Dedicado a AlejaDeMin

La convivencia con Namjoon había cambiado totalmente, ahora eran sexualmente activos entre ellos, no habían dado un nombre a lo que tenían.

Pero la verdad es que Jin tampoco quería hacerlo, tenía mucho miedo de que el moreno malinterpretara sus sentimientos, es cierto que este tiempo había desarrollado cierta afección hacia Namjoon, pero entendía que no podría estar más allá de lo carnal.

El tema de la inseguridad sobre su apariencia estaba sobre la mesa, veía a las modelos que salían en las fotos con Namjoon y se sentía algo inferior, está semana que el moreno no había estado en casa, se había tenido el cabello al lila, se vestía con ropa algo más ajustada.

Se suponía que el moreno volvería estos días, así que quería tener comida casera lista para cuando regresará, además de había comprado ropa interior bonita para el deleite de Namjoon.

Al llegar al departamento, había una caja en la entrada, la tomo para meterla junto con las bolsas del supermercado, dejo todo en la barra y fue abrir la caja la cual tenía su nombre.

—Al parecer es de Namjoon.

Venía una caja blanca con un moño rojo y una tarjeta negra.

¿Me lo vas a modelar?

Cuando abrí la caja y sacó el contenido, era un diminuto traje de sirvienta, con medias, liguero y una tanga.

Tomo su teléfono algo molesto y le mando un mensaje a Namjoon.

¡Estás loco! ¡No me pondré eso jamás!

Se fue a acomodar las cosas de la despensa, para después darse un merecido baño, dejando que el agua caliente le recorriera el cuerpo de manera lenta, paso el jabón por su abdomen y su entre pierna, empezaba a extrañar el tacto de Namjoon.

Después de secarse el cabello, la caja con el uniforme de sirvienta seguía tirada, lo levanto y decidió darle otro vistazo, en verdad era bonito el disfraz. Miro a su alrededor como si alguien lo fuera ver, al asegurarse de que el lugar estuviera despejado, procedió a probarse el disfraz.

Estaba hecho a la medida, el único pero que le podría poner era el largo de la falda, era una burla solo le cubría hasta donde terminaba su trasero.

Su cintura se veía pequeña y el color lila de su cabello relucía entre la vestimenta negra, las medias hacían lucir sus piernas un poco más largas, se giro algunas veces en el espejo, después negó con la cabeza.

—Namjoon está loco, me veo ridículo.

—En realidad te ves delicioso.

Jin dio un brinco al escuchar la gruesa voz de su compañero, el cual estaba en el marco de la puerta dejando su maleta en el piso, la mirada de dragón del moreno lo miraba descaradamente de arriba abajo mientras se relamia los labios.

—¿Q…qué…cómo…

No lo dejo siquiera formular la pregunta, se lanzó a besarlo, tomándolo del rostro con una mano y la otra en la cintura atrayendolo contra su cuerpo, la lengua de Namjoon invadía la boca de Jin de manera sedienta, se separó de el, colocando su frente contra la del peli morado.

—Te eche de menos —deja besos pequeños en los gruesos labios del chico — sabía que el traje te quedaría perfecto, mis manos conocen tanto las medidas de tu cuerpo que sabía que no me iba a equivocar.

—Di..dices.. puras tonterías.

Aunque pareciera todo lo contrario, a Seokjin le encantaba cuando Namjoon se ponía algo sensual y cursi con él. Sentía que su corazón latía demasiado rápido.

—Son verdades, no como cierto chico que dijo que no se pondría el traje.

—Fue una tontería, ya me lo iba a quitar.

—De eso nada, si alguien te quitará esa ropa seré yo.

Dicho esto lo tomo de la cintura para alzarlo haciendo que Jin se enredará en la cadera del moreno, entre besos obscenos, Namjoon no perdió tiempo de acariciar los muslos de Jin, delineaba la piel alrededor del liguero, la erección de ambos era notoria.

—Jin, no hice otra cosa más que pensar en ti en este tiempo.

—¿En serio?

—Nunca te mentiría en algo así —beso y lamió el cuello de Jin —tu aroma y piel, solo estaban en mi mente —apretó el trasero del chico —sin mencionar que tú trasero —movió la cadera contra él—dios, cómo lo extrañe —su pareja suelta un gemido —sobre todo ese dulce sonido.

Lo lleva a la cama dejándolo acostado, se quitó la camisa arrojandola lejos, dejando ver ese abdomen moreno marcado y perfecto, Jin no podía quitar la vista de los ojos de Namjoon, el deseo que se asomaba en ellos era notorio, se iba a quitar el pantalón pero Jin lo detuvo.

—Espera —bajo de la cama y se arrodilló frente a él—dejeme hacerlo por usted, señor Kim.

Sintió un jalón en su entrepierna al verlo sumiso y llamarlo señor, ni en sus más locas fantasías pensó que Seokjin haría algo así, ahora tenía miedo de correrse con solo escuchar la voz de este.

Jin quitó el cinturón sin dejar de ver a los ojos al moreno, que tragaba saliva ansioso de sentirlo, cuando esté bajo sus pantalones y ropa interior, tomo el grueso falo entre su mano dando una extensa lamida desde la base hasta la punta, dejando que su lengua delineará cada vena del caliente miembro, al llenar a la punta sus labios rodearon la cabeza empezando a succionar lento e ir meriendolo a su boca, abarcando lo más que podía con ella.

El moreno lo tomo de la cabeza para poder iniciar los movimientos de cadera contra la garganta, agradecía la hora en que le había mostrado a Jin el como hacerle un oral, ahora la lengua de este lo torturaba mientras invadía la cavidad bucal, Seokjin casi podía meterlo su miembro por completo hasta la garganta al no contar con reflejo nauseoso solo debía controlar su respiración para no ahogarse con el enorme trozo de carne.

—Por dios Jin, tu boca aaarghh— el chico con su mano derecha empezó a masturbarse, no podía aguantar el dolor de la erección que era causada por los gruñidos del moreno —daria todo lo que tengo… mmmh… por solo sentir tu boca.

Las embestidas a la boca de Seokjin se hicieron un poco más intensas hasta que este sintió el calor del semen llenando su boca,  trago todo lo que pudo antes de sacarlo de su boca.

—No es propio de usted correrse tan rápido mi señor.

Namjoon le limpio la comisura de los labios.

—Da gracias al cielo que dure algo, solo verte así casi me hace correr.

Se aleja para quitarse todo y quedar en la desnudez total. Se arrima a la cajonera sacando el lubricante.

—A la cama niño, es hora de destrozar ese lindo culo tuyo.

La falda del traje estaba sobre las caderas de Seokjin dejando a la vista la erección que sobresalía por la diminuta ropa interior, el moreno quería dejar esa imagen grabada en su cabeza, no había nada más sexy y lindo que Kim Seokjin.

Tanto que su miembro volvió a cobrar vida de un golpe.

Jin se levantó del piso y se colocó en la cama.

—En cuatro dulzura.

Seokjin obedeció y dejo su trasero levantado para darle una vista preciosa al chico moreno, este se frotó la barbilla con algo de fuerza, vaya que extrañaba ese culo.

Hizo aún lado el delgado hilo de la ropa interior, vertiendo un poco de lubricante en sus dedos.

—Abre.

El jóven obedeció y separó sus glúteos dejándole ver la entrada del color rosado que tanto soñaba, con su dedo pulgar delineó un poco el anillo hundiendolo lentamente, para acercar su boca y la lengua acompañará la intromisión del falange, la cara de Seokjin pegaba en el colchón ahogando un poco sus gemidos, sus piernas temblaban en cada lamida e intromisión del grueso dedo.

La lengua entraba haciendo que las terminales nerviosas de Seokjin se descontrolara, su erección palpitaba, sentía que se podría correr sin tocarse. La ropa interior le fue arrancada, Namjoon lo tomo de las caderas, para girarlo y romper el traje de maid.

—Se ve muy bonito, pero tu piel al desnudo es mil veces mejor —acaricio la cuerda del liguero —pero estás se quedan.

—Pervertido.

—¿Lo dudabas?

Una sonrisa sexy apareció, acelerando el pulso de Jin.

—Es momento de que me montes lindo Jin.

Seokjin se iba a levantar, pero no pudo moverse mucho debido a que Namjoon lo jalo de las piernas abriendo estás y alineándose rápidamente para penetrarlo de golpe, la invasión hizo a Jin gritar pero no era mucho el dolor, si no el placer al tocar el punto sensible en la primer estocada.

—Perdona —empezo a moverse dentro de él —no podía esperar mucho más.

Las embestidas fueron algo agresivas, pero los besos ayudaban a que fueran demasiado placenteras, su erección se frotaba contra el abdomen del moreno, en una estimulación completa.

Sin salirse del interior de Jin, logro girar de nuevo dejando este encima, apoyándose del abdomen del moreno para rebotar sobre el miembro de este, sus caderas se movían sin parar ayudada por las manos fuertes de Namjoon.

—Mirame Jin, quiero ver tus ojos mientras te corres.

La imagen era como un sueño, el cabello lila algo despeinado, los labios algo hinchados y rojos por los besos agresivos, los jadeos saliendo al ritmo de la penetración, basto con que Namjoon masturbara un poco el miembro de Jin para que esté terminara en un espasmo violento apretando el falo en su interior hasta exprimirlo, entre gemidos sincronizados.

Jin cayó en el pecho del moreno, dejando que las grandes manos de este le acariciaran la espalda.

—¿Cómo te fue en tu trabajo? —pregunto Jin

—Puede decirse que de maravilla, pero te extrañe demasiado—Esto hizo sonreír al joven —fue cansado, porque me costó convencer a mi agente de la renuncia.

Jin se sentó para mirar a los ojos a Namjoon.

—¿Renuncia?

—Si, me quedaré solo como modelo, no volveré a filmar más.

—Pero, ¿Por qué?

Namjoon se sentó también acomodando a Jin a un lado tomándolo del mentón.

—Si yo no soporto que otros te miren, tu estarás molestos de que mi trabajo sea follarme a otras —le dio un beso corto —les dije que por el bien de mi pareja debía dejarlo, no quiero que más delante, tengamos problemas por esto.

—¿pareja?

—¿No lo somos?

Jin solo asintió cómo tonto.

—Tengo al novio más guapo del mundo ¿crees que necesito algo más?

—¿Otra ronda?

Los hoyuelos del moreno aparecieron para empezar a besar nuevamente a Jin.

Por culpa de Alejandra del valle hubo segunda parte de este OS, es que uno queda mal con las imágenes mentales, pero también me sirve como excusa de celebrar los 1k de vistas jujuju
Mil gracias mis pequeñas sucias.