Jimin había hablado con su grupo de aprendices para hacerles saber su decisión de no continuar entrenandolos para evitar riesgos. 

—No quiero que la venganza se adueñe de ustedes así que es mejor tomar una pausa hasta que dejen de visualizar a una persona mientras toman una espada, porque eso puede hacer que se desvíen sus intenciones y terminen convirtiéndose en rebeldes. 

—Nunca podremos dejar de hacerlo hasta que ellos paguen por lo que hicieron. 

—El castigo dejenselo a su príncipe, no lo hagan por su cuenta y se manchen las manos, es difícil detenerse después de empezar.

—Usted dijo que vio a una persona importante ser dañada, ¿nunca quiso vengarse? —cuestionó Violet.

—Era una guerra, terminó asesinado de todas formas, lo que yo deseo es que nadie vuelva a pasar por lo mismo, por eso entreno a los omegas. 

—La única forma de que olvidemos el rencor es que les haga lo mismo que nos hicieron a nosotros. 

—Y tiene que deshacerse de ese lugar —señaló la omega un bar —en las noches todavía se reúnen los Alfas abusivos ahí y continúan haciendo daño de forma más discreta, tienen a omegas encerrados que usan para entretenerlos. 

—Se lo informaré de inmediato al príncipe, por ahora vayan a casa.

Los omegas hicieron una reverencia antes de alejarse, Tae puso su mano sobre el hombro del rubio en señal de apoyo cuando los vio alejarse. 

—Como juzgarlos cuando yo hice lo mismo.

—Es diferente, iba a hacerte daño a ti y no por eso te dio por querer matar a todo Alfa que se te cruzara. 

—Tenemos que deshacernos de ese bar, dicen que tienen omegas encerrados que son obligados a atender a los Alfas —dijo en cambio sin querer continuar con el tema. 

Cada que cerraba sus ojos recordaba como el Alfa que abusó y asesino a su cuidadora miraba a su dirección oliendo su miedo desde dónde estaba escondido, se acercaba y abría la puerta, sonreía como si hubiera conseguido el mejor de los premios y lo alzaba por el cuello de su hanbook, la desesperación llegó a su cuerpo al leer las intenciones y oler su excitación por hacerle lo mismo que a ella.

Sus sentidos se alertaron al máximo y tomó las agujas que tenía en su hanbook ya que solía perderlas seguido por sus clases de bordado, y las clavó en los ojos del Alfa, que gritó y lo soltó, tomo en sus manos el arma que el mayor soltó al terminar con la vida de la omega y la clavó en su abdomen una y otra vez hasta que dejó de moverse.

Escucho pasos a su espalda y vio que su primo Tae había llegado para ayudarlo, observó a la cuidadora y al rubio con el arma y sangre en su rostro.

El temor lo invadió por que su pequeño y querido primo Jimin fuera acusado de ser un rebelde, así que lo hizo quitarse la ropa y quedar en un camisón, limpiarse la sangre y se culpó del asesinato, siendo Alfa no le dirían nada.

Chanyeol fue el único que se dio cuenta al ser el responsable de sacar los cuerpos y ver las agujas de su hijo en el Alfa, pero guardó silencio para protegerlo. 

No había una sola gota de arrepentimiento en él, era el recordartorio de sus objetivos.

—Esta noche daremos una visita, tenlo por seguro. 

Afirmó Tae y Jimin sonrió anticipando lo que sucedería esa noche. 

No revisaron sólo ese lugar, entre ellos y guardias del Reino Kim revisaron cada bar del pueblo, encontrando que en todos tenían omegas en malas condiciones y en contra de su voluntad, algunos aceptaron su derrota y se dejaron arrestar, otros quisieron demostrar su valor y atacaron a Jimin.

Está de más mencionar que esa absurda idea le costó la vida a más de uno. 

Los lugares fueron clausurados y se empezaron a modificar los requisitos para establecer bares, a los omegas se les dio atención médica y protección que supervisaba Jimin, notando con tristeza que también les faltaban dedos a unos cuántos de ellos. 

Controlar sus emociones era una tarea más sencilla de decir que de hacer, el coraje y la impotencia lo abrumaban pero no podía dejarse dominar por estas, le costaba admitirlo pero la verdad era que no estaba preparado para enfrentarse a la situación del Reino Jung.

Empezaba en momentos a preguntarse si estaba haciendo lo correcto con sus decisiones, lo que menos deseaba era que sus acciones llevarán por un mal camino a su primo, quería justicia, quería tranquilidad para el pueblo, así como liberarlos de su sed de venganza.

Quería verlos convertirse en guerreros.

Pero eso realmente iba costar hacerlo, empezaba a creer que incluso más de lo que les costó en el Reino Kim. 

Un debate se realizó entré los príncipes Kim y los Alfas de alto rango de ese lugar, con el fin de encontrar una solución y apropiado castigo para los que abusaban de su fuerza.

Ellos habían discutido al respecto pero ver a Jimin tan afectado emocionalmente con la situación los hizo considerar la idea de abrir un debate queriendo escuchar la opinión de los representantes del pueblo en espera de una solución favorecedora para todos y que calmará sus ansias de venganza en los omegas, que ya habían atacado a los Alfas que les hicieron daño, en espera de que no incitara a los demás a hacer lo mismo. 

Para la mala suerte de los hermanos Kim, vieron que lograr su objetivo de una satisfactoria solución sería una tarea complicada desde que notaron la mirada de sorpresa y desacuerdo sobre Jimin de los Alfas que entraban a la sala al verlo presente en una importante reunión que sólo debería ser exclusiva para Alfas según las tradiciones de ese Reino. 

Peor aún al verlo sentado al lado del príncipe Jin, donde tendría que ir el ex consejero del Rey Jung.

—Alteza, con todo respeto, este no es lugar para un Omega, aunque este sea su pareja. 

—El Duque Jimin no es mi pareja, es mi actual consejero, por lo tanto puede estar aquí —dejó en claro— y no es eso lo que debería preocuparles, sino la situación actual del pueblo.

—Esto no hubiera sucedido si su consejero no les hubiera enseñado a pelear a Omegas con ganas de venganza, Alteza.

—Las clases ya fueron anuladas por ese detalle. 

—Eso no hará que ellos no practiquen por su cuenta lo que ya se les enseñó, ellos no van a olvidar el rencor hasta no ver muertos a los Alfas que sólo hacían lo que en ese momento era correcto. 

—Y hacer eso es dejar sin Alfas al pueblo, sólo quedarían niños y algunos jóvenes, así que no puede matarlos a todos, así como tampoco meter a medio pueblo en el calabozo, el porcentaje de Alfas aquí es mayor que el de Omegas —habló el ex consejero en apoyó al otro Alfa. 

—¡Se convertirán todos en rebeldes a este paso!

Todos empezaron a alegar al mismo tiempo, Jimin suspiró, Jin sobo su frente y Tae se acomodó disfrutando del caos, resignado a que no aportarían nada  y sólo se dedicarian a quejarse. 

—Tienen razón —habló Jimin y todos callaron— no podemos castigar a los Alfas por hacer algo que aunque no es correcto para nosotros del Reino Kim, estaba permitido aquí con el Rey Jung.

—¿Estás diciendo que no debemos castigarlos? —preguntó Tae sorprendido. 

—No por el pasado, pero si por el presente y futuro. 

—No estoy seguro de que esa decisión les guste a los Omegas que tuviste de aprendices, Jimin —mencionó Jin.

—No les gustará, es un hecho, quieren que sufran lo mismo que ellos sufrieron pero es verdad, nos guste o no, eso estaba permitido antes, tú sólo puedes castigar a los que hicieron tales actos después de tu llegada y ya nos encargamos de ellos. 

—¿Y cuál es su propuesta para los Omegas que no aceptarán que no se les castigue a sus agresores, consejero Jimin? —cuestionó uno de los Alfas.

—Esperar. 

—¿Esperar? —repitió incrédulo.

—Lo único seguro de las personas malas es que harán cosas malas cuándo la oportunidad se les presente, deben esperar a que vuelvan a intentar cometer esos actos para que podamos castigarlos como parte de las nuevas leyes, ya lo hicimos con los Alfas de los bares. 

—Será un desastre, esos Omegas no se quedarán de brazos cruzados. 

—Entonces serán castigados, en este Reino no será permitido que se abuse del rango o poder, tampoco que ataquen injustificadamente, mucho menos la alevosía y la ventaja, a menos que sea por defensa personal, todo aquel que lo haga será castigado, Alfa u Omega. 

—Traerá problemas llevar a cabo eso —acusó el ex consejero. 

—Entonces proponga algo y deje de quejarse —le respondió molesto Jimin —es la solución que se me ocurre para castigarlos pero no metiendo a medio pueblo en el calabozo u ordenando sus muertes. 

—¿Cuál es su decisión, Alteza? 

—Pensaré respecto a ello y haré saber lo antes posible mi decisión, la reunión ha terminado —avisó y los Alfas se pusieron de pie para salir, quedando los tres en la sala de reunión —¿estás seguro de esto, Jimin? 

—¿Qué otra cosa podemos hacer?

—Causará una gran disconformidad en los omegas. 

—Tengo presente eso, pero no podemos darle gusto a todos, los Alfas ya no pueden hacer lo que les plazca con los Omegas, no por eso ellos deben aprovecharse para hacer lo contrario, debemos solicitar guardias para que ronden las calles, aunque no estoy seguro de que deban ser de aquí. 

—Debemos estar preparados para posibles ataques de ambas partes, podrían usar de excusa los Alfas la defensa para herir a los Omegas. 

—Y quizá sea mejor que yo vuelva al Reino Kim… mi estadía aquí trajo problemas al final, no quiero causar más —habló Jimin. 

—Denegado, ahora más que nunca te necesito, a ti y a tus guerreros, ustedes harán las guardias y les mostraran como son los verdaderos guerreros, sólo asegurate de que sean Omegas que no empaticen con la venganza de aquí —ordenó Jin.

—No volveré a fallar —prometió haciendo una reverencia. 

"Mostrarles cómo son los verdaderos guerreros…" 

Eso sonaba como un buen comienzo. 

El sonido de caballos acercarse llamó la atención del pueblo, que curiosos salieron y vieron con sorpresa que un hombre con guardias a sus lados se iba directo al castillo, el Rey junto a Chanyeol y Namjoon salieron para ver de quién se trataba, aunque no tardaron en reconocer el olor.

—Perdonen que haya venido sin previo aviso y después de tanto, estuve algo ocupado —habló mientras se quitaba el gorro que lo cubría. 

—Príncipe Jungkook, usted es bienvenido aquí con o sin aviso —le sonrió el Rey Kim.

Finalmente el joven Alfa había ido por su Omega. 

Tremendo lío xd
Pero Jungkook por fin vuelve a hacer aparición 💖