—Disculpa, ¿tú eres Jeon Wonwoo?

El castaño miró confundido a aquel peli-naranja, pero igualmente asintió.

—¡Por fin te encuentro!–sonrió, haciendo que sus ojos formaran dos medialunas—. Me dijeron que eres cercano a Kim Mingyu, ¿no es así?

Wonwoo asintió por segunda vez, mientras bebía su leche de fresa.

–¿Quién eres?, ¿un amigo de Gyunnie?

El peli-naranja sonrió.

—Algo así... ¿sabes dond-...?

Sus palabras quedaron atoradas al ver al mayor, lleno de tatuajes y piercings, era muy diferente a lo que recordaba. Éste abrazaba a Wonwoo con fuerza contra su pecho, sin percatarse de que el peli-naranja les miraba con el ceño fruncido. Carraspeó y recién ahí notó su presencia.

—¿Qué haces aquí?–la voz de Mingyu era fría y escupiendo furia, mientras le veía con asco—. Jinyoung...

—Vengo a recuperarte, Mingyu –se le acercó descaradamente, haciendo a un lado sutilmente a Wonwoo, el cual veía la escena un tanto perplejo—. Te extraño, amor.

—¿Qué pasó, Mingyu te echo a patadas?–soltó con rabia, apretando la mandíbula.

Jinyoung negó con una sonrisa, mientras acariciaba el brazo de Mingyu.

—Nada de eso... solo lo nuestro no funcionó, ¿sabes por qué?–le miró a los ojos—. Porque te extraño.

Wonwoo presenciaba la escena confundido, pero igualmente sintió un malestar en su pancita al ver como aquel peli-naranja llamado Jinyoung acariciaba con confianza a su Mingyu... su Mingyunnie.

—Lastima que me importa una mierda–tomó a Wonwoo de la mano, para luego darle la espalda a Jinyoung e irse, dejando al peli-naranja perplejo observando como la pareja se alejaba. Sin embargo, las cosas no terminarían ahí.

Uyyyy, se puso bueno esto