Jungkook voló sintiendo la lluvia en su rostro y su cuerpo, pero no tenía frío simplemente al ver la lluvia quiso salir un rato, a despejar su mente.

Vió como un tronco un poco lejos de el árbol de guardianes tenía una luz prendida y sin dudar voló hacia allá y se encontró con Gieun quien escribía algunas cosas murmurando para el mismo.

- Hola Jungkook- habló el viejo autillo aún escribiendo.

- Buenas tardes ajusshi- susurró Jungkook acercándose hacia Gieun.

- ¿Has estado volando en la lluvia, cierto?- el menor asintió mirando como escribía.- ¿Porque? ¿Quieres encontrar otra ráfaga?

- N-no solamente quería despejarme un rato en la lluvia- la vieja ave se rió. Puso un punto final y se giró para mirar al niño quien tenía su cabello completamente mojado, y sus grandes ojos verdes oscuros que lo hacía ver demasiado tierno.

- Jungkook, confieso que te hice volar a propósito hacia la ráfaga, fue algo valiente- el menor frunció el ceño.

- Pero si casi pierdo mis alas, mi cabeza me decía que deje de hacerlo y mi pecho decía hazlo.- Gieun sonrió y se dirigió hacia un pequeño mueble, rebuscando algunas cosas.

- E hiciste caso a tu cabeza, Jungkook- encontró un pequeño sello y se acercó a Jungkook poniendo su mano en el hombro del menor.- Vas a dominar aquello, y cuando lo hagas te aseguro que hasta nos salvarás en alguna ocasión, con paciencia Jungkook- y puso el sello en la esquina del pequeño libro.

Jungkook miró el sello y sintió su respiración acelerarse.

- ¿Escribió las crónicas de las garras de hielo?- Gieun asintió guardando los libros- ¿Estuvo ahí? ¿Fue un soldado?

- Uh, algo así... Más bien fui el líder de los soldados- guardo las plumas, los sellos y el libro en la pequeña mesa.

- ¿De, de los soldados?... Es... Agust'D- murmuró Jungkook caminando atrás de Gieun.

- Si, era Agust'D- Jungkook bajo la mirada.

- ¿Era? ¿Porque no lo dijo? ¿Los del árbol lo saben? Pero...- Gieun gruñó girandose para ver al menor.

- Todos los del árbol lo saben, no lo dije porque ya no soy Agust'D, tengo ahora a Yoongi, cuando nació él, me di cuenta que solo necesito ser heroe para mi hijo... Y creo que lo he cumplido.- Jungkook asintió entendiendo, y sin evitarlo recordó a su padre. Todo lo que hacía él por sus hijos y Yugyeom le pagó de esa forma.

Sus padres...

¿Cómo estarían su padre y su madre sin sus tres hijos?

¿Cómo reaccionaria ante lo que hizo Yugyeom?

Un siseo de parte del gran Nival NamJoon de escuchó por todo el árbol. Jungkook sintió un escalofrío cuando comenzaron a escucharse aleteos.

- Es hora de terminar con los puros- Gieun voló hacia un hueco, y comenzó a sacar herramientas, cuchillos y escudos.

- ¿Que? ¿Iremos ahora?- habló Jungkook abrazándose así mismo con sus alas.

- ¿Iremos? Por supuesto que no irás niño, esa pelea es demasiado fuerte como para ti, mejor cuida a tus amigos y a tu hermana- el menor frunció el ceño acercándose a Gieun

- ¡No! ¡Tengo que ir! ¡He practicado demasiado para éste momento!- Gieun abrió sus alas hacia Jungkook, diciéndole que tenga respeto a su mayor.

- ¡No Jungkook! Eres aún un niño, los puros tienen mucha más fuerza que tú, te podrían matar.- Jungkook lo miró fijamente totalmente enojado, mostrando un rastro de su iris iluminado y salió del tronco volando hacia la habitación donde estaban sus amigos con su hermana.

Ellos no dijeron nada a Jungkook solo seguían conversando entre ellos, luego se escuchó el siseo del gran Nival anunciando su partida hacia los puros, Taehyung se acercó tranquilamente y se sentó a su lado.

- ¿Estás bien?- el menor suspiró jugando con sus manos.

- Gieun dijo que soy aún un niño para ir hacia los puros, y... Es cierto- Taehyung asintió.

- El gran Nival, SeokJin también dijo lo mismo, y me enojé igualmente, pero creo que solo nos están protegiendo... Aún no somos fuertes ni grandes para luchar con ellos y los puros no piensan en que somos aún niños para no lastimarnos.- Jungkook miró a Taehyung fijamente y luego sonrió.

- Es cierto, TaeTae- el mochuelo rió mirando hacia el piso.

Ailee dejó de reír por las cosquillas que le hacía Hoseok y corrió dónde su hermano quién la envolvió con sus alas.

- ¿Cómo te sientes, Ailee?- la niña asintió con una pequeña sonrisa apegando su mejilla al pecho de su hermano, pero luego de un tiempo en silencio, la sonrisa desapareció.

- Kookie... ¿Que pasará con Yugyeom?- Jungkook suspiró cerrando sus ojos.

- No lo se, Ailee, no lo sé... Pero dejemos de pensar en eso ¿Si?...- Jungkook acarició las alas de la niña- Ahora solo hay que agradecer a Dyun por salvarte y disfrutar que estamos en el árbol de los...

Ailee se separó confundida mirando a su hermano

- ¿Salvarme? ¡No! Yugyeom me entregó a ese guardián, no me salvo- las demás aves regresaron a verla, prestando atención.

- ¿Que? No. El se ofreció a ir donde los puros-

- El incluso perdió a soldados - murmuró Jimin mirando a los hermanos

Jungkook abrió sus ojos al recordar la conversación entre Namjoon y SeokJin

- Es una trampa - hablo Hoseok asustado levantándose después de un rato en silencio.

- ¡Por eso venía ya con sus respectivos nombres, cobijas y en una canasta! ¡El gran Nival, SeokJin, lo dijo!- gritó Jimin poniendo sus manos en su cabello.

- Es un traídor, es una trampa. ¡Tenemos que ir!- habló Taehyung mirando a las demás aves.

Jungkook dejó un beso a su hermana en su frente y se levantó mirando con seguridad a sus amigos.

- Gieun tiene unas... Armas- los chicos asintieron mirándose nerviosos, volaron hacia la rama de Gieun, tomaron algunas armas y algunas herramientas de protección en sus garras y mirándose los unos a los otros con confianza, emprendieron el vuelo hacia las aves puras.

Las aves no decían una palabra, sentían el miedo recorrer por su cuerpo, ésta vez debían ser fuertes.

Cuando llegaron, el ambiente estaba demasiado tenso, se vió un bosque quemándose y a lo lejos, detrás de las montañas, una intensa luz celeste.

- Jungkook- susurró Taehyung al ver la luz- Es, es la trampa.

Jungkook sintió como sus manos comenzaban a temblar y tragó saliva.

- Si vamos a poder Taehyung.

Siguieron volando hasta que llegaron detrás de la montaña y encontraron a todas las aves guardianes en el suelo retrociendose de dolor, y aquel hilo celeste impregnando su cuerpo hasta llegar a su corazon.

Pararon en un pequeño hueco para poder planear alguna cosa.

- No podemos dejarlos ahí, pero tampoco podemos ir donde ellos y cerrar el baúl.- habló Hoseok mirando con desesperación hacia las aves, especialmente a Shaki.

Jungkook se giró para mirar dónde se encontraba el baúl, y luego miró al fuego

- Si explotamos el baúl, los hilos también desaparecerán.- Taehyung lo miró asustado y tomó su mano.

- No, Jungkook, no puedes volar en el fuego...- el menor lo miró con preocupación.

- Pero tengo que salvarlos, Tae, tengo que hacerlo.- Taehyung suspiró preocupado, pero sus nervios aparecieron cuando se escuchó aquel siseo tan tenebroso que le hacía recordar tantas cosas.

- Chicos, están saliendo murciélagos- dijo Jimin ubicándose detrás de Hoseok.

Jungkook tomó las mejillas del mayor, y sin dudar dejó un beso en los labios.

- Soy muy fuerte Tae, y tú también.- se separó abriendo sus alas.- Bien chicos, ustedes no dejen que los murciélagos lleguen dónde los guardianes, yo... Desapareceré esos hilos.

Los chicos le gritaron que tuviera cuidado y volaron hacia los murciélagos.

Jungkook tomó una pequeña lámpara que contenía aceite y voló hacia el fuego, escuchando en su mente la voz de Gieun, que confiara en su corazón, en sus alas y su alma.

Paró un momento mirando con temor al fuego, cerró sus ojos y votó aire tratando de enfocarse en lo que estaba por hacer.

Pidió al cielo que todo vaya bien, que todos su amigos no estuvieran herido y que por fin derroten a aquellas aves puras, incluso a su hermano, si todo se salía del control

Mientras aleteaba manteniéndose a flote, sus plumas y los mechones de su cabello poco a poco comenzaron a iluminarse de celeste, los iris de sus ojos tomaron la lista intensidad de color de aquella noche.

Y con sus alas en lo alto voló hacia el fuego y éste, cuando el chico pasaba, el fuego se alejaba de el, reverenciando ante el nuevo líder que la naturaleza y los híbridos reconocerían al instante.

La lámpara se prendió en llamas, Jungkook sintió el calor en sus garras y sonrió, voló hacia arriba del bosque y aún con sus alas iluminadas miró hacia sus compañeros que se encontraban en el piso retorciéndose de dolor, los gran Nivales tratando de mover sus alas pero solo se lastiman más y sus amigos peleando con los millones de murciélagos

Asintió confiando en su destreza y todo lo aprendido, y sin dudar voló cuesta abajo para tener más velocidad y que el hilo rojo no llegue a lastimarlo a tal punto de inmovilizarlo

Zelo al ver a aquel jovencito con sus alas iluminadas volando hacia el baúl que contenía las perlas, se levantó abriendo sus alas.

- ¿Es un líder? No puede ser, los líderes del árbol no deberían existir más ¡¿Acaso no dijiste que todos los guardianes llegaban contigo?!- gritó a Dyun quien miraba con odio al niño- ¡Yugyeom ve por él!- el chico asintió abriendo sus alas ya con manchas de sangre, tal y como los puros. Sus ojos se iluminaron de un color rojo y sonrió con malicia acercándose al menor.

Pero un chico con unas bellas alas blancas con pequeñas manchas de café y unos ojos iluminados de un color avellana apareció al frente de él negando con una sonrisa, quién en sus manos llevaba cuchillos.

- Déjalo en paz- murmuró muriéndose de miedo al ver aquella mirada tenebrosa del chico. Su rostro le hacía bastante familiar.

- Oh... Eres aquel débil mochuelo- rió fuerte- Y te atreves a "proteger a mi hermano"- Taehyung abrió sus ojos, recordando quién era, pero ya entendía porque no lo había reconocido. Su color de alas cambió drásticamente, su cabello igualmente y sus ojos llevaban más maldad. Sin duda ya era uno de los puros.

Jungkook cerró sus alas enrrollandolas en su cuerpo,  y bajó hacia el baúl con más rapidez.

Hasta que claramente sentía como varios hilos ingresaban en su cuerpo, sin embargo, solo sentía dolor, sus alas no se inmovilizaron.

Yugyeom gruñó cuando vió a su hermano lanzar la lámpara, esta cayó en el baúl y explotó, haciendo cenizas todas las perlas celestes. Los hilos desaparecieron, y sus compañeros se quedaron en el piso tratando de recuperarse.

Jungkook abrió sus alas, pero éstas se encontraban aún adoloridas y solo causó que cayera golpeando su cuerpo entumecido.

- ¡Jungkook!- gritó Taehyung yendo a verlo, pero Yugyeom fue más rápido y estampó al mochuelo contra la pared de una cueva más cercana. Agarró sus alas con sus garras y comenzó a lastimaras haciéndolo gritar de dolor.

- Nunca des la espalda a tu enemigo- murmuró en el oído del menor lastimando con más dureza.

Jungkook alzó su vista, jurando que había escuchado un grito y a lo lejos vió como Taehyung se retorcía de dolor, tratando de atacar a Yugyeom pero este era más fuerte porque estaba cerrado en ira. Jimin y Hoseok querían ayudarlo pero los murciélagos no los dejaban en paz

- ¡Puros! ¡Ataquen antes de que se estabilicen!- gritó Zelo y enseguida millones de aves salieron hacia los guardianes, pero todos ya se levantaron con dificultad pero con firmeza, asintiendo hacia los líderes Nivales que murmuraban el plan.

Gieun vió como Jungkook desesperadamente trataba de levantarse así que lo ayudó.

El mayor puso cada palma de sus manos en las alas del menor quien lo miraba preocupado, y las manos junto con las alas comenzaron a iluminarse de verde, luego de un rato  el mayor le sonrió.

- Eso fue demasiado admirable, Jungkook, pero la pelea recién comienza. ¡Vamos!-

Jungkook abrió sus alas, ya iluminadas y voló hacia donde estaba Taehyung y su ira creció cuando éste se encontraba totalmente desmayado y gotas de sangre chorreaban por sus alas

Pero su sorpresa fue grande cuando la persona quién lo sostenía se giró enfrentándolo, soltando al mochuelo.

- Hola hermano- habló Yugyeom tomando por el cuello a Jungkook y lanzandolo hacia un árbol.

Hoseok vió como el cuerpo de Taehyung comenzó a caer y voló hacia el, tomándolo en sus brazos. Pero se horrorizo cuando vió su piel pálida y sus alas totalmente lastimadas.

Jungkook se levantó con dificultad en la rama, pensando en que lo único que debía hacer es ir a ayudar a Taehyung pero su hermano voló hacia sus espaldas y lo golpeó tirándole del árbol y cayó estrepitosamente al piso, sus alas dejaron de iluminarse.

- Veo que aún sigues siendo débil, Kookie- rió Yugyeom volando por el bosque y yendo de nuevo dónde Jungkook para golpear su rostro

- Como te convertirás en líder si ni con tu hermano puedes pelear - Yugyeom caminó despacio hacia donde el menor mirándolo con burla.

- No eres mi hermano, ni de mi ni de Ailee. Mamá y papá estarían muy decepcionados de ti - Murmuró con firmeza mientras se levantaba, el mayor dejo de sonreír

- Me lo han hecho saber siempre, gracias Jungkook. Siempre han preferido al hijo menor

- Mamá hacia todo por ti, hyung, te cuidaba y quería que todo estuviera correcto y que estés tranquilo, yo sentía envidia de ti, porque papá te mimaba. Pero nunca viste y ahora te has convertido en alguien peor. ¡Solo mírate! - Yugyeom sonrió nuevamente

- Me gusta mi nuevo yo. Los tytos como tú y Ailee nunca triunfarán - Jungkook nego formando una sonrisa burlesca

- Dara y Zelo no triunfarán, de eso se encargan los gran Nivales. Los puros como tú desaparecerán - Yugyeom saco rápidamente un cuchillo y lanzo a su hermano haciendo que abra rápidamente las alas y se eleve esquivando al filoso cuchillo.

Pero tenía que admitirlo, Yugyeom era mucho más fuerte y rápido, tenía bastante fuerza en las alas.

Cuando el menor regreso a ver a Yugyeom, este ya no estaba y grito de dolor cuando las garras del mayor tomaron las alas y lo lanzo hacia el fuego.

Jungkook quiso moverlas para apoyarse en una rama pero de la manera que caía era difícil, podría lastimarse.

Cerró sus ojos y logro abrirlas pero aún así fue muy cerca de un árbol por lo que golpeó su hombro con este volviendo a caer.

- Los guardianes están acabados, hermano, los puros triunfaran y serán los líderes del árbol- escuchó a Yugyeom hablar por algún lado del bosque, y cuando sintió el aleteo de sus alas, se giró golpeándolo con una rama y éste cayó de espaldas riendo- Serán gloriosos.

- ¿Gloriosos? ¿Acaso no viste lo que nos hicieron, Yugyeom?- murmuró Jungkook en el piso- ¡Nos quitaron a nuestra familias y mira lo que te han hecho!

- Lo único que hicieron, es creer en mi- se levantó abriendo sus alas- ¡Creyeron en mi, cuando  nunca nadie lo hizo!- el rojo de sus alas se iluminaron al igual que el de sus ojos, y por primera vez, Jungkook tuvo miedo de su hermano.

Yugyeom con sus garras agarro el cuello de Jungkook, y lo estampó con un árbol, apretando su cuello y sonriendo cuando Jungkook solo cerró sus ojos dejando que varias lágrimas cayeran por sus mejillas, sintiendo dolor y decepción, no podía pensar bien al ver que su hermano veía cualquier oportunidad para matarlo.

El árbol al estar rodeado de fuego comenzó a debilitarse, trizandose por la fuerza que ejercía Yugyeom

Jungkook sintió como el arbol se partía como en dos, cayendo la parte de arriba hacia atrás. El menor miro la distracción de Yugyeom y con su garra rasgó gran parte de su ala por lo que el mayor clavó sus garras en el cuello contrario pero dejo de volar al tener su ala rota, trato de sostener de los brazos de su hermano que se había elevado pero solo rasguñó sus brazos y cayó, perdiendo de la vista a su hermano cuando una nueva ráfaga de fuego se alzó en el cuerpo de Yugyeom.

- Y-Yugyeom - Murmuró al no ver rastro del mayor, voló hacia el piso libre de fuego y observó las llamas que aumentaban su tamaño. Sus ojos se acumularon de lágrimas y cayó arrodillado mientras sollozaba con su mano en el pecho. - Mamá, papá. Lo siento, y-yo... Quise llevarlo conmigo donde los guardianes pero no quiso, prefirió a los puros, ellos... - alzó su mirada viendo desde lejos como los guardianes peleaban con los puros, y como Zelo arrastraba a Gieun hacia la cueva.

Taehyung

Sus ojos se iluminaron de miel intenso, su cabello y sus alas solamente de miel, el celeste quedó oculto al predominar la ira en el pequeño cuerpo de Jungkook.

- Los puros... Ellos pagarán, te lo prometo Hyung - tomó una rama rodeada de fuego y con su mirada fija en la cueva comenzó a volar, sintiendo la adrenalina, el odio y la tristeza recorrer por su cuerpo.

Fue con toda su rapidez para atacar el cuerpo de Zelo que se encontraba encima de Gieun golpeando su rostro.

Por supuesto que no se fijó en lo grande que era el ave, sus alas eran negras y sus ojos rojos. Zelo atrapó el cuerpo del niño inmovilizando sus alas y con sus manos acaricio el rostro sucio por el fuego de Jungkook

- Si tan solo te hubieras unido a nosotros como tu hermano. Nada de esto hubiera pasado - Jungkook giró su rostro tratando de que esas manos no lo toquen

- Deja al niño, Zelo, la pelea es entre nosotros - hablo Gieun tratando de levantarse pero estaba demasiado cansado y sus piernas no respondían a su pedido de levantarse

- No me arrepiento de haber ido con los guardianes. Ustedes son unos monstruos, roban a niños y hacen que se vuelvan despiadados y asesinos ¡Son unos monstruos! - el golpe que le dió Zelo al menor lo dejo aturdido, sintió un fuerte mareo pero no disminuyó su fuerza.

- Tu hermano lo fue, en un mes robo y mató a descenas de niños - Jungkook gruño

- ¡Por su culpa! ¡Fue por ustedes! - grito con lágrimas en sus ojos - Y yo lo mate - susurró sintiendo la presión en su pecho, Zelo abrió sus ojos sorprendido pero sonrió.

- Tienes la sangre en tus alas, Jeon Jungkook, tienes el odio y la ira como tu hermano, y lo mataste. Un gran peso en tus hombros ¿No? Se un puro y juro que todo esto lo olvidaré - Zelo quería al niño, ese niño con un fuerte entrenamiento se convertiría en alguien mucho más poderoso y fuerte que el mismo Zelo, sería capaz de reinar todo un mundo por su habilidad - Serás grande Jungkook, todos te conocerán y te alabarán. Serás su Dios.

Zelo sonrió cuando la mirada de Jungkook cambio a una pensativa, miro a Gieun quien era sostenido por puros y detrás de él, se encontraba Dara con una sonrisa. El agarre de Zelo comenzó a dejar de apretarlo y miró nuevamente a los ojos del ave pura.

- Lo aceptaré...- Zelo asintio con una risa de triunfo - Pero primero me deshare de ti - con una patada fuerte en la mandíbula contraria hizo que Zelo cayera de espaldas aturdido y con la rama de fuego entre sus manos la llevo al pecho, clavándole con rudeza viendo cómo los iris se volvían negros y su mirada cambiaba a una perdida, su piel se volvía pálida y sus alas de un gris.

- Lastimaste a mi hermana, y dañaste, maltrataste y te llevaste la vida de mi hermano, así que... Nunca hubiera estado a tu lado, por protección mía y de los niños- habló en el oído al gran tyto con una sonrisa tenebrosa y saco de su cuerpo la rama, ya apagada con sangre.

Dara siseo de dolor y ayuda, llamando a los pocos puros que quedaban, miro fijamente los ojos mieles intensos de Jungkook, y abrió sus alas manchadas de sangre cuando los puros estuvieron a su lado.

- Jeon Jungkook - susurró antes de volar rápidamente esquivando a los guardianes, desapareciendo de la vista de todos.

Jungkook soltó la rama y ya con sus ojos verdes oscuros, se arrodilló soltándose a llorar, tapando su rostro, sintiendo su pecho oprimido y con un gran nudo en la garganta.

Gieun aún en su estado de sorpresa, se acercó al niño y lo abrazó acariciando sus alas y su cabello.

- N-no pensé que ésto... Que ésto fuera tan horrible... Papá... Papá siempre lo contaba tan emocionante y heroico... Y lo único que pasó... Fue perder a mi hermano y posiblemente a mis padres...- Jungkook lloró más fuerte, alzando su mirada cuando recordó en el mochuelo herido- ¡Taehyung!... Taehyung estaba herido... El cayó y yo...

Gieun apretó el agarre en el menor. Los demás chicos llegaron dónde el menor y sus corazones se achicaron al escuchar el fuerte llanto del menor.

- Parece... Parece que hay que reescribir las crónicas ¿Verdad Jungkook?