Todos mis amigos son paganos, tómalo con calma.

Espera a que te pregunten a quien conoces.

Por favor, no hagas ningún movimiento brusco.

No sabes ni la mitad de los abusos.

Twenty One Pilots- Heathens.

Tyler.

Ryan.

Noa.

Eisha.

Aisha.

«Mis amigos»

Hay una frase que dice: «El amigo es el enemigo que AÚN no te ha declarado la guerra»

¿Hasta donde podía confiar en ellos?

Mire cada uno de sus rostros.

Las facciones sencillas pero bonitas de Tyler, sus lentes. El rostro masculino de Ryan y sus lentes asentandole belleza. El cabello marrón corto de Noa, sus ojos siempre ojerosos. El cabello recién cortado de Eisha con su nuevo color negro. Las pecas en su rostro y sus ojos verdes. El cabello morado brillante de Aisha, sus ojos destilando astucia.

Parecen los rostros de buenas personas pero cualquiera de ellos podría ser el asesino.

-Ryan.-le llamé.-¿Ya está mejor tu herida?

Él asintió sonriente mientras tocaba el cabello de Tyler.

-Casi muero cuando esa loca me disparó y dijo que Tyler a esas alturas estaba muerto.-dijo y miró a Noa con desconfianza.-Menos mal que Noa se arrepintió de manera súbita y misteriosa y decidió no matarlo.-dijo con sarcasmo.

-¿Por qué tus huellas estaban el cuerpo de Michael Williams?-solté la pregunta.

Ryan se tensó y desvió la mirada hacia las ventanas.

Era de día pero debido a los últimos sucesos estábamos de luto y no habían clases por este día.

-Tus huellas también estaban.-dijo entre dientes.

-Si nos atacamos unos a otros no vamos a descubrir nada.-dije.-Debo preguntar a cada uno para saber y unir las piezas.-le expliqué.-No sé cómo llegaron mis huellas allí y necesito saber cómo llegaron las de ustedes para descubrir la verdad. Alguien podría querer inculparnos.

Él asintió creyéndose mi respuesta.

No les diría que yo había enterrado al muerto con los Pride. No sabía hasta donde podía confiar en ellos y si cometía un error podría apuñalarme por la espalda.

-Tampoco sé cómo llegaron mis huellas allí.-dijo.-Yo y Michael éramos amigos pero mis huellas no deberían estar en su jodido cadáver.

Mentía. Mentía. Mentía.

Mi experiencia leyendo a personas me lo decía. Sus ojos estaban en el suelo. Su pierna se movía intranquila y su voz temblaba ligeramente, era algo no muy notable pero yo podía notar el temblor en su tono.

Ryan mentía.

-Aisha.-la llamé y tembló ligeramente.-¿Qué puedes decirnos sobre tus huellas?

-Michael era mi amigo.-dijo mecánicamente como si la mentira de Ryan le sirviera para la suya propia.

-Eso no es cierto.-saltó Eisha.-Michael era tu ex y se odiaban.

Aisha abrió los ojos y tragó en seco.

Se rió nerviosamente.

-Hermana, él era mi ex y nos llevamos mal al inicio de nuestra ruptura pero luego nos hicimos amigos.-dijo con voz temblorosa.-Él y yo nos parecíamos mucho.

Mentía. También mentía.

-¿Noa?

-Yo ni siquiera lo conocía.-dijo segura.-No sé cómo demonios llegaron mis huellas a ese maldito cadáver. Soy una puta inocente, joder.

Parecía enfurecida por desconfiar de ella pero la cantidad de palabras bruscas en su lenguaje me decía que estaba mintiendo, que estaba nerviosa y se refugiaba en palabras fuertes para aparentar.

-¿Y tú, Iv?-preguntó Eisha, quién era la única además de Tyler de esta habitación que podía juzgar a alguien pues era la única cuyas huellas no estaban.

-Ya lo dije.-mentí con pura calma y lista a hacerles creer que todo lo que decía era verdad.-No sé cómo llegaron mis huellas a ese cadáver. Alguien nos debe querer inculpar. Tal vez el asesino.

Eisha dudó y los demás asintieron. Era obvio que ocultaban algo y preferían la versión de «alguien nos quiere inculpar» a la verdad.

Creí que me había librado hasta que Eisha habló:

-Espera, Iv.-soltó.-Hubo una tarde en que tú ni estuviste en Millennium University en todo el día. Lo recuerdo porque en ese entonces ya me había ido de aquí y tenía a las personas del Nuevo Mundo detrás de mí para llevarme. Vine a aquí y no estabas, volví en la tarde y seguías sin estar y en la noche vine y tampoco estabas, al final los del Nuevo Mundo me encontraron y... Lo que ya sabemos. Me llevaron abajo hasta que Clara me trajo a buscar mis cosas, volver a bajar y luego ustedes me sacaron de allí. Pero en fin, ¿Dónde estabas ese día?

Sabía perfectamente de que día hablaba.

No sabía que había estado aquí pero el único día que me pase casi las veinticuatro horas afuera que cuando seguí a Junior al cementerio, luego de eso regresé y converse con Tyler, el asesino me llamó y fui a ver a los Pride. Fue allí cuando los vi con Michael Williams muerto y esperamos a la noche para enterrarlo.

Pero eso no se los diría.

-Fue el día que follé con Junior en el cementerio.-dije.

-¿Y? ¿Se pasaron las veinticuatro horas follando?-preguntó Eisha. Entendía su desconfianza luego de la verdad sobre Mack pero me dolía que no confiara en mi, aunque no la podía culpar cuando yo tampoco confiaba y le estaba mintiendo.

-Me pase en día con él.-mentí.

Bien. Ahora tenía mi coartada en las manos del asesino.

Eisha pareció complacida.

-Bien.

Un toque en la puerta nos puso a todos en alerta.

Me levanté y abrí para encontrarme con la persona que manos quería ver ahora mismo.

Junior Pride, alias «el asesino del calabozo».

Él me abrazó al instante en que me vio.

Depositó suaves besos en mi cuello y ya no se sentía como anoche, no era violento sino que volvía a ser el Junior dulce y embriagador, el chico de los besos suaves y eso solo confundió más mi mente.

Me aparté.

-¿Qué pasa, guapa?-preguntó.-Me quedé esperándote anoche para la maratón de pelis.

Bufé.

-No, gracias.-solté de mala gana.-Estoy en algo. Por favor, vete.

Él parecía confundido.

-¿Iv estás bien?-preguntó.

Mi ira creció considerablemente.

Tomé su mentón con furia y hablé en voz baja.

-¡Basta de fingir!-susurre.-Deja ya el personaje de chico bueno y dulce cuando ambos sabemos lo cruel, maniático y peligroso que eres.

Él parecía confuso.

-Iv.-me tomó de los hombros.-Escuchame. No sé de qué hablas.

Mi mano derecha voló e dirección a su mejilla con rapidez. Él movió su rostro a un lado ante el impacto de la bofetada. Su piel clara se tornó rojiza en la zona golpeada y... ¡Dios! Ahora quería golpearlo más y verlo ponerse rojo. ¡Golpearlo en todas partes?

¡Niña! ¡No estás bien! ¡Es un asesino!

Ante los reclamos de la yo en mi interior que aún poseía conciencia me aleje de él pero su mano se posó en mi brazo con la delicadeza que lo caracterizaba. Era un agarre fuerte pero incapaz de hacerme sentir el más mínimo dolor.

¿Cómo pasaba de ser el chico violento de anoche a él chico dulce de siempre?

¿Quién eres Junior Pride?

Puso mi mano derecha en su mejilla. Creí que estaría enfadado pero ese pensamiento desapareció cuando puso mi otra mano en su erección.

Joder. ¿En serio estaba duro por una cachetada?

-Hazlo de nuevo.-gimió contra mis labios mientras los mordisqueaba sin llegar a besarme.

Era tan difícil resistirse a él.

Entonces los recuerdos de aquel otro invadieron mi mente, su manera violenta de tocarme, sus palabras crueles y sin amor.

No podía caer nuevamente en las garras de Junior Pride. No mientras siguiera siendo uno en el día y otro en las noches como los monstruos de los cuentos de hadas solo que esto no era un cuento de hadas y si seguía en este juego en el asesino podría darme todo el amor del mundo en un momento pero no dudaría en matarme en otro.

Lo aleje de mí golpeando con mi rodilla su entrepierna.

Cuando se retorció entendí que me había pasado con el golpe.

-¡La intensión del primer golpe era el dolor no el placer!-le dije.-Debí haberte pegado en los huevos desde la primera vez, imbécil perverso.

Él me miró. Su mirada perdida en mis ojos. Sus ojos buscaban algo en los míos. Su mirada sin entender por qué actuaba así con él y suplicando una explicación, al menos así lo interpretaba yo y me di cuenta que tenía razón cuando dijo:

-¿Qué te ocurrió? ¿Por qué me tratas así, joder?-preguntó.

-¿En serio seguirás fingiendo?-pregunte.-Solo vete, Junior.

Él se recompuso y me encaró.

-No me iré hasta que me digas por qué demonios actúas así conmigo.-gritó con el dolor y la furia en sus ojos grises.

-Aléjate de ella, Pride.-dijo una voz detrás de nosotros.

Dallas Morgan.

El chico de cuerpo y aura bestial golpeó a Junior directo a la cara. Junior se levantó y le devolvió el golpe. Ambos ya sangraban.

-¡Basta!-grite.

Ryan que recién salía de la habitación al oír los gritos y golpes sostuvo a Dallas y Tyler a Junior mientras aprovechaba para toquearlo todito y hacerme señas mientras decía en voz baja y para que solo yo lo oyera:

-¡Mira como toco a un Pride! ¡Debería tomarme una selfie!

Este chico era un caso. Siempre con su sentido del humor incluso en las peores situaciones.

Junior se soltó.

-¡Vete!-le exigí.

-Esto no termina aquí.-dijo escupiendo sangre y alejándose con su mirada dolida. Es como si en serio no supiera lo que sucedió anoche y como descubrí que era el asesino.

Le indique a los chicos que entraran junto a las chicas que chismoseaban.

-Dallas Morgan.-dije yendo hacia el chico de cabellos tan rubios como la mismísima luz del sol.

-Así que has investigado sobre mí.-dijo sonriendo.

-Solo investigo a quienes me interesan y tú no estás en esa lista, bebé mafiosito.-dije.

-Ni quiero estar.-dijo.-No necesito estar en la mira de la niña mimada que se folla a cinco asesinos.

Mi corazón latió.

-¿Cinco asesinos?-pregunte.-¿Qué es lo que sabes, Dallas?

Él se acercó a mí.

Definitivamente parecía saber mucho más que yo.

-No mucho.-respondió.-Sé exactamente lo mismo que tú. La única diferencia es que yo recuerdo lo que sé y tú no. Pero ambos sabemos lo mismo, ambos sabemos el misterio.

Sangre...

Ellos...

-¡Todo arderá en las llamas de mi venganza!

Ante el grito desconocido miro detrás de mí.

Siento pasos detrás de mí.

Cuerpos.

Son dos. Muertos.

Una chica y un chico.

Ella ahorcada.

Él con un cuchillo directo al corazón.

Sus manos estan ensangrentadas, me toca y me mancho de su sangre.

-Olvida lo que viste.

-¿Eres tú el asesino?

No puede ser.

No puede ser.

Siempre a mi lado, siempre. Siempre cerca, siempre. Siempre aquí, siempre.

Esta no puede ser la verdad. No puede ser que el asesino sea...

Vuelvo a la realidad y el chico que parece saberlo todo sigue frente a mí.

-¿Qué es lo que sabes?-pregunto.

Él sonríe.

-Sé que Mack era la loca obsesiva, que Jinx la mató para salvarte, sé quién dirige el Nuevo Mundo y sé al igual que tú quien es el asesino. Ya estuviste cerca del asesino y descubriste pero tu mente te obligó a olvidarlo.

Lo tomé del cuello de su camisa.

-¿Y tú cómo sabes todo eso?-pregunte.

-Porque siempre he estado aquí, pequeña mimada.-me dijo.

Siempre aquí.

Siempre aquí.

Dicho esto se alejó hasta desaparecer en la oscuridad.

Eso mismo había dicho el asesino en los recuerdos.

¿Era Dallas el asesino que había aparecido ahora para seguir atormentadome y hacerme recordar para luego matarme?

¿Y si no era el asesino quién era ese chico que sabía tanto?

¿Era una víctima o era un depredador más en este castillo de cartas a punto de derrumbarse?

🖤_____________________❤️

¡Hola, mis Heavens!

¿Les gustó el capítulo? ¿Tienen teorías?

¿Y esa actitud de Junior después de que Iba descubriera que es el asesino? ¿Por que actuó como si nada hubiese pasado?

¿Quieren actualización? Si veo que están ansiosxs trataré de actualizar en unas horas con otro capítulo y este estará lleno de sorpresas, respuestas y revelaciones.

¡Nos vemos!