Era viernes por la noche, Jimin había decidido pasar la noche en casa de su amigo Hoseok, también invitaron a Taehyung para poder relajarse un poco después de una semana de estrés escolar, sus padres estaban de acuerdo pues la casa de Hoseok solo quedaba a unas cuadras de las suya y aunque el tiempo era terrible sabía que estaría seguro.

—Yo digo que lo mandes a volar, después de todo, tu no estás para estás sufriendo, él se lo pierde.

Hoseok daba consejos de vida mientras comía de una bolsa de cheetos enorme viendo todos la televisión de manera despreocupada.

—Se que estar tras de él está mal, pero en verdad  me gusta.

—A media escuela le gusta Jungkook y también media escuela ya se lo ha tirado —Taehyung soltó sin pensarlo, aunque Jimin sabía que lo que dijo el castaño es verdad, aún así a él le gustaba —mejor no hablemos de algo divertido.

Taehyung de levanta y corre hacia su mochila, sacando una enorme tabla ouija.

—Por dios guarda eso Kim —Hoseok se metió casi detrás del sofá —sabes que odio esos rituales.

—Debes de estar muy aburrido como para asustar a Hobi así —Jimin suspiro sentándose derecho.

—Como son aguafiestas, el clima es perfecto para esto, además si Hobi tiene miedo lo consuelo más tarde.

El castaño se sentó en el suelo frente a la mesa de centro colocando la tabla.

—Si solo querías follar con Hobi para que me invitas —Jimin bebio de su vaso de refresco pero no se acerco a la mesa —no estoy de humor para esto.

Hobi se acercó hasta el castaño temblando pero con curiosidad, Taehyung le hizo señas para que pusiera las manos en el puntero de madera, este lo hizo aun con la duda.

—Oh espíritus del mas allá, ¿Nuestro amigo Jimin podrá tener una polla discente alguna vez?

—Tae.

Hoseok le dio un empujoncito, mientras a Jimin no le parecía divertido que jugaran con eso.

—Si crees que no, mándale a alguien para que sepa que es gozar y se olvide del cabeza hueca de Jungkook.

—Eres un imbécil Taehyung, esto no concede deseos, es solo un pedazo de madera, me largo ustedes están insoportables.

Jimin se levantó molesto del sofá y se fue directo a la puerta, sus amigos trataron de rogarle para que se quedara, que ignoraron cuando la tabla de la mesa se movió hasta formar las palabras “Esta bien”

Al joven no le importo la lluvia, después de todo no estaba lejos de su casa, un poco de agua no le haría daño después de todo, camino con los brazos cruzados hasta su casa, entro casi corriendo pues su ropa estaba demasiado empapada y empezaba a temblar por el frio, lo extraño es que solo las luces del pasillo estaban encendidas, esperaba ver a sus padres en el comedor o en la sala, es raro que se fueran a la cama tan temprano.

—¡Mamá! ¡Papá! Llegue antes.

—No están en casa.

Un relámpago ilumino el cielo junto con un enorme trueno, el cual hizo que las luces se apagaran, en la sala solo logro ver un par de ojos amarillos y una sombra negra de donde provenía la voz que le contesto.

—¿Qui..Qui..Quien eres tu?

Jimin tomo una de las sombrillas cercanas a la puerta para apuntarla al ser desconocido, no sabia si temblaba por el frio o el miedo.

—Que grosería —con la poca luz que había en la casa logro mirar que la figura se levantó causando más terror al ver su enorme tamaño —tus amigos me llamaron para ti —cada vez se acercaba más a Jimin este retrocedía hasta llegar a topar la espalda contra la pared —Veamos, ellos quieren que te haga olvidar a un tal Jeon Jungkook.

—Si..si..si esto es una broma de parte de esos dos idiotas, ya te puedes ir, lograste asustarme, vete por favor.

—Mi intención no es asustarte Jimin, es poseerte.

El frio se hacía presente cada vez más pero seguía con el paraguas marcando la distancia entre el ser y él, la luz regreso a su casa, iluminando el pasillo y mostrando al ser frente a él, un hombre moreno bastante alto de tez morena y piel tersa, su mirada de dragón adornada por el color amarillo intenso, labios delgados pero tentadores, vestía con un pantalón negro, una camisa del mismo color y una gabardina gris, expedía un aroma como el fuego de la chimenea, se sentía cálido y su cuerpo frio quería sentir más cerca el calor que despedía.

Lo que lo desarmo un poco fue una sonrisa que se dibujó en su rostro marcada por dos hoyuelos en ambas mejillas, Jimin tuvo que parpadear un par de veces, el ser era muy sexy y su gruesa voz no ayudaba nada a la cordura del joven.

—Eres muy atractivo Jimin, no me será difícil cumplir con mi función aquí.

—No, no te me acerques —Jimin seguía analizando al hombre miro una especie de ornamentas en su cabeza —vete.

—No puedo irme hasta que cumpla con para lo que fui llamado —tomo la punta del paraguas bajándolo de manera lenta —relájate.

—Ya se, es que estoy soñando, me quede dormido en casa de Hobi, no existe otra explicación.

El paraguas cayó al piso, y lo siguiente que sintió fueron unos cálidos labios contra los suyos, su cuerpo dejo de temblar por el frío, la sensacion del aliento era embriagante.

—¿Te parece suficientemente real?

Se tocó los labios y volvió a encogerse por el miedo.

—Ellos, ellos son unos idiotas, solo estaban jugando, yo, yo no necesito olvidar a Jungkook.

—Yo no vine en vano — le toma la mano y le besa la muñeca — para irme necesito que me ayudes.

Las piernas de Jimin no le respondían ahora, estaba mal, pero empezaba a sentir curiosidad.

—¿Te irás solo si accedo?

—Todo depende de ti.

¿Quién lo sabría?

Nadie.

Movió su cabeza en afirmación, a lo que el moreno se hinco con una rodilla para tomar la mano de Jimin.

—Mi nombre es Kim Namjoon, y como el demonio de la lujuria haré que sientas tanto placer hasta enloquecer.

Los besos acompañados por la lluvia era lo único que se escuchaba por la sala, el demonio Namjoon no dejaba de maltratar los gruesos labios del menor mientras lo desnudaba, Jimin no entendía como es que todo se sentía tan bien, al punto de que no importaba que estuvieran en su casa, el paradero de sus padres era incierto, y solo pensaba en la lengua viperina del moreno explorando su interior de la boca.

Su ropa mojada fue retirada con salvajismo siendo rasgada mientras los gruñidos de la garganta del moreno eran cada vez más graves.

—Sentado pequeño.

Ya desnudo obedeció, sentándose haciendo que ya su dura erección de recostara sobre su abdomen, a el moreno le brillaron más los ojos al ver el nivel cuerpo tan delicado y perfecto en ese sofá, sus labios estaban rojo y más hinchados, su mirada perdida un poco por la abrumadora experiencia que recién iniciaba, Jimin era hermoso como una obra de arte.

—En verdad voy a devorarte Jimin.

Se fue desnudando ante la atenta mirada del chico, cuando la camisa negra cayó al suelo, los marcados y morenos pectorales del demonio hizo que su miembro diera un pequeño brinco, los brazos al doblarse dejaban ver el conejo de cada brazo y las venas en estos, juraba que podía correrse con solo esa imagen. Pero todo solo mejoraba al quitarse los pantalones con la ropa interior.

El miembro era irreal, imponente, de un grosor que jamás había visto y una longitud que sabría que no le cabría la mitad.

Trago en seco, pero al mismo tiempo se mordió los labios.

—¿Crees que soportes? Estoy ansioso por enterrarme en ese blanco culo tuyo.

Se agachó para tomar las muslos de Jimin abriéndolos de par en par dejando expuesta la entrada rosada, la primer lamida llegó sin  aviso, sacando un gemido agudo y armonioso, sus uñas casi rasgaban las almohadas del sofá,  la lengua del demonio era tan larga que cuando se metió en su interior el placer que le causó causo un tirón intenso en la entrepierna.

—¡mierda!

Su semen salió expulsado al correrse mientras seguía siendo follado por la lengua, se esparció por todo su abdomen, Namjoon salió de entre sus piernas cuando sintió que sus espasmos se detuvieron, tomo entre sus dedos restos del líquido aún algo tibio del abdomen de Jimin.

—Debemos limpiarte niño sucio.

Tomo un poco más de semen entre sus dedos para frotarlos y usarlos como un tipo de lubricante para la entrada un poco dilatada de Jimin, metio dos dedos simultáneamente lamió los restos del abdomen haciendo movimientos lentos con la lengua hasta llegar a sus pezones los cuales mordisqueo un poco antes de meterlos en su boca y succionar sin dejar de penetrarlo con sus dígitos.

—Ya llegué a mi límite lindura.

Mordió el blanco cuello haciendo más bruscos los movimientos con sus dedos, el miembro de Jimin había cobrado vida de nuevo así que el moreno aprovecho para masturbarlo  explotando la sensibilidad del chico.

—Mmmmh…señor…por favor… hágalo, quiero sentirlo.

—¿Tan ansioso? —una sonrisa de lado— di “Follame Amo Kim.

—Folla…folleme amo Kim.

Escupió en la entrada al sacar los dedos, para aprovechar la dilatación y meter la punta de su miembro de golpe.

Se sujeto de los hombros encogiéndose ante la intrusión, Namjoon puso los muslos de Jimin sobre sus hombros apoyando sus brazos sobre el respaldo del sofá, se mordió el labio inferior al empujar un poco más dentro del joven, la posición le daba toda la facilidad para meterse lo más profundo posible, pero apenas tocó la próstata el pequeño volvió a correrse en un orgasmo ruidoso.

—¡Carajo! Sien…siento..—jadeo —siento que me voy a desmayar.

—Aun no bonito que tú señor aún no termina, rellenare tu lindo culo el cual me está apretando tanto que siento que no durare mucho si me muevo mientras de contraes.

Se acercó para besarlo y distraerlo de lo sensible que estaba, Jimin jamás se había corrido más de una vez estando con Jungkook y el demonio ya lo había hecho tocar los límites del placer dos veces con acciones que parecen muy simples, no sabía que podía seguir queriendo más hasta que Namjoon inicio las embestidas.

El estruendo que generaba el golpeteo de los movimientos de cadera del moreno se acompañaba nada más por gemidos suaves que la garganta de Jimin emitía, se aferro de la nuca de Namjoon mirando con sorpresa y exitacion cómo en su vientre se podía notar el tamaño exagerado del enorme miembro.

Los ojos amarillos del demonio empezaron a oscurecerse cuando los movimientos ya eran más rápidos dónde la dilatación de Jimin por fin aceptaba el grosor y longitud, con facilidad lo cargo sosteniendo de las nalgas para ponerse de pie y subirlo y bajarlo el mismo sobre su polla caliente.

El sentirse dominado de esa manera era algo nuevo para Jimin, quizo hacerle sentir lo bien que disfrutaba al besarlo, Namjoon hizo más lentos los movimientos de cadera del chico al ver que este se tensaba para un nuevo orgasmo el cual tomo por sorpresa a ambos puesto que el miembro de Jimin no sé había endurecido del todo pero eso no evito que volviera a manchar de semen ambos abdomen.

Namjoon aprovecho para descargarse también, llenando de su líquido caliente el interior del pequeño, de fue a sentar aun con el encima, dando un beso lujurioso.

—¿Qué tendré que pagar por esto? Eres un demonio, no harías esto gratis.

—Pacta conmigo, vuélvete mi perra, nadie más podrá follarte más que yo, ese es el precio.

A Jimin le pareció el precio justo….

Se me olvidaba la dedicatoria todo esto fue por culpa de mi linda Meli_Gonz96 te hago responsable