Capítulo 10 - Lyon
Hola a todos ^^ Sé que dije que comenzaría a publicar a mediados de septiembre pero entre la mudanza, las nuevas clases y el hecho de que estuve varias semanas sin internet, me fue completamente imposible publicar. Lo siento T_T
Intentaré publicar un capítulo por semana, al menos de esta historia, aunque aún no sé qué día publicaré. No tengo mucho tiempo así que decidí centrarme en solo una de mis historias y escogí a esta. Pero intentaré escribir algo de vez en cuando en mis otras historias que llevan demasiado tiempo paradas :(
También quería deciros que en unos minutos publicaré un one-shot graylu en mi serie de one-shot de Fairy Tail, espero que os guste aunque no es gran cosa xD
Dicho esto, espero que os guste el capítulo ^^
Os quiero <3
Lucy POV
Ya habían pasado tres semanas desde el cumpleaños de Juvia por lo que quedaba solo un mes para la gran boda entre Mirajane y Laxus. No han querido dar explicaciones para ya la retrasaron dos veces, espero que todo les vaya bien. Por tanto, habían pasado tres semanas desde que Lyon vino a buscarme para disculparse por su comportamiento en el cumpleaños de Juvia y por todo lo que me dijo al día siguiente. Además, le dije que estaba dispuesta a abandonar mi estilo de vida y tener una cita formal con él. Todavía no estamos saliendo, simplemente quiero ver si podríamos llegar a funcionar como pareja antes de serlo, ni si quiera hemos tenido sexo todavía... Parecía feliz cuando le comuniqué mi decisión aunque a los pocos días, vino a mi casa un poco confuso intentando que le aclarara mi relación con Gray. Todavía recuerdo la conversación que mantuvimos sentados en el sofá.
Flashback.
- Oye Lucy...
- ¿Sí?
- Tú y Gray... Lo del cumpleaños de Juvia... ¿Ha pasado más veces...?
- ... —eso me sorprendió, no entendía por qué preguntaba algo así de forma tan repentina, pero no quería mentirle— La verdad es que no era la primera vez...
- Lucy... Tú... ¿Sientes algo por Gray...?
- ¿Huh? No, claro que no... Lo quiero mucho pero entre nosotros solo hay amistad.
- ¿Entonces por qué os habéis acostado y en más de una ocasión?
- Todas esas veces nos habíamos pasado con el alcohol.
- Eso no es excusa. ¿No te parece extraño que siempre terminéis juntos? Está claro que ambos os buscáis utilizando el alcohol como excusa para hacer lo que en realidad deseáis pero que no podéis hacer cuando estáis sobrios. Eso solo significa que entre vosotros hay algo más que simple amistad...
- No se necesita tener sentimientos para tener sexo.
- Pero Gray no es uno más de los múltiples hombres de tu lista, no es un desconocido, es alguien preciado para ti y en esos casos, nunca es sexo sin sentimientos.
- No digas más tonterías... Ya te he dicho que solo hay amistad entre nosotros.
- ¿Y estás segura de que él también lo ve así?
- ¿Qué quieres decir? —eso me sorprendió.
- Sigo pensando que debe haber algo más que simple amistad entre vosotros. Si no eres tú quien tiene esos sentimientos, entonces es Gray.
- ... —me dejó muy impactada— Eso... Eso es imposible... Él ama a Juvia, yo solo soy una amiga...
- ¿Por qué piensas que es imposible que Gray sienta algo por ti? ¿De verdad nunca te diste cuenta?
- ¿Darme cuenta de qué...?
- De nada, olvídalo. Pero... Si de verdad ama a tanto a Juvia... ¿Por qué iba a engañarla una y otra vez con una simple amiga...?
- ...
- Si fuera cierto que Gray siente algo por ti en estos momentos, ¿qué harías?
- Nada, yo no siento lo mismo por él, por no hablar de Juvia, jamás le haría eso.
- ¿Quitarle a Gray? Créeme que es peor que la esté engañando así... Además, nunca sabes hasta dónde eres capaz de llegar para estar con la persona a la que amas, así que nunca digas algo así porque estoy convencido de que si llegaras a enamorarte de Gray, intentarías por todos los medios librarte de Juvia.
- Yo no soy esa clase de persona —dije molesta.
- ¿No? —sonrió— El amor es algo que saca lo mejor de uno mismo, pero también lo peor. Si algún día lo sientes, entenderás lo que digo.
Fin Flashback.
No entendía a qué vino todo aquello, pero durante estas semanas no he parado de darle vueltas a sus palabras porque en el fondo creo que estoy asustada... ¿Y si Lyon tenía razón y Gray sentía algo por mí...? Pero eso era tan imposible... La única razón por la que Gray actuaba así era por el alcohol, de lo contrario no engañaría a Juvia conmigo, no creo que Gray sienta algo por mí, ni si quiera actúa de una forma diferente conmigo. Además, me ha dejado muy clara la posición que ocupo en su corazón y obviamente, siempre estaré por detrás de Juvia. Pero... ¿Qué hay de mí...? ¿Sigo viéndolo como un amigo...? Lo cierto es que nunca me he enamorado así que tampoco entiendo del todo bien estas cosas... Pero creo que no ha cambiado mi forma de verle... Aunque... En mi interior tampoco siento todo como antes... Ah... No entiendo absolutamente nada... Estoy tan confusa... E inquieta... Pues no me gusta el rumbo que ha tomado mi relación con Gray, no pasamos nada de tiempo juntos pues siempre está con Juvia, es que casi ni hablamos... Aunque Lyon viene bastante a menudo por lo que tampoco es que tenga mucho tiempo para dedicarle a él o al resto del gremio... Y las pocas veces que hablo con él, noto incomodidad y tensión en el ambiente. Entiendo que debemos alejarnos un poco pues no podemos arriesgarnos a volver a tener sexo, eso debe acabar, no quiero romper esa pareja... Pero creo que hemos puesto demasiada distancia entre nosotros...
Como casi siempre, me encontraba sentada en un taburete, bebiendo un refresco en la barra. Por alguna razón, no podía evitar observar a Gray quien se encontraba sentado jugando con Juvia, tenía una sonrisa preciosa, parecía realmente feliz... No quiero destruir eso... Quizás por mucho que me duela estar tan separados, sea mejor seguir así... No quiero hacerle más daño... Yo solo quiero algo así para mí... Tener lo que ellos tienen... Pero no creo que sea Lyon quien me dé eso... No estoy enamorada de él y dudo que él lo esté de mí, soy alguien a quien los hombres desean pero no de quien se enamoran... Incluso pienso que Lyon todavía siente algo por Juvia... Sé que lo que tenga con él, tiene fecha de caducidad, pero al menos espero que me ayude a cambiar mi estilo de vida y saber cómo es estar en una relación... Aunque todavía no seamos pareja... Comenzaba a deprimirme un poco por lo que me giré de nuevo, di un gran suspiro y apoyé el codo en la barra y mi cabeza en mi mano, incluso cerré los ojos un momento en un intento por dejar mi mente en blanco aunque fuera solo por unos segundos. Esos segundos se fueron alargando y convirtiendo en minutos antes de que me diera cuenta, hasta que sentí que alguien me hablaba en un tono preocupado.
- ¿Te encuentras bien?
De verdad que era extraño, de verdad que en mi interior algo se sentía diferente... ¿Tanto echo de menos mi amistad con él como para que el simple hecho de escuchar su voz me reconforte de esta manera? Solo fueron tres palabras pero su voz me pareció más bonita que nunca... Abrí mis ojos y me giré para verle.
- Sí, ¿por qué lo preguntas? —dije con una sutil sonrisa que intentaba disimular, me sentía feliz por el simple hecho de que hubiera venido a hablarme, me sentía idiota por algo así.
- Últimamente pareces decaída... ¿Va todo bien?
¿Decaída? Supongo que un poco... Cambiar mi estilo de vida me tenía asustada, mis amigas estaban demasiado ocupadas por lo que ni si quiera podía desahogarme, y lo peor de todo, mi mejor amigo se alejaba cada vez más y más de mí... ¿Cómo no iba a estar decaída...? Por no hablar del secreto de la infidelidad de Gray a su novia, cada vez pesaba más la culpa y se volvía más difícil de soportar.
- Sí, claro, no te preocupes —dije mostrándole mi mejor sonrisa fingida— Juvia nos está mirando y parece molesta, deberías volver con ella.
Gray me miraba serio mientras que yo solo podía repetirme lo gilipollas que era. Gray había venido a hablar conmigo, ¿por qué no podía simplemente aprovechar ese momento con él? ¿Por qué tenía que alejarlo de mí? Soy imbécil. Pero entonces, agarró un taburete y se sentó a mi lado.
- ¿Qué te pasa? —preguntó serio.
De nuevo, me sentí feliz y no entendía el motivo. De verdad que echo de menos a Gray en mi vida... De lo contrario no me sentiría así por quedarse conmigo a pesar de que eso probablemente hará que discuta luego con Juvia... ¿No?
- No sé... —respondí— Supongo que simplemente estoy un poco asustada por un cambio tan grande en mi estilo de vida... Me está costando acostumbrarme...
- Ya veo... Entonces... ¿Estás saliendo con alguien...? —preguntó en un tono de voz apagado. Pero antes de que pudiera responder, alguien se colocó entre nosotros.
- Hola preciosa, ¿qué haces hablando con este idiota?
- ¿No te han enseñado a no meterte en medio de una conversación? —dijo Gray molesto.
- Anda, vete con tu novia y deja en paz a Lucy. ¿No ves que no quiere hablar contigo?
- No decidas por mí algo así, Lyon —dije molesta.
- No me apetece perder el tiempo contigo así que me voy —dijo Gray mirando a Lyon mientras se levantaba del taburete— Hablaremos en otro momento Lucy —dijo antes de dirigirse de nuevo hacia Juvia.
- Ah... —suspiré frustrada. Entonces, miré molesta a Lyon.
- Vamos no me mires así... Me cuesta controlar mis emociones cuando se trata de Gray... —dijo rascándose la cabeza— Lo siento...
- Ah... —volví a suspirar— ¿Has venido por algo en concreto?
- Ya casi es la hora de cenar así que me preguntaba si te apetecería cenar conmigo... —dijo rascándose la cabeza de nuevo un poco sonrojado.
- Claro —le sonreí, en el fondo, era bastante tierno— ¿Qué te parece si compramos los ingredientes y hacemos una bonita cena en mi apartamento?
- Me parece estupendo —sonrió.
De esta manera, ambos nos dirigimos al supermercado donde compramos todo lo necesario para hacer una buena cena. Inesperadamente me ayudó a prepararla y lo cierto era que se le daba bastante bien la cocina. Fue una cena bastante deliciosa y agradable, pero comenzó a hacerse un poco tarde, aun así, no me apetecía que se fuera... Por lo que decidí proponer algo.
- ¿Te apetece una copa?
- Por qué no —sonrió. Yo me dirigí hacia la cocina y cogí una botella de tequila y dos vasos, tras eso volví al sofá donde me senté, él se encontraba en el sillón de al lado.
Así, ambos comenzamos a beber y a juguetear... Lyon no tardó en sentarse a mi lado en el sofá, intentando acortar la distancia conmigo algo que no me molestaba en absoluto... Cada vez estábamos más cerca el uno del otro... Lo cierto era que llevábamos demasiado así, sin sexo, eso era lo más extraño del mundo para mí pero al ser mi primer intento de pareja, quería ir más despacio, pero tres semanas creo que ya son suficientes para tener nuestra primera noche juntos... Por lo que estaba dispuesta a llegar con él hasta el final esa noche, así que empecé acercándome a él de manera seductora, nuestros rostros se encontraban a escasos milímetros cuando me agarró por la cintura y me pegó por completo a él. En ese momento, nuestros labios se unieron en un apasionado beso que no dejaba de intensificarse, su lengua juguetona no paraba de entrelazarse con la mía, la verdad es que besa muy bien... Pero no es Gray... De verdad que no entiendo qué me pasa... ¿Por qué pienso en él en un momento así...? Quizás porque los besos de Lyon se sienten totalmente diferentes de los de Gray... De verdad que no entiendo el motivo pero los de Gray... Me llenan... Me hacen sentir realmente bien... Me llevan a un mundo ajeno a la realidad donde todo deja de existir excepto esa increíble sensación que me provocan sus besos... En cambio los de Lyon... Los disfruto pero no me producen nada nuevo, sigo tan vacía como antes del beso... No siento nada extraordinario... Lo cierto es que con Rogue me pasó exactamente lo mismo que con Lyon pero no recuerdo si antes me ocurría lo mismo con el resto de los chicos o si esto empezó a sucederme después de probar los irresistibles besos de Gray...
En ese momento, sentí como Lyon me empujaba con delicadeza en el sofá y se acomodaba sobre mí entre mis piernas sin dejar de besarme. Nuestros besos seguían volviéndose cada vez más apasionados, más enérgicos... Nos besamos una y otra vez, mientras tanto, colé mis manos por debajo de su camiseta y comencé a recorrer su espalda con suaves caricias muy excitantes. Él no tardó en bajar hasta mi cuello para empezar a darme pequeños besos que poco a poco se convirtieron en pequeños mordiscos haciéndome inevitable soltar algunos pequeños gemidos... Entonces, se apartó un poco de mí y se quitó la camiseta antes de quitarme la mía, a los pocos segundos ya había desabrochado mi sujetador dejando mis pechos al descubierto. Tras observarlos un momento, bajó su cabeza hasta ellos donde comenzó a depositar algunos besos alternándolos con algunas lamidas por lo que mis gemidos empezaron a ser más frecuentes. Comenzó a dar pequeños lametones a uno de mis pezones mientras que jugaba con sus dedos en mi otro pezón, haciéndome gemir cada vez más y más alto. Rodeaba mi pezón con su lengua y le daba pequeños lametones mientras que al otro le daba pequeños golpecitos con su dedo que me estaban excitando demasiado. De repente, subió buscando mis labios, yo estaba muy excitada por lo que no pude evitar besarle con rudeza a la vez que rodeaba su cintura con mis piernas. Comencé a mordisquearle la oreja aunque no tardó en besarme de nuevo, mientras lo hacía sus manos recorrían toda mi piel, una terminó parándose en mi muslo el cual acariciaba de una forma que me estaba haciendo perder la razón...
- Lyon... —dije excitada mientras él seguía jugando con mis pechos— ¿Por qué no seguimos en mi cama...?
Se limitó a sonreír y a cargarme hasta mi habitación donde ambos caímos en la cama, Lyon se encontraba de nuevo acomodado entre mis piernas donde enseguida noté que colaba su mano. No tardó nada en quitarme los short junto con mi ropa interior dejándome completamente desnuda. De nuevo, me observó minuciosamente durante unos segundos mientras se mordía el labio inferior, entonces, se dirigió una vez más a mi cuello donde comenzó a depositar suaves besos.
- Tienes un cuerpo precioso Lucy... —dijo entre aquellos excitantes besos.
A los pocos segundos, sentí su mano inspeccionando mi entrepierna, en cuanto sus dedos empezaron a acariciar mi clítoris, los gemidos comenzaron a escaparse de mi boca. Poco después, introdujo un dedo en mí y comenzó a moverlo.
- Estás muy mojada... —dijo con una sonrisa pícara— Y sí... ¿Dejamos ya de jugar...?
- Por mí vale —dije excitada con una sonrisa.
Lyon sacó un preservativo de su bolsillo antes de quitarse los pantalones y su ropa interior, quedando también desnudo. Se lo colocó y una vez más, se acomodó entre mis piernas donde a los pocos segundos comenzó a introducirse en mí de forma lenta. Enseguida empezó con el movimiento de vaivén, el ritmo era lento pero se sentía muy bien, era muy placentero.
- Ah... mmm...
Poco a poco fue aumentando el ritmo, sus embestidas cada vez eran más rápidas y fuertes, por lo que comencé a gemir con mayor intensidad.
- ¡Ah...! ¡Lyon...! ¡Sí...! ¡Así...!
- Uff... —dijo— Tienes una voz preciosa Lucy... Si sigues gimiendo así, voy a perder la cordura...
Yo agarré su rostro y lo besé a la vez que rodeaba su cadera con mis piernas, atrapándolo entre ellas y mi torso. Él aumentó la intensidad de la penetración, las embestidas se volvieron un poco rudas por lo que no podía parar de gemir.
- ¡Ah...! ¡Sí...! ¡Más...! ¡No pares...!
- ¿Vas a llegar? —preguntó un poco jadeante.
- Sí... Estoy a punto... —poco después tuve un orgasmo.
Lyon me agarró y me colocó de lado, él se acomodó detrás de mí, a mi espalda, y sin previo aviso se introdujo en mí de una sola vez haciéndome gemir. Bajó una de sus manos hasta mi clítoris el cual comenzó a acariciar sin descanso consiguiendo que tuviera mi segundo orgasmo de la noche. Tras eso volvió a agarrarme y me colocó boca abajo, subió un poco mi cadera aunque no mucho y se acomodó sobre mí. Agarró mis muñecas colocando cada una a un lado de mi cabeza, sujetándolas con fuerza. Me tenía acorralada entre él y la cama, me tenía totalmente a su merced cuando sentí que se introducía en mí de una sola vez y comenzaba a embestirme con rudeza, excitándome mucho.
- ¡Ah...! ¡L-Lyon...! ¡Sí...! ¡M-más rápido...! —dije entre jadeos pues mi respiración estaba muy agitada.
Sin disminuir la fuerza con la que me penetraba, aumentó la velocidad. Apretaba mis muñecas con mucha fuerza, probablemente me dejaría marca... Pero no me importaba. Tras varias embestidas más, volví a sentir que me venía.
- L-Lucy... —dijo jadeante— No puedo más... Voy a correrme...
- Yo t-también... Hazlo...
Poco después, ambos llegamos al clímax juntos. Lo cierto era que no esperaba tener tantos orgasmos con Lyon... Aun así, a pesar de lo mucho que lo disfruté, no me llené, no es lo mismo. Tengo la misma sensación de vacío que tuve tras hacerlo con Rogue... Es como... Como si solo Gray fuera capaz de satisfacerme... ¿Cuándo ocurrió esto...?
- ¿Estás bien? —preguntó saliéndose de mí.
- Claro —forcé una sonrisa.
- ¿No te ha gustado...? —preguntó preocupado.
- Qué dices... Claro que me ha gustado, solo estoy un poco cansada —intenté mostrarle mi mejor sonrisa para no preocuparlo.
- ¿Seguro...? —supongo que solo Gray sabría lo falsa que es mi sonrisa... Me conoce tanto...
- Sí —él se sentó sobre la cama y comenzó a buscar su ropa, yo decidí abrazarlo desde su espalda y hablarle un poco seductora— Vas a quedarte... ¿Verdad...?
- ¿A dormir? —preguntó extrañado— ¿Quieres que duerma contigo...?
- Claro —le sonreí.
Era normal su extrañeza, no solo no habíamos tenido sexo hasta hoy sino que ni si quiera le ofrecí nunca quedarse conmigo, siempre se iba a su hotel. Dejó de nuevo la ropa por ahí y con una gran sonrisa, se giró y me agarró, pegándome a él. Me miraba fijamente manteniéndome entre sus brazos con esa sonrisa tan linda.
- ¿Qué? —pregunté.
- Que eres preciosa —dijo apartando un mechón de pelo de mi rostro antes de besarme, esta vez su beso era mucho más tierno y dulce que otras veces...
Tras ese beso, sin tan si quiera vestirnos, nos acomodamos para dormir.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro