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Capítulo 23

Con cada paso que se acercaba a la puerta, sentía un dolor agonizante en el estómago, con sus manos intentó abrazarse a sí misma para contener el dolor. Con las pocas fuerzas que tenía, agarró el picaporte, la puerta rechinó por la humedad, ella, con sorpresa dijo:

Gwen: ¡¿Tú?!

Leshawna: Si soy yo... No respondes al teléfono estaba preocupada por t...

Lesahwna notó las marcas de golpes que tenía en su rostro y el dolor en el estómago que ella trataba de disimular.

Gwen (deprimida): H...Hola.

Leshawna: ¡¿Pero qué demonios te pasó?!

Gwen se apretó el vientre con más fuerza, el dolor la obligó a bajar la cabeza.

Gwen: P...perdón por no verte en t...tanto tiempo.

Leshawna: ¡¿Quién lo hizo?!

Gwen no responde.

Leshawna: Como sea, me lo dirás camino al hospital ¡Andando!

Gwen (nerviosa): ¡No! ... Leshawna, espera... no lo necesito yo estoy b...bien. 

Leshwana: ¡¿De qué estás hablando?! ¡Estás herida!

Gwen (con lágrimas en los ojos): No, t...te lo ruego, d..deja que me quede aquí.

Leshawna quedó pensativa por unos segundos, vio las lágrimas que brotaban de sus ojos, entonces dijo:

Leshawna: Bien... pero al menos dime qué te sucedió.

Gwen suspiró por un momento, comenzó a contar todo lo que había pasado aquella trágica noche, pasaron unos minutos, Leshawna quedó en silencio, Gwen intentó contar lo sucedido con Courtney, pero ella no creía ni una sola palabra, simplemente se levantó del sofá y se dirigió a la ventana que daba a la calle, miró por un instante la mansión de Duncan que estaba a unos pocos pasos, una sensación de peligro invadió su ser y súbitamente dijo:

Leshawna: ¡Ven a mi casa! ¡No es seguro que estés aquí!

Gwen no responde.

Leshawna: Duncan puede aparecer en cualquier momento, ¡y estarás acabada! 

Gwen (baja la mirada): Estoy bien aquí, Leshawna, además Zoey está conmigo, no debes preocuparte.

Leshawna: ¡Lo sabía! ¡Sabía que había algo mal con ustedes dos!

Gwen: Sólo fue un alboroto ¡Él no es un monstruo!

Leshawna: ¿Ah no? ¡¿Alguien que te maltrate no lo es?!

Gwen no responde.

Leshawna: Es un delincuente!!!!!!!!

Gwen (con lágrimas en los ojos): ¡Todo fue mi culpa! ¡¿Está bien?!

Leshawna: ¡¿Qué significa eso?!

Gwen: ¡Sí! Yo lo provoqué... le mentí, y el..., no lo soporta.

Leshawna: ¡¿Y por qué no te defendiste?! 

Gwen: (Comienza a llorar) ¡N...no pude!

Leshawna: ¡Oh eso si que no! ¡Ese delincuente ha pasado mis límites! ¡Ahora mismo voy a la policía!

Gwen: ¡No! ¡Te dije que no!

Leshawna quedó perpleja por sus palabras.

Gwen: ¡Yo sé lo que estoy haciendo!

El silencio perturba sus almas por algunos minutos.

Leshawna: No me digas que lo sigues amando... ¡después de lo que te hizo!

Gwen: Ya no quiero hablar de esto... Basta... por favor.

Leshawna: ¡¿Y qué se supone que debo hacer?! ¡¿Irme a casa y dejarte sola aquí?!

Gwen: No puede suceder nada malo. Tranquila.

Leshawna: ¡¿Pero qué dices?! ¡Su casa está frente tuyo!

Gwen no responde.

Leshawna: Ven a mi casa... ¡te lo ruego!

Gwen: ¡Yo no quiero ser presa del pánico!

Leshawna: ¡Eres tan testaruda! Al hospital...No, a la policía No, a mi casa No, ¿y quién es ese que se preocupa por ti? ¡Santo cielo!

Gwen: Yo puedo cuidarme sola... aquí tengo todo lo que necesito.

Leshawna: Yo no te dejaré sola.

Gwen (cierra los ojos): Todo estará bien, confía en mí.

Leshawna se acercó a ella, lo único que podía hacer por ahora era darle un dulce beso en la frente, ya no podía ocultar las amargas lágrimas que salían de sus ojos, pero, a pesar que estaba destrozada por dentro, con voz fuerte y autoritaria le dijo:

Leshawna: Recuerda siempre tener el celular prendido... quiero saber como estás. te llamaré más tarde.

Gwen (con tristeza): Está bien...

La hipopera cruzó y cerró la puerto con delicadeza, sus ojos estaban rojos por la amargura, no pudo contener más sus lágrimas y salió corriendo del edificio ocultándose el rostro con sus manos.

Gwen pensaba en Courtney, los recuerdos la perturbaron, corrió a su habitación, agarró una almohada y lloró  a cántaros sin consuelo alguno.

Gwen: C..Courtney... ¡por mi culpa ya no existes más! ¿por qué...? ¿por qué? ¡¿ahora que haré sin ti?!

Una voz: Yo tengo todas la respuestas que estás buscando, Gwen.

Gwen (asustada): ¡¿Qué?!

Una silueta familiar comenzó a hacerse visible ante sus ojos.

Heather: Buen día, Gwen.

Gwen: ¡¿Y tú quién eres?! ¡¿Qué haces aquí?!

Heather: Tranquila... vaya, ¿no me recuerdas? ¡Cielos! Veo que el tiempo te ha hecho envejecer, roba-novios.

Gwen: Heather...

Heather: Al menos pude refrescarte un poco la memoria, ¿y sabes algo? La muerte es mejor que estar a tu lado. Como sea... vengo de parte de Courtney, como buena amiga que soy.

Gwen: ¡¿Courtney?! ¡¿Cómo está?! ¡¿Dónde está?! Pensaba que estaba...

Heather: Si, ella absorbió la mitad de tu dolor al costo de casi ser pulverizada, por eso ahora estás respirando normalmente, si lo notaste.

Gwen: ¡¿Y tú cómo sabes eso?!

Heather (sonríe): Déjame explicarte, nosotros, es decir, los muertos, podemos ver todo lo que sucede en la tierra.

Gwen: Pero... Courtney...

Heather: Sabes... no debería decirte nada, ya que si no me equivoco, por culpa tuya casi desaparece en la nada.

Gwen: ¡Ya lo sé! ¿Pero cómo está ella?

Heather (la ignora): Aparte que por culpa tuya ella está exiliada de nuestro mundo. Como sea... Ahora ella ha perdido los sentidos, y para que recupere sus energías, nosotros los fantasmas tenemos la gravedad de nuestro mundo.

Gwen: ¡No me interesa! ¡Quiero saber como está Courtney! ¡Ahora!

Heather: Una persona como tú no merece volver a verla, así que no es asunto tuyo.

Gwen la sujetó con fuerza de su muñeca, Heather comenzó a asustarse.

Gwen: Por última vez, ¡¿qué le pasó a Coiurtney?!

Heather se liberó de la mano de Gwen, mientras decía:

Heather: Está bien... te contaré... ¡pero ten por seguro que no lo hago por ti!

Heather comenzó a contarle todo.

Heather: Bien... como decía, tu dolor no desapareció del todo, pero puedes hablar y respirar perfectamente.

Gwen: Si... entendí que mi dolor era demasiado fuerte para el alma de Courtney.

Heather: En realidad te habrías curado al 100% si hubiese acabado su objetivo y hubiera terminado pulverizada. Pero, para su suerte, yo y otra fantasma la devolvimos a nuestro mundo, a un lugar seguro y secreto, ¿sabes lo que significa?

Gwen: Si... quiere decir que ustedes también se están arriesgando al exilio como Courtney. Ella me contó todo lo que sucede en su mundo y sus reglas. Pero yo quiero saber cómo está ella, por favor. Quiero saberlo.

Heather: Como ya te dije, ella absorbió tu dolor y perdió los sentidos, pero no debes preocuparte, ella está en buenas manos. Con un poco de paciencia se recuperará y volverá sana y salva.

Gwen (con lágrimas en los ojos): ¡Gracias! Pensé que la había perdido para siempre.

Heather miró por un momento los ojos de la gótica.

Heather (pensamientos): Vaya... parece que verdaderamente quiere a Courtney.

Gwen: Dime... ¿cuándo la volveré a ver?

Heather: En más de un mes, mis disculpas.

Gwen: ¿Por qué más de un mes?

Heather (sonríe con sinceridad): Tranquila... ya está fuera de peligro, eso es lo importante. Todos nosotros estaremos con ella.

Gwen: ¿Entonces estás haciendo esto por mi?

Heather: Correción, estoy haciendo esto por Courtney, no por ti.

Gwen (baja la mirada): Bien... eso significa que también puedes ser exiliada.

Heather: Exactamente, si es que no nos hacemos atrapar en un mes, Courtney se recuperará y volverá a tu lado.

Gwen: ¿De verdad?

Heather: ¿Acaso dudas de mi palabra?

Gwen no responde.

Heather: Pero... en caso contrario, si nos descubren, será nuestro final, incluido el de Courtney. Y nosotros no podremos ayudarla.

Gwen: Siempre quédense junto a ella, y pídanle mis disculpas cuando se recupere. En serio, no sabes cuanto lo siento... (Brotan lágrimas de sus ojos)

Heather: Pero recuerda, no estamos haciendo esto por ti, lo estamos haciendo por Courtney.

Gwen: Bien, gracias, en serio, en especial a ti, gracias por decírmelo.

Heather: Oh no, no sonrías, que esto no ha terminado, y además, me hacer dar nauseas.

Gwen sonríe en silencio.

Heather está por irse, pero recuerda algo.

Heather: Ah... y una cosa más.

Gwen: ¿Qué?

Heather: Yo denunciaría a Duncan si estuviera en tu lugar.

Gwen queda en silencio, con la mirada baja.

Heather: Adios.

Heather se desvaneció en el aire mientras miraba con reproche a su peor enemiga, Gwen se había quedado sola de nuevo... Su mente la empujaba a denunciarlo, pero su corazón se negaba sin objeción alguna. Mientras avanzaba a la habitación notó que su dolor en el estómago había disminuido, entonces recordó que había sujetado a Heather por un momento, ¿será que ella había absorbido su dolor? Se preguntó por un tiempo hasta que quedó inconsciente por el sueño que le aquejaba.














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