Capítulo 1 - La primera vez
Lucy POV
La luz de la mañana entrando por la ventana y proyectándose en mi cara, me despertó. Era tan molesta que apenas me dejaba abrir los ojos, sin cambiar de posición en la cama, me llevé una de mis manos a la cabeza pues tenía un dolor terrible, supongo que tengo resaca. Anoche estuvimos celebrando en el gremio el compromiso de Mirajane y Laxus quienes se casarían en pocos meses por lo que bebí demasiado, fue una noche muy alocada... Ni si quiera recuerdo cómo llegué a casa...
- mmm... —de repente sentí algo moviéndose a mi lado poniéndome muy nerviosa pues acababa de darme cuenta de que no estaba en mi apartamento.
- ¡¿Gray?! —dije con los ojos abiertos como platos.
Estaba realmente impactada, ¿qué ha pasado? No recuerdo nada... ¿Nos hemos acostado...? Ambos estamos en ropa interior... Bueno yo ni eso pues solo conservo mis bragas. Él se inclinó en la cama y se llevó una mano a la cabeza antes de mirarme serio pero justo en ese momento alguien llamó a la puerta.
- ¡Gray-sama! —sus ojos se abrieron de par en par pues lo que menos necesitaba era que su increíblemente celosa novia descubriera su infidelidad, si es que realmente habíamos tenido sexo.
- ¡Escóndete!
- ¡¿Huh?!
- ¡Shh! —me tiró su camiseta para que me tapara con ella antes de recoger rápidamente mi ropa y esconderla en el armario dónde me hizo meterme.
- Juvia siente haber despertado a Gray-sama... —dijo apenada. Podía escuchar la conversación desde el armario.
- No pasa nada, ya tenía que levantarme. ¿Has venido por algo en concreto?
- Anoche Gray-sama bebió tanto que Juvia estaba preocupada al no verle en el gremio esta mañana.
- Tengo un poco de resaca... Pero no te preocupes, estoy bien.
- Gray-sama... ¿Le apetece dar un paseo con Juvia?
- Esta tarde ¿vale? Todavía tengo que ordenar y limpiar el apartamento.
- Juvia puede ayudarle.
- No hace falta... ¿Por qué no me esperas en el gremio? En cuanto termine voy para allá.
- Pero... —escuché como la callaba con un beso.
- Espérame allí... ¿Sí? —su voz sonaba tan irresistible... Con ese tono tan seductor hasta yo le obedecería aunque eso no es nada nuevo, Gray es tan sexy...
Minutos después, escuché la puerta del apartamento cerrarse. En ese momento me percaté de que aún seguía solo con mis bragas puestas así que decidí ponerme la camiseta que Gray me lanzó pues no podía encontrar mi ropa dentro del armario.
- Lucy, ya puedes salir —dijo dando dos golpes a la puerta del armario.
- Ah... —suspiré mientras abría la puerta y salía del armario— Gray... ¿Puedes explicarme qué pasó anoche? No recuerdo nada...
- Normal... Bebiste muchísimo...
- ¡Gray!
- ¿Qué es lo que quieres escuchar? Anoche nos acostamos, no hay mucho más qué decir.
- ¿Y lo dices así tan tranquilo? Joder que tienes novia...
- Ya lo sé pero no por eso voy a deprimirme en un rincón... Ya lo hicimos, no hay vuelta atrás.
- No sé cómo puedes actuar así...
- Lucy, ¿qué importa lo que hiciéramos? Ambos estábamos borrachos, tú no lo recuerdas y yo vagamente.
- Ah... —suspiré— Supongo que no será muy difícil hacer como que no pasó nada... Aunque me siento mal por Juvia...
- Ojos que no ven, corazón que no siente.
- Joder Gray... Qué frío... ¿No te sientes ni un poco culpable por haberle sido infiel a tu novia?
- Soy un mago de hielo... Soy frialdad pura —dijo burlón guiñándome un ojo.
- Ah... —volví a suspirar— ¿Vas a contárselo...?
- Pues claro que no. Lo que pasó anoche entre nosotros se quedará aquí. ¿De acuerdo?
- Sí...
- Bien —se acercó al armario y sacó mi ropa dejándola sobre la cama— No pretendo echarte, pero será mejor que te vistas y te marches antes de que te vea alguien aquí.
- Tienes razón —cogí mi ropa para comenzar a ponérmela, en cuanto cogí mi sujetador Gray salió de la habitación para dejarme intimidad.
¿Cómo hemos podido acabar así...? Somos muy buenos amigos pero nada más... Es cierto que tras el regreso de Lisanna comencé a pasar mucho más tiempo con él y Erza ya que Natsu solo quería estar con ella y dejó de hacer misiones con nosotros. Y es cierto que yo empecé a acercarme mucho a él... De alguna manera comenzó a llamar mi atención, me divertía mucho con él en las misiones y cuidaba mucho de mí por no hablar de su personalidad, me encanta su faceta traviesa y juguetona pero desde que sale con Juvia todos hemos podido ver un lado tierno y adorable en él que no había mostrado nunca, no negaré que en el fondo me molesta que sea ella quién ha conseguido sacar esa parte oculta de Gray, no negaré que en el fondo me siento un poco celosa de Juvia... Él y yo siempre estábamos juntos, nos divertíamos mucho y nos lo contábamos todo pero ahora... Ahora Gray apenas me hace caso... Me siento un poco sola desde que comenzó a salir con Juvia, se alejó mucho de mí por esos celos tan obsesivos de Juvia hacia mí, en el fondo lo entiendo, le molestaba esa relación tan íntima y especial que teníamos, éramos los mejores amigos y eso le provocaba inseguridad aunque al final parece que tenía motivos para sus celos... Gray le ha sido infiel conmigo... Es cierto que no me gusta que se haya distanciado de mí, lo echo de menos, pero aprecio mucho a Juvia y Gray es muy importante para mí, nunca fue mi intención meterme en medio, lo de anoche fue un accidente, habíamos bebido y no sabíamos lo que estábamos haciendo aunque por un lado me gustaría recordarlo... Seguro que Gray es muy bueno en la cama... A ver... Solo somos amigos, no es como si estuviera enamorada de él o algo así pero no voy a negar lo obvio, Gray me atrae mucho físicamente... Es muy guapo y tiene un cuerpo muy tonificado, es muy sexy... Solo espero que podamos seguir siendo amigos después de esto, no soportaría que se distanciara aún más de mí. Él parece no darle mucha importancia pero aunque no lo recordemos, sabemos que ha ocurrido y eso siempre estará ahí molestándonos.
- Me voy ya —dije tras terminar de vestirme y salir de la habitación.
- Ten cuidado de que nadie te vea salir.
- No te preocupes.
Tras eso me marché a mi apartamento, necesitaba darme una buena ducha y cambiarme de ropa. Comí algo rápido y me dirigí hacia el gremio, faltaban muchos miembros y los que se encontraban dentro tenían muy mala cara todos, no pude evitar reír al ver a todos con esa gran resaca, incluso Mirajane estaba sentada tras la barra agarrándose la cabeza.
- ¿Te encuentras bien Mira? —pregunté un poco burlona.
- ¿Tengo cara de estar bien...? —dijo molesta, se pone de muy mal humor cuando tiene resaca pero aun así es muy linda, me hace gracia.
- ¿Por qué no le pides a tu chico que cuide de ti?
- Porque mi chico no se ha podido ni levantar esta mañana...
- Pft —no pude evitar reír.
- ¡Lu-chan! —dijo Levy abrazándome tan alegre como siempre— ¿Dónde te metiste anoche? Desapareciste de repente.
- ¿Eh...? P-pues no sé... Bebí tanto que ni recuerdo cómo llegué a casa...
- ¿No te llevó Gray? —dijo Mirajane de repente— La última vez que te vi estabas saliendo del gremio con él.
- No sé... No lo recuerdo... —miré para otro lado pues comenzaba a ponerme nerviosa por lo que cambié de tema— Mira Levy, por ahí viene tu chico.
- ¿E-Eh...? N-no es mi chico... No estamos saliendo...
- Pero te encantaría que así fuera —dijo un poco traviesa haciéndola sonrojar.
- Lu-chan...
Tenía razón, oficialmente solo había tres parejas en el gremio, Mirajane y Laxus, Gray y Juvia y Evergreen y Elfman, pero todos sabíamos que había algo más que simple amistad entre Levy y Gajeel y entre Natsu y Lisanna. Ojalá pudiera incluirme en esta lista pero estoy totalmente soltera y disponible, no es que no me guste mi libertad pero... Las chicas siempre están ocupadas con sus cosas, Natsu prácticamente se olvidó de todo el mundo y solo tiene ojos para Lisanna y Gray casi siempre está con Juvia... Así que a veces me siento un poco sola... Cuando eso ocurre suelo invocar a Loke y él encantado de hacerme compañía... Ventajas de ser una maga celestial supongo.
- Oye enana —dijo Gajeel acercándose a Levy, se veía adorable con sus mejillas sonrojadas toda nerviosa.
- ¿S-sí?
- Gehe —dijo con una sonrisa antes de mostrarle algo— He encontrado tu lazo.
- Oh... Muchas gracias —ya está, ya estará durante días más feliz que una perdiz— ¿P-puedo invitarte a comer como a-agradecimiento...?
- Bueno... —Gajeel se sonrojó levemente y comenzó a rascarse la cabeza— S-Si quieres...
- Ah... —suspiré mientras los observaba marchándose— Son adorables...
- ¿Qué hay de ti? —preguntó Mirajane— ¿Estás enamorada de alguien?
- ¿Yo? Ojalá...
- ¿Y... Natsu...?
- Ah... —suspiré frustrada— ¿Por qué todos pensáis que estoy enamorada de él? Solo somos amigos, siempre ha sido así, entre nosotros solo hay y hubo amistad.
- Ara... Entonces... ¿No hay nadie que llame tu atención?
- No aunque eso no es nada nuevo, nunca me he enamorado.
- ¡Gray-sama! —escuché de repente por lo que no pude evitar fijarme— Por fin llega, Juvia le ha estado esperando para dar el paseo.
- ... —me quedé mirándolos en silencio. Ahora recuerdo que quedaron cuando yo estaba en su apartamento.
- ¿No podemos darlo más tarde?
- ¿No quiere pasear con Juvia...? —dijo triste.
- Claro que sí.
- ¿Entonces? —parecía a punto de llorar así que decidió agarrar su rostro y darle un beso.
- ¿A dónde quieres ir? —preguntó con una sonrisa.
- Ah... —suspiré y me giré.
¿De verdad nos hemos acostado? ¿Cómo voy a mirar a Juvia ahora? Me sentiré culpable... No sé como él puede actuar cómo si no hubiera ocurrido nada, ¿es que no se siente ni un poco mal? Por más que lo intento, no consigo olvidarme de lo que ocurrió entre nosotros anoche aunque ni si quiera lo recuerde, ¿cómo puede actuar con Juvia con normalidad cuando él sí que recuerda algo...? Comencé a agobiarme en el gremio, necesitaba salir unos días y despejarme por lo que me dirigí hacia el tablón para escoger una misión. Mientras me decidía, alguien se acercó a mí.
- ¿Tú también buscas una misión?
- Sí.
- ¿Te apetece venir conmigo?
- Claro —sonreí.
De esta manera Erza y yo estuvimos tres semanas fuera del gremio, la recompensa era bastante generosa por lo que regresé a Magnolia bastante satisfecha aunque por otro lado, un gran temor me acechaba a todas horas, debía hablar con Gray. Tras dejar mis cosas en el apartamento y ducharme, me dirigí hacia el gremio pero alguien me paró por el camino.
- No sabía que habías vuelto... ¿Qué tal os fue en la misión?
- Bastante bien.
- No es normal en ti estar tanto tiempo fuera.
- ¿Me echaste de menos? —dije un poco traviesa haciéndole sonreír.
- Digamos que noté tu ausencia —sonreí— ¿Sabes? Te invito a un café, hace tiempo que no charlamos.
- No sé Gray... Juvia se pondrá celosa...
- Se fue esta mañana a una misión.
- Bueno... Está bien... —quería hablar con él además desde que comenzó a salir con Juvia, apenas pasábamos tiempo juntos, no iba a desperdiciar una oportunidad así.
- ¿Entonces? ¿Tuvisteis muchos problemas para cumplir con éxito la misión? Estuvisteis mucho tiempo fuera —preguntó tras sentarnos en una terraza con nuestros cafés.
- No realmente, solo era algo larga.
- Ya veo.
- Gray... —me puse muy nerviosa, no sabía cómo decirle esto— Yo... Verás...
- ¿Qué pasa? —preguntó preocupado. Después de todo me conocía demasiado bien, nunca podría ocultarle nada.
- Quizás no sea nada... Pero... Tengo un retraso... —de repente se puso extremadamente pálido y me miraba impactado— Tú... ¿Usaste protección...?
- No sé... No lo recuerdo... —dijo nervioso todavía impactado, su respuesta no alivió mi temor.
- Ah... —suspiré, no sabía qué decir.
- No te preocupes... Seguro que te baja pronto... —dijo intentando relajarme— Y si no pues no pasa nada...
- ¿Qué no pasa nada...? ¿Qué voy a hacer con un bebé? Aún soy joven además ni si quiera podría mantenerlo y no tengo pareja, ¿cómo iba a criar a un bebé yo sola? —dije muy asustada pero al menos podía desahogarme, había estado conteniendo todo esto durante días.
- Lucy —dijo capturando mi mano entre las suyas— Cálmate... Aún no es seguro que estés embarazada pero si lo estás, no es solo tu responsabilidad, también es mía y no te dejaré sola así que no te preocupes tanto.
- Ah... —volví a suspirar.
- Cuando nos terminemos el café compraremos un test de embarazo, ¿de acuerdo?
- Sí... —no me había atrevido a hacerlo sola...
Tal y como dijo, nos dirigimos a la farmacia en cuanto nos terminamos los cafés, Gray compró dos test y nos dirigimos a mi apartamento donde me hice la prueba con los dos para estar más seguros. Ambos esperamos impacientes al resultado, Gray se encontraba sentado en el brazo del sofá moviendo la pierna sin parar mientras que yo daba vueltas a su alrededor nerviosa pero tras cinco minutos, pudimos suspirar aliviados pues ambos dieron negativo. Habían sido muchas emociones seguidas por lo que no pude evitar abrazar a Gray quien permanecía sentado en el brazo del sofá, al principio se sorprendió pero enseguida correspondió mi abrazo.
- ¿Ya estás más tranquila?
- Sí —respondí sin dejar de aferrarme a su cuello.
- Tal vez el retraso se deba al estrés...
- ¿Estrés? —pregunté alejándome un poco para contemplar su rostro aunque mis brazos aún permanecían en su cuello y sus manos en mi cintura.
- Sí, te conozco muy bien... Sigues agobiada por lo que pasó entre nosotros aquella noche... —me puso nerviosa que sacara ese tema por lo que reaccioné alejándome de él.
- Me siento culpable... Juvia no se merece eso... Me sentiría mejor si pudiera decírselo y disculparme con ella... —dije dándole la espalda.
- Lo sé pero por eso mismo no quiero que lo sepa. ¿Para qué hacerla sufrir por algo que ni si quiera recordamos? Piensa que si en vez de ir a mi casa, lo hubiéramos hecho en el baño del gremio, habría despertado cada uno en su cama y no nos habríamos enterado de lo que hicimos.
- Pero tú sí lo recuerdas...
- Muy vagamente, solo recuerdo algunas escenas bastante borrosas, estaba tan borracho como tú.
- ... —no sabía qué decir.
- Solo deja las cosas así y olvídalo. No le des tanta importancia a un hecho que ni si quiera recuerdas.
- Está bien... —en ese momento se levantó del sofá.
- Comienza a ser tarde así que me marcho —comenzó a dirigirse hacia la puerta.
- Espera Gray —dije haciendo que se detuviera— Hace mucho que no pasamos tiempo juntos... Ya que Juvia no está... Y nos hemos librado de una buena... ¿Por qué no nos tomamos una copa?
- Por qué no —sonrió— Pero solo una.
Así, me cambié rápidamente de ropa y nos dirigimos hacia un bar donde nos sentamos en una mesa del fondo y nos pedimos una copa, y otra... Y otra... Lo estábamos pasando tan bien que al final seguíamos bebiendo sin parar mientras charlábamos. No sé cómo se encontraba él pero yo comenzaba a estar bastante bebida, ya casi no era consciente de lo que decía, hablaba sin pensar, por lo que decidí que ya era suficiente.
- Se está haciendo tarde —dije, eran las tres de la madrugada— ¿Nos vamos?
- Sí —ambos nos levantamos de las sillas pero nada más ponerme de pie, perdí el equilibrio aunque Gray me sostuvo— Bebiste demasiado —dijo un poco burlón.
- Me pasé un poquito...
- Vamos anda, te acompaño a casa.
Gray me acompañó hasta mi apartamento, no sé ni cómo llegamos pues ambos estábamos bastante borrachos, nos costaba caminar en línea recta. Una vez en mi puerta, Gray me ayudó a subir las escaleras, comencé a buscar mis llaves en el bolso pero no las encontraba hasta que las escuché cayéndose, me agaché para recogerlas pero entonces me percaté de que Gray observaba minuciosamente mi escote provocando que los deseos reprimidos que tengo por mi mejor amigo se desataran con la ayuda de la gran cantidad de alcohol que circulaba por mi cuerpo.
- ¿Quieres pasar? —pregunté.
- No, ya es tarde, será mejor que vuelva a casa.
- Vamos no seas así... ¿Por qué no nos tomamos la última? —sonrió.
- Creo que ya hemos bebido suficiente, ¿no te parece?
- Para una vez que pasas algo de tiempo conmigo... —puse mi expresión más adorable intentando convencerle.
- Ah... —suspiró a la vez que se rascaba la cabeza— Está bien... Pero no me pongas esos ojitos —dijo dándome un suave golpecito en la nariz.
Nada más entrar me quité los tacones y me dirigí hacia la cocina. Cogí dos vasos y una botella, y me dirigí hacia la mesa donde Gray me esperaba sentado en el sofá. Al igual que en el bar, lo que comenzó siendo una sola copa, se convirtió en la botella entera...
- Vamos Gray... —casi no se nos entendía— Termínate la botella...
- ¿Huh? ¿Es que quieres matarme...? —dijo recostándose en el sofá— Ya no puedo más...
- Solo un poco más —dije sentándome sobre él, comenzaba a estar fuera de control, me sentía tan atraída por él que la libido comenzó a apoderarse de mí.
- ¿Qué haces...? —preguntó sonriente con su mirada bien clavada en mis pechos.
- Mis ojos no están ahí...
- Lo sé, no son tus ojos lo que quiero ver... —dijo travieso. Si él no me rechazaba, estaríamos en problemas...
- Si serás... —dije con una sonrisa subiendo su rostro. Cogí la botella y la coloqué en su boca— Vamos, traga.
Al final accedió y se bebió lo que quedaba en la botella, no era mucho realmente, unos cuantos tragos. Tras eso suspiró y me miró.
- Qué mala eres... ¿Por qué no te lo has bebido tú? ¿Es que quieres emborracharme...? —preguntó travieso.
- Tal vez... —dije siguiendo su juego.
- ¿Ah sí? ¿Y eso por qué? —preguntó seductor acercándose a mi rostro.
- A lo mejor quiero aprovecharme de ti... —dije en un tono muy provocativo acercándome más a su rostro, nuestros labios estaban a escasos centímetros.
- Pues muy mal Lucy... —dijo en ese tono tan irresistible antes de agarrarme y tumbarme en el sofá, él se colocó sobre mí y agarró mis muñecas sosteniéndolas sobre mi cabeza— Has bebido tanto como yo... ¿Y si soy yo quien se aprovecha de ti...?
---------------------------------
Hola a todos, espero que os haya gustado el primer capítulo de esta historia. Agradecería mucho que me dejarais vuestras opiniones en los comentarios, sin ellas no puedo mejorar ^^ Por otro lado, quería deciros que he actualizado los avisos en "Sinopsis, avisos y adelanto" Eran cinco pero he añadido uno más, el número 2, y he actualizado el número 1, ya están puestos pero os lo dejo aquí también para que sepáis cuales son con seguridad:
1. La historia contendrá mucho LEMON ya que el sexo será una parte muy importante en esta historia. Algunas escenas serán normales pero otras serán de sexo duro, las normales no las avisaré pues creo que así pierde gracia pero las que sean más duras las marcaré con tres asteriscos (***).
2. Aún no lo tengo claro pero es muy probable que Lucy tenga sexo con más de un chico. Lo digo desde antes de comenzar la historia porque luego no quiero comentarios de "Lucy es una zorra" ni nada por el estilo. Repito, aún no lo tengo decidido pero si así fuera, en esta historia Lucy está soltera, puede hacer lo que quiera y además, es la mala. Lucy no es la buena, dulce y pobre novia a la que le están siendo infiel, es "la otra", la que sabe que Gray tiene novia y aún así se mete en medio y lo provoca. Así que si no os gusta eso, entonces no la leáis.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro