La biblioteca estaba abarrotada. Algo normal en épocas de exámenes. Obviamente todos querían pasar con buenas notas,aunque no muchos pudieran lograrlo. Neville Longbottom por ejemplo, no lograba entender una redacción para Pociones y eso lo tenía de los pelos

Blair normalmente iba acompañada de sus amigos a la biblioteca pero ese día tuvo que ir sola para estudiar para su examen de herbología que era dentro de un par de dias y no entendía nada. Se planteó seriamente pedirle ayuda a Longbottom, pero desistió al ver como comenzaba a lloriquear por no llevar nada de la redacción. Era de dominio público el pánico que le tenía al profesor Snape

Blair se levantó de la mesa mientras tomaba todas sus cosas. No iba poder estudiar ahí, al menos no hasta que toda la gente de ahí se calmara

Saludó a Luna Lovegood al pasar cerca de la mesa donde ella se encontraba y Luna le devolvió el gesto con mucha energía. A Blair le llamó la atención los pendientes tan peculiares que llevaba puestos

Iba tan concentrada viendo los pendientes que no se dio cuenta que alguien atiborrado de libros amontonados en una gran torre se dirigía hacia ahí. La chica chocó contra él provocando que los libros cayeran con un estrepitoso ruido

— Lo lamento— Se disculpó— No estaba poniendo atención. A ver, te ayudo— dijo mientras juntaba los libros del suelo

— No te preocupes— Le respondió el chico — Yo debí haber visto por donde caminaba. Es sólo que Hermione me encargó entregar esto...

Ambos levantaron la mirada y se vieron a los ojos por un momento. Ella lo reconocía ¿Como no hacerlo? ¿Quién no reconocería al niño que vivió? Blair había chocado con Harry Potter

Harry bajó la mirada y observó la túnica que la chica llevaba. Hizo una mueca de desagrado

— Vaya, jamás creí que una serpiente se atrevería a arrodillarse junto a un león

— ¿Disculpa?

Harry le quitó el libro que ella llevaba en las manos y lo puso sobre la nueva torre que estaba haciendo en el suelo

— Los de Slytherin no ayudan jamás a los Gryffindor, ni a ninguna otra casa. Deberías saberlo

Blair se sorprendió

— Que lástima que pienses eso. No todos los Slytherin somos unos egópodos narcisistas

— Tal vez no, pero como dicen, mayoría gana

Las mejillas de ella se incendiaron por el enojo. Estaba cansada de que siempre la juzgaran por ser una serpiente. Bueno, era hora de demostrar el veneno que podía soltar

Se levantó de golpe y pateó los libros deshaciendo la torre que había armado

— ¡Púdrete Potter! Eres un cerdo. ¿Quién creería que el niño que vivió es un prejuicioso de lo peor? Déjame decirte algo, niño Potter— Harry la miró sorprendido— Puede que seas el maldito elegido o todas esas otras cosas que se dicen de ti, pero eso no te da derecho a juzgar a los demás sólo por la casa de la que proviene

— Yo no...

— No me importa que es lo que tienes por decir. Ahora se que todo lo que se dice en la sala común de Slytherin es verdad. Harry Potter no es más que un chico pusilanime que se las da de famoso sólo porque sobrevivió al mago tenebroso más poderoso de todos los tiempos— Blair lo miró con desprecio como la mayoría de los Slytherin lo hacía— Eres patético

La chica salió de ahí casi corriendo con direccion hacía las mazmorras. Y Harry vio el camino que ella llevaba. De alguna manera le dolió todo lo que le dijo tomando en cuenta de que ella tenía toda la razón. Se lamentó por sus actos y se dispuso a seguir recogiendo los libros hasta que una fina mano le pasó un libro que había volado hasta su mesa

— Creo que esto es tuyo Harry

— Gracias Luna—  La chica lo observó por un momento para después decirle con voz soñadora:

— Vi como peleabas con Blair. Fuiste malo con ella

Harry suspiró

—  Lo sé, Luna

— ¿Sabes? Ella tiene razón. No todos los Slytherins son malos. A veces, ella me protege de los que son malos conmigo y me llaman Lunatica— Harry hizo una mueca. Jamas le gustó que ella se refiriera a si misma de esa manera — Blair es mi amiga 

Resultaba imposible una amistad entre una Slytherin y una Ravenclaw pero Luna parecía muy feliz con eso, logrando sólo que Harry se sintiera más miserable. Luna le sonrió

— Iré a hablar con ella. Supongo que debe estar triste

— No hagas que me sienta peor— Luna sólo se dio media vuelta y lo vio por encima del hombro

— Tendrás que disculparte, Harry Potter— dijo para después salir dando saltillos

Harry suspiró,sabía que Luna tenía razón. Se rindió en la tarea de entregar los libros por Hermione y los dejó amontonados sobre la esa que antes había ocupado Luna

El gran comedor estaba atiborrado a la hora de la cena. Harry buscaba con la mirada a la chica con la que había tropezado hacía unas horas. Luna había dicho que se llamaba Blair y aunque no quería aceptarlo, a Harry le pareció un lindo nombre

Por fin la encontró sentada en la mesa correspondiente a Slytherin y Luna estaba con ella. Las dos hablaban animadamente y Blair les daba una mirada fulminante a todo aquel que se atreviera a molestar a la visitante de Ravenclaw. Ron le dio un codazo

— ¿Quién es la serpiente con la que te topaste?

Harry apuntó a Blair con el dedo y Hermione levantó el cuello para poder ver mejor

— Es ella

— ¿Blair? ¿En serio Harry? ¿De todas las serpientes a las que pudiste haber insultando escoges a Blair? — Preguntó su amiga— Ella es de las personas más decentes de su casa. A pesar de ser sangre pura no discrimina a los demás y es impresionante porque lleva notas excelentes a excepción de herbología. A ella se le da la herbología como a mi la adivinacion— Gruñó. Harry la miró extrañado

— ¿Como es que sabes tantas cosas de ella? — Hermione se encogió de brazos mientras se servía puré de papas en el plato

— A veces estudiamos juntas

— ¿Y no fuiste para decírmelo?— Reprochó— Demonios Hermione

— Tú nunca preguntaste— La chica lo miró ceñuda

Ron volvió a codear a su amigo mientras le clavaba el diente a una pierna de pollo

— Sólo ve ahí y discúlpate

— Eso es lo que voy a hacer

Harry se puso de pie y caminó hasta la mesa de Slytherin. Rodó los ojos al pasar al lado de Draco Maloy y maldijo al darse cuenta que la chica estaba sentada frente a él. Harry le dio la vuelta a la mesa y le tocó el hombro a Blair ante la mirada de todos los demás

— ¿Que se te ofrece, Potter?

—¿Podemos hablar?

— Tú no vas a hablar con ella

— Cállate Malfoy— le dijo ella al chico rubio. Él la miró mal. Blair se puso de pie animada por Luna— ¿Que sucede, Harry?

A Harry lo alivió el que lo hubiera llamado por su nombre

— Yo sólo quería disculparme— dijo — Tenías razón en decir que no tenía derecho a juzgar a los demás por su casa o por lo que los demás integrantes hagan. Lo siento, de verdad

Blair esbozó una sonrisa

— Está bien, Harry. Luna me habló un poco sobre eso y bueno, está todo bien. Siento el haber pateado tus libros

Harry sonrió

— Descuida, yo hubiera hecho lo mismo — Ella volvió a sonreír y Harry se frotó la nuca — Oye, el próximo fin de semana es la salida a Hogsmeade ¿Te gustaría ir conmigo? Ya sabes, para tomar una cerveza de mantequilla de la paz

Blair rio

— Me encantaría

Luna se puso de pie

— ¿Acaso eso será una cita?— Ambos asintieron avergonzados— Vaya, quién lo diría