CAPÍTULO 43
Douma se alejó rápidamente de donde estaba, esquivando por casi nada los ataques que una recién llegada persona le había lanzado.
Pero en lugar de molestarse por ello, una enorme sonrisa se dibujó en el rostro de la Luna Superior en cuanto reconocía a la inesperada visita.
- Oh vaya, esto no podía ponerse mejor - Expresó el demonio sin dejar de mirar al individuo frente a él - Nunca imagine que llegaría verte otra vez - Su sonrisa creció más de lo normal - Taisho Kagome -
En efecto, se trataba de nada menos que de la azabache, la cual se encontraba vistiendo un sencillo kimono vino, el cual era sujetado por un obi de tonalidad amarilla, esta lo miraba con una profunda ira, la cual aumento en cuanto miró tras este a su hija inconsciente.
- Ahora vas tras menores, déjame decirte que eso es muy bajo, hasta para un maldito demonio como tú -
- ¿Celosa querida? No deberías de estarlo, tú eres mi única favorita -
- Ya quisieras maldito - Con velocidad se abalanzó sobre Douma, pero apenas rasgando algo de su vestimenta, aunque eso era lo de menos, la verdadera intención era alejarlo de la menor - No tengo pésimos gustos -
- Auch, acabas de romper mi corazón - Expresó con fingido dolor mientras evadía otra estocada de la ojidorada - No eres para nada amable -
- ¿Y cuando dije que quería serlo? - Afianzó el agarre de su nichirinto - Respiración de Agua, Segunda Postura Modificada ¡Rueda de Agua Horizontal! -
- Vamos querida, ya me se ese truco - Se mofó la Luna Superior al evadir a la Pilar, ocasionando que esta se molestara - Por favor, no frunces tu ceño, de lo contrario dañaras tu hermoso rostro -
- ¡Esos es algo que no debería de interesarte maldito bastardo! - Acertó una muy fuerte patada en su oponente, lanzándolo a una gran distancia y destruyendo algunos árboles que se cruzaban en el camino de este, momento que aprovecho para acercarse a la peliburdea - Bien, hora de poner a Sumiko a salvo - En cuanto liberó un sonoro silbido su fiel familiar se hizo presente ante ella - Ranga, orden de máxima prioridad; lleva a Sumiko a la Finca de Shinobu - Con ayuda de un listón de tonalidad vino le coloco al can un pequeño trozo de papel - En el preciso instante en que pongas un pie aúlla tres veces, eso activara la barrera que llevas en el talismán, eso deberá protegerlos hasta que amanezca - Con sumo cuidado se hinco para tomar a la Hinoe en sus brazos - Te la encargo mucho Ranga - Acomodó el cuerpo de la cazadora de tal forma de que no callera del lomo del albino lobo - Andando Ranga -
Con aquellas palabras el familiar comenzó a correr, acatando lo que su señora la había pedido; Taisho miraba como estos se perdían en la espesura del bosque cuanto de un momento a otro colocó su katana frente a ella, bloqueando apenas los filosos abanicos del de ojos arcoíris.
- Nada mal, mejoraste mucho en estos años - Halagó mientras veía a la chica tomar distancia.
- Pues claro que sí, ya que tengo una gran cuanta que saldar contigo -
- ¿Aun estas sentida por ello? - Esas palabras hicieron que la azabache tensara la mandíbula - Deberías de dejar el pasado atrás, querida -
- ¡Lo dejare en cuanto termine con tu asquerosa existencia! -
- Me divertiré mucho el ver que lo intentes -
Con aquellas últimas palabras la revancha de la cazadora dio inicio, en la cual la fémina daría todo de sí para librar al mundo de aquel demonio, pero no solo eso, sino también vengar la memoria de su querida y amada amiga Kocho Kanae.
**************************
- Kocho-sama ¿Sabe si Sumiko va a tardar en regresar? -
- ¿Aun no llega? - Preguntó extrañada, mirando la negativa de la de coletas - Esto es raro, ya debería estar aquí -
- ¿Le digo a Tsuyoi-sama que vuelva mañana? - La pregunta de la ojiazul sacó a la de puntas moradas de sus pensamientos.
- ¿Él está aquí? - Vio a Aoi asentir - ¿A que vino? -
- No lo sé, tal vez a verla o a invitarla a cenar -
Kocho sabía que cualquiera de las opciones era válidas, después de todo sabía la relación de su compañero con la ojirubí. Lo que no le cabía en la mente era el hecho de que la Kamado aun no llegara, ya que de haberse quedado con los Rengoku le hubiera avisado, ella es muy responsable con ello.
Mientras tanto, en la entrada de la Finca un muy ansioso Sabito esperaba que Kanzaki le diera alguna razón de su novia, estaba por retirarse cuando vio algo moverse en la puerta principal.
Debido a la oscuridad de la noche, Tsuyoi no podía vislumbrar bien de que se trataba, pero abrió en demasía los ojos al reconocer aquel pelaje blanco y corrió a su encuentro al notar el cuerpo que venía encima de él.
- ¡Santo Cielo! ¡Sumiko! - Este tomó con suma delicadeza a la peliburdea en cuanto el familiar se había detenido - ¡¿Qué fue lo que te sucedió?! - Exclamó con preocupación mientras comenzaba a examinar a la Hinoe.
En ese mismo instante salía la Pilar del Insecto junto a la ojiazul, pero en cuanto vieron al pelidurazno con una inconsciente Sumiko corrieron con la preocupación acentuando completamente sus rostros.
- Tsuyoi-san ¿Qué le ocurrió a Sumiko-chan? -
- No lo sé Kocho, realmete no lo sé - Respondió con frustración, continuando con su evaluación.
- ¡¿Cómo que no lo sabe?! -
- Lo que escuchaste Kocho, Ranga la trajo así de quien sabe dónde -
Confundida, Shinobu dirigió su vista hacia donde apuntaba el ojilavanda, encontrándose con el tan mencionado familiar de la Pilar de dorado mirar.
- ¡¿Pero qué rayos?! - Con decisión la ojimorada se levantó de donde estaba para dirigirse hacia el albino lobo y tratar de obtener algo de información.
Pero lo que Kocho tenía planeado hacer quedo en un intento, ya que de la nada Ranga soltó un muy agudo aullido, haciendo que los presentes (menos Sabito, ya que este aun tenía a la Hanyou en sus brazos) se taparan los oídos.
- Ranga ¿Qué ocurre? - Preguntó la cazadora mientras trataba de acercarse al can.
La respuesta que obtuvo la de puntas moradas fue un segundo aullido y en cuanto estaba por retomar su caminar un tercer aullido la frenó.
- Creo que tendré que buscas las respuestas por cuenta propia - Pensó Shinobu con resignación, así que se dirigió a la entrada principal para ir a investigar, pero vaya sorpresa con la que se topó - ¡¡Pero qué rayos!! -
- ¿Ocurre algo Kocho-sama? - Preguntó Aoi en cuanto escuchó a su Superior quejarse - Kocho-sama -
- No puedo salir - Susurró tan bajo que la de coletas apenas pudo escucharla - Algo me impide hacerlo -
Algo extrañada la de coletas se dirigió hacia donde se encontraba la ojimorada, pero al igual que la mayor, la ojiazul no pudo siquiera poner un pie fuera de la Finca.
Tsuyoi estaba a nada de hablar cuanto empezó a sentir a la chica moverse entre sus brazos, por lo que centró toda su atención en la peliburdea, la cual poco a poco comenzaba a reaccionar.
- ¿En dónde estoy? - Murmuró Sumiko mientras intentaba centrar sus sentidos.
- Sumiko, gracias al cielo que despertaste - Exclamó aliviado el Pilar mientras atraía a la menor más a su cuerpo.
- ¿Sabito-san? - Preguntó la cazadora algo confundida, pero cuando el mayor estaba por responderle, esta abrió los ojos al ver a cierto can de pelaje blanco.
- Contrólate Sumiko ¿Qué es lo que te pasa? - Expresó algo preocupado Sabito, tratando de tranquilizar a una muy alterada ojirubí, la cual trataba desesperadamente de separarse de él.
Los gritos del pelidurazno llamaron la atención de las dos féminas, por lo que dejaron de lado por qué no podían salir e ir hacia donde se encontraba la pareja.
- ¿Qué ocurre con Sumiko, Tsuyoi-sama? -
- No lo sé Kanzaki, comenzó a reaccionar así minutos después de haber desper... -
El ojilavanda no pudo terminar de responder debido a que la Kamado logró soltarse de su agarre y corría directamente hacia la entrada principal e ir hacia donde se había topado con la Luna Superior, pero sus intentos fueron completamente fallidos al serle imposible salir de la Finca Mariposa.
- ¡No, no, no! ¡Aun no estás en condiciones de pelear! ¡¿Por qué haces esto? - Exclamaba la Hinoe con impotencia sin dejar de golpear la barrera que le impedía salir - ¡Debiste de haberla traído también! - Miró por un momento a Ranga para reprocharle lo que había hecho, el can solo pudo bajar un poco su cabeza.
Al no saber que más hacer Sumiko cayó de rodillas al suelo golpeándolo con tremenda fuerza, lastimándose las manos en el proceso, todo eso ante la incrédula mirada de los tres espectadores; Shinobu fue la primera en reaccionar e ir hacia la menor, con algo de trabajo logró frenarla, evitando que continuara lastimándose.
- Sumiko miraba por favor - Pidió con suavidad mientras con una mano hacia que la chica la mirada - Tú sabes lo que ocurre ¿No es así? - La vio asentir con suavidad - Podrías decirme por favor -
- La Segunda Luna Superior - Musitó la peliburdea apenas siendo audible para la mayor y los otros dos chicos - Pretendía llevarme con Muzan - Eso sorprendió a los tres - Y lo hubiera logrado de no ser por ella - Los chicos notaron como la ojirubí apretaba los puños con fuerza.
- Sumiko ¿De qué rayos hablas? -
- ¡Mi madre Sabito-san! ¡Mi madre! -
- ¿Kagome-san que, Sumiko? - Preguntó Kocho, teniendo un muy mal presentimiento de esto
- ¡Ella se quedó a enfrentar a la Segunda Superior! - Eso hizo que la sangre abandonara el rostro de Shinobu, pero no fue la única, ya que Tsuyoi y la de coletas les ocurrió lo mismo.
Cuando la menor estaba por hablar nuevamente un gran destello de luz rosácea pudo ser notada a una considerable distancia, reforzando de esta manera las palabras de la Hanyou.
**************************
Kagome respiraba agitada mientras trataba de reponer energías, esto sin dejar de mirar a un muy lastimado Douma, el cual a duras penas se regenerada debido a la explosión de energía espiritual que la azabache había liberado.
- Este maldito está a otro nivel, es la misma cantidad de energía espiritual que utilice al purificar a Akaza - Pensó algo frustrada sin dejar de mirar a su oponente.
- Eso sí que fue algo nuevo - Expresó el de ojos arcoíris mientras continuaba regenerando su cuerpo - Aunque debí de haberlo previsto, después de todo no eres una cazadora cualquiera -
- Debo suponer que el maldito de Muzan te contó sobre ello ¿Verdad? - El demonio frunció un poco el ceño sin perder su sonrisa ante las palabras dichas por la chica - Bueno, era de esperarse, ya que él no es capaz de venir personalmente a eliminarme -
- Muzan-sama no tiene que perder el tiempo en tonterías como estas - Cubrió parcialmente su rostro con uno de sus abanicos.
- Claro, es por eso que tiene a sus peones para hacer el trabajo ¿No? - Un poco más recuperada se puso en pose defensiva - Típico de un miserable cobarde como él - Eso logró que la sonrisa del rubio desapareciera por completo.
- No permitiré que alguien como tú insulte a Muzan-sama, Técnica de Demonio de Sangre, Nube Congelada -
Con suma rapidez la ojidorada pudo colocar una barrera sobre sí misma, logrando protegerse de la técnica, lastimosamente aun no recuperaba por completo su reiki por lo que su defensa se desvaneció al igual que el ataque de su oponente.
- Sí, no cabe duda que haz mejorado en estos cinco años - Halagó la Segunda Superior de forma burlona - Pero no debes de olvidar que aún tengo la ventaja sobre ti - Preparó su siguiente movimiento - Técnica de Demonio de Sangre, Lotos Dispersos -
- Respiración de Agua, Undécima Postura, Calma -
Gracias a esa Postura la Taisho logró bloquear el ataque de la Luna Demoniaca, el cual quedo un poco asombrado por ello, aunque no lo demostró.
- ¡Que divertido es esto! - Exclamó Douma con emoción mientras arremetía contra la azabache - Continuemos con esto, averigüemos hasta donde resiste tu débil cuerpo humano -
- Ya verás lo que este débil cuerpo puede hacerte maldito bastardo - Respondió tras bloquear el ataque de su adversario - Esta vez no te dejare ir con vida - Tras decir aquello blandió su katana al cuello de Douma, el cual con algo de dificultad puedo evadir - Me encargaré de enviarte directamente al infierno -
- Tal parece que lo único que mejoró fueron tus habilidades en batalla, tu vocabulario sigue siendo muy vulgar - Habló con fingido pesar mientras evadía otra estocada de la Pilar - Ahora entiendo de donde adquirió eso aquella hermosura de cabellera burdea - Dramatizó mientras se llevaba una mano a su frente - Pero la corregiré en cuanto la tenga en mi poder -
- Sobre mi cadáver maldita basura - Afianzó el agarre de su nichirinto mientras se abalanzaba hacia Douma - Respiración de Agua, Octava Postura ¡Lago de la Cascada! -
Una enorme cortina de polvo se levantó tras aquel ataque, imposibilitándole su vista a la cazadora, estaba por acercarse, pero una nueva serie de ataques hizo que esta se alejara varios metros, apretó su mandíbula al ver como el de ojos arcoíris salía de la cortina sin ningún rasguño.
- Aplaudo la nueva fuerza que tienes, es algo sinigual - Metió la mano en uno de sus bolsillos al decir aquellas palabras - Puedes enfrentarme a mi sin necesidad de alguien más - Lo que la ojidorada vio en manos del rubio la descolocó por completo - Es más, me atrevería a decir que supera a nuestro encuentro de aquella vez -
Ahí, en manos de aquella Segunda Superior, Kagome veía un broche para el pelo, pero no uno cualquiera, era nada menos que de su amada amiga Kanae; era un adorno con forma de mariposa, en la parte central de ella era decorado con un hermoso verde, mismo que era acompañado por las orillas de un lindo tono rosáceo.
- Parece ser que recuerdas esto - La voz del de ojos arcoíris captó la atención de la azabache, la cual tensaba en demasía su mandíbula.
- ¿De dónde obtuviste eso maldito desgraciado? - Masculló con ira a la vez que apretaba con más fuerza el mango de su katana.
- La conseguí en el preciso momento en que aquella hermosa pelinegra se interponía entre mi ataque y tú - La sonrisa de la Luna Superior provocó que la furia comenzara a recorrer completamente el cuerpo de la ojidorada - Realmente me pareció una chica muy interesante, sabía que no sobreviviría, así que quise tener algo para recordarla - Ante la furibunda mirada de la Pilar, este besó con descaro dicho objeto - Tenía una belleza sin igual, hasta había considerado convertirla en un demonio, lástima que tuviera que sacrificarse por ti - Lo ultimó lo dijo con falsa tristeza a la vez que limpiaba una imaginaria lagrima.
Eso fue la gota que derramo el vaso, la cazadora arremetió nuevamente contra él, logrando asestarle varios cortes en todo su cuerpo; ante esto el demonio tuvo que guardar una distancia segura, ese arrebato de la fémina lo había tomado con la guardia baja, o eso se decía a sí mismo, prefería pensar mil veces eso que creer que de un momento a otro ella había adquirido mayor velocidad y precisión.
- Respiración de Agua, Séptima Postura ¡Gotas Ondeantes Perforadoras! -
- Eso estuvo bastante cerca - Fue lo que cruzó por la mente de Douma en cuanto sintió la afilada nichirinto de la fémina cortando un poco su cuello.
- Respiración de Agua, Primera Postura ¡Tajo de la Superficie! -
Con algo de miedo el rubio sintió como el filo de la katana estaba a nada de cercenar su cabeza, por lo que como pudo se alejó de la Pilar para así regenerar su herida.
- Por lo que veo tendré que ponerle seriedad a este enfrentamiento - Evadió con éxito la Cuarta Postura, pero no así la fuerte patada que logró asestarle la Taisho y el cual lo mando a volar.
- Respiración de Agua, Decima Postura ¡Ciclo de...! -
- Técnica de Demonio de Sangre, Lotos de la Vid -
La ojidorada no pudo completar su ataque debido a que tuvo que evadir las vides que se dirigían con claras intenciones de lastimarlas, logró erradicar con la Sexta Postura, desgraciadamente no pudo esquivar la patada que el de ojos arcoíris le propinó, o eso parecía, ya que el demonio quiso aprovechar que ella estaba ocupada en bloquear su Técnica.
Pero en vez de ver volando a la azabache, el afectado fue otro, ya que en el último segundo la joven había colocado una pequeña barrera, por lo que Douma salió expulsado por la fuerza que su patada llevaba.
La cazadora cometió el error de bajar un poco su defensa, cosa que el rubio aprovechó al máximo; sin que la Taisho se lo esperada fue violentamente lanzada por los aires a una altura colosal.
- Respiración de Agua, Novena Postura ¡Chapoteo Caótico! -
Gracias a una reacción rápida y certera la fémina pudo amortiguar completamente el brutal impacto con el suelo, cosa que no le alegró para nada a Segunda Superior.
La Pilar se vio completamente vulnerable a una segunda patada de parte de su oponente, por lo que este la mandó a estrellarse en un muy grueso árbol, ocasionando que esta escupiera sangre debido a ello.
- Vamos, sé que puedes resistir más que eso - Vio como la azabache se levantaba poco a poco con ayuda de su arma.
Al escuchar la forma burlona en la que fueron pronunciadas aquellas palabras la ira volvió a tomar control en el cuerpo de Kagome, por lo que atacó sin siquiera pensarlo, pero debido a ello lo único que logró cortar fue el aire y recibir un fuerte golpe en el abdomen, dejándola momentáneamente sin el vital oxígeno.
- Una disculpa, cuando estoy emocionando no controló mi propia fuerza - Se excusó Douma mientras veía a la azabache tratando de respirar - Se me olvida que los humanos son demasiado frágiles - Una macabra sonrisa es la que se dibujó en él al notar la oscura mirada de su oponente - Pero no te preocupes, aliviare por completó tu sufrimiento -
La ojidorada salió volando por los aires en cuanto el demonio agitó sus abanicos con fuerza, mandándola hacia la espesura del bosque.
Un gemido de dolor fue lo que salió de los labios de la Taisho en cuanto su espalda impactaba con dureza al suelo; pero fue en ese momento que la imagen de la pelinegra de ojos lilas se manifestaba frente a ella.
"- No sé de por vencida Kagome-san -"
- ¿Kana...e? -
"- Recuerde las palabras que usted me dijo una ocasión, Una vez que decidas matar a un Demonio, mátalo; una vez decidas que vas a ganar, gana; gana a cualquier costo -"
Esas palabras ocasionaron que un click hiciera en la cabeza de la cazadora, esto a la vez como una fuerza descomunal comenzara a recorrer todo su cuerpo.
"- Hágalo por ellas, ya que son las que ansían su regreso -"
Gracias a esas palabras la determinación de la Pilar volvió a renovarse, por lo que haciendo a un lado su propio dolor comenzó a ponerse de pie, se apoyo un poco en su nichirinto para que no cayera al suelo.
- Prometí vengar tu muerte, Kanae - Susurraba Kagome a la imagen de su amiga mientras buscaba algo en el interior de su kimono - Y yo nunca rompo mis promesas -
No sabía si eran por la alucinación u otra cosa, pero Kagome pudo acariciar con gentileza la mejilla de la ojilila, la cual la miraba con sumo cariño, regresándole también el gesto.
"- Lo sé Kagome-san, así que por favor cuídese mucho -"
Eso fue lo último que la azabache pudo escuchar de labios de la pelinegra antes de que esta desapareciera, la mano que había estado en la mejilla de la menor se cerró en un fuerte puño.
- Gracias Kanae - Musitó la Pilar mientras bajaba su mano y dirigía la vista hacia la dirección en la que sentía a la Luna Demoniaca - De una vez por todas le daré fin a ese maldito - Inhaló con profundidad mientras su semblante se tornaba serio - Hora de utilizar aquello, es una verdadera suerte que la haya traído conmigo - Apretó con fuerza el objeto que tenía en su mano izquierda - Respiración de Agua, Doceava Postura...-
No muy lejos de ahí cierto demonio de ojos arcoíris esperaba pacientemente a que la chica de cabellera azabache regresara.
- Vaya, creo que volví a excederme - Expresó con fingida pena - Bueno, que se le va a hacer, en ese caso voy a ir en busca de la hermosura de cabellera burdea -
Dio un par de pasos hacia donde vio que se fue el albino lobo con la chica, pero quedo extrañado al no poder seguir avanzando, estaba por volver a intentar avanzar cuanto tuvo que bloquear una filosa katana con sus abanicos.
Ante aquel hecho Douma tuvo que tomar distancia para poder resguardarse, mirando con una ladina sonrisa a su atacante.
- ¿Ya pronto te vas? Pensé que alargaríamos este encuentro - Cuestionó la recién llegada mientras colocaba su arma sobre su hombro.
- Bueno, no me puedes culpar, después de todo tardaste mucho en regresar aquí -
- Una disculpa por ello, ya me tienes justo enfrente de ti - La seriedad nunca abandono el rostro de la chica, pero eso no era lo que llamó la atención del de ojos arcoíris, sino más bien la marca de nacimiento que esta tenía dibujada en su frente.
- Que extraño, eso no lo tenía momentos antes - Algo asombrado vio como la cazadora le cortaba el brazo derecho - Esto no es bueno, por alguna extraña razón esta mujer está al mismo nivel que yo - Se quedó sin aire momentáneamente al recibir una fuerte patada de su adversario - Tendré que tomar esto muy enserio - Tras bloquear nuevamente una estocada en su cuello y ponerse seguro, se preparó para atacar - Técnica de Demonio de Sangre, Lirio de Escarcha; Bodhi-Sattva -
Douma se subió a la enorme figura de hielo que había invocado, esto con la intención de que le fuera imposible a la azabache de alcanzarlo.
- ¿Acaso tienes miedo de mí? - Preguntó la cazadora de manera burlona mientras esquivaba sin tanta dificultad el ataque de aquella invocación.
- Para nada linda, no es miedo, es precaución - Respondió de manera risueña al ver como la ojidorada solo se limitaba a esquivar.
- Bien, si así lo quieres entonces así será -
Un poco intrigado el rubio veía como la Taisho guardaba su katana y se subía por las ramas de un gran árbol hasta llegar a la cima y adquiría una pose diferente a la que tenía momentos antes.
- ¿Qué carajos es lo que piensa hacer? - No fue hasta que vio emerger de las manos de la chica una tenue luz rosácea que descubrió lo que está tenía planeado hacer - No te dejare hacerlo de nuevo -
Una muy fuerte y fría corriente de aire fue lo que salía de la boca de la estatua, esto con la intención de frenar cualquier movimiento de la azabache, pero eso estuvo lejos de suceder, ya que en ese momento la determinación de la cazadora era más grande que cualquier intento de detenerla.
- ¡Esto es por todas las vidas inocentes que has matado maldito! - Exclamó la ojidorada en cuanto se encontraba lista para atacar - ¡Te enviare al mismísimo infierno! -
- Típico de los humanos, ideándose falsas esperanzas antes de mo...-
- ¡Aluvión de Flechas Sagradas! -
La Segunda Superior se vio rodeado de diversas estelas de luz, las cuales subían a una tremenda velocidad al cielo, estas comenzado a bajar en picada hacia donde él se encontraba, planeaba desviarlas con sus abanicos, pero de manera sorprendente estos les fueron arrebatados de sus manos por otro par de flechas.
Nada pudo hacer el demonio ante el abrumador ataque recibiéndolo de lleno; debido a la inmensa magnitud del ataque esta pudo oírse estruendosamente por todo el lugar, ocasionando también que una gruesa cortina de polvo se levantara.
La Luna Superior aun no daba crédito de lo ocurrido, se encontraba tirado en el suelo gravemente herido, por más que intentaba regenerarse le era imposible hacerlo, llenándolo de una inmensa frustración.
- ¡¿Cómo fue que llegue a esto?! Tenía todo bajo control - Fue lo que cruzó por la mente de Douma en cuanto pudo ver los restos de lo que había sido su ultima técnica.
- Legó tu fin maldito - El de ojos arcoíris alzó su mirada al escuchar aquella voz - Expía todos los horrores que causaste en este mundo - Alzó su katana para darle al demonio el golpe de gracia - Respiración de Agua...-
- Tal parece que realmente este es mi fin -
- Decima Postura...-
- Bueno, al menos no seré el único, sin atención inmediata esta cazadora no durada mucho -
- ¡Ciclo de Cambios! - Sin ninguna pizca de piedad Kagome le cortó la cabeza a su adversario, cerrando así un ciclo, el cual había tardado demasiado tiempo en hacerlo.
Douma comenzó a desintegrarse ante la atenta mirada de la ojidorada, la cual miró en este una tenue sonrisa.
- Al menos me iré al infierno con una bella imagen - Fue lo último que el demonio pudo pensar antes de que se desintegrara por completo.
La Taisho rebuscó entre la ropa que habían pertenecido al demonio el broche de mariposa, en cuanto lo encontró la acercó a su pecho mientras gruesas lagrimas comenzaban a emerger de sus bellos ojos.
- Al fin Kanae, al fin puedes descansar en paz - Susurró a la nada mientras las lágrimas no dejaban de caer - Me encargare de que Nezuko tenga este recuerdo de ti, te lo prometo - Una tenue sonrisa se dibujó en su rostro al sentir una suave brisa acariciar su rostro, sonrisa que creció más al escuchar un dulce y suave murmullo.
"- Sé que lo hará Kagome-san-"
**************************
Hola,hola mis estimados lectores, les traigo ante ustedes el capítulo 43.
Estamos muy cerca de la recta final de esta historia, espero brindarles una excelente narrativa ☺️
Espero se encuentren bien, les mamdo un muy fuerte y caluroso abrazo 😘.
Les deseo una excelente mañana 🌄/ tarde ☀️/ noche 🌙.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro