— ¡Déjalo, es una orden! Solo arruinarás su vida y arruinarás la nuestra — el padre de Louis grita haciendo que el sonido retumbe por toda la habitación — no jodas su vida...

— Le amo, le amo demasiado — Louis grita de igual forma, es una de esas veces cuando Louis no puede callar lo que siente es tan malo como las veces pasadas.

— Si lo amas entonces  olvídalo, él está subiendo, está haciendo una vida nueva y tú solo lo jodes, llevándolo a fiestas y haciendo de su relación un escándalo, no puedo manejarte a ti pero puedo evitar que lo arruines.

Las revistas están por todo el escritorio de caoba, esparcidas como si Mark deseara que Louis viera lo que él ve, como si así lo pudiese hacer entender. Todas las notas, todos los encabezados de chismes, todas las notas llenas de mentiras e inyectadas con retazos de verdades. "Heredero y su novio de fiesta otra vez" "¿Están realmente saliendo" "Louis Tomlinson tiene otra pelea en un bar" todas esas palabras que se arrejuntan como si dañar fuese su propósito.

— No lo dejare y no lo voy a lastimar, él puede ser tu modelo todo lo que desees pero después de eso es mi novio, antes y durante — Louis está a punto de salir por la puerta de madera del estudio de Mark cuando escuchas sus palabras.

— Lo despediré, arruinare su carrera y nadie va a contratarlo, haré de su vida un infierno — Louis se detiene a medio camino, se gira y observa a su padre atento.

— No te atreverías — los dientes del castaño rechinan por lo duro que está apretando su mandíbula y sus puños se colocan duros a sus costados.

— Haré que todos lo olviden, nadie recordará su nombre ni quien fue, solo una mancha en la industria que es fácil de limpiar, hay mil como él allá afuera.

***

— Lo siento, no puedo seguir — su cabello chorrear agua y sus ojos húmedos son difíciles de ver desde la neblina que ciega a Harry — se acabo, no eres lo que creí — el rizado cierra la puerta, el estruendo de la lluvia se cuela entre las palabras de Louis, las crueles palabras de Louis. Que idiota fue.

Louis jadeo sintiendo el vacío en su pecho, se aleja del umbral de la puerta y camina bajo la lluvia, sus lágrimas mezclándose con el agua de las nubes.

Fue así como en un instante, en algo que parecía eterno en su momento pudo ser de esa forma destruido.