Besos y el chasquido de sus lenguas era lo único que se escuchaba en la habitación. El mayor se sacó la camisa y volvió a devorar los labios de su pequeño.

—M-Mingyu~–gimió—. Duele...

—¿Donde? Amor–le dejó un par de besos por el rostro.

–Aquí...–se señaló la entrepierna, la cual dejaba notar una gran erección.

Mingyu sonrió, acercó sus labios al cuello del menor y comenzó a morder y a pasar su húmeda lengua, mientras que con su diestra acariciaba el miembro de su pequeño sobre la tela del bóxer, mientras Wonwoo ahogaba un gemido.

Continuó bajando, hasta llegar a sus pezones, donde solamente pasó su lengua por uno de ellos, luego se encargaría. Bajó en una hilera de besos, hasta llegar al elástico de la ropa interior.

—S-sácalo...

Hizo caso a las órdenes de su novio, bajó aquella molesta tela, dejando libre su necesitado miembro. Wonwoo suspiró al sentir el cálido aliento del peli-negro en su sensible hombría. Gimió con fuerza cuando el mismo lo engulló, lamiendo toda la extensión para luego volver a meterla por completa en su boca, mientras con su otra mano acariciaba la mojada entrada de su pequeño.

Wonwoo era un desastre, gemía con fuerza al recibir tantos estímulos a la vez, la cálida boca de su novio devorando su miembro, mientras metía uno de sus dedos en su cavidad. Sintió un característico cosquilleo en su vientre.

—V-voy agh...M-Mingyu ~

Gimió cuando Mingyu le pego una lamida a la punta, mientras metía y sacaba sus dedos.

Entonces, el mayor dejó de chupar y sacó sus dedos del interior de su novio, por lo que el mismo se quejó.

—Date vuelta, bebé.

Hizo lo que le pidió, abriendo levemente sus piernas y cerrando sus ojos. Jadeó cuando Mingyu tomó una de sus nalgas y la apretó, para luego dirigir ambas manos hasta su cintura.

—¿Listo?–preguntó, acercando sus rostros para dejarle un par de besos.

—S-si...

Entró lento, para luego quedarse quieto, disfrutando la sensación del interior de su novio. Cuando Wonwoo comenzó a mover sus caderas en busca de más contacto, gimiendo bajito, Mingyu comenzó un vaivén, al principio lento, y luego rápido, sacando su miembro y entrando de una sola estocada. Wonwoo abrió su boca, soltando gritos de placer al sentirse tan lleno, apretando las sabanas y hundiendo su rostro en las mismas.

Chilló cuando el mayor estrelló su palma en su blanquecina piel, para luego tomar ambas nalgas y masajearlas, mientras bombeaba con fuerza su interior.

Ambos sintieron el orgasmo llegar, por lo que Mingyu volteó a su novio para comenzar a devorar sus labios, comenzando una lucha entre sus lenguas y un hilo de saliva escurría por uno de los costados de Wonwoo. El menor dirigió una mano a su miembro y comenzó a masturbarse, sintiendo que pronto vendría su preciado orgasmo.

Mingyu se corrió dentro de su pequeño, junto a un ronco gemido, mientras Wonwoo en su mano, manchando un poco el pecho de su novio.

Una vez que se compusieron, el peli-negro salió del menor y se acostó a su lado, por lo que Wonu se acurrucó en su pecho y unos brazos le abrazaron con fuerza.

—Te amo, Mingyu.

Mingyu ya estaba durmiéndose, aunque llego a oírle.