Y se habían equivocado.

Cuando ChangMin entró al grupo el ambiente cambió vertiginosamente no sólo por el hecho de que era la nueva adición en un grupo que apenas se estaba formando, sino porque la actitud del muchachito estaba por sacarle canas verdes a los tres. JaeJoong intentaba ganárselo con comida, le hacía postres y comidas para cuando el muy joven y nuevo integrante saliera de la escuela y llegara a los ensayos. Incluso todos fueron conscientes de que el mayor de los tres se había ganado la confianza de la Sra. Shim.

Él estaba un poco desesperado, JunSu, JaeJoong y él trabajaban todos los días arduamente para mejorar en el canto y baile. No existía esfuerzo que no hicieran para poder demostrar que iban en el camino correcto. Sin embargo el pequeño problema que resultó ser el pequeño ChangMin estaba tirando fuerte de las cuerdas de su paciencia. Ellos eran un gran equipo, JunSu y él trataban de mostrarle la forma en la que las coreografías debían ser hechas, los ejercicios de enlogamiento y cómo seguir el ritmo. Pero nada, el pequeño mocoso solamente se dedicaba a seguirlos sin externar dudas, sin hacer comentarios y sobre todo sin mostrar actitud. Se sentía frustrado en muchos niveles; no había algo que no hicieran por ganarse al niño y demostrarle que para ellos estar ahí no era una pérdida de tiempo.

JaeJoong siempre trataba de calmarlo en casa, y estaba de acuerdo en que quizá tanto ellos como la familia del niño estaban poniendo demasiada presión sobre él. Pero a sus ojos eso no justificaba el hecho de que estuviera siendo una incómoda piedra en el zapato de todos ellos al momento de demostrar sus avances.

Y si pensaba que eso había sido lo peor que les podía ocurrir en esa etapa definitoria, estaba sumamente errado.

ChangMin pasó de ser una piedra en el zapato de todos, al menor de sus problemas. Era cierto que su madre siempre le había dicho que era una persona muy protectora e incluso celosa, sin embargo el instinto que se había activado en él no tenía nada que ver con querer lo mejor para su familia, cuidar a su hermana más pequeña o asustar a los niños que siempre andaban tras ella. Este sentimiento era completamente distinto a la pequeña chispa de enojo que afloraba en él cada que su hermana sonreía a otros niños, y era ciertamente distinta a todo. Al inicio quiso justificarlo con la preocupación que sentía con respecto al rumbo que estaba tomado el grupo, él estaba un poco asustado de que esta vez no tuvieran una oportunidad de volver a reagruparse si fallaban. Claro que tenía miedo del gran día del debut, pero ahora estaba seriamente preocupado por el nuevo integrante.

No porque no le hubiera cogido cariño al más pequeño del grupo, él entendía que era sólo un niño complaciendo a su madre, sino porque aún no sabía como lidiar con él del todo y ya había llegado lo que al parecer era el último miembro del grupo. Park YooChun resultó ser un chico que estaba en el rengo de edad de los tres, mayor que JunSu pero menor que JaeJoong y él. Era un chico que había llegado directamente de USA, con un aire que se calificó como fresco y una personalidad que en primera instancia los había capturado a todos, o bueno a casi todos. Ese no había sido un gran problema, el chico realmente le había agradado y a pesar de llevar unos pocos días yendo y viniendo a S.M.E se notaba que era una persona una poco más social que el mismo JaeJoong a quien le había costado hacer amigos con facilidad.

Ciertamente eso alegró y calmó un poco sus nervios, ver a Park convivir con JunSu e intentar conversar con ChangMin lo hacían suspirar con alivio. El problema era cuando Park-Tengo mucha confianza en mi- YooChun se acercaba a JaeJoong. Su mejor amigo ya no tenía tanto problema manejando a la gente de su entorno y le alegraba, seguro que sí, pero saber que ahora Jae estaba prestando demasiada atención al chico nuevo removía algo dentro de él que no le gustaba. Y no es que estuviera enloqueciendo de la nada, pero ¿Por qué era JaeJoong quien se ofrecía a darle pequeños tours en las zonas cercanas? ¡Él mismo era pésimo orientándose en ese monstruo de ciudad como para arriesgarse y salir con aquel chico! Y eso no era todo, él había sufrido por encontrar al chico y volverlo su amigo, sin embargo, al parecer a ese tipo no le había costado más de 15 minutos hacerse cercano a su hyung.

Quizá él estaba muy acostumbrado a que JaeJoong repartiera el poco tiempo que les dejaban los entrenamientos entre él, algunos trabajos de tiempo parcial y a veces entre su pequeño círculo de amigos. No esperaba que ahora tuviera que regresar solo a casa porque su compañero de cuarto quería quedarse a repasar las vocalizaciones junto a ese Park, o que el susodicho tuviera que acompañarlos a comer en las tiendas de conveniencia. No le desagradaba el sujeto, pero a veces sólo quería llegar a casa y tener un poco de paz.

¿Por qué ese Micky no podía hacerse más cercano a ChangMin o a JunSu? JaeJoong ya era su mejor amigo, él claramente podía tener más, pero nunca otro mejor amigo. No importaba si el chico era rubio, venía de un país extranjero y tuviera una sonrisa bonita.

Todo estaba siendo un desastre torrencial en este momento, ahora eran cinco personas en un proyecto que cambiaría sus vidas, había dos chicos que eran nuevos y la apatía de uno y el afán amistoso de otros le estaban volando el cerebro.

Lo único que agradecía era que a pesar de los conflictos internos ellos parecían la mejor creación que Lee SooMan-nim tuviera hasta el momento. Él parecía satisfecho al escucharlos cantar, sonreía cuando los observaba bailar y esos momentos donde les palmeaba el hombro hasta hacían que él pudiera respirar y dejar pasar todas sus emociones conflictivas.

Tal vez si compartía un poco más a JaeJoong nada pasaría, quizá si dejaba que el tiempo corriera un poco más Park se daría cuenta de que era bienvenido con todos, no sólo con su hyung y se atrevería a interactuar con los demás tanto como fuera necesario.

Después de todo con la llegada del que era el quinto pero no malo pudieran dar finalmente el paso que les faltaba para estar sobre los escenarios.

Pero sobre todo, después de la llegada de Park Jung YunHo sabría que no era difícil tener un mejor amigo sólo para él, lo difícil sería darse cuenta que nunca fue un mejor amigo...

Sino un primer verdadero amor