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El ambiente por primera vez, en un largo tiempo, no se sentía tan pesado en la oficina; eso no era buena señal para nada.
Sus compañeras estaban tranquilas en sus escritorios, el gerente no ha aparecido de sorpresa y la pequeña ola de trabajo que tenían ya había acabado por lo que se encontraban sin trabajo en ese momento. Tanta tranquilidad daba miedo, SeokJin no tenía tanta suerte como para que su horrible trabajo se transforme en uno bueno de la noche a la mañana.
Desde que cenó con NamJoon la tarde anterior, la idea de si debe aceptar la oferta de trabajo o no ha estado rondando su mente. No sabe el cuánto sería el pago, aunque esto no le preocupa mucho ya que tiene ahorrado; solo sigue ahí para tener dinero para un largo plazo, lo más seguro NamJoon le pagaría el salario mínimo por lo que estaría bien.
—Hyung —TaeHyun apareció a su lado— ya es hora de almorzar, vamos a buscar algo.
Sin decir nada, el mayor tomó sus cosas y caminó junto al rubio hasta la cafetería. No tenía hambre por lo que solo compró un licuado de banana, TaeHyun parecía estar en una condición parecida ya que solo tomó una bebida y una galleta. —¿Sin apetito también?
El menor arrugó su nariz asintiendo— Desde que comencé a trabajar aquí es la primera vez que está tan tranquilo, da miedo.
SeokJin asintió estando de acuerdo. Buscaron una mesa alejada del resto, ya se les había hecho costumbre querer algo de paz en ese lugar, pero ahora que la tenían solo podía alterarlos.
—NamJoon me ofreció trabajar en su local —el menor lo miró sorprendido— sería el contador de la tienda.
—¡Genial! —exclamó feliz el menor— ¿Por qué sigues aquí entonces?
—¿Debería aceptar? No sé los detalles del trabajo y suena muy apresurado la verdad.
—Deberías —sentenció TaeHyun— porque yo también lo haré, este lugar es una mierda, tengo la opción de buscar trabajo sin preocuparme por el dinero así que no hay razón por la que debería torturarme aquí.
SeokJin en verdad no esperaba escuchar que el menor renunciará, aunque lo puede entender por completo. Él también puede hacerlo pero sigue sin comprender porque piensa tanto cuando lo único bueno de aquí es la paga y eso ni le importa.
—Haré un truco de magia —anuncio de la nada el rubio, el mayor lo miró confundido— leeré tu mente y te daré la respuesta que necesitas escuchar.
—Ya te perdimos.
—Ush, ya estoy procesando tu mente hyung —el pelinegro solo bufó. Solo sonreía al ver la expresión concentrada de TaeHyun— Listo, la razón porque aún lo piensas es porque te atrae NamJoon, pero haz estado tan absorto en tu trabajo que ya no recuerdas cómo iniciar una relación por lo que estás asustado de avergonzarte aún más frente a él.
El rubio sonrió satisfecho al ver la expresión anonadada de SeokJin. — Eso fue muy... específico. —Logró decir el mayor.
—Y muy acertado, no lo negaste por lo que soy un genio adivino.
TaeHyun elevó sus manos y las movía jactándose de haber acertado, pero esto poco duro al ver que de la nada sus compañeros comenzaron a correr en dirección a la oficina, el celular de ambos sonó notificando un nuevo mensaje.
Ahora entendían el porqué del revuelo— ¿Vamos a la oficina de recursos humanos a poner la renuncia? —preguntó SeokJin.
—Entre más pronto mejor.
El gerente otra vez llegaba de sorpresa y ninguno de los dos tenía ganas de aguantarlo.
El tiempo dónde la tienda se llenaba de cajas había vuelto, estas están llenas de semillas, macetas y demás elementos de jardinería los cuales ya necesitaba; sus clientes se habían llevado casi todos.
Llevar cada una de las cajas a la bodega le dejaría un bello dolor de espalda, pero no podía dejar todo eso estorbando ahí, debería contratar ayudar para estas cosas; el trabajo solo seguía aumentando.
Dejó la caja que llevaba y echó un vistazo al lugar, debió ponerlas en orden pero por sus ceros ganas de seguir moviéndose le tocará reorganizarse después. Nunca aprende.
Volvió a la tienda y apenas llegó la puerta fue abierta, por esta entraron unos sonrientes SeokJin y TaeHyun— Bienvenidos, es una sorpresa verlos a esta hora.
Ambos se miraron cómplices— Tenemos mucho tiempo libre ahora, por lo que nos verás más seguido. —habló el rubio— los dejaré solos, nos vemos NamJoon hyung.
Una vez se despidieron y TaeHyun se fue, ambos hombres se quedaron viendo sin saber qué decir exactamente. SeokJin por fin prestó atención a la gran cantidad de cajas que llenaban el lugar— ¿Inventario?
—Sí, estaba llevándolas a la bodega para después organizarlas.
SeokJin comenzó a caminar hasta el mostrador dónde se encontraba NamJoon, tuvo que tener cuidado de no votar alguna de las cajas— ¿Será parte de mi trabajo llevarlas a la bodega?
—¡¿Eso significa?! —preguntó entusiasmado el castaño.
—Sí, acabo de renunciar —El mayor no podía evitar sonreír al ver que tan feliz hacía a NamJoon la noticia— Así que eres mi nuevo jefe.
NamJoon rodeó el escritorio y se acercó al mayor— ¡Qué bien! Espero que no haya sido muy difícil el proceso de renuncia.
El pelinegro negó y sonrió divertido, colocó su portafolio en el escritorio— Fue... terapéutico.
Lo que SeokJin y TaeHyun agradecen es que en ese lugar no tardan nada en pagar las liquidaciones, apenas se procesó su renuncia su último pago fue hecho. Ahora solo tenían que avisar al resto de la repentina renuncia.
El jefe de recursos humanos reunió al resto de empleados y dio el anuncio, la mayoría hizo expresiones de asombro. SeokJin llevaba un buen tiempo ahí mientras que TaeHyun apenas unos meses, además de que ambos lo hicieran en el mismo día era aún más sorprendente.
—Los extrañaremos chicos. —Habló Lia, el resto estuvo de acuerdo con lo dicho.
El rubio sonrió por cortesía— Bueno, yo no extrañaré que me exploten, tal vez el dinero sí.
El resto guardó silencio— Tú Jin ¿Te despediras? —habló el de recursos humanos.
—Vaya que lo hará.
—Sí, hay algunas cosas que quiero decir —el pelinegro se aclaró la garganta— todos son una bola de imbeciles tóxicos —sus ex compañeros lo miraban sorprendidos— SoYeon, a nadie le interesa cuántos te andas cogiendo cada fin de semana, tienes novia mocosa, sino la respetaras dejala. Lia, SoYeon quiere algo con tu novia, por eso se acerca a ti, casi todos lo saben.
Mark, eres un jodido lame patas, no hay nada de malo en querer agradar pero no eres nadie para creerte el jefe solo porque te pones al lado del gerente cuando humilla a alguien.
Oh y el gerente, diganle que es un asco de jefe, estar acusando de cosas falsas solo para afirmar su autoridad con el resto lo hace una mierda, por último ¡MaRi! Usted está aquí aseando, no tiene por qué estar prohibiendo tomar café ¡No es la jodida dueña!
Solo se escuchaba la risa de TaeHyun, el resto mantenía su boca abierta asombrados que el tranquilo SeokJin le había dicho sus verdades en la cara y sin filtro.
—¡¿En serio dijiste eso, hyung?! —Otro que lo miraba asombrado era NamJoon.
SeokJin asintió divertido— Me dañaron la salud por estar rodeado por ellos, al menos necesitaba hacer eso.
—Si esa gente es así, no me sorprende que tengas esos problemas, suena a tortura.
—Lo es. —el mayor se quitó el saco, ya no estaba en una feria oficina por lo que no lo necesitaría— por suerte, ahora trabajo aquí dónde me calma, junto a ti.
Las mejillas de NamJoon se sonrojaron. Intentando ocultar eso, se acercó a una de las cajas — Hay... hay que llevar esto, hyung —tartamudeo— no es tu trabajo, pero te pagaré lo extra.
Dicho esto, caminó directo a la bodega escuchando la risa del mayor, la cual, lo hizo sonreír.
Wenaaaaaas
No es tan tarde, agradezcan jajsja
Ya trabajaran juntos OwO ñam♡
Pd. Aquí les dejo una foto de TaeHyun por si no lo identifican
Kang TaeHyun de TXT♡
Ahora sí, nos leemos luego~
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