Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

8

Al pasar de los días, SeokJin se ha ido familiarizando cada vez más con lo que conlleva trabajar en un vivero. Aunque su trabajo es exclusivamente de contador, no puede evitar ayudar a NamJoon con alguna tarea que no requiere bastante conocimiento de las plantas; por nada en el mundo quiere hacer algo mal y dañar alguna, más siendo testigo del trabajo que el menor pone en estas.

Pero aún sentía que aportaba poco a todo el trabajo que este debe realizar día a día. 

—Buenos días hyung —apenas entra al lugar, el menor lo recibe con una cálida sonrisa que lo hace sonreír también.

—Hola Nam, ¿Hoy también te toca sembrar?

—Solo terminar las de ayer, son pocas.

SeokJin no evitó soltar un suspiro. Ayer todo el día NamJoon se dedicó a plantar semillas, no suena nada forzoso pero la cosa cambia cuando este debe ir a traer las macetas, sacos de tierra y fertilizante; una y otra vez.

Claro que lo ayudó las veces que pudo y el menor nunca se quejó de agotamiento, pero era obvio que debía estarlo una vez llegara a casa.

Con cuidado de no botar o pisar alguna planta, SeokJin camina hacía su escritorio a continuar el trabajo que dejó el día anterior. Lo hubiera terminado ya si no fuera que su lado protector, que NamJoon estaba sacando a flote últimamente, lo obligaba a mantener gran parte de su atención en el menor temeroso de que se lastimara; aún cuando sus acciones son realizadas como si de un sabio se tratara.

Como los días anteriores, SeokJin intentó adelantar trabajo rápido para así poder ayudar a NamJoon tan siquiera un poco, pero antes de lograrlo este terminó antes que él. 

—Finalmente terminé —el castaño se estiró buscando relajar sus músculos—, tengo hambre.

Una rápida ojeada al reloj indicó que apenado serían las diez, muy temprano para tener hambre considerando que ni una hora llevaba abierta la tienda— ¿No desayunaste?

El menor negó mientras comenzaba a recoger sus utensilios— Vine temprano a terminar la siembra, ahora ya puedo comer en paz.

—NamJoon, deberías comer antes de trabajar. Lo que haces requiere mucho esfuerzo como para andar con el estómago vacío. 

Intentando evitar el regaño, que en parte sabía que se lo tenía merecido, el castaño sonrió inocente— No tenía apetito —susurró—, además entre más rápido terminara esto, mejor disfrutaré mi comida.

—Nam ¿No crees que sería buena idea contratar a un ayudante? Sé que solo soy tu empleado, pero sigo siendo tu hyung y no me gusta verte con tanta carga de trabajo.

Como si las palabras del mayor entrarán por un oído y salieran por el otro, NamJoon sonrió enternecido al escuchar que el mayor se preocupa por él. Aunque rápidamente salió de esa ensoñación recordando el tema principal— No es necesario, yo puedo con todo –aseguró—. Además, Hyung me ha estado ayudando, con eso basta.

—Solo te he ayudado a cargar y muy poco ya que tengo que hacer mi trabajo —el menor seguía con una mueca reacia a la idea—. Nam, recuerdas que en el anterior trabajo nos daban mucho que hacer a cada uno.

Confundido por la repentina mención, el castaño asintió— alguien dijo que tanto trabajo no era justo y todo sería más fluido si lo repartieran entre más personas —con los brazos cruzados sobre el pecho, SeokJin se acercó al menor— ¿Quién lo dijo?

NamJoon puchereo sabiendo la respuesta— Yo —susurró—. Bien, lo haré, pero sólo contrataría a alguien que ya tenga conocimientos en plantas; por ahora me retrasaría mucho el enseñar.

En eso SeokJin no podía meterse, aunque NamJoon sea menor, él es el que sabe mejor qué hacer en relación al vivero— Bien ¿Cómo buscamos a esa persona?

La mente de ambos se quedó en blanco, NamJoon es un jefe nuevo; nunca ha contratado a nadie a parte del mayor, y SeokJin nunca ha sido un jefe, además de no haber trabajado en este tipo de negocios.

La concentración de ambos fue interrumpida por el sonar de la campanilla de la puerta— Bienvenido —saludó el mayor.

El castaño iba a saludar también, pero al ver quien entró se sorprendió— ¿BeomGyu?

Quién ha entrado es un hombre alto, cabello negro largo y de facciones bien marcadas. La reacción de NamJoon lo confundió, se veía verdaderamente sorprendido de ver al hombre.

—Hola NamJoon, tiempo sin verte.


Después de la llegada del pelinegro, NamJoon le pidió a SeokJin si podía cuidar la tienda por un rato; este no se negó, aunque no le gustaba el cambio de actitud del menor por la llegada de ese hombre.

El menor tomó la mano del desconocido y ambos salieron del lugar.

Una vez fuera, el pelinegro seguía siendo arrastrado por NamJoon hasta llegar hasta la cuadra más cercana.

—BeomGyu ¿Qué haces en Seúl? —preguntó apenas lo soltó. 

El chico bufó— Hola BeomGyu, un gusto verte ¿Estás bien? —habló con ironía— ¿No puedo venir a Seúl?

NamJoon rodó los ojos y se acercó abrazando al contrario– Me alegra verte.

—Sí, me queda claro como casi me echas de la ciudad. 

—Exagerado, pero a la próxima avisa.

Los amigos decidieron mejor entrar a un café para poder hablar más cómodos— Ese chico de la tienda ¿Es tu nuevo novio?

Dando un sorbo al café que había pedido, intentó ocultar el sonrojo que sus mejillas mostraban; aún así BeomGyu se dio cuenta y sonrió— No lo es, es un hyung amigo mío y es el contador del vivero.

—Pero quieres que lo sea —NamJoon comenzó a toser casi ahogándose con el café. La risa del más alto no se hizo esperar—, eres muy fácil de leer querido Nammie.

Este lo miró mal, pero decidió mejor desviar el tema; sabe que su amigo lo molestará más si le da cuerda— Entonces ¿Qué haces en Seúl?

La sonrisa de ambos amigos dudaron— Tú sabes que hago aquí. 

—No volveré para eso y lo sabes —sentenció. 

—Lo sé –el pelinegro miró hacia la ventana, admirando mejor la diversidad de colores y estilos que esa calle posee—, pero a tu papá no le importó eso y me envió; yo le dije que vendría pero no te obligaría a nada.

—Gracias Beom, mi papá puede ser muy terco en serio ¿Aún sigue con la idea de nosotros dos?

Esta vez fue turno del pelinegro para voltear los ojos— "Tendría nietos muy lindos con tus ojos y los hoyuelos de NamJoonie" —imitó la voz del padre. NamJoon solo podía reír de lo ridículo que eso sonaba, ambos son como hermanos como para verse de esa manera— no acepta que no eres mi tipo.

—Sé que no me obligará a volver, pero tampoco dejará de insistir ¿Y tú?¿Qué harás ahora que ya hablaste conmigo?

—¿Me das trabajo? Quiero estar un año aquí para ver el terreno de un posible vivero, pero tampoco quiero estar sin hacer nada.

NamJoon asintió— Justo iba a comenzar a buscar un ayudante, llegaste a tiempo.

BeomGyu se sorprendió— ¿Desde cuándo tienes la iniciativa de compartir tu trabajo?

—No fue idea mía, fue de SeokJin hyung porque trabajo mucho y se—apenas mencionó las palabras se arrepintió viendo la expresión de su amigo— preocupa...

La sonrisa pícara de BeomGyu comenzaba a molestar a NamJoon— Así que tu hyung no quiere que trabajes mucho.

—¡No es mi hyung! —la mesera se acercó a dejar un café que el castaño pidió para llevárselo al mayo—bueno, si lo es pero no de esa manera que insinuas

—Ya veremos.

Una de las personas que conoce mejor a NamJoon es BeomGyu, capaz la que lo mejor lo hace, y este pudo notar sin dudas como la timidez y un lindo brillo en los ojos de su amigo aparecía con la más leve mención de ese hombre.

Buenas OwO

BeomGyu chiquito será parte de esta historia :3♡

Espero les haya gustado

Nos leemos luego~

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro