Aquel cementerio, cubierto con la espesa bruma, negra como el carbón y confusa con aquella maligna presencia, reflectaba las mismísimas sendas de la muerte en el camino despiadado de la vida, Izzy, con el corazón helado y la mente aturdida, estaba en frente de aquella personalidad maligna, las cejas fruncidas y los labios mordidos intentaban reflejar una ira falsa, intentando esconder el pánico que tenían sus ojos de esmeralda.

Mal: Tranquila. Esto va a ser rápido.

Izzy le miraba con incredulidad, buscando alguna expresión sarcástica que había aprendido de Noah. Mal, encendió sus ojos cual fiero fuego del infierno, diciendo.

Mal: Prepárate, porque tú... ¡servirás a mi rey!

Izzy: Bien..., pues, nunca me tomarás viva.... (se acuerda que está muerta), digo..., ¡no te la dejaré tan fácil!

Mal: Sabes..., no necesito esta hoz para llevarte conmigo, pero mis manos quieren jugar un momento... (Llamas ardientes de un muerto color verde comienzan a desprenderse de su ser) 

Izzy: ¡¿Qué demonios es eso?!

Mal: Es hora de un juego, como el reto de Chris, en el cuadrilátero ¿lo recuerdas?

El horrendo golpe de unos puños de acero impactaba contra el débil ser de Izzy, después de unos segundos, ella había caído al suelo malherida.

Mal (sonríe): Débil...

Izzy lo miró con estupefacción, y con las últimas fuerzas que le quedaban, se pudo d pie, se limpió las heridas con una mirada de desprecio y odio.

Mal: Bien, es suficiente, ahora, ¡prepárate!

Mal recogió del piso aquella hoz que intentaba asemejarlo con la muerte, la puso en alto y con las dos manos, se preparaba para acabar con el alma de Izzy.

Un estruendo clamor rompió aquella calma moribunda, y las oscuras neblinas huyeron despavoridas ante las candentes llamas azules que habían hecho del cementerio su hogar. Blaineley había llegado...

Blaineley: La distracción que tenías planeada fue una completa estupidez. Y bien, veo que sigues intentando tomar lo que no es tuyo. Siempre intentando imitar a la muerte... para robar las almas y sumirlas en la oscuridad.

Un desgarrador silencio se impuso al gris ambiente en el que estaban, luego de unos segundos de inquietante calma, ella dijo:

Blaineley: Mal. ¡Este no es tu territorio!

Mal: Yo puedo ser cualquier cosa... puedo ser este cementerio, puedo ser el tiempo, puedo ser todo lo que sobrepasa los límites de la realidad. Yo estoy dentro de cada ser en el mundo, yo soy la corrupción de las almas, y cuando llega su momento... ¡yo me los llevo!

Blaineley: Recuerda ¡la vida siempre vencerá a la muerte!

Mal: Sólo en 1% gana la vida, y el 99% siempre gana la muerte, o sino, ¿por qué estarían ustedes aquí?

Blaineley: ¡Abandona este lugar! ¡Ahora!

Mal: ¿No recuerdas a la muerte? Cuando te llevó consigo de ese mundo.

Blaineley: ¡Izzy! Escóndete en un lugar seguro ¡ahora!

Izzy: ¡Lo que usted diga!

Una explosión devastó aquel reclusorio de muerte, ambos estaban frente a frente, intentando usar el máximo poder que tenían. Blaineley irradió una energía destructiva que hirió a Mal.

Blaineley: ¿Ya aprendiste algo? 

Mal: ¡Tu tiempo ha pasado! 

El alma perdida encendió sus ojos cual fervientes antorchas, alzó las manos, formando una esfera de fuego, de inmediato, la lanzó a su contrincante. Blaineley cayó al piso, pero pudo levantarse de inmediato.

Mal: Eres débil, Blaineley.

Blaineley: Haría todo por protegerlos de tu presencia.

Mal (intenta lanzar otra carga de fuego): Creo que esto te hará cambiar de opinión.

Los rayos de muerte evadieron a Blaineley, bloqueadas por un escudo invisible que la protegía.

Blaineley: ¿Ya acabaste...? ¡Bien! Ahora es mi turno.

Ella, lanzó otra carga de energía, que golpeó a Mal y anuló todos los poderes que poseía su espíritu maligno. Izzy, al verlo en el piso, salió de su escondite, escondiéndose a las espaldas de Blaineley.

Mal (con una sonrisa): Nunca podrás matarme, ¡anciana!

Blaineley: Hay peores destinos que la muerte.

Mal: Te mataré Blaineley, tarde o temprano, deberás morir. Al igual que tú, Izzy.

Izzy (frunce el ceño): Yo no te tengo miedo.

Mal: Bien. Eso lo veremos en el futuro... (sonríe), pero en un futuro muy diferente.

Mal se desvaneció con los restos de la negra neblina. Blaineley, con un solo toque, cura a izzy de inmediato.

Blaineley: ¿Estás bien?

Izzy: ¡¿Qué si estoy bien?! ¡Wow! ¡Nunca estuve mejor en mi vida!

Blaineley: Bien, debí suponerlo desde el principio (voltea los ojos en signo de sarcasmo),  volvamos con los otros.

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Gwen: Bien, entonces déjame entender, ¿ustedes también pueden morir?

Courtney: Es correcto, cada 50 años, la muerte nos persigue, pero Blaineley siempre nos protegerá.

Gwen: ¿Realmente Blaineley tiene tanto poder?

Courtney: Deja que te explique mejor... Blaineley vio la mismísima cara de la muerte, y a partir de entonces dejó de ser un fantasma en realidad. 

Gwen: Y entonces ¿qué demonios es ahora?

Courtney: Se le dio la misión de ser una "guardiana", impide que la muerte y otros seres malignos tomen nuestras almas. Ha combatido muchas veces contra ellos. Espíritus malignos y almas perdidas intentan capturar más víctimas en un intento desesperado de salvarse de la purga, por eso, cuando alguien muere, intentan capturar su alma antes que llegue a nuestro mundo. Tú no sabes lo que en realidad sucede después de la muerte. Si ellos te toman, tú simplemente desapareces de la faz de la tierra.

Gwen: ¿En qué sentido "desapareces"?

Courtney: Bien..., por ejemplo, intentas descargar un archivo a la computadora..., pero luego cancelas la descarga poniendo el documento en la recicladora, y después eliminas todo lo que está allí. ¿Entendiste?

Gwen: Está bien..., entonces, quieres decir que si ellos te toman, no existiremos más... ni siquiera como un alma.

Courtney: ¡Exactamente!

Gwen: Bien..., supongo que ahora tengo miedo de morir.

Courtney: No te preocupes.... Blaineley siempre sabrá cómo protegerte. Como yo, siempre estaré a tu lado para protegerte.

Courtney la sorprende con un abrazo, Gwen se siente un poco incómoda.

Courtney: Y recuerda, cumpliré nuestra promesa, cueste lo que cueste, sin importar el tiempo.

Gwen: Emmmmmm ¿Courtney?

Courtney: ¿Si?

Gwen: Estás fría, creo que me estás helando la sangre....

Courtney (sonríe): Lo siento... (continúa abrazándola)

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Al verlas llegar, Owen se abre paso como puede, abraza y besa a Izzy mientras dice:

Owen: IZZY!!!! ¡¿Dónde estábas?! ¡Gracias al cielo estás bien!

Izzy: ¡Vamos Owen! No exageres.

Tyler: ¡Al fin la muerte perdió otra vez!

Noah: Tienes poco que festejar cerebrito, tarde o temprano volverá, y es más que seguro que tomará a uno de nosotros.

Owen (molesto): ¡Noah! Un poco de optimismo ¡rayos!

Tyler: Evita ser de mal agüero, gracias.

Izzy: Como sea...  Lo importante es que estamos todos juntos aquí ¿no? En paz y tranquilos por otros 50 años.

Heather, en un gesto de desagrado, intentó alejarse del lugar. Una voz la detiene:

Sierra: ¡Hey! ¿No estás feliz? ¡Izzy está a salvo!

Heather: ¡Cómo no podría estarlo! Es más... ¡quiero darle un regalo!

Sierra: ¡Perfecto! Entonces vamos con ella ahora mismo (la toma de la mano y la arrastra hasta Izzy)

Heather (pensamientos): ¿Qué acaso no entienden el sarcasmo?

Sierra: Bien, ¡dícelo!

Heather: Ufff, está bien, Izzy...

Izzy: Dime... ¡soy toda oídos!

Heather: Lo que hiciste fue muy admirable, y como recompensa... eres libre de ver con nosotras la esfera de vida de Gwen.

Izzy (sorprendida): ¡No lo creo! ¡¿De verdad?! ¡¿Los demás pueden venir con nosotros?!

Heather hace un gesto de desagrado, mientras los demás la miran con desprecio.

Heather (suspira): ...Bien... (cruza los brazos con arrogancia) Acomódense donde puedan, esto no es un cine cinco estrellas.

Izzy: ¡Así me gusta! ¡Vengan! ¡Que comience el espectáculo!

Sierra (pensamientos): ¡Bien hecho, Heather! (sonríe)

Todos se reúnen para espiar la vida privada de Gwen a través de esa misteriosa esfera..., otra vez, estarán en paz por al menos 50 años, o al menos, eso creen ellos ;-)

Parece que Mal está vivo en el mundo de los muertos... y no creo que se quede con los brazos cruzados... Si quieren saber lo que sigue, esperen al próximo capítulo de Gwen Life of Hell.