DIONNE

Hoy juega el barça. Y Nico lleva insistiendo en que vaya a verle toda la semana. No he ido a ningún entreno, por que el trabajo con Núria me ocupa casi todo mi tiempo.

Dani vendrá conmigo, porque, aunque ella no lo admita, siente algo por Ansu. No hemos hablado del tema, pero bueno, tampoco hemos hablado de lo que sea que hay entre Nico y yo. Porque los amigos no hacen las cosas que nosotros hacemos.

Respecto a nosotros...bueno. El duerme más en mi casa que en la suya, siendo sincera. Cuando no juega solemos ir de paseo por Barcelona, yendo por las calles menos transitadas y escondidas de la ciudad para que no reconozcan mucho a Nico.

Aparco el coche en el parquing del estadio. Siempre agradeceré el día en el que mi padre me dio el pase vip para entrar en cualquier parte, el cual esta firmado por el y todo para que no pongan pegas, aunque todos me conocen ya.

Vamos al palco superior, donde suelen sentarse las celebridades, el presidente o miembros del club o incluso los reyes.

Nos sentamos en los asientos asignados y vemos a los chicos entrenar.

–¿Crees que ganarán? – pregunta Dani con miedo.

Es un partido de champions contra el Chelsea. Es un club potente, pero confío en los chicos.

–Confío en ellos. Pueden ganar si quieren.

Dani asiente.

–Por cierto, ¿qué tal con Ansu? – pregunto pícara.

–Bien. Muy bien. Quedamos el domingo para ver una peli – le doy una mirada pícara –. Solo vimos una peli – dice ella con las mejillas sonrosadas –. Además, a saber, lo que haces tu con Nico. Que poco me cuentas del tema – contraataca, haciendo que me ponga igual que ella.

–Cabrona.

–Así me quieres amore.

El partido comienza, y los canticos de los aficionados comienzan a sonar por todo el estadio. Es increíble el ambiente que se vive en el estadio. Como diría Rauw Alejandro, "Es algo mágico". Nunca mejor dicho.

Estamos en la primera media hora del partido, ha habido una ocasión de Auba, pero el portero del equipo inglés la ha parado.

Hasta que, en el minuto 35, hay un penalti a favor del barça.

Lo tira Ansu y...

Golazo de Ansu.

Todos van al córner a celebrarlo y sigue el partido.

Estamos en el descanso y decido ir a por algo de comer a dentro.

Al volver, veo como Dani está hablando con un chico, el cual esta de espaldas y no veo.

–¿Ferran? – pregunto, alucinada –. ¿Qué haces aquí?

–Me he lesionado. Me han dicho que subiese aquí a informar a La Porta y que me quedase aquí.

–¿Qué te ha pasado? – pregunto.

–Me he hecho una herida en el pie cuando me he chocado con Azpi. Con el vendaje no puedo moverme bien.

Ambas asentimos y le dejamos sentarse a nuestro lado.

Vuelve la segunda parte y informan por la pantalla de la lesión de Ferran, y toda la gradería aplaude, mandándole ánimos.

El partidos acaba con un 2-1 a favor del barça, gracias a un gol de cabeza de Dembélé.

Ferran insiste en que bajemos a los vestuarios y le hacemos caso. Una vez abajo, saludamos a mi padre, y él entra para decirle a Nico que salga. Nico sale, sudado y sin camiseta, y me acerco a él.

Dani en cambio habla con mi padre, y ambos entran al vestuario, donde solo oigo gritos y risas.

–Hola – dice el gallego, acercándose. Deja un leve beso en mis labios y me mira.

–Hola – respondo, nerviosa.

–Creo que, deberíamos hablar de esto – dice, señalándonos con su dedo.

–Bueno, de momento somos amigos que se besan siempre – digo, bastante nerviosa.

–¿Quién dijo amigos? – dice Nico, acercándose –. Yo no quiero ser tu amigo Dio – dice, a pocos centímetros de mí.

Toma y mano y nos mete en una sala.

–¿Dónde estamos? – pregunto.

–En una sala de reuniones. Aquí no entra nadie nunca – dice, cerrando la puerta y yendo directo a besarme.

Nos besamos durante un rato hasta que decido hablar.

–¿Entonces qué? – pregunto –. ¿Qué somos Nico?

–De todo menos amigos, eso ya te lo digo ahora. ¿Quieres ser mi novia Dionne con dos n? – pregunta.

Le miro. No digo nada, solo tomo su mentón y dejo un suave beso en sus labios.

–Creo que eso debería contestar a tu pregunta, ¿no? – pregunto, mirándole a los ojos.

Asiente y vuelve a besarme.

Justo abren la puerta y nos separamos lo más rápido que podemos.

–Os estaba buscando – dice mi padre –, nos vamos a cenar todos. Dejar el besuqueo y veniros anda.

Ambos estamos muy rojos, y salimos con el de la sala. 

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Os gustaría una historia de Ansu y Dani? Os leo :)

Por cierto, en el tablón os he dejado la otra sorpresa del día:)

Y aviso de que el capítulo de un verano sin ti será a las ocho :)