Capítulo 12 - Sentimientos (parte final)
Lucy POV
A la mañana siguiente desperté entre los brazos de Lyon. Me encontraba en la cama de lado mirando hacia él quien estaba de lado mirando hacia mí, sus brazos me rodeaban, sin embargo, no me producía la misma sensación que sentía entre los brazos de Gray. Últimamente no dejo de pensar en él, creo que le echo demasiado de menos, nunca imaginé que llegaría a este extremo pero si he sacado algo en claro de todo esto, es lo mucho que le quiero y lo mucho que le necesito en mi vida. Necesito recuperar a mi mejor amigo... El problema es que ya no sé si le sigo viendo como eso y nada más... Estoy muy confusa... Porque él es el único que me hace sentir diferente, algo indescriptible... Sus besos... Sus abrazos... Su cariño... Incluso el sexo con él, todo me produce mucha mayor satisfacción con él. Lyon me dejó la misma sensación placentera pero vacía que Rogue, tanto en sus besos como en la cama... Y estoy asustada porque no entiendo qué me pasa con Gray... En el cumpleaños de Juvia decidí terminar con aquel juego que me provocaba tanta culpabilidad pero que a la vez, me gustaba tanto... Y lo echo de menos... A él... Su amistad... Ese juego...
- Buenos días... —gracias a esas palabras conseguí salir de esos pensamientos.
- Buenos días —le sonreí, él me devolvió la sonrisa y depositó un tierno beso en mis labios— ¿Dormiste bien?
- Claro.
Poco después, salimos de la cama y desayunamos en mi apartamento. Finalmente, nos despedimos a mitad de camino pues yo me dirigía a Fairy Tail mientras que él debía regresar a Lamia Scale por lo que no le vería en algunos días. Al estar sola, intenté disfrutar de un poco de tiempo para mí aunque por alguna razón, no podía dejar de pensar en Gray a quien me encontraba observando sentada en un taburete de la barra del gremio. Estaba sentado solo en una de las mesas, serio y pensativo, con la cabeza apoyada en una de sus manos, mientras que con la otra movía algo que tenía en la mano. ¿En qué estará pensando? ¿Le habrá pasado algo? Juvia se había marchado de misión con Wendy por lo que tenía vía libre para hablar con él, con ella aquí es bastante difícil para mí conseguir tiempo a solas con él, mi simple presencia le provoca muchos celos aunque ahora son comprensibles pero yo solo quería normalizar mi relación con él, quería ir a hablar con él, me preocupaba verle tan serio.
- Dime Lucy, ¿a quién observas tan minuciosamente? —preguntó Mirajane sacándome de mis pensamientos, haciéndome sentir nerviosa.
- A nadie... —me giré para contemplarla a ella quien se encontraba detrás de la barra.
- A nadie eh... Vaya... Juraría que estabas mirando a Gray... —dijo con una sonrisa lindísima tras la que ocultaba toda su perversión.
- ¿Por qué iba a estar mirándole?
- No lo sé, dímelo tú —volvió a mostrarme su mejor sonrisa.
- No digas tonterías...
- ¿Entonces? ¿Qué te preocupa?
- Ah... —suspiré. Lo cierto era que me sentía confusa y Mirajane me parecía una buena opción con quien hablar, siempre daba buenos consejos— Pues... Lo cierto es... Que estoy un poco confusa...
- ¿Sobre qué? —dijo sentándose en un taburete que tenía tras la barra.
- Pues... Conoces mi estilo de vida... Siempre he sido feliz así pero esos encuentros con hombres desconocidos ya no me llenan, ya no me dicen nada... Disfruto mucho ese momento pero después solo me queda una sensación de vacío que antes no sentía...
- ¿Te pasa eso con todos los hombres?
- Sí... Bueno... En realidad... Hay un chico que me hace sentir diferente... —abrió los ojos emocionada.
- Explícame qué te hace sentir.
- Pues... No sé... Cualquier beso suyo o cualquier caricia, me hace estremecer, me enmudece, me paraliza... Me siento bien, llena, me gustan demasiado y no quiero que acaben nunca...
- ¿Ese chico es un desconocido de una sola noche?
- No...
- Es un amigo... —dijo con una sonrisa traviesa antes de que pudiera responder— ¿Qué tiene novia quizás?
- No es Gray —dije molesta.
- Ara... No dije ningún nombre... —sonrió con satisfacción. Mierda, de seguro sabe algo— Mira Lucy, lo que estás describiendo es lo mismo que yo siento con Laxus, empecé a sentirme así con él cuando comencé a enamorarme de él... Yo me encontraba en la misma situación que tú, él solo era un amigo, un amigo que en algún momento, comenzó a encariñarse demasiado de mí y me mostraba su afecto de forma constante, intentaba disimularlo pero simplemente no podía tratarme de otra forma.
- ¿Estás insinuando que me estoy enamorando? Pero eso es imposible... Él... Es solo...
- ¿Es solo un amigo? —terminó la frase por mí— Eso me decía yo con Laxus y ahora estoy a punto de casarme con él —sonrió feliz.
- Te digo que no estoy enamorada de él... No puedo enamorarme de él...
- ¿Porque tiene novia?
- Que no es Gray —volví a decir molesta.
- Vamos Lucy, puedes engañar a otros pero no a mí, he visto muchas veces la expresión de tu rostro cuando estás observándole. Incluso a veces, se nota cuánto te molesta verle con Juvia...
- Ah... —suspiré frustrada, era inútil intentar ocultarle algo a Mirajane— ¿Qué voy a hacer...?
- ¿Por qué no me explicas qué ocurre exactamente entre vosotros? Quizás así pueda ayudarte.
- Pues... —decidí contarle todo, ya nos había pillado y yo necesitaba hablar del tema— No lo sé... Todo empezó la noche de tu compromiso con Laxus, bebimos más de la cuenta y terminamos teniendo sexo en el apartamento de Gray. Después de eso, no sé qué pasó entre nosotros pero cada vez que bebíamos alcohol, terminábamos acostándonos...
- ¿Cuántas veces ha ocurrido eso? —preguntó acercándose a mí pues comenzamos a hablar bajito para que nadie se enterara de nada, seguía sentada en el taburete tras la barra.
- Creo que cinco...
- ¿Y cómo ha sido vuestra relación después de eso?
- Extraña. Cada vez nos hemos alejado más y más del otro, nuestra amistad ya casi no existe y siempre que estamos juntos, se nota la tensión e incomodidad en el ambiente...
- ¿Por qué creéis que ha pasado eso entre vosotros?
- No lo sé, Gray dijo que yo siempre le he atraído mucho físicamente y que siempre tuvo ganas de pasar una noche conmigo... El problema es que una noche, se convirtieron en cinco...
- ¿Y cuál es tu escusa? —dijo con una sonrisa divertida.
- La misma supongo... También me atrae mucho y la verdad es que me gusta demasiado el sexo con él...
- Así que Gray es bueno en la cama eh... —dijo con una sonrisa pícara.
- Sí... Pero ese no es el punto...
- Mira Lucy, voy a ser sincera contigo. Yo creo que Gray siente algo por ti desde hace mucho tiempo, prácticamente desde que te conoció, por eso me sorprendió mucho cuando comenzó a salir con Juvia pues siempre pensé que terminaríais juntos al final... Después de todo, tú siempre estabas con él —sonrió— En mi opinión, lo que ha ocurrido es que por culpa del alcohol, aquella noche Gray no pudo reprimir lo que siente por ti. Creo que él guardó esos sentimientos cuando comenzó a salir con Juvia pero por culpa de esa noche, esos sentimientos han empezado a salir de nuevo y no es capaz de controlarlos, provocando que siempre caiga en tus brazos cada vez que bebe.
- Eso... Eso es imposible... Es imposible que sienta algo por mí...
- Lucy... Durante todos estos años pude ver la expresión bobalicona que siempre tenía cuando te observaba, expresión que ha vuelto a mostrar —dijo sonriente— Él te quiere muchísimo, ni si quiera ahora que sale con Juvia ha dejado de demostrártelo. Así que la cuestión es, ¿qué sientes tú por él?
- ¿Yo...? —dije confusa— No lo sé pero es imposible que me esté enamorando de él... Como te dije antes, él es solo un amigo...
- ¿Por qué intentas engañarte de esa manera? Así solo te harás daño.
- Pero... Yo nunca me he enamorado, ni si quiera lo entiendo del todo... Nunca lo he sentido... Ah... ¿Qué voy a hacer...?
- No puedes hacer nada, por suerte o por desgracia, no podemos elegir de quién nos enamoramos.
- ¿Pero qué significa eso? ¿Cómo sabes si estás enamorado de alguien?
- Esa es una pregunta muy difícil Lucy, ya que cada persona es diferente y por tanto, siente el amor de una manera distinta. Pero una idea general, sería algo así... Veamos... Estás enamorada de alguien cuando es la persona con la que más te gusta estar, siempre quieres estar con esa persona. Cuando estás enamorada, no puedes dejar de pensar en todo momento en esa persona, por lo que resulta complicado concentrarse en algo que no tenga que ver con esa persona pues cualquier situación o circunstancia te recuerda a ella, incluso cuando duermes, a veces sueñas con esa persona, no sale ni un solo segundo de tu mente. Solo piensas en lo bien que te hace sentir siempre que estás a su lado aunque no estéis haciendo nada, una sensación que se vuelve cada vez más adictiva y que solo te produce esa persona, por lo que a veces te obsesionas por conseguir estar con esa persona. También empiezas a sentir un fuerte deseo por estar con esa persona en todo momento, de hacer cosas con esa persona, sientes que la necesitas a tu lado. Otra cosa muy importante son los celos... Esa sensación tan desagradable alimentada por el miedo a perder a esa persona frente a otra que crees superior a ti, y tú los sientes... Odias verle con Juvia porque te hace sentir inferior, sientes que ella te ha apartado de él, que te ha quitado a tu mejor amigo y eso no lo soportas. Además, envidias la relación que tiene con Gray porque es la que tú quieres tener con él.
- ... —no sabía qué decir, ni si quiera sabía si entendía todo— No sé Mirajane... Pero si es cierto que no me gusta verle con Juvia... Y que me molesta que lo haya alejado de mí...
- Está claro que empiezas a sentir algo por Gray aunque no quieras reconocerlo... Pero dime algo Lucy... ¿Qué hay entre tú y Lyon?
- Lyon... —me quedé pensativa— No estamos saliendo, de momento solo estamos viéndonos a menudo intentando conocernos mejor para ver si podríamos llegar a ser una pareja...
- Ya veo... Pero no se te ve muy emocionada con él... Aunque supongo que es normal, es lo que suele suceder cuando estás enamorada de otro chico —dijo traviesa.
- Ya te he dicho que eso es imposible...
- Compruébalo —sonrió traviesa.
- ¿Qué...? —no entendía nada.
- He de decir que no me parece bien lo que le estáis haciendo a Juvia... Pero creo que ambos necesitáis aclarar vuestra relación.
- ¿Cómo?
- Sedúcelo.
- ¿Huh...? —eso me sorprendió.
- Piénsalo. Lo que necesitas es estar con él, besarle, pasar la noche con él... Y así comprobarás que todo lo que te dije es cierto, que realmente te sientes así con él, necesitas comprobar si solo él te hace sentir así, necesitas darte cuenta de que estás enamorándote de él... Además, debes seducirlo sin que ninguno haya bebido alcohol y esto es muy importante. Si estando sobrios, consigues pasar la noche con él, significa que hay más que simple atracción física. Tú mejor que nadie conoces a Gray, sabes que no engañaría a Juvia tan fácilmente sin estar ebrio, pero si cae en tus brazos, entonces significa que tengo razón, que Gray siente algo por ti que no es capaz de parar, ni si quiera por Juvia.
- ¿Cómo quieres que haga algo así...? Es imposible... Para empezar, apenas pasamos tiempo juntos, sobre todo si Juvia está en el gremio, ¿cómo voy a conseguir el suficiente tiempo con él para intentar seducirle e incluso pasar la noche con él...? Además, me rechazará por completo y lo poco que queda de nuestra amistad, se estropeará del todo.
- Es más fácil de lo que crees —sonrió traviesa— Solo tienes que conseguir que vaya de misión contigo, una en la que tengáis que pasar la noche fuera. Y una vez en la posada, solo tienes que sobornar al recepcionista para que diga que solo queda una habitación libre por lo que tendréis que dormir juntos... Tienes un cuerpazo que al parecer, vuelve loco a Gray, úsalo.
- ... —conozco bien a Mirajane y sin embargo, nunca deja de sorprenderme— ¿Cómo has pensado un plan así y tan rápido...? —solo sonrió.
- Entonces, ¿te busco una misión?
- No sé Mira...
- Piénsalo. Necesitáis daros cuenta de que ambos sentís algo por el otro.
- ¿De verdad crees eso...?
- Por supuesto, es tan obvio... Lo sorprendente es que vosotros no os deis cuenta.
- ¿Pero qué pasa con Juvia? Somos personas horribles...
- Juvia no se merece nada de esto... Pero lo hecho está hecho y ya no se puede cambiar... Solo una vez más, Lucy. Comprobad vuestros sentimientos y una vez que los tengáis claros, decidid qué hacer.
Alguien llamó a Mirajane desde una mesa por lo que tuvo que ir a atenderla. Me quedé sola en la barra por lo que decidí girarme, necesitaba contemplarle... Quería acercarme a él, no estaba segura de nada de lo que Mirajane me había dicho pero lo que sí tenía claro era que necesitaba comprobar todo lo que sentía cuando estaba con él, necesitaba respuestas, afirmaciones, pero no sabía cómo acercarme a él ni qué decirle. Entonces, mientras le daba vueltas a lo mismo, escuché mi nombre pues el maestro me llamaba. Me dirigí hacia su despacho donde me explicó que debía salir de inmediato a una misión urgente. Era peligrosa por lo que me dijo que eligiera a algún otro miembro del gremio para que me acompañara. La mayoría estaban fuera por lo que no había mucho donde elegir. Erza, Natsu, Levy, Wendy... Todos estaban fuera... Pero entonces, pensé en que Gray se encontraba libre... Sería una buena oportunidad de pasar tiempo a solas con él, mientras no bebamos alcohol, no pasará nada... Aunque he de reconocer, que tengo curiosidad por saber qué pasaría si intentara seducirle... ¿Me rechazaría o terminaría en mis brazos...? Lo cierto era que las palabras de Mirajane tenían sentido... Si conseguía seducir a Gray estando sobrio, significaría que hay más que simple atracción física... ¿No? ¿De verdad Gray siente algo por mí...? No es la única que lo piensa, Lyon creo que también... Estaba tan absorbida en mis pensamientos que no me percaté de que Gray se dirigía hacia la puerta del gremio por lo que fui tras él. Pero mientras lo seguía, por alguna razón, me resultaba muy difícil pararle, supongo que me daba miedo que volviéramos a tener un encuentro incómodo y tenso, además, me sentía nerviosa aunque no entendía el motivo de esos nervios, tal vez porque me daba miedo que me rechazara... Pero debía intentarlo. Ya lo había alcanzado, estiré mi brazo para atraparle pero justo cuando dudaba si agarrarle o no, se giró por lo que mi mano terminó chocando con su pecho en vez de tocar su espalda. Me miraba sorprendido mientras que yo me sentí un poco avergonzada pues me sentía estúpida actuando así...
- Hola —dijo con una sonrisa.
- Hola... —me sentía un poco nerviosa.
- ¿Venías a por mí?
- Sí... Me costó alcanzarte...
- Suelo andar bastante rápido cuando voy solo —dijo sonriente, al menos parecía de buen humor pero aun así, se notaba cierta incomodidad entre nosotros— Entonces, ¿qué querías?
- Casi todos los magos del gremio están fuera por lo que el maestro nos encargó una misión urgente —mentí, no quería darle la oportunidad de elegir pues temía que no quisiera acompañarme.
- ¿Solos nosotros dos...? —parecía incómodo con esa idea.
- Sí... —se quedó pensativo y eso me hizo sentir mal, estaba claro que no le apetecía estar conmigo... Por lo que quería acabar con esa desagradable sensación e irme de allí— Si no quieres venir conmigo, lo entiendo, no pasa nada, puedo ir yo sola...
- Si el maestro asignó dos magos a esta misión entonces no debe ser algo fácil por lo que no te voy a dejar sola. Además, yo no he dicho que no quiera ir contigo... —me dedicó una pequeña sonrisa.
- Entonces... ¿Nos vemos en media hora en la estación de tren...? —pregunté.
- Claro —sonreí.
Me hacía realmente feliz hacer una misión con Gray, solo esperaba poder aprovechar esa oportunidad para normalizar mi relación con él a la vez que conseguía las respuestas que estaba buscando respecto a mis sentimientos por él.
A la media hora, me encontraba esperándole en la estación. Llegó un poco tarde pero rápidamente se disculpó y compró los billetes. Debíamos ir a una ciudad a unas tres horas en tren de Magnolia, mentiría si dijera que no estaba preocupada pues teníamos que capturar a un mago oscuro que había conseguido escapar de su prisión, era un mago poderoso y muy peligroso. Mientras pensaba en todo eso, sentí la cabeza de Gray en mi hombro, se había quedado completamente dormido. Entonces, decidí moverlo con cuidado y colocarlo en mis piernas para que estuviera más cómodo. Nada más sentir mis piernas, dio un suspiro y se movió, acomodándose de lado. ¿Por qué siempre se veía tan lindo mientras dormía?
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro