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iii. Tonight I'm gonna have myself a real good time

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Para Hope Mikaelson, los sábados eran por lejos su día favorito de la semana, no era día de escuela, ni de entrenamiento así que libremente podía levantarse de la cama a las dos de la tarde si le apetecía, tampoco tenía tarea después de realizar cada pendiente la noche anterior con tal de tener libre su anhelado fin de semana, era meticulosamente organizada al respecto. Sin embargo, en la vida existen distintas excepciones y actualmente se encontraba haciendo tarea un sábado por la mañana por primera vez en su vida.

Había despertado abruptamente a las cuatro de la madrugada a causa de una de sus más recurrentes pesadillas; Ella atada a una camilla entre tanto una muchedumbre de científicos inyectaban dolorosas sustancias químicas a su cuerpo y extraían prototipos de su sangre.

Aquel horrorizante escenario era el reflejo de una de sus más grandes inseguridades respecto al Registro Sobrenatural, dos cartas maestras que damnificaban su seguridad al visualizarla como blanco de experimentos. Era una joven poderosa hija de dos personas poderosas, naturalmente nació con un francotirador apuntándole directamente al corazón.

Ciertamente, no fue capaz de conciliar el sueño nuevamente lo que desembocó en que optara por ponerse al corriente con sus deberes escolares que entregaría la semana entrante, su parte de la exposición de ciencias, un ensayo acerca de la literatura gótica, unos ejercicios de matemáticas, un proyecto de arte y unas preguntas de historia que utilizaría en un debate.

-La primera ola del feminismo nace de la mano con los derechos humanos en la Revolución Francesa cuando las mujeres asumieron un papel político. La Asamblea Nacional Constituyente adoptó la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano gracias a la persuasión de los reformistas, dicho documento otorgaba derechos a sus ciudadanos, no obstante, las mujeres fueron excluidas en su totalidad-relataba Klara de Martel, a través de una videollamada proyectada en su computador, eran las cuatro de la tarde en Dublín y Hope no hesitó en acudir como fuente de información a una personalidad tan involucrada en temas sociales como su prima-Cuando se convirtió en el preámbulo de la Constitución Francesa en 1791, Olympe de Gouges redactó la Declaración de los Derechos de la Mujer y de la Ciudadana donde planteaba que las mujeres nacen libres y son iguales a los hombres ante la ley. Este documento junto al activismo colectivo de las mujeres fue el punto de partida del movimiento.

Klara narraba de una manera tan memorizada que perfectamente se creería que estaba leyendo un sitio web histórico, pero en realidad acariciaba sus memorias al ser algo que vivió en carne propia muy de cerca, la francesa desde que deambulaba como humana en la tierra tuvo un pensamiento adelantado para su época, semejante al de su progenitora.

Y del que la tríbrida aprendía cada vez más e implementaba en su día a día en un mundo donde la balanza se inclinaba en su contra-Tienes argumentos e ideas muy estructuradas, deberías dar charlas educativas, estoy segura que te prestarían atención-incentiva la castaña rojiza a su prima.

La vampiresa esboza una sonrisa torcida que deja entrever un atisbo de su madre asomarse, físicamente Hope y Klara eran polos opuestos, la primera con estatura baja, cabello claro, orbes azules y figura curvilínea, la contraria era mucho más alta, cabello oscuro, ojos avellanas y silueta esbelta, pero sus personalidades se complementaban divinamente como el sol y la luna-Vengo debatiendo este tema en específico desde hace tres siglos ¿Irónico cierto? Trescientos años y el proceso continúa.

Hope alza ambas cejas y asiente de acuerdo-Sospecho que aún falta-confiesa-¿Todo en orden por allá?

-Kris tuvo que viajar de imprevisto a Moscú y Steve decidió acompañarla, sabemos que nunca la deja sola-La tríbrida menea ligeramente la cabeza en tanto curva una sonrisa ante la suavidad con que mencionaba ambos nombres, iban avanzando en la reparación de su relación previamente fracturada-Sospecho que se trata de algún altercado porque salió ayer de emergencia y me dejó al cuidado de Sam y Antoni, a veces olvidan que debo empezar a valerme por mi misma-un nudo se enreda en el estómago de Hope asfixiando sus sentidos ante la simple mención de dos palabras que bastan para alterarla; Altercado y Emergencia.

Apoya ambas manos en el borde de su escritorio de madera buscando tomar aire antes de emitir sonido o palabra-¿Crees...crees que se trate de mi papá?-tartamudea a la hora de indagar afluyendo que la francesa explaye los ojos y se aproxime inquieta a la pantalla-¿Y si el gobierno lo capturó a él y a mamá Nat?-Sus manos sudan frías, sus emociones abrumadas desembocan que un par de libros salgan desperdigados por la habitación y debe respirar hondo varias veces para mermar la velocidad que ejercen los latidos de su corazón-¿Y si vienen por nosotras?

No era capaz de contemplarse en el reflejo del computador, no vería a esa tríbrida invencible e omnipotente que profetizó cada ser sobrenatural al enterarse de su llegada a este mundo, era una adolescente normal aterrada ante la idea de acabar subyugada y apartada de su familia.

Odiaba sentirse vulnerable porque bien podría acabar en un simple chasquido de dedos con cualquiera que osara a atreverse a dañarla, más le era inevitable sucumbir ante el temor natural, seguía siendo una niña.

-Hope-el llamado de Klara afortunadamente logra expulsarla de sus tortuosos pensamientos-Nadie va a lastimarnos, somos dos chicas poderosas y perfectamente capacitadas para patearle el trasero a quien trate de meterse con nosotras-La ojiazul recaba soltar una risita en medio del susto-Se que ser hija de grandes figuras puede tener considerables desventajas, todos quieren ser nuestros enemigos-No mentía, no nada más gozaban de riquezas infinitas o una vida de ensueño, también lidiaban con los problemas que conllevaba cargar el peso de sus coronas, ser un blanco andante de enemigos milenarios que ponían precios a sus cabezas era un buen ejemplo de ello-Soy hija de la dama de la muerte y del monstruo de Francia, tú eres la única hija del gran mal y la reina de los crecientes, somos su mayor temor. Pero así como tenemos a miles en nuestra contra, contamos con grandes aliados a nivel global que están dispuestos a protegernos-La mente de Hope evoca a Wanda asesinando a un agente del gobierno para protegerla e involuntariamente también rememora al joven arácnido y su promesa personal, sacude bruscamente la cabeza retirando tal figuración, apenas la conocía, claramente no daría nada por ella-Y sobretodo nos tenemos a nosotras mismas, es más que suficiente. En mil años, nuestra familia nunca ha sido superada, no hay nada que pueda vencernos.

La tríbrida asiente un poco más tranquila después del discurso de su prima, respira hondo estabilizando su respiración y alza el mentón recuperando algo de confianza-Por favor, háblame en cuanto sepas algo, mi papá y mamá Nat no responden mis llamadas y eso no ayuda a que deje de preocuparme.

-A lo mejor tuvieron que cambiar de teléfono o se ocultaron temporalmente en un lugar con pésima señal-supone Klara buscando una explicación que calme los nervios de su prima-Tengo que colgar, Iónica viene en camino y prometí ir por ella personalmente al aeropuerto.

-Salúdala de mi parte y no olvides usar tu anillo de camuflaje-le recuerda Hope un paso fundamental en la enorme lista de precauciones para no ser apresados.

-No te preocupes-sonríe la francesa deslizando una argolla verde esmeralda en su dedo anular que inmediatamente restructura su rostro y cambia su apariencia física a la de una joven pelirroja con enormes ojos grises-Sam te enviará mañana una bolsa de dulces irlandeses con Antoni, Kris y Steve están pensando en ir a verte unos días-Hope no tiene que verse al espejo para saber que su rostro fue mágicamente iluminado ante saber que posiblemente tendría con ella a su adorado tío y a su segunda madre.

-Dile a tío Sam que gracias por los dulces y por contarme con lujo de detalles como mi papá cantó despechado canciones de José José.

Ambas primas carcajean ante eso-Hablamos más tarde, pequeña leona-se despide Klara haciendo alusión a su casa de Hogwarts.

-Así será, serpiente mayor-corresponde Hope de la misma forma colgando la videollamada.

-¡Esperancita!-canturrea Gael ingresando a la habitación sin molestarse en tocar-Mi abuela ya me depositó mi mensualidad, tengo dinero y hay que gastarlo-El mexicano era un experto socializador, pero un pésimo ahorrador que no duraba mucho tiempo con dinero en mano.

Hope baja ambas manos a la altura del pecho-Tenemos-corrige entre risas-¿Cual será tu primera compra absurda?

-No será absurda-replica el licántropo-¿Quieres venir conmigo a la tienda geek que queda a unas cuadras?

-Tía Bex y tío Tony no están para llevarnos y me da pereza caminar.

-Te compro lo que quieras.

-¿A qué hora nos vamos?

Gael Luna en un acto reflejo, salta tan alto como sus pies se lo permiten al mismo tiempo que se escuda al lado de Hope cuando una motocicleta se traslada alarmantemente cerca suyo, la tríbrida le repara de pies a cabeza con una ceja enarcada entre divertida y extrañada por su reacción-Perdón, es la costumbre, pensé que ya nos iban a asaltar-se excusa el mexicano mirando por encima de su hombro que nadie más se les aproxime sospechosamente.

Hope agacha la cabeza incrustando sus ojos azules en la calle, jugando mentalmente a no pisar las líneas que dibujan los ladrillos-Y así te atrevías a quejarte de mi paranoia.

-Podrás irte de tu país, pero tu país nunca se irá de ti-recita el licántropo encogiéndose de hombros disfrutando la brisa fresca jugar con su cabello chocolate.

La castaña entrevee un asomo de nostalgia y melancolía que es imposible omitir-Extrañas México ¿No es así?

El mexicano suspira con pesadez y asiente lentamente-Más de lo que creía-admite guardando sus manos en los bolsillos de su chaqueta de mezclilla-Incluso las cosas más cotidianas como despertar temprano gracias al cacareo de las gallinas, viajar los cuarenta minutos de camino entre mi casa y la escuela, comprar unos deliciosos tacos a la salida cuando iba de vuelta a la villa-Hope sonríe genuinamente al escuchar a su mejor amigo charlar tan ensimismado al vagar en sus memorias, la tríbrida era curiosa por naturaleza lo que la convertía en una excelente receptora-Recuerdo una vez que Fernanda me acompañó a comprar la cena, el taquero nos dio una buena orden con tal de conseguir su número, no lo obtuvo, pero la siguiente vez que fui me gane unos tacos gratis.

-Apuesto que Fer ni siquiera se enteró que la usaste de carnada-gorjea Hope remarcado lo distraída que es esa sifón colombiana-¿Por qué nunca me invitaste?

-Porque la señorita no quiso volver a la villa solo porque unas gallinas inofensivas la persiguieron.

-¡Era una niña, en mi mente se veían diabólicas!-se defiende la tríbrida blanqueando los ojos. Las visitas a México eran ciertamente frecuentes gracias a la estrecha amistad y alianza de su familia con los licántropos Luna, estas aumentaron considerablemente al momento que su tía Krista emprendió una relación amorosa con Rafael Luna, tío de Gael. En uno de tantos viajes, Hope se propuso recorrer de punta a punta la extensa mansión atestada de innumerables áreas verdes que su natural esencia lobuna abrazaba hipnotizada por su efecto magnético, su misión fracasó al toparse con una bandada de gallinas que dieron rienda suelta a una duradera persecución donde recabó lloriqueando atemorizada en los brazos de su progenitor y con Genevieve transformándolas en mariposas a fin de tranquilizar sus nervios.

Y desde ese traumático instante, no volvió a poner un pie en dicho recinto.

¿Podían culparla? Claro que no, era una niña de ocho años que según ella corría por su vida lo más que sus diminutas piernas le rindieran.

-Si, son gallinas demoniacas que te van a jalar los pies en la noche-ironiza el castaño.

Hope entrecierra los ojos en una mirada afilada-Vuelves a molestarme con eso y te arrojaré a una piscina con tiburones-lo amenaza apelando a su eterna fobia.

Gael deja escapar un aullido indignado-Te hace falta, Jesús, Esperancita-replica-¿En tu vieja escuela impartían algún curso de amenazas?

Inevitablemente la tríbrida evoca su vida en Mystic Falls antes de los acuerdos, la Escuela Salvatore era un internado, por ende se ahorraba más de diez horas de camino entre los estados de Virginia y Louisiana. Y por consiguiente residía en el pueblo durante el curso escolar, cualquiera supondría que se sentía sola al hallarse a kilómetros de distancia de su familia en una localidad remota a su hogar, no obstante, en Mystic Falls también disponía de un hogar junto a sus amigos quienes con su compañía menguaban cualquier tipo de sentimiento negativo, además contaba con visitas frecuentes de su padre, tíos y primos.

Jamás se sintió desplazada o algo por el estilo pese a encontrarse lejos, todo lo contrario a la actualidad donde era brutalmente abordada por un horrible vacío, una melancólica añoranza a su antigua vida y un creciente temor porque el gobierno encontrara a los vengadores fugitivos, estado que prolongaba su separación familiar. La vida parecía haberse ensañado con ella encontrando un divertido pasatiempo tal como apalearla hasta que se rindiera.

Pero Hope Mikaelson, no era una persona que se diera por vencido, podría sangrar, más eso no detendría sus intenciones de ponerse de pie nuevamente. Si dejaba de pelear significaba una derrota, si luchaba saldría victoriosa sin importar el resultado, porque optó por hacer algo en lugar de huir.

Prefería morir en batalla, que vivir como cobarde.

No podía quedarse en el suelo, ya no más.

-¡Tierra llamando a Esperancita!-vocifera Gael jaloneando su brazo despertando a la ojiazul de su filosófica ensoñación.

Hope parpadea repetidamente para acoplarse a la realidad-Perdón, sabes que tiendo a quedarme ida en mi propio mundo-expone sin dar tantas largas-No, no nos daban cursos de amenazas, pero con una amiga como Lizzie y una familia como la que tengo, las advertencias creativas florecen naturalmente. Dios, realmente extraño a mis amigas.

Gael asiente comprendiendo su sentir-¿No has hablado con ellas?

-Ayer por la noche tuvimos una pequeña videollamada y hoy desperté con mil mensajes en el grupo que se resumen en Lizzie acribillándome con preguntas acerca de cuantos amigos he hecho en Midtown y es vergonzoso responderle que ninguno.

-Si socializaras más con Peter y Ned, tendrías dos.

-Me agrada Ned, pero Peter...es complicado-confiesa respirando hondo antes de continuar-No es un mal chico, es agradable, pero no puedo evitar querer estamparle un puñetazo en la nariz cada vez que respira.

-¿No crees que eso se deba a que tienen asuntos pendientes por arreglar? Hay una pequeña pizca de rencor que te hace ser tan fría con él.

-¿A que te refieres?

-Creo que no odias a Peter-explica el mexicano pacientemente y cuidando el uso de sus palabras-Congenian muy bien eso no puedes negarlo, pero en el fondo hay algo que te impide acercarte o abrirte a entablar una amistad con él, no sabría como describirlo, es una espina que tienes clavada y no te deja ceder.

Hope sacude la cabeza pensativa considerando el señalamiento de su mejor amigo, no podía refutar sus argumentos porque después de cuestionarlo unos segundos, se enteraba que en efecto, tenía razón. Era rencor, pero ¿Por qué ella se lo tomaba tan personal y Peter no?

Su encrucijada mental concluyó en el instante que ingresaron a la extensa tienda o mejor dicho, el paraíso para cualquier persona aficionada a los videojuegos, populares sagas de películas, comics, anime o cultura pop en general. Era un prolijo panorama multicolor repleto de figuritas de colección, historietas, estanterías a reventar de mangas, camisetas temáticas colgadas en unos ganchos próximos a la entrada, llaveros, libretas, mochilas, disfraces, bolsas de regalo para quienes iban en busca del presente ideal.

La tríbrida sonríe mordiendo el interior de sus mejillas para no gritar emocionada tal cual niña en dulcería, daba gracias al cielo que trajo consigo la tarjeta de crédito que su tío Tony le obsequió días atrás porque pensaba llevarse a casa un par de cosas. Tony le aseguró que no tenía limite, su adorada sobrina era libre de comprar lo que le diera la gana.

Aunque Hope no era partidaria de despilfarrar el dinero en cosas innecesarias, quería darse ciertos lujo ahora que se encontraba en un establecimiento de su interés.

-Creo que me quedaré sin merienda hasta el siguiente mes, pero valdrá la pena-bufonea Gael jugueteando con un monto grueso de hojas, un manga, Hope esbozó una media sonrisa al rememorar a Sebastian, no dudaba que su primo de encontrarse con ellos ya habría comprado la mitad del local-Esta noche me la pasaré muy bien, mañana hago tarea.

-Eso vienes diciendo desde ayer.

-¿Me vas a juzgar o vas a buscar lo que tu buen amigo te va a regalar?

-Me gusta más la segunda opción-contesta Hope propinándole un codazo amistoso en las costillas antes de dirigirse a la sección que representa el cielo en la tierra para ella; Un ala dedicada exclusivamente al universo de Harry Potter.

Sus ojos juguetean alrededor de varias direcciones decidiendo que artilugios agregará a su gigantesca colección, su primera compra cumplen el pronóstico dictaminado por Gael antes de salir del penthouse; Un paquete de plumones en forma de varitas.

Después va por unos pendientes en forma de snitch dorada y una libreta de dibujo con estampado de la casa Gryffindor a la que le daría un muy buen uso considerando su inédita creatividad. Sus orbes oceánicos captan una curiosa figura de vinilo arrinconada en una estantería, su boca se abre impresionada al reconocerla y aplaude feliz internamente ¡Es el funko pop de Luna Lovegood que tanto trabajo le había costado encontrar! La vida finalmente le estaba sonriendo.

Era una edición especial del personaje con su icónica cabeza de león que se agotaba rápidamente, aquel dato se le rememora al distinguir que es el último disponible así que deposita su pequeña canasta de compras a un lado y se apresura a tomarlo.

Su mala suerte parece terminar su descanso fugaz porque una figura más alta se le atraviesa y retira el objeto de su lugar ¡Maldita sea! Hope aprieta los puños respirando hondo para apaciguar su frustración, no le importaba parecer una cavernícola, estaba dispuesta apañárselas para arrebatárselo de las manos así tuviera que armar un plan maquiavélico.

El joven desconocido se gira sobre sus talones al percibir una presencia a sus espaldas, la tríbrida explaya sus ojos de par en par al toparse una vez más con ese personaje que tanto trabajo le costó ignorar los últimos días, ese rostro bonito recurrente en sus pesadillas ¿O sueños? ¡Concéntrate Hope y dale con la silla por robarte tu anhelado funko pop!

-¡Gatita!-saluda Peter Parker amigablemente sosteniendo entre sus manos lo que ella tanto quiere arrancarle y largarse triunfadora-¿Cómo has estado? Que coincidencia encontrarte por aquí ¿No crees que es una señal del destino para que dejes de ignorarme y hagamos las paces como dos personas civilizadas? Casi nunca vengo a esta tienda, pero hoy amanecí con ganas de caminar un poco y aquí estoy ¿Que hay de ti?-verborrea al hablar entre titubeos de nerviosismo, no es para menos, era la primera vez que cruzaban palabra desde su primer día de clases.

-¡Tenías que ser tú, araña saltarina del demo...!-A la ojiazul se le olvida rotundamente que se encuentra en público y procede a casi delatar el alter ego del castaño, de no ser porque Peter actúa tan rápido como sus sentidos se lo permiten y coloca una mano sobre la boca de Hope obligándola a callar. Y por inercia termina arrinconándola contra una pared detrás de las estanterías.

La castaña rojiza comprime la mandíbula embravecida por su atrevimiento en tanto su cuerpo se tensa por la cercanía de sus anatomías y sus respiraciones mezclándose, un extraño nudo se arremolina en su estómago, su garganta arde y sus mejillas se calientan ¡Mal momento para pescar un resfriado!-Lo siento, lo siento, lo siento-se disculpa Peter repetidamente liberándola del agarre que ejerció con su brazo alrededor de su cintura-Perdóname, entré en pánico ¿Estás bien? ¿Te lastime?-Hope ladea la cabeza señalando la palma que permanece en su boca-Oh, lo siento, enserio, perdón-tartamudea retirando la mano de sus labios.

-Ahora ¿Serías tan amable de alejarte de mi?-inquiere Hope rechinando los dientes apuntando a sus cuerpos que parecen máquinas ajenas a sus mentes, Peter retrocede un par de pasos con sus mejillas ardiendo de la misma manera que las de la joven acompañado de un cosquilleo en su pecho-Gracias-la tríbrida se agacha para recoger el funko y el arácnido cambia radicalmente su semblante-Y por esto también.

Antes que Hope pudiera emprender su huida, Peter se las ingenia para arrebatárselo de las manos-Por más que quiera que seamos amigos, me temo que no puedo dártelo ¿Sabes cuanto trabajo me costó encontrarlo?

-No y no me interesa-sentencia la tríbrida pateando su mano para que lo deje caer y ser ella quien lo atrape-Yo lo ví primero.

-¡Oye, esa es la ley de la ventaja y no está cool!-exclama el arácnido acercándose una vez más a Hope buscando quitarle la manzana de su discordia, parecen un par de niños a nada de golpearse por un juguete-Voy a amarrarte las manos con telarañas-murmura contra su oído mientras persigue el artefacto que la chica de New Orleans le niega intercambiándolo de manos.

-Inténtalo y te clavaré mis garras-advierte la joven depositando el objeto en una estantería que el adolescente no podría alcanzar sin tener que pasar por encima de ella primero.

-Aún no eres lobita así que no tienes.

-Pero no me he limado las uñas, será un pequeño adelanto.

Peter alza ambas manos en señal de rendición-Pido una tregua.

-¿Es esta una maniobra evasiva para distraerme?

-¡¿Ves que siempre estás a la defensiva?!

-¡Intenta vivir con millones de personas confabulándose para asesinarte desde antes de tu nacimiento y después hablamos!-brama Hope dejando salir una pequeña gota de la enorme cantidad de fluidos negativos que yacen aguardados en su interior. Se maldice internamente en mil idiomas por el vómito verbal que expone su sentir.

Peter se queda callado un buen rato sin saber que responder, quizás había metido la pata una vez más con la tríbrida-Lo lamento, no era mi intención-Definitivamente tocó un botón sensible para ella y pudo confirmarlo en su mirada azulina carente de brillo, estaba ida en sus propios pensamientos arrugando la comisura de los labios, una extraña sensación se cuela en el pecho del arácnido al verla de ese modo tan tenue.

La joven sacude la cabeza negando-Descuida, no es tu culpa-asevera con voz apagada y ligeramente desfasada-No es tu culpa-se recuerda inconscientemente otorgando una respuesta a la interrogante previa de Gael.

-Mucho menos tuya-rebate el arácnido rememorando cada palabra inscrita en su libro de archivos sobrenaturales, específicamente en los dos capítulos enteros narrando las habilidades e historia de la grandiosa y única tríbrida original-Se que no nos conocemos tanto, pero puedo notar que cargas con un peso que no te corresponde.

-Los problemas de mi familia son mis problemas desde que vine al mundo-Hope recupera su mirada altiva y menea la cabeza-Tanto tú como yo cargamos con el mismo peso que fractura nuestras espaldas, señor araña-murmura lo último casi inaudible exclusivamente para la audición mejorada el adolescente-Querer proteger a los indefensos usando nuestros poderes para el bien así el precio sea nuestra cordura o buscar la manera de solucionar problemas que se supone pertenecen a los adultos, pero te terminan afectando a ti inevitablemente-Hope cierra los ojos con fuerza y se vuelve a auto regañar por hablar de más-Olvídalo, nunca tuvimos esta conversación.

-Hope-la llama Peter en un susurro dulcemente cuidando de no alterarla, la joven poseía un fuerte temperamento que si bien admiraba por su firmeza, también le disgustaba porque ampliaba esa brecha entre ambos que tanto quería extinguir-No puedo pedirte que dejes de cargar con eso de la noche a la mañana porque sería la persona menos indicada para decirlo, pero si puedo aconsejarte que no lo hagas sola.

-Tú también cargas con eso solo.

-Es por eso que te sugiero que no sigas mi ejemplo, no quiero que termine mal para ti.

La tríbrida asiente sin nada más que agregar, ya había hablado demasiado y no podía darse el lujo de abrirse tanto a las personas, más no comprendía como es que el joven arácnido se cernía en ella a tal punto de hacerla sentir cómoda y en confianza de expresarse libremente, Hope empieza a sospechar seriamente que en lugar de una araña humana, es una criatura que manipula su capacidad del habla con sus soñadores ojos chocolate.

¡Concéntrate, Hope!

-Gracias por la bonita charla, ya me voy, por favor envíame tu parte del trabajo cuanto antes, la señorita Lewis dice que nuestro turno de exponer será el viernes que tenemos clases con ella, sería miércoles, pero habrá junta de maestros así que día libre ¡Genial!-La ojiazul se agacha a tomar el funko y se encuentra con una desagradable sorpresa; Ya no estaba.

Su vista viaja inmediatamente al arácnido, más este la repara con intriga y confusión por su repentina mirada aniquiladora. Por encima del hombro de Peter, divisa a un niño de diez años aproximadamente jugando con el artefacto en manos en tanto su padre paga por él.

Maldito niño ambicioso, piensa la castaña rojiza.

Peter imita la trayectoria de los ojos de Hope y da con ese escenario igual de trágico para él-¡Oh vamos!-exclama irritado.

-¡Esto es tu culpa! ¡Eres un imán de problemas!-lo señala la tríbrida botando humo por las orejas entre tanto se enruta en dirección al mostrador de la tienda.

-Pero...-las palabras del castaño quedan en el aire cuando se apresura a pisarle los talones a la ojiazul que se detiene frente a una chica que atiende el lugar, Peter agradece a todos los dioses y santos existentes que a Hope no se le diera por abalanzarse contra un infante con tal de obtener su preciado artilugio.

-Disculpa, buenos días-saluda amablemente la joven Mikaelson a la trabajadora con una radiante sonrisa, Peter piensa en que su familia se tomó enserio el trabajo de inculcarle buenos modales-Tengo una duda ¿El funko pop de Luna Lovegood que se acaba de llevar ese niño era el último?

-¿Vendrán más próximamente?-secunda el arácnido.

La chica castaña ladea la cabeza-Por el momento sí era el último en exhibición-Los resoplidos de ambos adolescentes no se hacen esperar-Pero están de suerte, tenemos más en bodega que saldrán nuevamente hoy mismo a la venta, pueden volver antes de la hora de cierre a las seis-Tanto Peter como Hope celebran a sus adentros-Y no se preocupen, habrá suficiente para ambos, no tendrán que pelear otra vez.

Las mejillas del dúo se tiñen de un tono carmesí al enterarse que alguien notó su pequeña riña infantil-Muchas gracias-agradece la tríbrida antes de volverse a buscar sus compras seguida por el joven de Queens-¿Necesitas algo, Parker?

-Recordarte que mi oferta de patrullar juntos después de clases sigue en pie-comenta el castaño jugando con sus manos en un tic nervioso-Podríamos ayudar a más de alguien y de paso distraer tu mente de tantos malos pensamientos. No quiero dejarte sola y un compañero de crimen no te vendría mal-Hope relaja su semblante y agacha la mirada pensativa-Se que dijiste que no, pero si cambias de opinión, avísame ¿Vale?

La ojiazul asiente con la cabeza-Gracias.

-No es nada-dice Peter dedicándole una media sonrisa antes de retirarse del local dejándola con más preguntas que respuestas respecto a sus peculiares interacciones.

-¡Tía Bex, deja de reírte!-reprende Hope con molestia a su tía mientras se agacha esquivando la patada que intenta propinarle-¡No da risa!

Rebekah alcanza a encestar un pie en su estómago empujándola, pero Hope se endereza rápidamente devolviendo el golpe que la rubia detiene atrapando su muñeca-Pelearon por un muñequito como dos niños ¿Y pretendes que no me de risa? Quisiera haber ido con ustedes, se han de ver tan adorables.

-No te perdiste de nada-Hope aprovecha la posición en que se encuentra y le dobla el brazo logrando que se encorve, con sus piernas se impulsa para dar una voltereta y atrapar el cuello de su tía entre sus extremidades donde ejerce fuerza para empujarla hacia adelante con una vertiginosa maniobra que la tumba en el suelo-Te lo resumiré en que parecemos un perro y un gato, el es un golden retriever tierno y amigable mientras que yo soy un angora fuerte e independiente. El niño no se habría robado mi funko pop de no ser por esa araña saltarina entrometida y me enojo más conmigo misma porque quiero detestar a Peter, pero no puedo porque el muy idiota es demasiado amable para este mundo.

-Es porque en el fondo te agrada, tiene un corazón muy noble y es un buen chico que sabe ganarse a las personas sin siquiera intentarlo-gorjea Rebekah irguiéndose con su velocidad vampírica para instalarse detrás de Hope y aplicarle una llave que la deja inmovilizada-Debí suponer que estabas molesta en cuanto me pediste entrenar en tu día libre-La tríbrida le propina un cabezazo en la nariz para zafarse, pero su tía no afloja el agarre-Pequeña lección del día, no debes dejar entrever tus emociones en combate, el enemigo suele atacar tres cosas; Tu cuerpo, tu corazón y tu mente. Así fue como Helmut Zemo inteligentemente nos emboscó, investigó cada posible grieta que hubiera entre nosotros, nuestros perfiles, historiales y aunque lo odie, admito que fue una jugada maestra, fue capaz de llevarnos a un inminente punto de quiebre donde nos agredimos entre nosotros hasta casi separar a la familia. Afortunadamente Krista impidió esto, pero le costó su propia cordura.

Hope traga en seco recordando sus palabras al arácnido, la cordura era el precio de ser tanto un héroe como un villano e incluso un antihéroe-¿Es normal sentirme así?-La tríbrida da un salto arqueando su espalda para devolver al piso a su tía haciéndola mascullar entre dientes-No estuve directamente involucrada en todo ese asunto, exceptuando la batalla en el aeropuerto y eso mismo me ha estado torturando, siento que pude haber hecho más para ayudar. Para evitar que nuestra familia se desmoronara y que cada uno se viera obligado a tomar su propio camino, siento que no fui suficiente para protegernos-se sincera en plena confianza con la rubia que escucha atentamente y suspira con pesar.

-Créeme al decir que te entiendo-esclarece Rebekah enrollando una pierna en el hombro de Hope buscando derribarla, acto que procede exitoso-Cuando los acuerdos de Sokovia fueron presentados estuve completamente de acuerdo con lo que planteaban, me sentía culpable de lo que ocasionó Ultron porque fui yo quien lo creó, no resultó como planeé y miles de personas fueron aniquiladas por un error que cometí. Se que no soy ajena a arrebatar vidas con mis propias manos y jamás me ha pesado, lo que hizo que fuera la excepción es que tenía buenas intenciones, tuve la bondad para hacer algo bueno que protegiera a la humanidad y no funcionó-La original también se siente libre de desahogarse con su sobrina y esta última comprende empáticamente cada una de sus palabras-La culpa me taladraba el pecho e hice lo que pude para remediarlo porque hacía años que no poseía remordimiento y detestaba sentirme así, los acuerdos parecieron la oportunidad perfecta para absolverme, pero no fue así. Terminé peleando con tu padre, Krista y Kol agregando otro dolor a la lista cuando nos separamos.

-El lado bueno es que terminaron resolviendo sus diferencias, pero escogiendo rumbos distintos con tal de no ser capturados y dañar el plan de tía Kris.

Rebekah asiente con la mirada perdida en el techo del gimnasio-A lo que quiero llegar es que nadie esta exento del fantasma de la culpabilidad, pero en nuestras manos tenemos el poder de permitirle tomar el timón de nuestra vida o no.

-¿Y cómo se lo impido?

-Perdonándote a ti misma-corrobora la rubia sujetando con dulzura la mano de su adorada sobrina-Hope, eres una niña que por más madura que sea para su edad, debe vivir enteramente sus etapas. Los adultos somos los encargados de velar por ti y hacer todo en nuestro alcance por protegerte, es cierto no eres como el resto de jóvenes de tu edad, pero eso no significa que debas cerrarte a las experiencias mundanas de ser una adolescente.

La castaña rojiza atrapa su cabeza entre sus manos masajeándose la sienes, un tercer ojo se estaba abriendo con la conversación que mantenía con su tía, su panorama se ampliaba a una fotografía completa que empieza a recuperar su nitidez-Supongo que tendré que intentarlo, pero no será fácil, no se por donde comenzar.

-¿Te refieres a perdonarte o a vivir?

-Ambas.

-El perdón es un íntimo proceso espiritual que no cuenta con un manual de instrucciones, varia de persona a persona, en mi caso fue asumiendo mis responsabilidades, dejando ir el pasado y aceptando que todos cometemos errores y a veces son necesarios para aprender de ellos y renovarse-manifiesta Rebekah con calma y paciencia, arrullando cada palabra para que su sobrina la absorba y no lo sienta como una aburrida prédica sin sentido, sino una lección que aplique en su vida-Y para lo segundo puedes intentar con reanudar esas mismas actividades que tenías en Mystic Falls, hacer nuevos amigos no hará que olvides a Lizzie y a Josie, te haré una pregunta-retorna a su entrenamiento y con una pierna aprisiona la garganta de Hope-¿No crees que Peter es lindo?

-Dimiterre-musita Hope y la vampiresa original sale desperdigada por el aire estampando su espalda contra una de las paredes del sitio-No es feo, tiene unos ojos color café con un bonito brillo plateado que te desconcentra en segundos, su cabello parece del típico color castaño claro, pero si te fijas con atención tiene un par de destellos oscuros en la parte trasera, por su complexión física puedo decir que hace ejercicio, no está nada mal, su rostro carece de imperfecciones y tiene una preciosa sonrisa tan tierna que te desarma fácilmente-La joven abre los ojos de par en par al figurar que fue sospechosamente específica-Bueno, si me parece lindo, pero no por eso voy a salir con él.

Rebekah se endereza mientras retiene una carcajada y repara a su sobrina con diversión-Si cambias de opinión, tengo su número-Hope tuerce los labios y agacha la cabeza apenada por dejarse en evidencia-El entrenamiento ha terminado por el bienestar de mis huesos.

-De todos modos sanan en menos de cinco segundo-debate Hope ojeando el reloj en la pared, iba tarde, debía apresurarse a volver a la tienda ahora mismo antes que cerrara o algún otro niño codicioso robará su ansiada compra-Saldré un rato con Gael a comprar unas cosas, no nos tardaremos.

-Diviértanse.

La tríbrida se retira encarrilándose directamente a la habitación del mexicano, tiene demasiado afán como para perder tiempo cambiando su ropa de ejercicio por un atuendo casual-Gael ¿Puedo pasar?-pregunta antes de ingresar.

-Adelante-accede el mexicano y Hope abre la puerta encontrándoselo desparramado en el sillón con la vista concentrada en un videojuego del televisor. Su habitación es tan amplia y equipada como la de ella, pintada en tonos azul y verde oscuro con una cómoda cama, escritorio, un librero, sillones, enorme closet y baño propio-¿Me vas a pasar la tarea de historia?

-Si me acompañas a regresar a la tienda-Gael resopla sin intenciones de pausar su actividad-Vamos, no quiero ir sola.

-O sea que si nos asaltan ¿Quieres que nos asalten juntos?

-No nos van a robar-La castaña rojiza rueda los ojos, pero no culpa al adolescente, hasta cierto punto son igual de paranoicos-Si vienes, te paso la tarea por tres días-usa su carta más segura para que el joven mueva su trasero o no llegarían a tiempo.

El licántropo se pone rápidamente de pie aproximándose a su mejor amiga-Hubieras empezado por ahí, Esperancita-apaga la televisión y jala a la chica del brazo-Síganme los buenos.

La duración de su trayecto disminuyó considerablemente a comparación del tiempo que tardaron en la mañana, no iban tan relajados sino tensos y algo alertas teniendo en cuenta que estaba anocheciendo y la calle se hallaba atemorizantemente árida, en menos de quince minutos se detuvieron en una esquina que daba al local.

Esfuerzo que no funcionó de mucho, Hope gruñe pisoteando fuertemente el piso al divisar las luces apagadas y el vibrante anuncio de "Cerrado", se cumplió su gran temor-No se que tanto le hice a la vida o que karma estoy pagando para que me persiga la desgracia.

Gael se encoge de hombros restandole importancia-Bueno, lo intentamos, se hizo lo que se pudo-palmea amistosamente los omoplatos de su frustrada amiga-Volveremos mañana en cuanto abran, no te preocupes

Hope entrecierra los ojos al detectar movimiento dentro de la tienda y su mandíbula se descuelga ante el escenario que visualiza, once tipos encapuchados serpenteaban entre las estanterías arrojando varios objetos a unas bolsas, estaban robando-Gael ¿Estás viendo lo mismo que yo?

El mexicano asiente sujetando el brazo de la tríbrida-Si, ahora date la vuelta y corre lo más rápido que puedas antes que noten nuestra presencia y sea demasiado tarde.

Contra cualquier pronóstico para una persona con sentido de supervivencia, pero no para alguien que conoce a la joven, esta se zafa del agarre y se enruta cautelosamente al sitio caminando por los bordes para no ser detectada-Hazlo tú si quieres, yo voy a poner en su lugar a esos criminales.

-¡¿Esperancita, enloqueciste?! ¡Oye Mikaelson, estás demente!-gritonea desesperado el adolescente agarrándose la cabeza entre sus manos mientras sigue a la chica que cruza la calle un par de casas antes del local.

Hope respira hondo llenándose los pulmones de valor caminando con firmeza y decisión ¿Estaba cometiendo una locura? ¡Obviamente! Era una adolescente de quince años con complejo de superhéroe lo suficientemente valiente o estúpida para enfrentarse a once hombres que le doblan el tamaño.

¿Esto le importaba? Claro que no, tenía entrenamiento y un poder descomunal, podía dar batalla y mucha.

Se asoma por un callejón contiguo que se encontraba vacío para su fortuna, debía llegar a la puerta trasera para introducirse y tomarlos por sorpresa, su mente maquina un sin número de estrategias de ataque en tanto ignora los fallidos intentos de su mejor amigo por hacerla entrar en razón, una vez alcanza su objetivo, gira sobre sus talones para encarar al mexicano y tomarlo por los hombros-Nada de lo que digas va a hacer que cambie de opinión, no tolero este tipo de cosas y si en mis manos está la oportunidad de impedirlas, la voy a tomar, así que cierra el pico y déjame trabajar.

-Una cosa es luchar contra tu familia, quienes miden sus golpes o no los arrojan en tu dirección-murmura Gael tratando de pensar con cabeza fría-Y otra muy diferente enfrentarte a tipos como estos que no dudarán en sacar un arma y pegarte un tiro-Esa posibilidad deja helada a la chica de New Orleans-Estas a tiempo de rendirte.

Hope parece pensarlo un momento, podía ayudar llamando a la policía o simplemente ignorar la situación y salir bien librada, pero no podía, no estaba en su naturaleza pasar por alto una injusticia y quedarse sentada sin hacer nada-Si me matan, lo peor que puede pasar es que despierte como vampiro en transición-se vuelve a la puerta musitando unas palabras en latín para quitarle el seguro-Escóndete o huye.

-¡Maldita suicida!

La tríbrida no se queda escuchar el resto de regaños en español con los que la acribilla Gael y entra cuidando el resonar de sus pasos, rápidamente evoca las enseñanzas de Natasha en espionaje las cuales le permiten ser tan escurridiza como un gato entre decenas de cajas y estanterías a medida que se adentra.

En su camino se topa con su primer atacante al que derriba barriendo sus piernas con la suya, aún desconcertado se reincorpora, pero Hope es más rápida y aprovechando su cercanía, alza ligeramente su rodilla para tomar impulso y propinarle una estratégica patada en el rostro que lo noquea. El estruendo de su caída alerta al resto y dos más se suman a la contienda, la tríbrida toma a uno del brazo y tira de este hacia atrás hasta romperlo, con su mano libre desperdiga un codazo directo a la nariz del segundo y jala su cabeza estampándola contra el suelo dejándolo inconsciente, vuelve con el primero únicamente para rematar su trabajo-Ad sommun-susurra a su oído provocando que caiga en un profundo sueño.

-¿No te enseñaron que es de mala educación meterte en asuntos que no te incumben, muñequita?-satiriza despectivamente una voz masculina a sus espaldas.

La joven se da la vuelta conectando una patada giratoria contra su pecho que lo arroja contra una estantería repleta de mangas que caen en el rostro del hombre nublándole la visión-Creo que sí, pero me quedé dormida en esa prédica, fue muy aburrida.

El sujeto desfunda una beretta con la que le apunta a Hope, la ojiazul siente sus nervios congelarse y su corazón detenerse, pero no lo da a conocer. Se prepara para quitarle el arma con un hechizo cuando una red de telaraña entra en escena adhiriéndose al objeto y arrebatándoselo al hombre, por primera vez, la castaña rojiza se siente aliviada por contar con esa presencia que no requiere que se de la vuelta para reconocerla-¿No te enseñaron que esta mal apuntar con una pistola a las personas?-juguetea Peter enfundado en su traje de Spiderman a unos pasos de Hope cuidándole la espalda.

El hombre no formula ninguna palabra y se yergue buscando arremeter contra la adolescente, más es interceptado por el arácnido que se coloca en medio redireccionando el ataque en su contra con una patada que finalmente lo deja fuera de combate-Quedan siete-avisa Hope a Peter y el bullicio de su pelea trae como consecuencia que atraigan a los hombres que restan-Noquéalos, no pueden quedar despiertos o estamos fritos, yo a la izquierda y tú a la derecha ¿Entendido?

-Copiado, capitana.

Ambos acometen contra sus objetivos en una impecable sincronización que no alcanzan a divisar por estar sumidos en lo suyo, Hope se desliza por el suelo y golpea la rodilla del primero, aprovechando que se arquea preso del dolor, dobla sus piernas alrededor de su cuello y golpea repetidamente su cabeza utilizando sus codos tal como Natasha le ilustró. Da una voltereta hacia atrás llevándolo al piso donde yace noqueado y no pierde el tiempo para regresar con los otros dos, el segundo alcanza a encestarle un puñetazo en el pómulo y el tercero una patada en las rodillas, pero Hope rápidamente recupera la ventaja, utiliza la cercanía para asfixiar a uno y con la presión ejercida toma impulso para patear en el mentón al que se encuentra detrás, arquea su espalda dando una pirueta que estrella al tipo contra el suelo y ella aterriza con su rodilla izquierda flexionada, la pierna derecha extendida a un lado, una mano apoyada en el suelo y la otra echada hacia atrás.

Una vez terminada su tarea se dispone a prestar atención a los ruidos que ocasiona Peter al batallar con tres de sus cuatro objetivos, el arácnido se mueve fluidamente entre telarañas y acrobacias bien ejecutadas que recaban a impresionar a Hope, uno de los hombres intenta tomarlo desprevenido, pero la tríbrida extiende su mano inmediatamente-Expello-vocifera y una esfera azul es dispersada en su dirección enviándolo contra la pared. Peter al notar que planea enderezarse lo manda de vuelta a Hope y es esta quien lo deja inconsciente con un puñetazo que le parte el labio, la joven repara en sus nudillos salpicados de sangre, pero no le presta relevancia.

El castaño extiende sus piernas para conectar una patada lateral en el rostro de los últimos dos atacantes que quedan, uno trata de reincorporarse, pero Hope le clava el zapato en el cuello inmovilizándolo y Peter se instala a su lado disparándole al hombre dos redes de telaraña en cada mano para impedir su escape-Reconozco que me equivoqué-Las palabras arden en la garganta de la joven Mikaelson al ser emitidas-No conformamos una dupla tan mala-patea el rostro del tipo dejándolo inconsciente.

Peter gira su rostro pasmado e inclusive parpadea repetidamente para asegurarse que no es una alucinación-Como rivales fuimos buenos, como aliados seremos mejor-Le sonríe a la castaña rojiza bajo el traje y no sabe como logra identificar su gesto porque ella se lo devuelve auténticamente, ambos voltean por encima de su hombro entreviendo las cajas destrozadas, figuras de acción regadas por todas partes, mangas y comics magullados contra el piso, un caos sin pies ni cabeza en el ala que utilizaron como campo de batalla.

-Ustedes, idiotas entrometidos-maldice uno de los hombres que Hope derribó en cuanto entró-Esto, les va a costar muy..-No termina de hablar cuando Gael Luna sujeta fuertemente su cabello y de un rodillazo en la cara lo manda nuevamente al suelo.

El mexicano se hace paso en medio del desastre con las manos en la cintura mirándolos fijamente con odio-Lobita y arañita-ironiza apuntándolos con el dedo acusador-Les voy a dar una madriza porque me tenían con el Jesús en la boca-A lo lejos son capaces de escuchar una secuencia de sirenas que alertan a Gael-¡Brutos, la policía!-Agarra a cada uno del brazo y los saca del sitio a rastras antes que las autoridades policiacas arriben.

Sin embargo, Hope consigue expresar unas palabras en latín y esparcir los destellos zafirinos de su magia, un hechizo de amnesia a los asaltantes para que no recordaran su rostro.

Su identidad y su cara no debían ser reveladas.