Bursa y todo Estambul se habían enterado del atentado, todos estaban furiosos por tal acto de crueldad, creían que el nuevo Sultán no les haría nada a sus hermanos por que había demostrado compasión al dejarlos vivos, pero no fue así.

Muazzez y Nur estaban idas, no comían o dormían, ambas estaban de rodillas viendo a la nada, cada una en sus aposentos, todos estaban devastados y no sabían que hacer, o al menos eso creían todos.

—¿Que pasa Mükerrem?—dijo Dilruba dejando de lado su bordado.

—Estoy cansada de estar esperando a que Allah nos ayude en esto, es momento de hacer algo—suspiró—no es necesario que te involucres.

—Quiero hacerlo—tomo su mano—por Korküt

—Por todos ellos—señalo la puerta—voy a hablar con mi madre, no haré esto sola.

—Vamos madre, necesita comer—dijo Aşupcan arrodillandose a su lado.

—Déjame sola—susurró con la voz rasposa.

—No, todavía quedamos nosotros, Yusuf es el mayor ahora—dijo la más joven de sus hijas.—lleva días así, sin comer y en esa posición.

—No quiero nada—sollozo.

—Tiene que, madre, es nuestra esperanza—tomo su mano—vamos por favor.

—Quisiera creer que esto es un sueño—dice Nur viéndo a su pequeña—que nada es real, que estoy en casa viendo las hermosas flores crecer, pero no, estoy aquí sufriendo la pérdida de mi hija.

—Vamos madre, tiene que Seguir.

—Sólo podre descansar en paz su vengo la muerte de tu hermana, tengo que hacer lo, así me lleve años—susurró—así me tenga que llenar de sangre las manos, así tenga ese gran pecado.

Nurbanu miraba con dolor a su madre, no quería aceptarlo, pero tendrían que dejar esa inocencia de lado y hacer algo por sus hijos y hermanos, tenían que avivar ese fuego que se apago.

—Valide, han fallado—dijo la Kalfa esperando el regaño de Gevherhan.

—Son unos inútiles—les grito—¡Aghas! ¡Aghas! Matenlas—gritó con rabia—consigue a más espías, tengo que acabar con ellos, con esos dos príncipes de Mahmud la dinastía ya está segura y no necesitan a esos estorbos—le grito —vete.

—Madre ya—dijo Mahidevran — si quiere acabar con ellas comience por la más débil—sonrió y Gevherhan la miró felíz.

—¿Por que estas pidiendo esto ahora?—dijo Sivekar

—Si le digo no me dejará hacer lo

—¿Que es?

—Tengo un plan, pero no  quiero que nadie se involucre, si me caso tendré los recursos necesarios para llevar acabo mi plan, y el cuarto visir es inteligente, leal y muy rico—dijo Mükerrem

—Bien, mandaremos una carta a la capital, no te aseguro nada—suspiró

—Con que el sepa que quiero casarme está bien, quiera o no me casare—la miró—por mis hermanos madre, juro que todos pagarán tu dolor y el de  ellas.

—No quiero que te arriesgues

—No lo haré, seré cuidadosa, pero no quiero que le digas a nadie que haré justicia—la abrazo— esto es por ellos.

Meses después una boda se llevaba a cabo en Bursa, la celebración no era la más feliz pero trataban por la joven, sabían que la partida de ella sería mejor para su madre, con ellas fuera de ese lugar lograrían vivir lo suficiente.

—Allah te de una vida feliz—le susurró Nur—la que el nos arrebató—le entregó un hermoso anillo.

—Allah te bendiga mi niña—sonrió Mihrimah y la vieron partir.

Sólo allah sabía el plan que la joven sultana se traía entre manos.

Miren que hermosa la portada♡