necesitaba la ayuda del tan impresionante maestro de Fairy Tail, Makarov Dreyar.

Sin embargo, al entrar al gremio, cuando todos lo vieron, apuntaron con sus dedos antes de comenzar a reír con todas sus fuerzas.

"¡Bastardos!", Harry gritó con una expresión enojada. "¡Por lo menos tengo las agallas de entrenar con Erza! ¡¿Qué pasa con ustedes!?"

"¡No somos masoquistas!"

Macao gritó, pero retrocedió con pura incredulidad al ver que Harry saltaba sobre él, solo para morder su cabeza. "¡Maldito chico, suéltame!", intentó agitarse por todos lados, chocando con mesas y derramando cerveza.

"¡Cuidado!", gritó alguien, solo para golpear a Macao.

Makarov, quien estaba observando el caos creciente, golpeó la palma de su mano, en el centro de su frente. "Estos mocosos... ", gruñendo y negando con la cabeza, decidió ir a su despacho. Ahora, Harry tendría que ir a la parte trasera, abrir la penúltima puerta y subir las otras escaleras. ¡Ya que no podía llegar al despacho por el segundo piso!

Afortunadamente para todos, Erza no estaba en el gremio. Porque si lo fuera... Bueno, es mejor no pensar en cosas aterradoras. Luego de media hora luchando por todo el lugar, Harry logró salir de la masa de magos. "Estúpido Macao", murmuró antes de abrir la puerta y subir por las escaleras. "Por lo menos pude hacerlo sangrar un poco".

Al momento en que levantó la mano para tocar la puerta, llegó la voz de Makarov. "Puedes entrar, muchacho". Eso, hizo que recordara las veces que había visitado al director Dumbledore en su propio despacho. Siempre fue un poco exasperante cuando hacía eso. Farfullando un poco, abrió la puerta. "Parece que, después de semejante tortura, todavía tienes energía".

"¡Oh, vamos, no usted! ¡Levy ya estuvo revolcándose en mi cama por mi apariencia!"

Makarov simplemente soltó una pequeña carcajada. "De todos modos, muchacho, ¿qué necesitas? Ah, no me digas, ¿se trata sobre tu amnesia?"

"No", Harry se relajó un poco al tomar asiento. "¿Recuerda que estoy escribiendo un libro?"

"Sobre cosas de tu mundo, sí. ¿Qué pasa con eso? Déjame decirte, pero no soy bueno con ese tipo de cosas".

"Tampoco", Harry negó suavemente con su cabeza. "Maestro, estaba pensando, ¿no puede el gremio publicar mi futuro libro?"

Makarov parpadeó antes de entrelazar sus dedos frente a su nariz. "Explícate mejor", pidió seriamente.

"Según lo que me han dicho, Fairy Tail es considerado uno de los mejores gremios de Fiore, sino el primero, por lo menos entre los tres superiores. Estaba pensando que, en vez de ir a una editorial, podríamos crear una afiliada al gremio. Sería otra forma de obtener ingresos".

Makarov guardó silencio por unos momentos, pensando detenidamente. Si bien no era una mala idea, necesitaba de preparación, un lugar que no sea el mismo edificio del gremio y, sobre todo, maquinas para poder imprimir los libros. Tampoco se podía dejar de lado el personal necesario. Makarov, sin embargo, estaba preocupado de otra cosa. "¿Quieres usar la fama del gremio para obtener más ventas?"

"No", Harry se encogió de hombros. "Honestamente, suena bien, pero no", suspirando un poco, Harry decidió explicarse un poco más. "Ni siquiera sé si mi libro será lo suficientemente bueno. Y si no esta a la altura, ¿no sería eso tirar tierra al gremio? No me gusta eso, pero está Levy. Usted sabe de sus capacidades. Podría dirigir esto de la mejor manera".

"De hecho... ", él se rascó la cabeza con su mano buena. "¿Por qué no se han hecho cosas similares? Como, por ejemplo, un lugar en donde se vendan pinturas. Reedus puede hacer cosas geniales con su magia. O un puesto de venta que tenga las revistas más populares. O uno en donde se vendan juguetes con referencias al gremio. Uh... Maestro, ¿no sería esa una forma de obtener mucho más dinero para reparaciones?"

Por un instante, Makarov tenía los ojos con el signo de Jewels, pero se recompuso bastante rápido. Tosiendo un poco en su puño, comentó. "N- No es una mala idea, sí", murmuró, sintiéndose un poco como un tonto. "Pero, Harry, ¿por qué ahora? ¿Solo e te ocurrió recién?"

"Quiero que Levy sufra un poco por haberse burlado de mi. La haré trabajar hasta que me pida clemencia".

"... ", Makarov dejó caer su cabeza, pensando: ¡esa es la verdadera razón, maldito niño! No obstante, la idea, en realidad, no era para nada mala. Fairy Tail tenía una reputación enorme de dos lados. Estaba el lado en donde eran considerados como uno de los gremios más poderosos en el Reino, pero también estaba el otro, en donde el Consejo Mágico los trataba como tontos por nunca poder completar sus trabajos en paz. Algunas veces, era entendible, como la detención de un mago oscuro que intentó destruir parte de una ciudad para poder escapar. Pero en la mayoría de casos, eran los magos de Fairy Tail quienes hacían dichas destrucciones.

"¿Y como piensas que debo pagar esto?"

"¡Lo haré! Por lo menos, con la imprenta. Puedo comprar una maquina con mi dinero. Y también la construcción de un pequeño local a un lado del gremio. Es posible, ¿verdad? Fairy Tail tiene un terreno bastante grande".

"Sí, es posible".

Harry se rio un poco. "¿Sabe? Nuestro nombre, incluso va a juego. Fairy Tales, ¿no sería un bueno nombre?"

"¡Oh!", Makarov se emocionó un poco. "¡Suena lindo!", el asintió, pero frunció el ceño. "Pero una editorial no se mantendrá solo con un libro, ¿verdad?"

"Mi infancia no fue la mejor, pero por eso mismo, tenía que entretenerme con algunas cosas", Harry se veía un poco orgulloso. Viviendo con sus tíos, no tuvo muchas formas para pasar el tiempo que no fuera hacer las tareas del hogar. Pero cuando no miraban, algunas cosas de Dudley, se perdían por un pequeño periodo de tiempo. El chico era un poco tonto, así que sus padres no sospechaban que el pequeño Harry había tomado uno que otro libro de cuentos. Caperucita roja, Blancanieves, el hombre de nieve, el tigre que llegó a tomar té, Peter Pan, y unos pocos más. No recordaba totalmente cada línea, pero las cosas principales y esenciales, eran cosas que tenía en la mente. Oh, ya podía ver a Levy trabajando sin descanso para sacar todos ellos al público.

En cuanto a la cosa conocida como plagio, ¿qué era eso? Ni siquiera era el mismo mundo. Sus autores no podían venir aquí para reclamar cosas.

Harry Potter quería frotarse las manos, pero no podía. Y eso provocó que quisiera burlarse cada vez más de Erza y Levy, aunque esta última no tuviera la culpa de sus heridas.

. . . .

Parte 3.

Casi a las nueve de las noche, Harry levantó ambos brazos y gritó con fuerza: "¡¡Estoy... curado!!", la felicidad que desbordaba desde él, fue tanta que, incluso Porlyusica, sonrió muy levemente. "Muchas gracias, señora. Aunque nunca espere que realmente viniera a verme".

"Tenía una cosa que hacer en la ciudad, así que aproveche el momento", suspirando un poco, lanzó un pequeño frasco que tenía un gotero. "Puedes considerarlo como el beneficio de aquellos con circunstancias similares".

"¿Sí? Gracias", Harry, quien atrapo el frasco, se sintió un poco desconcertado. "¿Y esto?"

"Poción", contestó ella. "¿No querías usar magia con los ojos? No te dará inmediatamente tal capacidad, pero si te pones una gota en cada ojo, dos veces al día, por tres meses, entonces puede que suceda. Por supuesto, tienes que hacerlo cuando vayas a meditar, para que tus ojos, lentamente, puedan absorber más Ethernano".

"¿Es tan fácil? Vaya, no lo habría imaginado", Harry guardó con mucho cuidado el frasco.

Porlyusica se movió hacía la puerta. "Bueno, ahora que te di lo que quería, me largo. No soporto demasiado estar con muchos humanos".

"También lo eres".

"Y eso no significa que deba gustarme".

"Punto a favor, ¿creo?", Harry simplemente se encogió de hombros.

La anciana, que no es para nada honesta con sus sentimientos, era una persona extraña para Harry. Facciones faciales severas pero quietas casi como la piedra, palabras duras y un despreció por muchos, pero poseía un corazón amable. Se sentía como una extraña mezcla entre Minerva McGonagall y Severus Snape.

Harry se sintió raro al pensar en eso último, así que simplemente salió al patio de la casa de Makarov para poder usar las gotas en sus ojos y comenzar su meditación diaria. Cuando las gotas cayeron en sus ojos, no se sintió frío, sino tibio. Y un par de segundos después, pudo comenzar a sentir un aumento pequeño en el Ethernano que rodeaba esa parte de su cuerpo. Estaba siendo atraído específicamente a ese lugar, lentamente.

Habían varios tipos de magia que se podían usar mediante los ojos, como petrificar, escribir runas para crear ciertos efectos, manipular personas, objetos u otras cosas; también era posible aumentar la distancia de visión, ver a través de cosas solidas como paredes, reflejar ataques y varios otros efectos más. De todos los efectos mágicos posibles, existían algunos que estaban prohibidos y categorizados como magia oscura, como: afectar las emociones de otras personas o controlar sus cuerpos y/o mentes.

Sin embargo, así como cualquier magia podía utilizarse para propósitos nefastos, una magia peligrosa podía usarse para buenas cosas. Por eso, el Consejo Mágico había tomado en cuenta ciertos aspectos y formas de utilizar las magias.

La magia de hipnosis era una de esos tipos que estaban regulados. Podías hacer dormir a alguien, hacerlo pensar que algo es bueno hasta cierto punto, pero no ir tan lejos como darle ordenes para controlar al afectado. Pero esto es difícil de regular con tanta precisión. Debido a esto, muy pocos decidían aprender tal tipo de magia. Los magos preferían simplemente aprender, por ejemplo, magia para dormir, que tenía efectos similares a ciertos hechizos de la hipnosis. O magia de marionetas, que permitía el control de objetos y el cuerpo de alguien, pero sin afectar su mente. Después de todo, el solo hecho de que sepas magia de hipnosis, ya era sospechoso.

Además, un aspecto a tener en cuenta con los ojos mágicos es que, generalmente, los efectos estaban limitados a lo que podías ver y la distancia máxima de tus ojos. Muchas veces, si usabas ojos mágicos a través de binoculares, miras telescópicas, o incluso con anteojos, los efectos serían menores a lo normal. A veces, con los primeros, ni siquiera funcionaba.

Y tampoco se podía dejar de mencionar la resistencia de un mago. En muchos casos, sino todos, un mago que entrenaba y luchaba constantemente, ganaría un cierto nivel de resistencia mágica, en donde los efectos de una magia podrían durar menos tiempo. Esto se volvía más poderoso cuando el mago entrenaba su propio sistema nervioso mediante la absorción activa de Ethernano durante una meditación. No obstante, parece que es imposible desarrollar una resistencia total hacía la magia. De alguna forma, terminaría afectando de diferentes maneras.

Harry es un ejemplo perfecto de esto. Su Take Over: Phoenix le daba una gran resistencia hacía el fuego, pero si alguien lo golpeaba como Natsu, usando un puño rodeado de llamas, todavía le dolería ese puñetazo. Sería peor si, de repente, alguien con un fuego superior, lo golpeara.

Afortunadamente, ahora mismo, Harry es un mago un poco más equilibrado. Su forma de fénix le otorgaba un gran poder ofensivo, mientras que su forma de basilisco, era más defensiva y de control de masas. Las escamas que recubrían su cuerpo, eran extremadamente duras, tanto que incluso una espada no podría cortarlo fácilmente. Su veneno, por otro lado, resultó ser algo extraño. No mataba en cuestión de segundos, como esa bestia a la que se enfrentó en su segundo año dentro de Hogwarts, pero la perdida de letalidad fue intercambiada por una variedad de efectos interesantes.

Era como si se hubiera degradado dentro de su cuerpo. Sin embargo, Harry estaba satisfecho con esas habilidades. No quería tener demasiado cuidado a la hora de luchar y terminar matando a alguien por accidente.

Ahora, mientras meditaba, Harry activo su transformación total de fénix, para ir asimilando lentamente el atributo fuego en sus ojos. Era lo que quería, en este caso: ojos mágicos que le permitieran usar fuego par atacar con una sola mirada. Solo esperaba que funcionara, ya que según Porlyusica, no estaba asegurado.

Por lo menos, las gotas habían sido gratis.

_______________________________

Comenten y dejen una estrella. 

Solo he pensado en tres Take Over (transformaciones) para Harry. Ahora, dos se han mostrado. Si decido no descartar la tercera, todavía quedan capítulos para eso. No quiero acumular tantos power up tan rápido. Pero también me gustaría que aprenda, por lo menos, otro tipo de magia más. Por supuesto, sin tener en cuenta los hechizos que ya puede usar debido a su aprendizaje en Hogwarts. Así que también pueden dejar sus propias ideas en los comentarios, aunque no es seguro que tome una para introducirla en el Fan-Fiction.

________________________________