Salgo de la oficina del director satisfecho sobre el tema de los uniformes.

Quedaron increíbles, con el logo de la escuela en el pecho y el número de jugar atrás, solo falta ponerle los nombres de los que se quedarán y podremos irlos mandar a hacer.

-Buenos días -Digo entrando al gimnasio

El grupo B está en línea recta sobre la línea límite de Basketball.

-Se ven bien -Digo con gracia al ver a todos con los colores y ropa que pedí

Evito mirar la cara de molestia de Tyler, solo ver su cara me molesta. Y aunque disfrute de su mal estar, no quiero verle la cara hoy.

-Tomen un balón, empezaremos a practicar.

Tomo el carrito de balones y lo empujó hasta el centro de la cancha, entregándole una a cada uno y luego volviendo hasta el inicio de la fila.

-El que anoté cuatro puntos podrá usarlo como comodín si algún día los castigo.

Después de veinte minutos, solo las chicas han encestado una vez.
-No es algo tan difícil. -Digo cuando noto que les quedan diez minutos de clase y nadie logra los cuatro puntos- Tu, niño. -Le hablo a Tyler

Sale de la línea y se acerca a mi con cara neutra

-Eres el único que no ha estado cerca de encestar ni una vez, incluso tus compañeras lo han logrado. Tú ni fingiendo ser ellas puedes -Río

Frunce el ceño y con cara molesta me quita el balón de más manos

-Diez ha que encesta -Dice Jenna a su compañero, que ríe y acepta

-Veinte a que no -Digo, dirigiéndome a la chica.

Tyler me da la espalda y lanza el balón al aro, donde por un segundo pienso que el balón caerá en el. Pero solo se tambalea por la orilla y luego cae afuera.

Me tapo la boca para contener una risa y luego estiro mi brazo a la rubia, la cual deja dos billetes de a diez en mi mano.

-Suerte a la próxima -Me burló de ambos- Ya pueden irse.