CAPÍTULO SESENTA Y SIETE

8 de Junio, 2012.

6 de julio, 2012

Hoy es el cumpleaños de Dan y estamos celebrándolo en el apartamento con los chicos y nuestros amigos. Extraño a mis padres y abuelos, pero al menos Dan parece pasarlo estupendo, tanto que hace un rato lloré porque él y Harry estropearon el pastel que ahora Ethan deberá suplantar con uno que traerá.

Las apuestas sobre el nombre de la bebé están en pleno apogeo y la pizarra que Harry y yo destinamos a ello se encuentra llena de nombres. En este momento Dexter se ríe de la opción que puso Katherine mientras Hilary se burla de la de él.

Amo a mi bebé y no ha sido un mal embarazo, pero tengo que admitir que ya deseo que nazca. Estoy cansada, adolorida e irritada, me molesto fácilmente y me cuesta mucho dormir. Espero ella nazca muy pronto.

El timbre suena y al abrir me encuentro con una sonriente Grace con una caja de regalo en sus manos.

—¿Llegué a buena hora?

—En una perfecta —aseguro en cuanto me doy cuenta de que Ethan viene caminando por el pasillo.

Sé que será un gran momento para ella como Fiver, aunque nunca le he preguntado quién es su integrante favorito.

Ethan arquea una ceja mirando a Grace de espalda y le doy un sutil asentimiento que lo tienen guiñándome un ojo antes de detenerse detrás de ella sin que lo note.

—Estoy preocupada de que enloquezca, Kae —murmura Grace con una sonrisa nerviosa.

—Tranquila, mi hermana pasó por esto y todo salió de maravillas ¿quieres que hagamos la prueba?

—¿Cómo la haríamos?

—Dándote la vuelta y diciendo hola.

Gira desconcertada y su inhalación es audible cuando se encuentra frente a frente con el BG.5 que consideran un misterio. Ethan le sonríe de manera ladeada y encantadora, apuesto a que disfruta de esto.

—Hola, cariño ¿Qué tal todo? — pregunta con su característica voz ronca.

—Oh, mierda, tu voz es caliente —murmura Grace—, espera un segundo, creo que necesito respirar.

Ethan ríe mientras la mira con diversión y Grace parece estar ordenando sus ideas mientras a través de sus pestañas lo mira, jadea una vez más y Ethan ríe más fuerte.

—Tú... vaya... las fotos no te hacen justicia —dice ella rápidamente—, solo... vaya... mierda, espera, intento decir algo coherente.

—Tómatelo con calma. Por cierto, eres realmente hermosa —dice sin quitarle la mirada de encima y temo que mi nueva amiga colapse.

—Ella es mi amiga Grace, es una fiver, así que compórtate —Le hago saber.

—Me estoy comportando, Hottie, no seas gruñona mira que traje un rico pastel para el cumpleaños.

—Solo porque Harry te lo pidió —digo rodando mis ojos.

—Lo que cuenta es la intención —Ethan mira con atención a Grace y luego esboza una sonrisa muy sincera y diferente—. Es agradable que Hottie te haya invitado, un placer conocerte, Grace.

Intercambian una mirada breve, pero intensa que me tiene entrecerrando los ojos hacia ambos, me hacen sentir que estoy de más.

Grace le da una de sus bellas sonrisas, al tiempo que Ethan pasa a su lado para adentrarse al apartamento.

—¡Guau! —suspira llevándose la mano al pecho—. ¿Eso acaba de pasar? Él es hermoso y perfecto. Oh, Dios, he escuchado a Ethan Jones hablarme y no me he desmayado.

—Sí, ese es un gran logro, ahora vamos, entra, que Harry pensará que estoy huyendo o algo así.

Entramos y ellos realmente se encargan de volverlo incómodo permaneciendo en silencio mientras la miran.

—Esto es incómodo —murmura Grace en voz baja haciéndome reír.

—Ella es Grace, es una amiga y le gusta su música, así que sean amables y no unos salvajes — digo, Ethan sale de la cocina con una lata de cerveza y riendo.

—Yo la conocí primero y conocen las reglas —anuncia.

—¿Qué reglas? —preguntamos Grace y yo.

—Cosas de la banda —es la respuesta que Ethan da con una gran sonrisa.

—Antes de darte un abrazo como toda fiver merece —dice Harry jugando con el marcador y Grace le da toda su atención con la emoción brillando en su mirada—, debes proponer un nombre y unirte a la puesta, Grace.

—¿Están apostando a su hija? —me pregunta Grace sorprendida haciéndome reír.

—No, todos están proponiendo nombres y si Harry y yo lo escogemos se ganan el dinero, incluso mis padres están participando.

Grace asiente como si asimilara toda esta locura, luego se gira y me sonríe.

—Tu novio es muy caliente, todos lo son — murmura muy bajo para que solo yo escuche— ¡Oh, santo de todos los santos, Kae! Ellos son demasiado... vaya y no me he desmayado.

—Lo estás logrando —felicito con una sonrisa.

Grace se gira hacia Harry justo cuando él le arroja el marcador y le guiña un ojo. Dexter aplaude con alegría.

—Damas y caballeros esta jodida apuesta está aumentando —anuncia con voz de anfitrión.

—¡Mala palabra! —Lo reprende mi hijo antes de darme una mirada que claramente lo acusa.

—Solo no la repitas, pequeña bestia, déjame tener mi libertad de expresión.

Grace mira la caja de regalos en una de sus manos y se la extiende a Dan, quien le da una gran sonrisa y se acerca a ella.

—Espero y te guste, tu mami me dijo cuanto te gusta Ben10.

—¿Qué se dice, Dan? — cuestiono.

—Gracias —dice frunciendo sus labios para darle un beso, Grace le ofrece su mejilla y Dan hace presión.

—Oye, Keith, tu hijo está gateando hacia la cocina —Le hace saber Andrew.

—Mierda —Mi hermano se apresura a ir por él—. Adam, por favor, quédate lejos de la cocina.

—Grace, da un nombre —pide Doug impaciente señalándole la pizarra.

Ella respira hondo y retira su bolso de lado, Ethan lo toma y lo ubica en el sofá, él seguramente, quiere que ella se desmaye.

—Pero debes luego dar el dinero ¿eh? — dice Andrew.

—Claro —murmura Grace.

Todos esperamos pacientemente que ella plasme su sugerencia en la pequeña pizarra, ella se aparta y leo "Hazel," no está mal, pero Dexter suelta un bufido.

—Poco creativo.

—Criticas todas las sugerencias, Dexter, mira que Holly no es que te haya hecho pensar mucho — dice Bridget.

Ellos comienzan alguna discusión, pero con curiosidad miro a mi alrededor, notando que Dan no está. Me masajeo mis sienes, imaginando que pudo haber hecho esta vez.

Entonces escucho una bandeja caer y no necesito meditarlo dos veces, sé que es la que llevaba el pastel.

Todos se mantienen en silencio y le doy una mirada a Harry.

—Por favor, ve, esta travesura te toca a ti —Harry asiente y camina hacia la cocina—, al menos tenemos el pastel que Ethan compró.

Harry se aclara la garganta mientras entre sus brazos sostiene a Dan lleno de pastel por todas partes, mi hijo me ve con los ojos muy abiertos.

—Digamos que ningún pastel sobrevivió —anuncia Harry.

—Pero...

—Ninguno, Kae, ambos están en el suelo de la cocina.

Miro a mi hijo lamiéndose los labios chocolatosos y luego los pequeños dedos de sus manos, inhalo y exhalo.

—Lo siento, nani —dice en su entonación infantil.

Miro al costado y Andrew tiene ese odioso cuaderno mientras escribe, el de pros y contras. Él muy traicionero también escribe en el.

—Cariño, debes aprender a ser paciente— digo suspirando—. Bueno, holgazanes, pónganse a limpiar la cocina y que alguien vaya por otro pastel.

Todos me miran con incredulidad.

—¿Qué? Estoy embarazada y pesada, encárguense ustedes de arreglar todo este desastre, mi niño tendrá su pastel y le cantaremos cumpleaños. Solo debemos alejarlo del nuevo pastel.

—Ya escucharon, todos comiencen a moverse que Hottie habló — anuncia Dexter.

—Voy a bañarlo —me informa Harry mientras Dan continúa lamiendo sus dedos.

—Sí, asegúrate de lavarle bien el cabello.

***

27 de julio, 2012

—Quiero que nazca — digo frustrada y llorando.

Harry masajea mis hombros tensos.

—Cariño, quizás aún no se siente lista para venir a este mundo.

—¡Joder, Harry! Necesito cargar a la bebé, prometo cuidarla, pero estoy increíblemente agotada, tiene nueve meses. No debe ser caprichosa.

—Te entiendo...

—No, no entiendes porque tú no estás jodidamente embarazado, no tienes dolor de espalda, ni los pies hinchados y noches de insomnio.

—¿Quieres que me arrepienta de haberte embarazado? Porque no lo haré.

Abro mi boca con sorpresa, él tiene razón, no he sido muy amable, pero la falta de sueño y dolor en mi espalda me mantiene de mal humor.

—Lo siento Harry, solo estoy agotada.

—Está bien, Kae, puedo entender que te duelen muchas partes del cuerpo por el peso, pero quiero ayudarte de las únicas maneras en las que puedo, solo no seas tan mala conmigo.

Me acurruco contra su pecho, con mi espalda pegada a él, mientras comienza a acariciar mi vientre muy crecido con una bebé que se niega a nacer. Me relajo un poco.

—Ya quiero conocerla —murmura depositando un beso en mi mejilla.

—¿Y si me follas? He escuchado que eso ayuda a inducir la labor de parto, ya que las caminatas no me están ayudando.

—Muy buen intento, pero estás adolorida de la espalda y otros lugares, definitivamente tener sexo no es una buena idea.

—No es justo, no tengo acción desde hace dos meses.

—Eso no es cierto, recuerdo muy bien mi mano divirtiéndose con ciertas áreas de tu cuerpo y las tuyas conmigo.

Respiro hondo recordándome con todo pasa a su debido tiempo, tengo que ser paciente, es cuestión de esperar un poco más.

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