— Los mortífagos ya vienen— Informó Draco con lo que a Sofía le pareció una mueca de satisfacción— El señor Tenebroso está a nada de alzarse en el poder

— Eso es lo que tu crees. Lo que todos creen. Yo pienso que no será asi

Draco miró a Sofía con reproche mientras ella se cruzaba de brazos. Ambos estaban dentro del castillo en la sala común de su casa. Draco solo esperaba una señal de sus iguales para empezar a actuar

— No sabes lo que estás diciendo

—Sí que lo sé—dijo ella—¿Recuerdas la vez que Potter formó todo un ejército? ¿El ejercito de Dumbledore? Bueno, pues si Harry fue capaz de reclutar jóvenes de todas las casas para enseñarles él mismo hechizos que aquí jamás nos enseñaron, creo que es capaz de derrotar a Vol...

— Aun no he olvidado tu traición al unirte a ese tonto ejército, Sofía— le interrumpió

— Me perdonaste por ello

— Solo lo hice porque te amo

La chica se quedó callada por las palabras de Draco. Se acercó a él y le acarició las mejillas

— También te amo, Draco, pero debes entender que esto no está bien- le dijo- Sabes que todo cambiará si Voldemort...

— ¡No digas su nombre

—¡Por Merlín, Draco!— le gritó separándose de él—Eres uno de los suyos, lo tuviste viviendo en tu casa, ¡No puedes temerle a su nombre!

— Lo hago cuando estoy contigo—Admitió mientras ruidos extraños se empezaron a escuchar afuera—No quiero que él te lastime

— Eso sería imposible. Vol... El-que-no-debe-ser-nombrado— Rectificó Sofía al ver como Draco daba un respingo— Me tiene en su lista negra. Buscará cualquier medio para poder matarme

— Hubiera sido diferente si solo hubieras aceptado tener la Marca Tenebrosa

Draco parecía molesto por el hecho de que Sofía se hubiera negado a ser un mortífago, o tal vez era que sentía envidia hacia ella porque Sofía si había tenido el valor suficiente para oponerse

—Bien sabes que yo jamás pelearía por la causa del Señor Tenebroso

—Tus padres pagaron por ello. Eres consciente que Voldemort los castigó. Prácticamente los torturaron

— Ellos eran conscientes de mi nula lealtad hacia su señor

—¡Es ridículo!— Gritó Draco apreciando mejor los sonidos de la próxima batalla—¡Eres hija de mortífagos! ¡Tu hermano decidió obtener la Marca Tenebrosa!

— ¡Alexander está muerto!—Los ojos de ella se cristalizaron por el enojo y la tristeza. Draco deseó no haber dicho eso— ¡Murió por su estúpida obsesión por las artes oscuras! Y eso es justo lo que tú estás haciendo. Terminarás como mi hermano, muriendo siendo un maldito mortífago

—Dijiste que eso no te importaba cuando te pedí matrimonio—Replicó él dolido.

—Y no lo hacía hasta que comenzaste a tomarte esto personal. Ya ni siquiera te reconozco

La cara de Draco se contrajo permitiéndose derramar unas cuantas lagrimas siendo Sofía la única persona que podía ver a su prometido de esa manera sin que él quisiera lanzarle un cruciatus. Ella le acarició las empapadas mejillas

—Sabes que no tengo opción. Él matará a mis padres si no permanezco a su lado

— ¿Y crees que a tus padres les importa? Ellos están demasiado exhortos en sus deseos que no son capaces de pensar en lo que tú quieres. Tal vez Narcissa lo haga, pero, ¿Y Lucius? No creo que a él le importe una mierda, Draco

Él pareció pensárselo un momento para después besar fugazmente a Sofía

— Nadie ha sido capaz de preocuparse por mí de esa manera

— Yo si Draco— Sofía lo tomó por las mejillas haciendo que la mirara a los ojos— ¿Qué es lo que tú quieres? ¿Qué es lo que en verdad deseas?

Las manos de ella se vieron mojadas por las nuevas lágrimas de Draco. Fuera del castillo, se había desatado la batalla reavivando sus sollozos

—Quiero... quiero estar contigo y que podamos casarnos. Tener una familia abundante y una casa enorme donde nuestros hijos puedan juguetear. Quiero...—Unos golpeteos y gritos se escucharon dentro del castillo- quiero ser feliz contigo

—Entonces hagámoslo— dijo Sofía— Salgamos de aquí y luchemos del lado de Harry. Podemos ayudarlo a terminar con toda esta locura, amor

Draco negó

— No. No puedo. Mis padres... no

—Draco...

—Podremos ser felices aun con Voldemort liderando el mundo mágico, Sofía. Podemos...

— ¡No! — Le gritó ella con lágrimas surcándole las mejillas— ¿Es que acaso no lo entiendes? ¡Yo no quiero vivir así! No quiero vivir con temor, ni vivir sirviéndole al Señor Tenebroso. No estoy dispuesta a hacerlo

— Tendrás que hacerlo. No hay otra salida

—Sí que la hay

— ¿A qué te refieres?

Sofía no quería hacer lo que tenía en mente, pero supo que sería lo mejor. Con sumo cuidado fue quitándose el anillo del dedo

Era algo muy simbólico para ambos. No solo porque representaba su compromiso, si no que era una reliquia que no le pertenecía a los Malfoy. Draco lo había comprado para ella pensando en que Sofía no querría adquirir algo que le perteneciera a su Mortifica familia. El anillo de ópalos era único entre los Malfoy y eso lo hacía aún más especial. Draco se horrorizó al ver lo que estaba haciendo

—Sabes que a mi nunca me han importado las artes oscuras. Entre mi familia fui discriminada por negarme varias veces a usar la maldición cruciatus sobre personas inocentes; los mismos miembros de Slytherin me odian por eso. Sé que soy diferente; esa fue la razón por la que decidí entrar al ejercito de Dumbledore y después pedirle que me aceptara dentro de la Orden del Fénix

—¿Qué?—Preguntó Draco sorprendido

—Sí. Dumbledore pudo aceptarme en la Orden antes de que muriera. Él dijo que yo podía ser muy joven, pero mi determinación era la que me definía

Se acercó una vez más a Draco estirando sus brazos

—Yo jamás podría vivir en un mundo dominado por el mal. Así que prefiero morir luchando a favor del bien. No puedo fallarles a todos los de la Orden

—¡Pero me estás fallando a mí!—gritó Draco desesperado— ¡Creí que me amabas!

—Lo hago. Es por eso que te pido que te unas a mí. Pelea a favor de Harry, de la Orden, de Dumbledore... de mí

Draco se alejó de golpe

—No lo haré. No pondré en peligro la vida de mis padres por el idiota de Potter

—Entonces yo no tengo nada que hacer con esto

Sofía le entregó el anillo con todo el dolor de su corazón

—Lo siento, pero no lucharé del lado de Voldemort. Puedes hacerlo tu si quieres. Yo trataré de ayudar a Harry a salvar al mundo mágico. Y a ti

Y tras darle un último vistazo a Draco, Sofía se aferró a su varita y salió por el retrato en busca de sus compañeros de la Orden y de Harry. Al verlo, lo envolvió en un abrazo sin haberse percatado antes que había estado llorando en el camino. Harry la miró preocupado

—¿Estás bien? ¿Qué pasó con Draco?

— No pude convencerlo— Admitió sollozando. Harry le sonrió de lado

— Lo siento

— Yo también

Sofía le devolvió el gesto para después correr hacia uno de los hermanos Weasley quien estaba siendo atacado por el mismo padre de Sofía

Por otro lado, Draco apretaba el anillo de compromiso para luego lanzarlo con fuerza contra una de las columnas de la sala común mientras lloraba. Sin saber que, del otro lado, su amada Sofía estaba siendo asesinada por su propio padre