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Capítulo Dos:

Muerte de inocentes.

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        «— No todo puede ser felicidad ¿Verdad?, al menos así lo veían los habitantes de la ciudad Pepper, aun con la amenaza de los androides no querían desperdiciar ese día tan tranquilo, algunos compraban en los centros comerciales, caminaban por las calles o simplemente querían pasar un tiempo agradable en familia. Pero ese tiempo de paz se le veía amenazado, es aquí donde comienza el verdadero caos.

Los Androides habían aterrizado en la ciudad, 18 se le notaba que parecía estar aburrida, mientras que 17 miraba a las personas con una sonrisa siniestra, mientras que los habitantes de la ciudad los observaron con miedo.

— Si gustan, les daré 10 segundos de ventaja para que escapen — dijo 17 que estaba listo y ansioso para comenzar en matar a las personas de la ciudad.

— Les advierto que so será algo imposible — dijo 18 a lado de su hermano gemelo, incluso estaba lista para matar a las personas, era su juego favorito...

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Ver quién de los dos mataba a más personas primero.

¿Qué ganaban con eso?

La extinción de los seres humanos en el planeta, ese era el premio mayor.

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— 10 — comenzó a contar el azabache.

Las personas sin dudarlo ni un segundo comenzaron a correr con mucho terror, padres y madres cargaron a sus hijos, temiendo por las vida de los infantes, la triste realidad era que lamentablemente no podían escapar de aquel terrible destino que los esperaba, lo más triste es que al terminar de contar, los androides comenzaron a lanzar ráfagas de Ki, era un destino macabro si le preguntan a cualquiera que haya sobrevivido, algunos lograron escapar ese día, otros no tuvieron tanta suerte.

Algunas perdieron las esperanzas en el que el mundo volvería como era antes, otros simplemente no saben que hacer ante esta situación tan destructiva, en cuanto al resto, siguen manteniendo las esperanzas en los pocos guerreros que los están defendiendo. 

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Solo esperaban que todo volviera a ser como antes, que los niños no sigan viviendo en este mundo lleno de destrucción.

Que las muertes de algunas personas no sean en vano.

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Aunque, eran muy raras las veces que los Androides perdonaban a los humanos, esto se debía a que no perderían su tiempo con unos seres tan débiles e inútiles, para ese tipo de ocasiones inusuales hacían otras cosas, tal y como lo estaba haciendo 18, que estaba probándose ropa nueva, pero por otro lado, el hombre que la estaba atendiendo temblaba de miedo, sí bajaba la guardia, podría morir en ese momento.

— Solamente le pido de favor, que me perdone la vida señorita — aquel hombre rogaba con mucho pavor, no quería ser asesinado a manos de la Androide — Si quiere puede llevarse la ropa, puede llevarse todo lo que quiera, pero se lo suplico, no me mate. —

— Me impresionas — dijo 18 sonriéndole al hombre, mientras acomodaba su nueva ropa, la tomo en su brazos y se acercaba hasta la salida — Tienes ropa muy bonita, me gusto mucho. —

En eso, ella salió de la tienda para acercarse al auto que robaron ella y su hermano quien la estaba esperando algo impaciente, dejando al dueño de la tienda soltando un largo suspiro, de hecho, sentía que se quitaba un peso de encima por el miedo que sentía, por otro lado, 17 sin ningún remordimiento y sin pensarlo, lanzo una ráfaga de Ki a la tienda sin dejar rastro de la tienda, ni siquiera al hombre le dio tiempo de escapar.

— 17 no seas malo — dijo la rubia reclamándole a su hermano por lo que acababa de hacer — ¿Por qué lo hiciste?, me disgusta que destruyas las tiendas donde vendan ropa, sabes que esa es mi única debilidad. —

— Ay cierto, disculpa hermanita, casi lo olvidaba — dijo 17 mirándola y luego le sonrió, mientras que la tienda se consumía entre las llamas.    

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Algún día puede que la paz reine nuevamente.

Pero... En definitiva no era este día.

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17 conducía muy rápido y como un maniático se tratase, mientras que las personas corrían aterrorizadas — Huyan, huyan lo más rápido que puedan, porque si se quedan aquí los mataré — decía él riéndose ante los gritos de las personas.  

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Definitivamente, muchos esperaban el día que los Androides sean destruidos, y que prueben una cucharada de su propia medicina.

Que sientan lo mismo que siente cada persona al verlos.

Que sientan miedo.

         «— Lamentablemente, mientras las personas estaban escapando de aquellas máquina destructivas, los medios de comunicación informaban al resto de las personas de lo que estaba pasando en la ciudad, entre ellos fueron Bulma quien estaba conduciendo a la capital del oeste por algunos víveres y a su lado estaba su hijo Trunks, con tan solo 13 años, el adolescente pensaba como un adulto, y sabía muy bien que la vida en el planeta ya estaba llegando a su fin, pero, no era excusa para no tratar de salvar a la tierra.

— La ciudad Pepper está siendo atacada, los Androides están atacando de una manera desesperada — la voz de un hombre que estaba narrando la noticia se le notaba muy asustado.

En ese momento, cuando mencionaron la terrible noticia, enojo por completo a Trunks e inmediatamente Bulma apago el radio para no complicar más la situación y tratar de calmar a su hijo, aunque era imposible, porque ella también estaba muy molesta.

— Jamás perdonaré a esos Androides malditos, no me interesa en que demonios estarán pensando, pero, no puedo creer que hayan matado a su propio creador — exclamo Bulma claramente molesta, su vista aún seguía en el camino, como tal se lo decía así misma, pero, su hijo la estaba escuchando de todas formas — Siguen atacando la gente de todo el mundo, esos individuos son unos monstruos y se divierten matando, ¿Acaso no existe algo para solucionar eso? — 

El joven solo miro seriamente a su madre — Detente mamá, ¿Podrías dejarme en este lugar?, tengo que ver a Gohan y Gine — dijo el peli lila, haciendo que su madre detuviera el auto de golpe.

— Un momento Trunks, ¿Qué tienes pensado hacer? — pregunto la peli azul mientras miraba a su hijo, pero noto como las manos de su hijo sujetaban con fuerza su pantalón, se notaba molesto, aunque a Bulma le aterraba la idea que estaba pasando por su mente — No me diga, que estas pensado hacer... —

Él no podía contestar a eso, solo estaba decidido en irse, aunque eso iba a molestar mucho a su madre y en un momento, ya él había salido del auto e irse volando.

— ¡TRUNKS! — llamo la mujer, pero ya era imposible, pues él ya se había alejado.

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Solamente esperaba que su hijo no vaya al lugar donde estaban los Androides.

Porque no quería que su peor pesadilla, el perder a su hijo, se hiciera realidad.

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Por otro lado con los hermanos Son, ambos no tenían un radio para saber que estaba pasando en la ciudad, aunque no era necesario para ellos, solo necesitaban concentrarse y percibir el Ki de los Androides, también de las personas que se encontraban en la ciudad Pepper, ya ni siquiera les interesaban el Ki de los Androides, pero, el de las personas disminuía rápidamente y eso molestaba a Gine. 

— Sé que toda esta situación te molesta mucho Gine — dijo Gohan, sacando a su hermana de sus pensamientos — Pero, recuerda lo que voy a decirte, sin importar lo que pase... Somos los únicos guerreros que quedan en el planeta, aunque nos duela las perdidas de algunas personas, no podemos culparnos al no salvarlos en su momento que pudimos haberlo hecho, lo que si debemos tomar en cuenta es que podremos derrotarlos, para que las muertes de la personas no sean en vano. —

Eso lo había sorprendido bastante, aunque cada consejo que hacía su hermano lo tomaba muy encuenta, y si él decía, es porque es una promesa que quiere cumplir, debía cumplir con ese objetivo a como de lugar, sin olvidar, que Gohan entrenaba a su hermana y a Trunks por una razón, sabía que su lucha con los Androides no iba a durar mucho, lo que más le aterraba era dejar solas a su madre y a Gine, sobre todo esta última, ya que sería la más afectada por su partida si llegase a morir.

Pero por otro lado, sabía que hacía esto para protegerlas, también quiere cumplir con la promesa que le hizo a su padre y a los guerreros Z, de pronto, algo hizo que saliera de sus pensamientos, afortunadamente era un Ki bastante conocido para ellos.

— Es el Ki de Trunks — dijo Gine sorprendida, puesto que ella también había percibido el Ki de su mejor amigo, sin embargo, le sorprendía y a su vez le preocupaba que él estuviera ya en el lugar y solo.

— Debemos darnos prisa — dijo Gohan serio y ella asintió con la cabeza.

Sin más tiempo que perder, elevaron su velocidad para volar más rápido y llegar a tiempo a la ciudad.

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Las vidas inocentes son arrebatadas, es por eso que debía derrotarlos.

Y debían hacerlo lo más rápido posible.

         «— Seguía el caos en la ciudad, 17 seguía a las personas, mientras que el Androide se divertía con ese acto enfermizo, mientras que su hermana se aburría con solo verlo, de hecho, quería hacer algo más interesante que solo observar, eso es lo que pensaba la rubia.

— Corran, corran porque se irán al infierno — dijo 17 sin dejar de reírse, lo más aterrador, es que adoraba escuchar los gritos de desesperación de las personas,

— ¿Qué pasa contigo 17?, ¿Hasta cuando vas a jugar con esa nave? — preguntaba su hermana seriamente, aunque estaba algo molesta y a la vez estaba bastante aburrida — Vamos, hay que hacer otra cosa. —

Eso hizo entrar en razón a Número 17, sin tener más opciones, ya que era imposible razonar con su hermana si estaba molesta, así que este se estrellase en un edificio y este explotara de inmediato, y eso solo fue el comienzo... Un fragmento del vehículo que estaba en llamas cayó cerca de un charco de gasolina, por si no era poco de destrucción, ese charco sería el causante de otra explosión mucho más grande, pues esto estaba muy cerca de una gasolinera, matando así a todas las personas que seguían atrapados, alguna de estos corrían para apagar el fuego sobre sus cuerpos, aunque esto nos los ayudaba y hacía que el fuego los consumiera más rápido muriendo en el acto, los únicos que sobrevivieron a la explosión fueron los Androides.

 — Vamos 17 — dijo la rubia ya yéndose de una vez del sitio, segundos después su hermano la siguió. 

Los Androides habían dejado un gran caos, dejando la ciudad hecha escombros, Trunks estaba llegar, pero se detuvo su vuelo de golpe, contemplando la horrible escena frente a sus ojos.

— Llegue demasiado tarde — dijo él sin dejar de mirar la ciudad totalmente destruida.

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Ahora la ciudad Pepper ya no existía.

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No tuvo que pensarlo mucho, el peli lila aterrizo en el lugar para así comenzar a caminar y verificar que hubiera algún civil con vida, aunque deseó no haberlo hecho, puesto que habían muchos cuerpos, en verdad estaba deseado haber llegado a tiempo, solamente con ver esto lo hacía sentir débil e inútil, para no ver más cadáveres se alejó unos pocos metros, lastimosamente cuanto más se alejaba, más cuerpos encontraba, lo peor fue que se detuvo al ver un pequeño conejito de peluche, el cual pertenecía a una pequeña que estaba muerta quemada, al lado de ese pequeño cuerpo estaba un cuerpo del que parecía ser su madre.

Trunks solamente tomo aquel peluche en sus manos, esto lo hizo sentir peor de lo que estaba anteriormente, por su mente rondaba una pregunta, ¿Qué culpa tenía aquella pequeña o cada uno de los niños que estaban en la ciudad?, simplemente no había una respuesta correcta.

En ese momento sintió dos Ki, que afortunadamente ya conocía y era confiable para él, en segundos, Gohan había aterrizado en uno de los escombros del lugar, mientras que Gine aterrizo frente a su amigo, ella ya era testigo junto a su hermano, la destrucción que acaba de pasar.

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Todo a causa de estos Androides.

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Ella salió de su trance, al sentir los brazos de Trunks rodeándola, un gesto que él necesitaba, así que correspondió el abrazo, por lo que Gine dejo escapar las lágrimas que comenzaba a formarse en sus ojos.

— Ya no soporto esto Trunks, cada día, todo empeora más y... Solo quiero que esto acabe — decía la chica abrazándolo, sus manos sujetaban la camiseta del chico con fuerza, mientras seguía llorando.

Lo único que podía hacer Trunks, en ese horrible momento era consolar a su amiga, aun así a él le hacía todo lo posible para encontrar aquel consuelo, sin embargo... Es imposible dado las circunstancias.

— ¿POR QUÉ GOHAN?, ¿QUÉ GANAN LOS ANDROIDES CON DESTRUIR LAS CIUDADES Y A SUS HABITANTES? — grito Trunks sin dejar de abrazar a su amiga, aunque la abrazo con un poco más de fuerza, como lo había hecho anteriormente.

Ni siquiera el Sayajin tenía las respuestas adecuadas, él también paso por muchas emociones de este tipo cuando era más pequeño, pero, todo era diferente, ahora y todo estaba cambiando, la tierra estaba cambiando gracias a los Androides.

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Solo esperaban que todo el caos se acabara junto con los Androides.

Por ahora, todos deben ser fuertes y mantener la cabeza en alto, solo esperaban que las cosas se solucionen rápido.

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Avance:

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«— Soy Trunks, ya no voy a quedarme de brazos cruzados, debo continuar con mi entrenamiento. —»

«— Gine, mamá, Gohan, les prometo volverme más fuerte y derrotar a número 17 y número 18, cueste lo que me cueste. —»

«— Espera Trunks, primero comamos antes de entrenar. —»

«— En el próximo capítulo de Guerreros del Futuro. —»

«— Un momento de paz. —»

«— No se lo pierdan. —»