Todo era nuevo para Louis. Desde tener una gran cama, suave, acolchonada, alta y con el exquicito aroma del alfa rizado, la cual obvio que lo compartía con el mismo rizado, hasta ver caras nuevas cada vez que el  alfa lo sacaba, ya sea para comer algo como para acompañarlo a donde sea que el alfa fuese. Todo dentro de aquella gran mansión.

Pero lo que mas le llamó la atención y adoraba con sus brillantes ojitos fue cuando H lo metió por primera vez en la bañera para un relajante baño de inmersión. Tenía un delicioso aroma de la sal que había hechado el rizado, no tan fuerte ya que quería que no tapara el delicioso aroma del omega, y con mucha espuma para que el niño se sintiera feliz mientras el le bañaba.

En cuanto el ojiverde le metió y su cuerpito sintió la suave y calentita agua, gimió de una forma tan femenina y llena de placer que H se sintió duro en un segundo. Pero como para que no, tenía al mismísimo angel del señor con esas curvas y piel morena y tan suave delante de él, y aquel gemido solo le hizo tragar duro y enfocarse en bañar a su niño. De a poquito ese niño lo estaba frustrando sexualmente. Tenía la carne mas deliciosa enfrente suyo, pero no puede, no por ahora por lo menos, ese niño es la viva imagen de la inocencia.

Cuando el rizado empezó a mojarle el cabello suavemente con un vaso de agua, Louis simplemente cerraba los ojos y se dejaba hacer tranquilamente. Es que todo eso era nuevo para él, bueno por lo menos no recordaba lo que se sentía tener un buen baño con espuma y agua caliente.

- Te gusta bonito?- le pregunto H mientras masajeaba su cuero cabelludo con delicadeza con el shampoo

Louis tan simplemente asintió con la cabeza. Aun no hablaba casi nada, y eso a H le empezaba a desesperar. Quería oir la voz de su omega, necesitaba oirla.

- Lou- le llamó tranquilamente- vamos a aprender a hablar si?- le miró a los ojos así veía si le entendía o no
- no- dijo negando mientras bajaba la mirada avergonzado
- No??, por que no??- le dijo H arrugando el entrecejo
- Ha-habad mal-o- le dijo entrecortadamente y mal pronunciado pero con el mismo tono de un niño de cinco. El rizado se moria de la ternura y le diría que si a cualquier cosa si le hablaba siempre así, pero tenía que ponerse firme y obligarle a comunicarse con palabras.
- Hablar no es malo amor- le dice,sorprendiendose de que le entendió lo que le dijo su omega, dandole un besito en la punta de la nariz, enjabonandole todo el cuerpo con mucha suavidad, para no lastimar sus heridas y moretones- hablar es muy bueno, mas cuando quieres hacer feliz a la otra persona-
- feli??- le miro a los ojos sorprendido, el rizado no entendió porqué
- si... a mi me harías muy feliz que me hablaras y me dijeras muchas cosas, las que vos quieras contarme- le dijo enjuagando su cabello delicadamente

Una vez terminado el baño, el ojiverde agarró una toalla y se la enredo por todo el cuerpo, haciendo que parezca un churro, sonrió ante aquella hermosa vista de su omega con las mejillas coloradas. Louis no había vuelto a hablar cuando H le había respondido aquello, pero el ojiverde lo dejo pasar al verle cara de pensativo, que si le preguntabas se enamoro una vez mas de aquel niño bonito.

Una vez ya estaba vestido con un traje negro con los primeros botones abierto y su cabello a medio secar, se dedicó a encontrar ropa de la talla de su niño, para así después salir a comprarle todo un placards​ de ropa y muchas otras cosas. Agarró una camisa roja que el rubio omega de Z, Niall, había dejado junto con un pantalón beige, hace un rato atrás para que pudiera vestirlo adecuadamente.

Pero en cuanto quizo ponerle uno de sus boxers se dio cuenta que eran muy grandes para el ojiazul. Cuando mando a que Niall le prestara nuevamente uno de sus boxers, se sorprendió al ver unas panties celestes con un moño adelante, ya estaba por ir a quejarse cuando sintió como una manita se lo sacaba de sus manos y lo miraba con adoración mientras la acariciaba. H no hizo mas que sonreir ante aquella imagen, le dio nuevamente un besito en su nariz y volviendo a agarrar la pantie para ponérsela mientras se lo decía.

Una vez los dos listos para salir, H lo alzo y salieron por la puerta, encontrándose con Z y Niall muy juntitos, dándose un beso muy apasionado. H simplemente carraspeo, pero Louis parecía absorto con lo que había visto. Él quería que el rizado lo besara, pero simplemente agachó la cabeza sonrojado por pensar en eso. El era feliz con los besitos en la punta de su nariz que le daba el rizado con mucho cariño.

- H... eeemm.. el auto ya está listo- le dijo Z serio pero con un rubor en sus mejillas.

H tan solo asintió y siguió caminando sin darle mucha vuelta a lo anterior visto. Cuando subió al coche y acomodó mejor a su niño en su regazo, pudo ver que Louis estaba rojo.

- Bebé??- acarició su mejilla derecha para que le mirara, una vez mas se enamoró de aquellos ojos tan azules como el océano- que tienes cachorro?- no se pudo aguantar darle un besito en la nariz.

Louis tan solo levantó sus bracitos para agarrar con sus manitas las mejillas del rizado quien lo miraba con aquellos ojos que brillaban cada vez más. Y acercó sus labios en forma de trompita y los pegó con los labios de H. Y tan rápido como los pegó se alejó y se tapó la carita con sus manitas y escondiendose a la vez en el pecho del mayor.

H estaba en shock. Su mente iba a mil por hora y a la vez se ponía en blanco. Pensó que para llegar a todo eso que se refería sobre tener una relación y todo lo que eso conlleva iba a llegar mas tarde de lo que desearía. Pero su niño tenía otros planes. Y aunque aquel beso fue rápido e inocente, sabía que su niño había visto el beso de Ziall y algo se prendió en su cabecita que lo llevo a hacer eso.

Y estaba muy feliz, no crean que no. Solo que no sabia como reaccionar porque le agarró desprevenido. Pero encuanto sintio que su niño empezo a lloriquear volvió en si. Abrazo al omega acariciandolo y llenandolo de besitos en la cabeza.

- tranquilo mi niño... shhh... esta bieen.. no estoy enojafo bebé-
- n-no pe-pegad??-le dijo el omega mirandolo a los ojos, con lagrimas cayendo de sus rojos ojos
- No, no amor... jamás te lastimaría- le dice quitando sus lagrimas suavemente con sus dedos- es más... me gustó mucho tu besito bebé, me gustaría darte más si a vos también te ha gustado- Louis asintió rápidamente que H pensó que se iba a dislocar el cuello.

H le dio un nuevo piquito y ño abrazo fuertemente contra él. Louis enterró su cara en el cuello del mayor, su escondite favorito de ahora y para siempre. Y así se quedaron hasta llegar a la ciudad, enlazando sus aromas para ahogarse en ella.

La tarde pasó realmente muy rápido. Ya estaban volviendo a la mansión con un Louis totalmente dormido en el regazo de H y el alto tan solo mimandolo y velando por sus sueños, como la primera vez.
H empezó a recordar como se había divertido comprándole todo lo que su precioso admiraba y señalaba para que el lo viera.

Incluso estuvo por asesinar a la vendedora de un local donde Louis había visto dos ositos de arco iris, y obvio el niño los quizo, y miró con un puchero a H. Pero cuando quizo ir a agarrarlos para pagarlos la vendedora muy coquetamente se le acerco y con un golpecito en su mano lo aparto y se le acerco pasando el dedo índice por su pecho y con voz seductora le dijo que esos osos no estaban en venta, pero se los podía dar si iban para la parte de atrás ellos solitos y... bueno, ya saben a que se refería la muy zorra.

Pero H la miró filosamente y le estaba por contestar cuando un lloriqueo los interrumpió.
Louis yacía en el suelo con los brazos estirados hacía H para que le alce con un hermoso puchero en sus labios, que H olvido a la rubia teñida y se agachó hacia su niño alzandolo y dandole un besito en la nariz. Volvió su mirada hacia la chica quien miraba horrible a Louis, H obligo suavemente que Louis escondiera su carita en su cuello, logrado esto agarró los ositos los apoyó en el mostrador y sacó el arma que escondía en su cintura.

La vendedora quizo gritar del susto, pero con una mirada de H, decidió simplemente regalarle los peluches. H con su mirada aun seria, se giró hacia uno de sus guardaespaldas y con una mirada le indico algo. Cuando el guardaespalda se dirigió hacia la cjica, H salio con los ositos, y una sonrisa de satisfaccion en su rostro.

Y así siguió la tarde. Le compro un montón de ropa, todas de colores pasteles, ropa interior femenina ya que cuando Niall y Louis vieron aquella vidriera miraron a sus alfas con un brillo en los ojos que ninguno pudo negarse. Muchas zapatillas todas  adidas y de todos los colores.

H se dedico en buscar mamelucos para pijama, porque simplemente tenía muchas ganas de ver a su bebé en ellos a la hora de dormir, y al despertar. Nadie se quejo y Louis chilló de emoción cada vez que veía uno que le gustara.

También le compró muchos juguetes, entre muñecas hasta autitos, todo aquello que le llamara la atención al niño, H lo agarraba y lo tiraba en el canasto donde iba poniendo todo.

H sonrió al recordar los ojos tan brillosos de su niño, tan llenos de vida que se le infló el pecho de orgullo y amor. Lo único que deseaba de ahora en adelante era Louis y si él era feliz con la vida que él le estaba dando. Y si era así, H se daba por satisfecho.

Pero al llegar a la mansión, reconoció la camioneta y autos negros que estaban en la entrada. Eso solo significaba una cosa. Su padre estaba en Londres. Y él se imaginaba el porqué.

Abrió la puerta de la camioneta y cargando suavemente a Louis no perdió el tiempo en entrar rápidamente a la mansión. Una vez dentro se encontró con Liam, el beta de cara de cachorro.

- tu padre desea hablar contigo lo antes posible H-
- hoy no puedo... estoy muy ocupado.. hazle saber que mañana a primera hora me juntaré con él- y con eso dicho subió a su cuarto y se encerró con llaves.

Una vez que Louis había despertado por el hambre, H llamó para que le traigan la cena a su cuarto. Ni siquiera miró quien le trajo la cena, agarro la bandeja y así como abrió la puerta la cerró. Se dispuso a darle de comer a su niño con sonrisas y besitos en la nariz de por medio.

- pa-papii feli??- dijo apartandole la mano con el tenedor a H.

H le miró sorprendido, en verdad no se esperaba aquella pregunta. Y más que Louis estaba empinado en decirle papi. Y todo eso ocurrió en el centro comercial también.

Resulta que Louis estaba gateando por uno de los pasillos de la juguetería cuando vio como una niña llamaba "papi" a un hombre alto y rizado, al estilo de H, y este hombre alzó a la niña y le dió un piquito así como Louis y H lo empezaron a hacer desde que habían salido de la mansión. Louis en su cabecita, pensó que como el chico se parecía a su rizado, tambien debía decirle "papi" a su rizado, quizás porque a los rizados les gustaba que le llamen así.

Cuando Louis le dijo papi por primera vez a H. H creyó que había visto a su verdadero padre por ahí, pero cuando Louis lo apuntó con uno de sus deditos y volvió a decir papi, comprendió que se refería a él.

- Deseas que yo sea tu papi como vos sos mi bebé, amor??- le preguntó el rizado, y el omega simplemente asintió chillando y abrazándolo por el cuello mientras escondía su rostro en el cuello del mayor, aspirando su delicioso aroma, que más que tranquilizar su acelerado corazón, lo hacia latir el doble de rápido, pero le gustaba esa sensación.

Sensación a protección y amor.

En fin, H simplemente aceptó esta nueva relación extraña que estaba creando con su niño, su bebé, su omega. Y así como si Louis deseaba todo lo material y el se lo daba, tambien dejaria que le dijera como más deseaba, y mas cómodo se sintiera. Y a decir verdad, un cosquilleo por todo su cuerpo recorría cada vez que el niño le llamaba así, un delicioso y placentero cosquilleo.

Volviendo al presente. Louis observaba atentamente al rizado esperando con ansias su respuesta. H volvió a la realidad cuando sintió que Louis quitaba su mano de su mejilla.

- si soy feliz??, claro que lo soy. Soy muy feliz ahora que te encontré y te tengo amor mío- le dice el rizado besando sus manitas para luego besarle la frente- y vos??... sos feliz conmigo??- Louis asintió con una sonrisita
- Lou-louis feli... y... ha-habar pada papi feli-

H tardó en entender a lo que Louis se refería, pero entonces su conversación cuando bañaba al omega llego a su memoria:

"- Ha-habad mal-o- le dijo entrecortadamente y mal pronunciado pero con el mismo tono de un niño de cinco. 
- Hablar no es malo amor... hablar es muy bueno, mas cuando quieres hacer feliz a la otra persona-
- feli??- le miro a los ojos sorprendido, el rizado no entendió porqué
- si... a mi me harías muy feliz que me hablaras y me dijeras muchas cosas, las que vos quieras contarme- le dijo enjuagando su cabello delicadamente "

Así que por eso es que no había dicho nada cuando termino diciendo aquello. Su bebé quedó pensativo pensando en que esta vez si hablaba alguien seria feliz, feliz por escucharlo, no como antes que se lo prohibían. Y quizás debía asegurarse si en verdad su papi seria feliz, y por eso hacia aquella pregunta y por eso se decidió a que hablaría más.

Y con tan solo pensar que su Louis lo hacia para verlo feliz a él, se enamoró por completo. No quería hacer nada mas en la vida que complacer en todo lo que Louis deseara. Y daría su vida a cambio por aquella hermosa sonrisa que Louis sostenía cuando dijo aquello.

- Ooh mi hermoso bebé, me haces muy feliz mi amor. Prometo que mi felicidad será tu felicidad también amor- le dijo dandole un gran abrazo y un besito en sus labios.

Louis rio y abrazó a su papi también. Y se prometió que todos los días de su vida haría feliz a su papi. Por que su papi era su héroe.

Por ahora todo marcha bien. El amor se siente en el aire. Pero la tormenta se acerca mortal y silenciosamente.

Dedicación a:

Stylinson69Clemmings por comentar y leer mis novelas, i love you

michiro_notarak321 por comentar, gracias bebé

lougatitoglitter por comentar y votar, gracias hermosa

6themaneSX por comentar y pedir dedicación, besos bebé

Espero que les guste y perdón por tardar... las quiero!!

Besoos

Ceeless10