Esa misma noche, la mayoría se encontraban reunidos.

-Ha sido una victoria más!.-gritó Erick.

La gente presente aplaudió ante la acción de éste.

-Y lo mejor es qué nuestros amigos han vuelto!.-miró a Jazz

Jazz echó una mirada a Alejandro, indicaba que entraran al bunker.

-Erick, vamos, tenemos que hablar.-Alejandro ordenó.

Todos han entrado, algunos han tomado asiento para estar más cómodos al recibir esta nueva noticia.

-Muy bien.-susurró Jazz.- Alejandro, necesito que me digas qué es lo que esta pasando.-miró a Johana.-¿Por qué has dicho dos años?

-Jazz, una pregunta a la vez.-interrumpió Aarón.-Todos estamos muy confundidos.

-Uff, lo sé, Aarón.

-Desde aquél día que se marcharon, pasaron unos cuantos meses cuando comenzaron los sucesos.-interrumpió Alejandro.-Hades nunca ha venido, solo manda a esos demonios. Son esas cosas que han visto hoy.

Jazz miró a Alejandro, extrañada.-Ese hijo de perra sabe que no puede tocar tierra de mortales.

-Pero cuando estábamos todos, vino.-interrumpió Kaori.

-Si, vino, pero no ocasionó daño a algún mortal.-contestó Jazz.

-Nosotros somos mortales.-dijo Erick.

Jazz bajó la mirada, pensó un momento en la respuesta.-No lo somos del todo, Erick.-respondió.-Por eso hemos logrado viajar a el Olimpo. Si hubiésemos sido personas normales, ni cenizas quedarían de nosotros.

-Entonces, qué somos?.-preguntó Mavra

-Somos una especie de Semidioses, Koll me lo dijo.-respondió Jazz, alzó la mirada.

Mavra echó una leve carcajada.-Semidioses!?.-siguió riendo.-Eso no lo puedo creer...

-Pues deberías créelo.

-Alejandro, tengo una pregunta.-interrumpió Aarón.-Tu hijo está bien?

-Gracias por preguntar, Aarón.-respondió Alejandro.- Y si, afortunadamente están bien.

-Están?.-preguntó Jazz.

Kaori sonrió como nunca.

-El pequeño Aarón y la pequeña Jazz se encuentran más a fondo del bunker junto a Ana, ambos han nacido muy fuertes, los protegemos de los demonios.

-Vaya!.-Aarón, se alegró bastante por la noticia.-Eso es muy bueno, de verdad.

-Muchas gracias...

-Pero...tengo otra pregunta.-Dijo Aarón.- Si al parecere he ido 2 años, y mi padre murió... Quién controla ARJAZZ?

-Ahora yo controlo ARJAZZ, y créeme que no ha sido mada fácil.-interrumpió Johana.-Hemos creado una nueva tecnología, al parecer tu padre, mi..."suegro", no perdía el tiempo.

-Por qué dices eso?.-preguntó Jazz.

Aarón se encontraba confundido.

-Tu padre estaba creando tecnología, armas en especial.-respondió Johana.- Usaba parte de nuestro ADN para crearla. Él espera ver un mejor mundo... Qué estupidez.

-Johana...-interrumpió Aarón mientras tomaba a Johana de un brazo y se alejaban.

-Vaya, eso ha sido...raro.-comentó Jazz.-Muy bien!, ahora...qué haremos?.-comenzó a pensar...

-Jazz, qué no habían partido con la idea de qué buscarian la solución?.-interrumpió Astrid

-Ay, amiga, ya te había olvidado.-contestó Jazz.- De verdad, lo siento.-tiró una risa.

-No es muy gracioso de tu parte.-contestó Astrid.

-Ya ya ya, tranquila, mejor dime qué es lo que hacen esos trajes que traen puestos.-sonrió

Astrid se ha pasado el coraje, pues sabe que hay bastantes problemas.-Estos trajes estan hechos con el ADN de todos.

-No entiendo...

-Me refiero a que podemos hacer los mismos ataques que todos los demás.-interrumpió Astrid.-Por ejemplo...

Astrid extendió ambos brazos, del brazo derecho comenzó a expulsar fuego y del izquiero agua.

-Demonios!.-dijo Jazz.-tu eras de agua, no?.-tiró una carcajada.

-Eres una estúpida.-respondió Astrid.

Jazz?, Jazz seguía riendo.

-Jazz, necesitamos que nos digas que tenemos que hacer.-interrumpió Erick.

-Drago se encuentra en el inframundo, han pasado dos años y tú solo estás haciendo bromas estúpidas cómo si fueras una niña.-interrumpió Natalia.-Tu puesto de lider no va.

Jazz dejó de reír, su estado de ánimo cambió drasticamente.-A ver, Natalia...

-No, Jazz, Natalia tiene razón.-interrumpió Kaori.-Mejor dinos, qué tenemos que hacer?

Jazz bajó la mirada.-Ya pues, no se esponjen...

-Entonces dinos lo que hay que hacer.-respondió Astrid.

-Uff...

Jazz, les ha explicado con totalidad el asunto del corazón de Hades.-Tenemos que ir al inframundo y destruir ese corazón para que Hades regrese a ese sueño profundo.-miró a Natalia.- recuperar a Drago y regresar aquí, todo tiene que ser lo más pronto posible, pues ya veo que el tiempo pasa volando...

-Muy bien.-dijo Astrid.-Y cuando vamos?

-No lo sé, además, las cosas por aquí estan muy mal.-respondió Jazz.- Quizá los demonios regresen y no haya nadie quien proteja por estos rumbos. Necesitaré que algunos se queden.

-No te preocupes por ello.- interrumpió Ana.

-Mujer!?, pero qué estás haciendo aquí?.-preguntó Alejandro.

-Oí que habían regresado, asi que quise venir a saludar.-sonrió.-Yo cuidaré aquí, por eso no te preocupes, Jazz, he dominado por completo el traje, además de las técnicas auxiliares.

-Auxiliares?.-preguntó Jazz.

-Si.-contestó Ana.- me refiero a los animales que crea Marjorie o las siluetas de Alejandro, ellas me serán de gran ayuda en caso de que vuelvan a aparecer esos tipos.

-No.-interrumpió Alejandro.-No te dejaré aquí sola.

-No te procupes, ARJAZZ tiene mucho más armamento que le será de ayuda a Ana.-Interrumpió Johana, regresaba junto a Aarón, al parecer...han arreglado sus asuntos.

-Exacto, no estoy sola.-dijo Ana a Alejandro.-No te preocupes...

-Deben saber qué esto es algo de vida o muerte.-interrumpió Jazz.- Estamos hablando del inframundo, y aparte, si tardamos demasiado... Aquí los años pasan muy rápido...

-lo sé.-contestó Alejandro...

Dos trajes más se unieron a la junta, al parecer era un hombre y una mujer.

-Pero...lo tenemos que lograr.-interrumpió Marjorie, abrió su casco.- Cuenten con nosotros.

Drake también abrió su casco.-Es bueno volvernos a ver.

Jazz sonrio.

Comenzó a temblar,el buker se sacudía bastante, las cosas caían, se rompían.

-Qué esta pasando?.-Preguntó Marjorie.

Drake miró a Marjorie y presionó un botón para avtivar el traje de Marjorie.-No te confíes...

En el suelo un portal comenzó a abrirse...

Todos comenzaron a elevar el poder de su piedra.

Mavra observó a Ana y lanzó un pequeño rayo sobre ella, pues era un campo de fuerza.

Todos estan listos para lo que viene.