~Narrador omnisciente~

Los chicos pasaron horas comiendo palomitas y viendo películas. Mientras jugaban a hacerse cosquillas unos a los otros. En fin, pasaron una noche inolvidable.

A la mañana siguiente cierta persona se levanta de los cómodos cojines y esa es Kate. Esta se estira y bosteza, observa su alrededor y rápidamente se levanta para ir a la cocina.

Allí se prepara una taza de chocolate caliente, con galletas de avena y sube a su habitación. Allí deja a un lado su "desayuno" y toma su portátil para empezar en donde termino ayer. Observa una y otra vez lo ultimo que encontró sobre su paradero pero esta información es muy poca para ella.

Lo que nuestra querida Kate, observa detenidamente y piensa, es él nombre del orfanato en donde estaba. Se batalla en ir a investigar o en solo quedarse e seguir aquí pero, es curiosa y no podemos cambiarla.

-Mañana mismo, iré- pronuncio firme de sus palabras y toma la taza de chocolate. Le da un sorbo a su bebida y toma una galleta para llevarla su boca.

Mientras ella hace esto y deja su portátil para ir al baño, cierto trillizos despertó y se dirige a su habitación. Al entrar, se acerca a la cama y toma una de las galletas de avena que habían allí pero por "accidente" lee un poco de la carta que le había dejado la madre de crianza a Kate.

Este la toma entre sus manos y la lee con atención, sin saltarse ni una letra. Cuando termina se deja caer en la cama y observa él portátil, de ésta solo lee Orfanatos las hermanas del campo antes de que Kate cerrara él portátil inesperadamente y lo observara con enojo, al trillizo.

-¿Que lograstes ver?- escupe esta con seriedad.

-Sinceramente, ¿porque no dijistes nada?- él trillizo se levanta y se acerca a ella.

-Eso no es tu problema- Kate pasa sus manos por su cabello desesperada -No le digas a nadie- se adelanta en decir y colocando sus manos en su cintura.

-¿Debería hacer eso o ayudarte?-nuestra Kate lo mira con enojo y se acerca a Ben, amenazante.

-Dices una palabra y te juro Ben, que terminamos- estas palabras les dolieron mas a Kate que a Ben pero este no dio un paso atrás.

-Lo siento- dice en un susurro. Por un momento Kate pensó en que había ganado pero Ben la sorprendió -Cassie y Jorle se enterarán de esto en el desayuno.- camina por su lado y sale por la puerta. Kate deja salir un suspiro, se acerca a su cama y se deja caer en esta dejando salir sus lágrimas.

Mientras ella se desahoga con su almohada, otros se las lanzan para poder despertar a ciertos chicos. Nuestras traviesas hermanas avientan las almohadas a nuestros somnolientos trillizos, mientras se escabullen de la habitación terminada la travesura. Y aún en pillamas bajan hacia la primera planta de la casa para ir a desayunar, pero se sorprendieron al ver que la mesa de el comedor estaba repleta de comida.

-Buenos días chicas, ¿quieren desayunar?- Ben salio de la cocina con una jarra de jugo que puso encima de la mesa.

-¿Le pediste a Margarita que nos preparará el desayuno?- la susodicha era la cocinera y la encargada de la limpieza en la mansión.

-No, yo lo prepare. Me gusta madrugar.- las hermanas se enviaron miradas cómplices, a su amiga Kate, también le gusta despertarse temprano.

-Oh, esto se ve muy bueno, cocinó Ben, ¿verdad?.- Eric y Lucas, aparecieron en la estancia.

-¡¡KATE, EL DESAYUNO YA ESTÁ LISTO!!- grito Jorle, desde el comedor. Kate, apareció por la entrada y se sentó en la mesa con sus amigos al lado de Ben. Durante el desayuno todos se la pasaban hablando y jugando mientras que Kate y Ben, se lanzaban miradas.

-Chicos...- llama Ben con un tono de seguridad. Las miradas pasaron inmediatamente a este y él suspiro -Tenemos que hablar.

-¿Sobre que?- se adelanta Jorle en decir, con un tono de preocupación.

-Sea lo que sea, sueltalo de una hombre- Cassie se recuesta en su silla y rueda los ojos -Me has fastidiado él desayuno- pronuncia con enojo y cierto tono de preocupación.

-Se trata de...- es interrumpido por Kate, la cual se levanta de su asiento.

-Tengo que salir por unas horas- dice esta y se aleja hacia la salida. Todos la observan irse, extrañados de su actitud pero optan por dejarla salir.

-Ben, prosigue- Eric habla, sacando a Ben de sus pensamientos y este los mira.

-Es algo complicado pero...- comienza a hablar sobre lo que paso esta mañana y las pocas cosas que sabe del tema, incluyendo, como reacciono Kate al verlo en la habitación.

Narra Kate:
Estoy de camino al orfanato. Tome prestado uno de los tantos autos de las hermanas y este es un Audi color negro y blanco. Manejo hasta llegar a una calle desconocida para mi pero él GPS me indica que él orfanato esta cerca.

-A llegado su destino- detengo él auto frente a un lugar bastante... Extraño para mi. Apago él auto y tomo las llaves, junto a mi celular para salir.

Observó él orfanato, él cual tiene él nombre de Orfanato de las hermanas del Campo. Esto quiere decir que estoy en él lugar correcto.

Camino y paso un pequeño portón, subo por las escaleras y estas me llevan a la puerta. Suspiro antes de tocar pero alguien sale sorprendiéndome.

-Oh, hola- dice una pequeña niña con los ojos azules. Estos son tan claros que creó poder ver casi su interior por ellos.

-Hola- me limito a decir y a sonreirle.

-¿Busca a la hermana Milena?- esta se hace a un lado para que pase y me hace una señal para que entre -Yo te ayudare- dice antes de poder verla correr.

-Bueno...- pronuncio entrando al orfanato. Este es espacioso por dentro y hay muchos niños jugando. Seguido de esto, escucho como una campana es tocada y todos los niños caminan en diferentes direcciones.

Se alejan y luego él área queda vacía, solo yo. La niña de antes se acerca a mi y me sonríe. Luego aparece una mujer de tercera edad, con vestimenta de monja y se acerca a mi.

-¿Que se te ofrece querida?- pronuncia la mujer con un tono suave.

-Bueno...- mi voz sale temblorosa pero intento tranquilizarme -Vine a saber sobre mi paradero-