Los días pasaron, y, a insistencia de Duncan, Gwen terminó por aceptar su invitación, ya era Martes, por la tarde Gwen iba a ir con Duncan a la presentación de aquel libro, pero primero, fue a visitar a sus viejos amigos...

Llegó con su automóvil a una estación de servicio, Gwen salió del auto y corrió a abrazar a su vieja amiga de Isla del Drama, tuvieron algunos conflictos (en especial por sus parejas de aquel entonces), hasta se separaron por un tiempo después de Luz, Drama, Acción, ¿ya adivinaron quién es?, bueno..., ¡ahí está Bridgette!

Gwen: ¡Hola Bridgette!

Bridgette: Buen día, Gwen.

Gwen: ¿Cómo estás?

Bridgette: Bien..., como siempre, aquí en el trabajo.

Gwen: Lo cargas lleno, por favor.

Bridgette: Bien, pero ¿tienes dinero para pagarlo?

Gwen (nerviosa): Todavía no lo tengo, la próxima te pagaré ¡por favor!

Bridgette: ¿Cómo la última vez...? (Gwen se quedó en silencio con una mirada de súplica, hasta que Bridgette dijo) Uffff, está bien.

Gwen: Gracias, enserio...

Bridgette le cargó la gasolina a su auto, ambas se despidieron con un abrazo, y Gwen continuó con su camino, esta vez se dirigió a una casa modesta y amplia, al entrar le habló al hombre que estaba bebiendo en el pequeño bar que tenía la casa:

Gwen: Buen día, Al. ¿Puedes darme la bebida de siempre? Por favor.

(¿Ya adivinaron quién es?, bueno, aquí la respuesta)

Alejandro: ¡Si me hubieses llamado Alejandro te lo daría con gusto! Como sea..., por fin has llegado.

Gwen: Gracias, Al.

Alejandro: De nada.

Gwen comienza a subir las escaleras cuando se encuentra con otro chico, un poco más joven que ella, Gwen lo quería mucho, como un hermano menor, un molesto hermano menor, pero para él, Gwen era su amor inalcanzable ¿Ya saben quién es?

Cody: ¡Gwen!

Gwen: Oh vaya, ¡Cody!, ¿cómo estás?

Cody: Eh, bien... ¿no trajiste caramelos para mí?

Gwen: Emmm no, te lo traigo para la próxima.

Cody: Así no se vale... Siempre dices lo mismo.

Gwen le dio un besó en la mejilla, le agarró de las manos y le dijo:

Gwen: Te lo prometo.

Cody: Está bien, igual, me siento más cómodo contigo.

Gwen le sonrió, subió al segundo piso, encontró a otra vieja amiga, de hecho, fue la primera amiga que tuvo en la Isla, ambas tenían algo en común; odiaban a Heather. (Creo que ya fui muy obvio en esta parte, así que ya saben quién es)

Gwen: Buen día, Leshawna.

Leshawna (con el teléfono en mano): Espera un momento chica, estoy en algo muy importante ahora. No puedo entender cómo otros venden productos fácilmente sin los comerciales.

Después de un momento de silencio, Leshawna guardó su teléfono y le dijo a Gwen:

Leshawna: ¿Cómo estás? ¿Cómo va el trabajo?

Gwen: Bien, supongo..., los últimos detergentes los vendí hace un mes.

Leshawna: Me refería al otro trabajo.

Gwen: ¡Ah! Eso..., pues, no he publicado nada en mi blog últimamente.

Leshawna: Siempre lo dejas al último, ¿verdad?

Gwen: Cierto...

Leshawna: Sigo sin entender porqué estás estudiando en esa universidad de bellas artes, si tenías talento desde que era una niña.

Gwen: Si..., he decidido cambiar de universidad. Quiero entrar a psicología.

Alejandro: Aquí está el café.

Leshawna: Está bien, Alejandro, pero sabes cómo me gusta a mí, ¿no?

Gwen: Emmm ¡Leshawna! Estoy hablando contigo...

Leshawna: ¿Eh? Ah, perdona niña, estoy muy nerviosa últimamente ¿Qué pasó?

Gwen: Me volví a ver con él...

Leshawna: ¿Con quién? ¿No será alguien que toca un instrumento? ¿Otro gótico, otro músico?

Gwen: Un punk.

Leshawna: ¿No será un Duncan acaso?

Gwen: No, bueno si, pero un Duncan más tierno. Vive enfrente de mi casa.

Leshawna: La última vez que me dijiste eso terminaste perdiendo 300 dólares en esa cita.

Gwen: Muy graciosa...

Bridgette (entró de sorpresa): También hoy, Gwen debe unos 50 dólares a la Estación de Servicio.

Gwen: Ehmmmm

Leshawna: Tranquila niña, seguro lo pagará a la próxima...

Bridgette: Eso espero...

Leshawna: Gwen ¿Te quedas con nosotros para la cena?

Gwen: Perdón, pero ya tenía una cita... Ya debo irme ¡Adiós a todos!

Alejandro: Bien, vete si quieres.

Cody: Espero que esta vez cumplas tu promesa Gwen.

Gwen: ¡Claro! Lo tendré en mente.

Esa fría tarde de otoño, Gwen fue con Duncan a aquel museo, a medida que avanzaban el profesor explicaba al grupo un poco de historia, por cierto, muy aburrida..., Duncan se alejó del grupo por un momento, Gwen un poco extrañada fue a buscarlo, llegó a un bello salón con cuadros barrocos bordeados con exquisitos marcos de oro, Reyes, nobles y burgueses miraban fijamente a Gwen con un mirada solemne, cuando de la nada, Duncan la abrazó por detrás, obviamente, Gwen se asustó hasta que le dijo:

Duncan: Shhhh, no tengas miedo, soy yo.

Gwen: Ya me tenías preocupada.

Duncan: ¿Ya viste aquel cuadro?

Gwen: ¿Te refieres a ese arte erótico? Si..., vaya..., las cosas que hacen entre marido y mujer.

Duncan: O tal vez amantes, nadie lo sabe...

Los bellos cuadros fueron testigos de aquel profundo beso que le dio Duncan a Gwen en aquel momento...

Gwen; ¡Espera! ¿Si alguien nos ve?

Duncan: Puede ser..., eso es lo bello del barroco; la sorpresa y el suspenso...

Gwen: Me encanta este tipo de arte.

Duncan: ¿Enserio? Pensaba que te gustaba más el internet, la publicidad, la moda...

Gwen: Tu sabes que siempre me gustó el arte...

Duncan: Y entonces, ¿qué publicas en tu blog?

Gwen: No lo sé..., pienso muchas cosas, por eso lo escribo y lo publico en mis artículos de la web.

Duncan: Esta sí que es una noticia, ven conmigo.

Ambos salieron del museo, llegaron a un canal de televisión, y Duncan de inmediato entró a buscar a uno de sus grandes amigos; un chico despreocupado, con los ojos azules como el cielo y la mente libre y lista para una buena fiesta, ¿ya lo reconocieron?

Duncan: Geoff, ¿tienes un momento?

Geoff: Si, dime ¿Qué hay de nuevo, viejo?

Duncan: ¿Te acuerdas de Gwen?

Geoff: ¡Pero claro! (Tomó de la mano a Gwen y le dijo) Mucho placer, señorita...

Gwen: El placer es todo mío.

Duncan: Mira, ella es una chica muy especial, deberías ver todo lo que publica en...

Geoff: ¿En su blog? Pero claro que ya lo vi, Gwen, en verdad tienes mucho talento para escribir.

Duncan: ¡Sí que lo tiene! ¿Puedes hacer algo para que tenga más fama en la web?

Geoff: Bien, lo intentaré. (Miró su reloj y dijo) Pero vaya que tarde es, debo volver al programa, ¡nos vemos! (Geoff se fue corriendo de vuelta a su programa de Tv)

Duncan: Gracias, Geoff, ¡adiós!  Gwen, no lo dudes, ese chico de la Tv te puede ayudar mucho, 

Gwen: Eso espero..., pero, ¿ahora qué hacemos?

Duncan: Quería cenar contigo en mi casa, ¿qué me dices? ¿Vamos?

Gwen: ¡Claro!

Aquella noche era tan bella, el azul del cielo brillaba junto con las estrellas más hermosas de las constelaciones, los enamorados cenaron a gusto, y luego, una cosa llevó a la otra, y pasó lo que debía pasar...

Gwen y Duncan, llenos de pasión y deseo, hicieron el acto del amor puro, la noche perfecta, el lugar perfecto, el tiempo era perfecto para los grandes amantes..., sin duda, una noche inolvidable...

Bien, dejemos que se diviertan por ahora... ¿Cómo será el futuro de Gwen y Duncan? Y a todo esto, ¿Qué pasará con Trent? ¿Volverá a surgir la enemistad entre él y Duncan? ¿Quién será el ganador del corazón de la gótica? Todo esto en el próximo capítulo de Gwen Life of Hell.