
°♡. ꒰ c u a t r o ꒱. ♡°
Advertencia: pequeña escena sexual explícita.
. . .
JongIn partió dos días después.
Dejó a KyungSoo en la manada bajo la protección de JuSeon y luego de una despedida breve, porque ninguno de los dos quería alargar las cosas de más, él se dio la vuelta y se marchó sin mirar atrás.
Decidió que dejaría de lado los lugares cercanos a la aldea y su propia cabaña, pues la tentación de volver pronto podría domar su juicio y sus decisiones; entonces corrió hacia el este, hacia montañas diferentes que hablaban de su pasado y su tiempo en manada, y se mantuvo ahí, refugiándose entre los recuerdos dulces de una vida que ya había terminado.
El primer día había sido bastante fácil de sobrellevar. Fue algo de rutina llegar a la vieja cabaña donde había vivido junto a sus padres, deshacerse de sus cosas y comer algo antes de echarse en la salita y dormir para reponer las energías gastadas.
El segundo día presentó sus respetos a su familia, rezó frente a las lápidas bien cuidadas sobre la colina cercana y expuso su corazón a ambos, pidiendo consejos y fortaleza a sus espíritus.
El tercer día cazó y, después de tantos años, decidió que sería buena idea reparar correctamente la cabaña abandonada. Para sus padres y para su propia distracción.
Así pues, con algo que hacer con sus manos y la mente vacía de cualquier cosa que no fuera clavar clavos, solucionar problemas de humedad y rehacer paredes deshechas, JongIn sobrevivió a varios días sin KyungSoo y su compañía.
De esa manera, JongIn se concentró en superar sus dificultades.
Trabajó duro durante el día, y cuando caía la noche se dedicaba a pensar profundamente en sí mismo, en sus capacidades, en su condición como hombre, en lo que podía y no podía hacer, sus planes a futuro, la exposición real de sus deseos y pensamientos sin juicio al verse solo y lo que quería conseguir con el tiempo.
De esta manera, sin verse influenciado y encontrándose lo suficientemente lejos, él pudo traer al mundo los sentimientos y los pensamientos que se habían mantenido bajo llave durante tanto tiempo.
No puedo seguir mintiéndome. No puedo seguir posponiéndolo. Lo amo, lo amo profundamente, justo de esa manera en la que un hombre ama a otro hombre, como las almas gemelas se adoran, y no puedo retrasarlo por más tiempo.
Pensó esa noche mientras se dedicaba a empaquetar la carne que conservaría, la presa mediana ya limpia y deshuesada había sido colocada a un lado y su pecho y sus brazos se encontraban completamente desnudos para evitar estropear la ropa con la sangre fresca del animal.
Mis sentimientos han cambiado, y sin darme cuenta me encuentro deseándolo, me encuentro pensando en ser fuerte para protegerlo como mi pareja, me encuentro deseando ser un alfa digno para ganarme la posibilidad de tener una familia a su lado. Solo quiero ser aceptado, ser capaz de darle lo que necesita y hacerlo feliz como un hombre y no como un simple protector al que le debe la vida. Quiero que me ame como solo los adultos pueden hacerlo, quiero que me anhele, que me desee, que me quiera a su lado como su compañero, como su alma. Quiero dejar de ser una figura imponente que debe ser respetada incondicionalmente. Para él, quiero ser el amante valioso que cualquiera querría obtener en este mundo.
Adoraría ser extrañado y que su corazón se derrita al verme. Quisiera que él sienta deseos de hacerme el amor y entregarse a mí por completo. Quiero todas esas cosas y más, y solo puedo esperar a conseguirlo algún día, cuando él crezca y sepa realmente lo que quiere hacer conmigo, con nosotros.
No obstante, mientras eso ocurre debo seguir aquí, conociéndome y permitiendo que él se conozca a sí mismo. Solo entonces, completamente compaginados, podremos decidir plenamente sobre nuestros corazones y nuestros sentimientos. Así hallaremos la plenitud absoluta.
Con esto en mente, su lobo se encontró considerablemente más tranquilo y sensato de lo que habría estado siendo los últimos días, y eso le dio tranquilidad.
Trabajar después de ello fue significativamente más sencillo.
.
"KyungSoo te extraña, JongIn. ¿No vas a comunicarte con él aún?"
JongIn suspiró y dejó a un lado los trozos de leña que había estado cortando. Pronto llegará el invierno y el frío comenzaba a calarle los huesos, así que debía trabajar duro para mantener la casa caliente.
Secó el sudor de su frente y apoyó su mano en su cadera mientras la voz de BaekHyun fluía en su mente.
"Ha estado en medio de esta aura extraña y no hace más que mirar hacia las puertas de la aldea cada dos por tres. ¿No es algo cruel mantenerlo de esta manera?"
JongIn sintió como sus hombros se tensaba repentinamente y su lobo le dio un arañazo como obvio regaño.
"¿Ha sido de esa manera? No pensé que llegaría a ese punto..."
"Pues ha sucedido, así que sé responsable y hazte cargo. Ya es lo suficientemente duro para él saber que estás lejos, no le quites también la posibilidad de escucharte de vez en cuando."
JongIn se sintió avergonzado, como un pequeño niño reprendido, y era justo.
Honestamente no había recurrido a KyungSoo porque temía ser demasiado débil ante su voz, sucumbir a su anhelo y volver a su lado antes de tiempo, pero ahora que sabía que el chico estaba pasándola mal por su falta, no podía dejarlo ni ignorarlo por mas tiempo. Había una línea muy fina entre su bienestar personal y el daño que puede causar su egoísmo, y no estaba dispuesto a traspasarla aún más.
No para KyungSoo, al menos.
"Está bien." Dijo con suavidad. "Voy a hacerme cargo de todo, no te preocupes, BaekHyun. Y gracias por avisarme."
BaekHyun se quedó con él un poco más, así que se pusieron al día y hablaron sobre los chicos con mucha más facilidad ahora que JongIn le había dado su palabra sobre abordar la situación con KyungSoo, y finalmente se despidieron cuando el sol comenzó a caer y BaekHyun tuvo que hacerse cargo de la comida.
JongIn recogió su hacha y la leña que ya había cortado y se dirigió hacia la pequeña cabaña. Encendió las luces y dejó la madera a un lado, en una esquina habilitada para ella, luego se dirigió al baño y se encargó de darse una ducha profunda y necesaria.
Se deshizo de la suciedad y el sudor del día, de la grasa del pelo y las preocupaciones que le había infundado BaekHyun, y cuando se encontró mucho más relajado y dispuesto a entablar una conversación sin parecer extremadamente culpable o preocupado, tocó puerta en la mente de KyungSoo.
Ya vestido y acostado sobre la cama, JongIn aguardó pacientemente por una respuesta.
Cerró los ojos, insistiendo suavemente en la mente de KyungSoo, y finalmente sintió como su corazón daba un vuelco al hallar el paso totalmente libre para él. La voz dulce y rica de KyungSoo llegó un momento después, y entonces todo volvió a tener sentido en su vida.
Se sintió inmediatamente reconfortado y acompañado.
"¿JongIn?"
"Hey. ¿Cómo estás?"
Hubo un pequeño momento de silencio y lo más parecido a una exhalación siendo percibida por su lazo.
"Realmente eras tú... pensé que estaba alucinando sobre esto."
"Bueno, no lo estás haciendo." Dijo con afecto y ternura y JongIn colocó una mano sobre su pecho para sentir su corazón agitado contra su palma. "Lamento no haberme puesto en contacto antes; había estado ocupado durante este mes."
"Está bien, me has hablado ya, ¿no es cierto?" Otra pausa ligera más y JongIn cerró los ojos, esperando con paciencia. "¿Dónde has estado? ¿Qué has estado haciendo? ¿Puedo saberlo?" Preguntó tímidamente, como si no quisiera molestarlo con sus preguntas o parecer entrometido, no obstante, no podría ser nunca de esta manera. JongIn no tenía problemas con responder a esto.
"Me encuentro bastante lejos de la manada, en el hogar de mis padres, y he estado reconstruyendo su casa. Es algo que les debía y que por fin he podido saldar adecuadamente."
"... Oh... pensé que te habías ido a la ciudad y conocido algunas mujeres bonitas." Sus palabras vulnerables e inseguras provocaron un alzamiento en sus cejas y una confusión absoluta, y aparentemente KyungSoo pudo descifrarlo porque pronto se encontró explicando: "Es porque no habías hablado conmigo; creí que habías conocido a alguien y te sentías libre sin mí a tu alrededor. Lo siento."
Esto cayó como un balde de agua fría directamente a su corazón cálido por escucharlo nuevamente y le hizo saber la importancia del asunto, la gravedad del mismo y parte de los sentimientos de KyungSoo. Y todos ellos fueron dolorosos.
JongIn no tardó en intentar enmendar la situación lo mejor posible.
"No se trata de eso, nunca podría tratarse de eso. No me fui para buscar mujeres ni librarme de ti, KyungSoo, jamás podría hacerlo, y quiero que lo tengas presente todo el tiempo. Para mí no hay nadie más valioso que tú. Eres completamente irremplazable."
"Eso... eso es dulce y me hace sentir muy feliz. Gracias por decírmelo, JongIn, y por no olvidarme. Es reconfortante saber que me estimas de esa manera." Dijo con suavidad, como si hubiera encontrado algo de tranquilidad al escucharlo, y esto trajo tranquilidad al propio JongIn.
"Está bien." Susurró con cariño y un ramalazo de complacencia y calidez fue perceptible desde su vínculo.
"... JongIn, ¿puedo ser honesto contigo?"
JongIn se acercó a su almohada y giró el cuerpo para acomodarse en posición fetal. Su mirada cayó sobre la pared de madera frente a él y su propio aroma lo saludó en la tela de la funda limpia.
"Puedes serlo."
KyungSoo aguardó mientras organizaba sus ideas y, al sentirse preparado, comenzó:
"Durante este tiempo he estado pensando mucho y me di cuenta de muchas cosas." JongIn apretó su mano sobre su camisa, justo en el lugar exacto donde reposaba su corazón agitado, y los ojos brillantes de su alfa resplandecieron en su interior, completamente expectantes y atentos. "Descubrí que sé tan poco sobre ti; puedo reconocer la superficialidad de lo que te compone, pero soy tan ignorante de todo lo demás, de lo que hay en lo más profundo de ti mismo, y eso me hace sentir tan miserable."
JongIn frunció el ceño y trató de consolarlo nuevamente.
"KyungSoo..."
"No, por favor, déjame continuar." JongIn calló de inmediato, desistiendo fácilmente al saber que el chico necesitaba esto, y volvió a acurrucarse en la misma posición sobre la cama con el ligero toque de la incertidumbre sobre su cuerpo. KyungSoo suspiró y retomó su palabra.
"Ahora que no estás me he hecho muchas preguntas, preguntas que nunca habían aparecido en mi mente. Quería saber adónde ibas cuando salías de casa, cuáles eran tus pasatiempos favoritos, qué comida te gustaba más, qué tipo de personas te atraían, qué cosas te motivan, cuál es tu aroma preferido, cuántos hijos quieres tener en el futuro o si quieres hijos... sin embargo, cuando intentaba responder alguna de ellas me daba cuenta de que no sabía las respuestas. Que no te conocía tan bien como lo había pensado en un inicio, y eso me hizo sentir realmente triste y deprimido."
"Tú me conoces completa y absolutamente, ¿cómo no puedo hacer lo mismo entonces, cuando viví gran parte de mi vida a tu lado? Me sentí incrédulo y tonto y una persona horrible, así que quería verte y pedir perdón por todo, por ser un egoísta y no tratarte como lo merecías. Tú siempre has facilitado todo para mí, me has puesto siempre en el primer lugar y yo he olvidado dártelo de vuelta."
"Oh, KyungSoo..."
"Lo siento, yo solo... quiero que las cosas sean diferentes, pero ahora no estás y yo..."
"Está bien, está bien, cariño. Podemos hacerlo, no hay necesidad de sentirse mal por ello. Sigo estando aquí, no tienes que pensar lo contrario jamás." Dijo con convicción, con toda la fortaleza que le faltaba a KyungSoo en ese momento. "Aunque no me tengas a tu lado físicamente, sigo estando contigo, aún permanezco junto a ti, así que puedes preguntarme lo que quieras, puedes hablarme cuando quieras, y yo te responderé siempre, ¿de acuerdo? Solo... sé paciente, cielo, y espera un poco por mí. ¿Puedes hacer eso? ¿Puedes soportarlo solo un poco más?"
A través de su vínculo, JongIn fue capaz de experimentar una serie de sensaciones y sentimientos confusos e intensos que llenaron por completo su corazón, que alertaron a su lobo atento y aceleró su respiración. Era melancolía, resignación, fortaleza, felicidad y amor. Eran sensaciones hermosas y valiosas y todas provenían de KyungSoo.
Entonces era fácil tomarlas y atesorarlas, mantenerlas en su interior y aceptarlas de la misma forma que lo había aceptado a él.
JongIn se sentía afortunado por ser el objeto de estas emociones suyas.
"Claro, JongIn; después de todo lo que has hecho por mí esto es lo mínimo que puedo otorgarte... ¿prometes responderme siempre?"
"Por supuesto. Solo tienes que tocar la puerta y ahí estaré."
Y con esto, ellos pudieron hallar una zona de comodidad y seguridad nuevamente. Hablar después de ello nunca resultó ser tan fácil.
. . .
"¿Sabes? Estaba preguntándome muchas cosas sobre tu niñez y realmente estoy curioso por saber cómo fue tu infancia."
JongIn se encontraba cocinando cuando KyungSoo había decidido comunicarse repentinamente con él. Lo había aceptado de inmediato e iniciaron una conversación fácil y cómoda rápidamente y ahora habían llegado a este punto.
JongIn movió la cabeza de un lado a otro mientras enjuagaba algunos tomates frescos y comenzó a cortarlos con soltura, hundiéndose suavemente en los recuerdos que contenían a un JongIn mucho más joven e inexperto.
"Bueno, definitivamente no fue mal" dijo con sinceridad. "Vivía con mis padres en una manada llamada WIL y era bastante feliz. Podría decirse que era una clásica infancia tranquila y armoniosa con padres que se amaban y vecinos atentos."
"¿De verdad? ¿Eras inquieto?"
JongIn sonrió y colocó los trozos de tomate cortado en un tazón limpio.
"No era tan inquieto. Tenía la energía de un cachorro cambiaformas y solía juguetear mucho alrededor de mi padre, pero también fui bastante obediente. Quiero creer que nunca le di muchos problemas a mamá y papá."
"Seguramente eras un niño lindo y dulce... desearía haber nacido al mismo tiempo que tú para poder tener una niñez juntos y no haberte causado tantos problemas mientras cuidabas de mí."
"Mnn. Nunca me causaste problemas; eras un cachorro lindo y enérgico, así que seguirte el juego era sencillo y agradable."
JongIn sintió un tirón de calidez ajeno y su sonrisa se amplió un poco más.
"Eso es reconfortante" dijo KyungSoo con un tono especialmente suave y cariñoso. "¿Y qué ocurrió con la manada WIL? Nunca oí hablar de ella a nadie en la aldea."
JongIn volvió a tararear, y sin sentirse extremadamente dolido o lastimado, respondió:
"Es porque fue arrasada por otra manada hace muchos años. El líder de la manada Jung anhelaba nuestro territorio de caza y los omegas solteros de nuestra aldea para satisfacer sus necesidades; por supuesto, el antiguo líder no dio su brazo a torcer, preocupado por la seguridad de nuestra gente, y esto los llevó a ambos a una lucha terrible. Para entonces, las sedes del Consejo no estaban al alcance de todas las manadas como ahora, así que fue imposible pedir su intervención; y así, antes de darnos cuenta de cuándo ocurrió, WIL quedó completamente destruida y los pocos sobrevivientes de la guerra tuvieron que huir para evitar ser esclavizados por Jung. Yo fui uno de ellos."
Hubo un momento de silencio ininterrumpido donde JongIn se dedicó a cortar tomates para darle su espacio y que KyungSoo pudiera pensar en lo que había dicho, sin embargo, notando que este comenzaba a extenderse, volvió a tomar la palabra.
"Pasó hace mucho tiempo, Soo, ya lo he superado, así que no tienes que preocuparte por ello."
"... Aún así, creo que debió haber sido muy díficil a partir de entonces. ¿Tus padres...?"
"Sí. Me ocultaron cuando todo explotó; para cuando la disputa terminó y pude regresar por ellos, no había nadie para salvar. Pude recuperar sus cuerpos gracias a la ayuda de un miembro noble de la manada Jung, y después de eso no me quedó otra opción más que irme."
"Su sacrificio provocó que hoy pudiera estar vivo... se parecen a tu padre, KyungSoo. Mis padres y el tuyo, todos fueron muy buenos, amorosos y gentiles. Estoy agradecido por haberlos tenido en mi vida, y hoy no puedo sentirme triste. Siento sus espíritus conmigo todo el tiempo y eso me deja en paz."
"... Has pasado por muchas cosas, ¿no es cierto?"
"Sí, supongo que es de esa manera... era inevitable, ¿no lo crees?"
"Y, no obstante, aún así eres tan bueno y amable... eres increíble, JongIn. Eres un hombre maravilloso, y estoy tan agradecido porque sigues con vida. Tus padres fueron muy buenos al traerte al mundo para poder encontrarte en mi camino."
JongIn se detuvo y llevó una mano a su pecho, apretando la tela de su camisa por un momento antes de darse un par de palmaditas que buscaban tranquilizar los latidos acelerados de su corazón y el entusiasmo repentino de su alfa.
Porque KyungSoo diciendo esas cosas y escuchándose orgulloso y lleno de admiración hacia él era algo muy agradable, muy dulce y especial. Provocó muchos sentimientos y emociones y JongIn estaba luchando muy duro para no ronronear.
"Qué palabras tan dulces... me siento conmovido."
KyungSoo resopló, divertido y afectuoso, antes de murmurar en su mente:
"Eso es agradable."
Sí. Era muy agradable.
"¿Cómo volviste entonces a tu antiguo hogar si la manada WIL fue tomada por otra?" Preguntó suavemente cuando habían conseguido la comodidad suficiente para ello. Para entonces, JongIn había terminado de cortar sus tomates y preparado una carne jugosa y de aspecto delicioso.
Sirviéndose en un tazón y luego moviéndose para agregar rodajas de pepino y zanahoria junto a los tomates para una ensalada sencilla, JongIn respondió.
"Es porque un tiempo después de que el conflicto terminó, el Consejo, alertado por algunas denuncias, tomó cartas en el asunto. Destituyó al líder Jung y lo encarceló, mientras que la manada, cuyos miembros eran mayormente sometidos y esclavizados, partió a otras tierras para olvidar el pasado. Ahora WIL no es más que un lugar vacío, abandonado y remoto. Hay varias casas destruidas y en mal estado por el transcurso de los años y la hierba es alta y descuidada. Ahora mismo estoy haciendo todo lo posible por arreglarlo lo mejor que puedo."
"Ya veo... ¿reconstruirás esas casas cuando acabes de remodelar la de tus padres?"
"Sí, probablemente lo haga. Como el único sobreviviente de mi manada que vuelve aquí cada cierto tiempo, es mi deber ayudar a descansar a mis hermanos. Me tardé mucho tiempo en hacerlo y quiero saldar esta deuda."
Se mantuvieron en un cómodo silencio después de eso y KyungSoo le dio tiempo de terminar de preparar su ensalada y llevar su comida a la mesita en la sala de estar. Se sentó en el suelo, tomó sus palillos y le dio un bocado a la carne tierna.
Era realmente delicioso.
"Seguramente tus padres se encuentran muy orgullosos de ti."
JongIn se detuvo repentinamente y su corazón dio un vuelco al escuchar las palabras gentiles y honestas de KyungSoo de una forma tan nítida que él fácilmente podría estar a su lado, susurrando esto en su oído, y no habría diferencia.
El pensamiento de sus padres felices le había llevado calidez a su alma, un calor tan puro y profundo que tuvo que suspirar para demostrar de alguna forma el sentimiento. Era un consuelo muy dulce, le dio seguridad y le animó a continuar trabajando día a día en esto.
Después de tanto tiempo luchando con el recuerdo de sus padres, de su gente y su antiguo hogar, ahora podía recurrir a ellos con familiaridad, sin tristezas ni ligera impotencia, así que sí, probablemente ellos estaban orgullosos del hombre que era hoy en día.
Después de la llegada de KyungSoo, mi mundo y mi forma de ver las cosas ha cambiado por completo. Creo que están felices de verlo, ¿no es cierto?
Sin esperar respuestas, pero sintiéndose de la misma forma cálida y feliz, JongIn aceptó esto fácilmente y se fundió en su hogar y en el valor del mismo para su vida.
Y ahí, en esa salita iluminada que evocaba las memorias distantes de un JongIn joven y feliz, con KyungSoo acompañándolo en su mente y sus padres en su corazón, JongIn no se sintió solo.
Nunca más podría estarlo.
.
Sentado en el porche de la casa de sus padres, JongIn observó cómo los árboles finalmente habían cambiado el color de sus hojas y la montaña vestía sus faldas de rojos, naranjas y amarillos.
Era hermoso y vibrante, lleno de vida incluso antes de desnudarse completamente y darle paso a una muerte momentánea teñida de blanco helado.
El otoño es maravilloso, piensa con tranquilidad. Es capaz de verse bello y dar un soplo de cómodo aliento antes de desaparecer. Es una fría hermosura antes del cambio; una transformación completa y natural. El otoño es un etéreo principio del fin.
Es un poco como yo. Estuve en medio de esta estación durante gran parte de mi vida y ahora me encuentro siendo parte de esta transición fascinante. Antes de darme cuenta, después de pasar este invierno personal, hallaré la primavera y me fundiré en su calidez.
Una ráfaga de viento helado golpeó su cuerpo y JongIn sostuvo su taza de café entre sus manos para llenarlas de calor. La nariz estaba fría y su pelo era una bola desordenada y helada; se preguntó si en la aldea estaba haciendo tanto frío como aquí, y porque su lobo era inquieto y se encontraba susceptible a estos pequeños detalles, no dudó en tocar la puerta mental de KyungSoo.
Esperó pacientemente y su alfa se removió con deleite al recibir respuesta no mucho después. Lobo tonto e intenso, completamente débil ante su compañero.
"¡JongIn! ¡Hola!" Saludó con entusiasmo y JongIn sonrió en respuesta.
"Hola, KyungSoo. ¿Cómo estás?"
"¡Muy bien! Estoy ayudando al tío BaekHyun a cuidar a los cachorros. Me ha dado trabajo recientemente, así que tengo algo bueno que hacer."
"Oh, ¿es así? ¿Te han tratado bien?" Preguntó con cariño, sintiendo que era imposible no ser feliz al escucharlo de esa manera y saber que había encontrado algo bueno para distraerse de sus días monótonos en la aldea.
Viendo que él también estaba encontrando un lugar, madurando y buscando la manera de dirigir su vida a un ritmo adecuado a su edad.
"Sí, lo han hecho. Los niños son muy buenos conmigo y he hecho un par de amiguitos nuevos... JaeKyung también está esperando un cachorro y es probable que sea su maestro, así que estoy muy feliz."
JongIn se sintió aliviado al no detectar tristezas ni melancolías al escucharlo hablar de JaeKyung y su lobo gruñó con aprobación, sintiéndose especialmente satisfecho y complacido.
"Eso es muy bueno, me alegra saberlo, KyungSoo."
"Gracias, JongIn... oye, ¿puedo saber a qué se debe tu llamado? No me molesta, pero fue bastante repentino."
JongIn no podía culparlo por preguntarle esto. Normalmente ellos hablaban en la noche, se ponían al día con lo que habían hecho y luego se iban a dormir, así que era un poco desconcertante que JongIn rompiera la rutina de un momento a otro (incluso él se sentía un poco sorprendido por el despliegue de confianza y la nula represión a su lobo antes de llamar a KyungSoo).
No dijo nada de esto, sin embargo, y simplemente le dio un sorbo a su café humeante. Luego, al tragar y volver a la calma, contestó:
"Es porque está haciendo frío; quería saber si estabas bien abrigado."
Una explosión caliente y dulce en su conexión y una agitación en su lobo en respuesta y JongIn supo que había conmovido al chico con esto. Era una cursilería tonta hablarle por esta razón, pero era inevitable.
Era un alfa que se encontraba lejos de su compañero, así que no podía cuidarlo por sí mismo. Su instinto era indomable en ese punto y él no pudo no preguntarle aquello. Su bienestar, su salud, todos estos pequeños detalles eran cosas de las que quería hacerse cargo para toda la vida, y este movimiento ligero era una muestra de ello.
Para que KyungSoo supiera que siempre estaba en su pensamiento, que siempre se preocuparía por él y que era valioso.
"Ah, yo... sí, sí, estoy bien abrigado, no te preocupes, JongIn. JungWoo cuida muy bien de mí... ¡no por alguna razón extraña! ¡Es un buen amigo, no somos nada más! ¡No veo a JungWoo de esa manera! É-él solo me lo recuerda constantemente y yo..."
JongIn rió divertidamente y su lobo resopló, completamente cautivado ante su desesperación. Era lindo y JongIn sentía que su corazón corría a toda prisa ante las explicaciones innecesarias de KyungSoo.
"Está bien, yo lo sé. Puedes calmarte, Soo." Le dijo con suavidad, sincero y comprensivo, y KyungSoo detuvo sus balbuceos de inmediato. Contrario a ellos, una calma y un alivio pronunciados se encontraron muy presentes entre ellos y JongIn les dio la bienvenida, como lo hacía con todo lo que tenía que ver con KyungSoo.
"Mnn. Bien... solo quería que lo supieras. No hay nadie que me guste de esa manera, ¿está bien?"
"Está bien."
"Bueno."
JongIn sonrió y su mirada se clavó en los árboles en el horizonte, rodeando la zona y embelleciéndolo todo. Quitaban el aire desolado, el abandono y la falta de calor humano y lo llenaban de vida y de una misticidad clásica de los bosques inexplorados.
Es una imagen pura. Este es un momento lleno de paz y armonía, y mi corazón no puede dejar de saltar.
"Te quiero, JongIn."
Badum. Badum. Badum.
JongIn cerró los ojos y el frío del otoño fue incapaz de apagar el calor en su interior, el afecto y el cariño constante haciéndose cada vez más grande y profundo.
"Te quiero muchísimo."
Exhaló una bocanada de aire que obstruía e incomodaba su garganta y sus labios se alzaron un poco más, arrugando las esquinas de sus ojos cerrados y levantando sus mejillas delgadas.
"Y yo a ti. Te adoro, KyungSoo."
. . .
A pesar de que JongIn había encontrado a su compañero y que este se encontrara en la edad adulta, su rutina no hizo nada por retroceder y esperar.
No ocurrió cuando KyungSoo llegó por primera vez a su vida y definitivamente no lo hizo ahora que él era un adulto esperando su primer celo. En dado caso, JongIn sintió que este rut era un poco más intenso y complicado que los anteriores porque KyungSoo estaba casi listo y preparado para recibirlo en su abrazo y su instinto lo llamaba desesperadamente.
Era desesperante, JongIn sentía que podría enloquecer fácilmente en este punto.
Sudando y jadeando, con el cuerpo ardiendo y completamente adolorido sobre la cama, JongIn no pudo contestar los llamados mentales de KyungSoo. No si quería mantener el gramo de cordura que aún le quedaba.
Entonces reforzó su mente y llevó una mano a su polla enfurecida, cargada y preparada para anudar.
El contacto fue más doloroso que placentero y él no pudo reprimir un gruñido bestial y desesperado.
Anteriormente había recurrido a algunas parejas sexuales cuando la rutina lo golpeaba, no obstante, ahora no pudo hacerlo. El pensamiento constante de KyungSoo, su mirada, sus palabras y los sentimientos que le dejaba sentir a través de su conexión estuvieron tan presentes en él que la sola idea de buscar a alguien dispuesto a tomarlo le repugnaba.
Se sentía incorrecto, completamente fuera de lugar, y solo pudo soportar este dolor con el recuerdo de KyungSoo en su mente y su mano apretando su miembro como si quisiera arrancarlo para dejar de sentir esa desesperación y necesidad.
Desnudo y sudoroso, agitado y furioso, JongIn frotó su pene con la palma abierta; fue salvaje y necesitado, acunó sus testículos y los apretó, los frotó en su palma rasposa y movió toda su mano sobre su sexo húmedo.
Su respiración era sonora en su habitación y las caderas se alzaban y movían sin ningún tipo de control. Sobre su labio inferior descansaban sus colmillos hormigueantes y un aullido agudo y feroz rompió el silencio de la casa.
Con los pies bien plantados en el colchón, JongIn embistió su mano, rodeó su polla mojada y palpitante con un agarre pétreo y se masturbó con frenesí, tan descuidado y apresurado que podría ser lamentable.
Era un completo desastre.
Hubo un toque en su mente y el corazón de JongIn dio un vuelco, su polla saltó contra su mano y el nudo se volvió más caliente, mucho más perceptible ahora que sus testículos se encontraban completamente llenos y KyungSoo había llegado a su mente para buscarlo.
Si supiera que estoy haciendo esto mientras pienso en él, ¿cómo me vería? ¿Qué sentiría?
Las preguntas fueron tan excitantes como complejas y su lobo gruñó con insatisfacción.
Quiero que sepa lo que estoy haciendo. Quiero que sea consciente de lo dura que me pone la polla. Quiero que me mire y me toque, que sostenga mi sexo en su mano pequeña y me masturbe hasta llenar sus dedos con mi semen.
Quiero que me tome en su boca, que me pruebe profundamente antes de desnudarlo, volcarlo en la cama y tomarlo tan profundamente que su vientre de hinchará y en su interior crecerán mis cachorros. Yo lo deseo, yo lo necesito, lo anhelo tan mal.
JongIn cerró los ojos con fuerza y un segundo toque en su mente lo hizo apretar aún más su pene, los músculos de su vientre se contrajeron y un gemido estrangulado dejó su garganta tensa.
Si supiera lo que quiero hacerle, ¿me vería como un monstruo o estaría bien con ello? ¿Me temería o me aceptaría? Soy un hombre retorcido que no hace más que tratar de nadar en contra de la corriente, esperando pacientemente mientras trato de hacerme cargo de mis emociones y deseos malsanos.
Quiero que la corriente me lleve y me deje a su lado y, no obstante, aún me encuentro aquí, solo, consolándome con imaginaciones retorcidas y el recuerdo permanente de su olor sobre mi piel.
Un tirón en su alma, un llamado anhelante, y JongIn se encontró rodeando su glande, esparciendo el líquido viscoso a su alrededor y luego frotándolo con el pulgar. Dolía, pero era un dolor placentero, era un dolor que despegaba su espalda de la cama, le hacía abrir las piernas e instaba a tomarse con más fuerza y violencia que antes.
JongIn gimió largamente, profundamente, y se mordió el labio inferior hasta que la sangre salpicó su lengua.
Quiero saber cómo se siente correrme con KyungSoo tan cerca de mí. ¿Puedo obtenerlo?
"Te quiero, JongIn."
JongIn jadeó desesperadamente, apretó los párpados cerrados y echó la cabeza hacia atrás, a la almohada húmeda por el sudor.
"Te quiero muchísimo."
"Te quiero."
"JongIn."
"JongIn."
"¡JongIn!"
ㅡ¡Mierda!
Sus pies se hundieron aún más en la cama y el semen viscoso y caliente se derramó sobre su vientre tenso y su mano temblorosa. El nudo se hinchó aunque no había nada para engancharse y su miembro inflamado palpitó copiosamente bajo su agarre.
Agitado, aún caliente y con su alfa insatisfecho, JongIn colocó su antebrazo sobre sus ojos y trató de regular su respiración lo mejor posible. En su mente, KyungSoo había dejado de insistir.
Es gracioso. Me ha dado el mejor orgasmo de mi vida y ni siquiera es consciente de ello. De verdad, mi mente está estropeada por completo.
Dejó ir su pene caliente y alejó su brazo para mirar su mano llena de su esencia. Su corazón saltó y su lobo se removió y él no dudó en acercar los dedos manchados a su boca y lamer por completo el semen rico y recién ordeñado.
El sabor explotó en su boca, masculino y agradable, y JongIn tarareó con aceptación.
Le gustará cuando lo pruebe. Me encargaré de que no sea desagradable para él.
El pensamiento llegó directamente a sus bolas y una nueva oleada de calor lo golpeó. Ardiendo, JongIn gimió con desesperación, tomó una almohada y la colocó contra su sexo antes de comenzar a frotarse violentamente contra ella.
Lo haré bien para ti, KyungSoo. Solo espera un poco por mí y te lo daré todo.
Y con ese pensamiento y la promesa tácita de pertenecerle íntimamente en la posteridad, JongIn montó la colina del dolor y del placer por su propia cuenta y se alejó de todo a su alrededor durante tres días intensos y furiosos.
. . .
JongIn se sentía avergonzado cuando su rut terminó y la consciencia cayó sobre él con todo su peso.
No fue capaz de atender los llamados de KyungSoo, no cuando estaba lidiando con una culpa tan latente, así que se dedicó a correr en el bosque como un alma salvaje y descontrolada para tratar de distraer su mente de los recuerdos frescos.
Había fantaseado con hacer el amor con KyungSoo, se había corrido numerosas veces imaginando su rostro, su voz y su cuerpo y su lobo se había retorcido de placer con la imagen irreal de KyungSoo llevando a sus cachorros. Entonces, sí, era complicado e incómodo escucharlo y conversar con él como si nada hubiera pasado.
¿Huir de KyungSoo lo solucionaba todo? Oh, no, por supuesto que no, no obstante, prefería esto a ser un nudo imposible de desatar mientras hablaba con su compañero. Al menos por ahora JongIn se permitiría ser un cobarde.
Su cobardía duró cuatro días después de su celo.
Sintiéndose como una mierda aún más putrefacta, decidió que no podía seguir ignorando los toques constantes y desesperados de KyungSoo en su mente.
Él probablemente estaba preocupado y JongIn se encontraba perdiendo el tiempo en su mierda de señalamientos y lástima. Así pues, pensando que debía enfrentarlo finalmente y ser un adulto responsable, JongIn exhaló profundamente, reunió todo el valor que era capaz de obtener de sí mismo y tocó tímidamente la puerta en la mente de KyungSoo.
Al principio no hubo nada. Ninguna respuesta, ningún sentimiento, nada que le alertara de que KyungSoo estaba despierto; esto le había llevado tanto alivio como decepción, y dispuesto a aceptarlo, JongIn se encontró a punto de retirarse para darse una ducha mientras reflexionaba por todas las cosas indecentes que había hecho (como venía ocurriendo en los últimos días).
Sin embargo, antes de alejarse completamente, algo cambió. La mente de KyungSoo se unió a su conexión y una ola de sentimientos y emociones desenfrenados lo golpearon al mismo tiempo. Era una avalancha poderosa que lo dejó sin aliento por un segundo y JongIn tuvo que tomarse un momento para intentar reponerse y volver a estabilizarse.
"¡JongIn! Oh, Dios, ¿estás ahí?"
Aún sintiéndose abrumado, JongIn asintió torpemente antes de recordar que no podía ser visto por KyungSoo. Corrigió entonces su respuesta y susurró en voz baja y tímida.
"Sí, estoy aquí. Lamento tardar en contestar."
"Gracias a Dios, gracias a Dios. Estaba tan preocupado por ti y yo... ah, mierda, no vuelvas a desaparecer de esa manera, JongIn... n-no lo hagas de nuevo..."
Hubo inestabilidad en la conexión entre ambos, algo que saltaba y se entrecortaba y lo hacía todo un poco difuso; era porque KyungSoo estaba llorando y no podía concentrarse lo suficiente para poder mantener en pie el enlace, JongIn lo supo no mucho después, y el conocimiento de esto profundizó su culpa.
El lobo, avergonzado y triste, chilló lastimeramente en su interior y JongIn se llevó una mano al pecho para intentar consolarlo, consolarse a sí mismo y consolar a KyungSoo.
"Está bien, lo siento. Lo siento mucho, KyungSoo, no debí haber hecho eso; discúlpame, por favor."
"¿E-estás bien? ¿No te ha ocurrido nada?"
"Sí, me encuentro bien. Lamento haberte preocupado tanto, corazón."
"Eres un gran idiota... no tienes una idea de... ah, no puedo dejar de llorar, carajo..."
"Lo siento, lo siento... estoy bien, estoy aquí. Lo lamento."
"Yo pensé... tú, de verdad..."
JongIn se dedicó a consolarlo, repitiendo constantemente que se encontraba bien y que no debía preocuparse por nada. Era doloroso escucharlo de esa manera tan rota y desesperada, demostrando todos sus temores y sus emociones complicadas a través de su lazo... JongIn se sintió extremadamente culpable, tanto que le dolía el corazón.
Su alfa gruñó, malhumorado por no poder tener a su omega cerca para poder darle el consuelo real que necesitaba en ese instante, y JongIn ni siquiera pudo mantenerlo a raya por completo. Suspiró largamente cuando KyungSoo comenzó a calmarse y apretó la mano en su pecho para intentar detener su incomodidad y el peso de la culpa sobre él.
Luego de algunos minutos de silencio, pero unidos firmemente por su enlace, KyungSoo preguntó tímidamente:
"¿Por qué... por qué no me respondiste?"
"... Es porque entré en mi rutina recientemente." Respondió por lo bajo, con debilidad, y hubo un nuevo silencio entre ellos. Esta vez, no obstante, JongIn fue capaz de captar un poco de tranquilidad y comprensión en medio del mar de preocupaciones de KyungSoo. Fue, de alguna manera, reconfortante.
"¿Estuviste con alguien?" Esta vez, él pareció empequeñecido por la propia pregunta, su voz siendo apenas un susurro poco claro en su mente.
JongIn cerró los ojos, pensando para sí mismo que después de esa última rutina no podría acudir a nadie más para que le ayudara a montarla. Se apresuró a negarlo, entonces.
"No, no estuve con nadie. Lo superé por mi propia cuenta."
"Debió haber sido tan difícil... ¿por qué no acudiste a un omega, JongIn?"
Porque no los quiero. Porque eres lo único que necesito.
JongIn no podía hacérselo saber, no aún, así que tuvo que callar esta verdad y decir lo que creía que era aceptable dada la situación.
"Ya no son necesarios. Mi lobo no los quiere."
"¿Por qué?"
JongIn no podía evitar sorprenderse por cómo la voz de KyungSoo podía parecer un poco más pequeña, un poco más vulnerable y esperanzada. Era una caricia susurrante llenando su mente de suavidad, de afecto; le conmovía y le ayudaba a creer que tal vez no todo estaba perdido. Que él podría perdonarlo.
Que a pesar del dolor y la preocupación, la culpa podría ser mitigada a causa de su esperanza.
"Porque él solo desea a mi alma".
.
"El tío ChanYeol me ha felicitado por mis buenas técnicas de caza. Dijo que soy más competente que los jóvenes cazadores de la manada y me ha propuesto ser parte del escuadrón de caza cuando no esté tan ocupado en la escuela con el tío BaekHyun. Estaría trabajando con ChanHyun y JungWoo y, honestamente, creo que sería algo bueno". Le dijo cuando las cosas se hubieron calmado por completo y se encontraron en una zona tranquila y relajada una vez más.
JongIn sonrió con orgullo y complacencia y hundió su rostro en su almohada, sintiendo la felicidad emanando del propio KyungSoo para fundirse en la suya.
"Eso es genial, Soo. ChanHyun y JungWoo son realmente buenos, así que tendrás un equipo fuerte y competente. ¿JaeKyung aún se encuentra en el escuadrón de caza?"
"Oh, bueno, él lo está, pero no participa tanto como antes. Su hijo nacerá pronto, así que se encuentra ocupado con su alma. ChanYeol dice que no tiene la misma concentración de antes y es mejor dejarlo a un lado hasta que nazca su cachorro y él se encuentre completamente centrado en el trabajo nuevamente."
Asintió comprensivamente y un tarareo bajo se dejó escuchar en su mente y en su habitación.
"Ya veo, bueno, es natural que estas cosas pasen. ¿Sabes cuándo nacerá el cachorro?"
"La partera cree que podría ocurrir entre finales de invierno y principios de primavera. Todos están emocionados por ello; será el nuevo cachorro más joven de la manada y lo esperan con ansias".
"¿Tú también lo haces?" Preguntó suavemente y un sentimiento cálido y ligero fue transmitido a través de su lazo. Le calentó el alma y el cuerpo y dejó atrás la incertidumbre inicial.
Extrañamente, él también se sintió emocionado y su alfa mostró sus ojos claros, esperando su respuesta con ansias.
"Lo hago... y también crece en mí la ilusión de tener mi propio cachorro. Ojalá ocurriera pronto".
El corazón de JongIn dio un vuelco antes de correr a toda prisa en su pecho y su alfa aulló ruidosamente, creando una atmósfera de ilusiones, anhelos y deseos profundos y nada más que maravillosos.
La imagen de un KyungSoo embarazado, totalmente hermoso y lleno de su cachorro apareció en su mente como una cucharada del futuro próximo, de lo que podían crear juntos y lo felices que podrían ser uno al lado del otro. Él sería como JaeKyung, un tonto entusiasmado con la idea de la partenidad, cuidando a su hijo y a su compañero con su vida y llevando una dichosa vida doméstica sin ningún tipo de preocupaciones.
Sí, él también quería eso. Él también quiere que sea pronto.
JongIn lo quiere tan mal. JongIn le ama.
Una pequeña sonrisa tiró de la esquina de su labio mientras la complicidad rotaba tranquilamente entre ambos y algo completamente nuevo se creaba. Fue fascinante.
"Sí... deseo lo mismo".
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro