₩ McLaggen Cormac ₩ 006.2
— Los odio a los tres— dije dejándome caer sobre mi cama en la habitación que Hermione y yo compartíamos
— ¿Por lo de McLaggen? —Asentí — ¡Pero sí yo no dije nada!
— Pero tampoco desmentiste lo que Harry y Ron dijeron
— Porque en parte era verdad. McLaggen puede llegar a ser.... desesperante
Bufé mientras tapaba mi cara con una almohada
— Debiste haber visto su cara, Hermione. Parecía disgustado y deprimido
— Bueno, es obvio después de lo que escuchó — Hermione se sentó en mi cama apartando la almohada de mi rostro— Mira, por lo que me contaste, creo que McLaggen puede ser lindo muy en el fondo. Pero MUY en el fondo
— Ya entendí— dije sentándome— Pero es diferente cuando estamos juntos ¿Sabes? Él... es amable y muy caballeroso conmigo
Hermione me dio una mirada pícara
— Te gusta ¿A que sí?
— Me hubiera gustado ir con el a lo de Slughorn, sí
— Sabes que no me refería a eso — Ella frunció la nariz— Entonces... ¿Porque sí querías ir con él, les hiciste caso a ese par de tontos?
— Ni siquiera lo sé. ¡Dios Hermione! Soy una idiota
— ¿Y que harás?
— No tengo ni idea. ¿Que me aconsejas tú?
— Pues... ve a la fiesta con él
La miré entrecerrando los ojos
— ¿Cómo? Cormac dijo que ya no iríamos juntos
Mi amiga se encogió de hombros
— Sólo explícale lo que pasó y ya está
Me mordí el interior de las mejillas sin saber que contestar. Sabía que Hermione tenía razón, lo único que tenía que hacer era disculparme y contarle todo lo sucedido. Me puse de pie de un salto
— ¿Me ayudarías a estar lista para la fiesta?
— Claro, sólo sí tú me ayudas a mí — Hermione sonrió haciendo señas con sus manos para que me sentara en una silla y que ella pudiera peinarme.
— Seguro. Oh por cierto, ¿Como está eso de que invitaste a Ronald a la fiesta de Slughorn?
Las mejillas de Hermione parecieron estar sumergidas en lava ardiendo
***
El lugar donde se estaba llevando a cabo la fiesta del reciente profesor de pociones había sido adornado elegantemente sin llegar a ser ridiculo. Varios estudiantes ya estaban ahí riendo y bebiendo. Unos otros estaban juntos en una marea de gente desconocida. Alumnos egresados, talvez
Había decidido llegar sola. Harry invitó a Luna por lo que llegaron juntos muy temprano. Ron y Hermione llegaron unos minutos antes que yo a petición mía. Hermione quería que llegara junto a ellos pero sabía que tenía que estar sola para poder arreglar mis pensamientos.
Cuando llegué lo primero que hice fue buscar a Cormac con la mirada, él no estaba ahí.
Empecé a sentirme nerviosa y jugué con el borde de mi vestido. Era rojo con un poco de encaje en la parte de arriba y suelto hasta un par de centímetros arriba de la rodilla. Hermione había hecho ondas en mi cabello y pintado mis labios de rojo a juego con el vestido. Emprendí la búsqueda de Cormac hasta que un cuerpo robusto chocó contra el mío
— ¡Oh querida!
— Lo siento profesor
— No importa, no importa— dijo el profesor Slughorn mientras reía — Aunque, ciertamente, deberías ser más cuidadosa querida
— Sí, lo sé
— ¿Que te tiene tan despistada, Gallager?
— Uh... estoy buscando a Cormac, señor
— ¡Ah! McLaggen — Slughorn me apuntó con uno de sus regordetes dedos en lo que reía— Ese muchacho es una joya, sin duda uno de los mejores que he conocido
— Ah... sí, supongo
El profesor Slughorn volvió a reír mientras se frotaba el estómago
— Pero dime, Gallager, ¿Tú hermano sigue siendo uno de los mejores jugadores de Quidditch de todos los tiempos?
— Sí, eso creo señor
Levanté el rostro para seguir buscando a McLaggen pero el gran cuerpo del profesor no me lo permitía
— Estás desesperada por encontrar a ese chico ¿Eh?
— Puede decirse que sí, profesor
Slughorn rio
— ¡Ya veo! ¡Ya veo! El amor juvenil ¿no? Maravilloso, sin duda
Fruncí los labios ante su comentario
— No se ofenda, profesor pero no creo que usted sepa mucho sobre eso
Slughorn me miró ceñudo aunque después riera una vez más
— Te sorprendía saber todo lo que yo conozco acerca de ello. Yo también fui joven, Gallager, sé lo que es enamorarse a esta edad
— Lo lamento profesor. No pretendía insultarlo
Una sonrisa apareció en su amplio rostro
— McLaggen está detrás de esas cortinas carmesí de allá— Apuntó hacía un extremo de la sala— Buena suerte, querida
Se alejó dando pasos cortos hasta donde se encontraban Harry y Luna. Tomé aire y me encaminé hacía ahí
La espalda de McLaggen estaba frente a mi con sólo las cortinas separándonos. Recordé lo sucedido en la torre de astronomía provocando que mi estómago se revolviera. Aparté la cortina con una de mis manos
— Hola
Cormac dio un respingo y se giró hacia mi. Cuando me vio tuvo intenciones de irse pero lo detuve
— Tengo algo que decirte
— No quiero escucharte
— Por favor— Supliqué. Él asintió no muy convencido— Escucha, yo... lamento mucho lo que pasó. Jamás quise ofenderte de esa manera. Tampoco fue mi intención que escucharas todo lo que los chicos dijeron de ti
Cormac sonrio de lado
— Soy consciente de lo que se dice de mi en los pasillos Alison, pero fue muy doloroso para mi saber que tú también piensas eso
— Yo no pienso nada malo de ti
— ¿Entonces porque...?
— ¡No lo sé! — Él se sobresaltó— No lo sé ¿De acuerdo? Yo... sólo me dejé llevar por lo que Harry y Ron dijeron. No sabía lo que estaba haciendo. Cometí un error y lo siento. Lo siento muchísimo. En verdad quería venir contigo a la fiesta Cormac, por favor, creeme
Él observó mi rostro y, sorpresivamente, acarició mis mejillas
— Te ves hermosa el día de hoy. El rojo es mi color favorito ¿Sabes? Y en ti se ve espectacular
Sonreí avergonzada
— ¿Eso quiere decir que me has perdonado?
Él cogió mi cintura y me apegó a él
— Lo pensaré mientras bailamos
Tomó mi mano conduciendome hacía el centro del salón. Podía sentir la mirada de todos sobre nosotros. Cormac colocó sus manos en mi cintura y yo mis manos alrededor de su cuello
— Es increíble que estemos haciendo esto— dije sonriendo
— En realidad, creí que vendrías con alguien más
— Yo creí justamente lo mismo— Admití mientras bailábamos. Él negó
— No habría otra persona con la que quisiera compartir esto más que contigo
Ambos sonreimos mientras seguíamos bailando y yo colocaba mi rostro en su pecho escuchando los latidos rápidos de su corazón
— ¿Estamos bien entonces?
— Sólo sí aceptas tener una cita conmigo
— Acepto — dije para después recibir un ligero beso en los labios
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro