Pienso en ti cuando estoy feliz

acudo a ti antes de morir,

me aflige no ver brillo en tus ojos

duele ver tu corazón roto.

No quiero que llueva

sonríe, aunque duela

belleza hay en la tortura

y la soledad no es nada

al lado de tu compañía.

En el desierto, una rosa decoraba

sola, vacía, triste y desolada,

por las noches estrellas comenzaron aparecer

el tiempo fue decorando el cielo,

no existe la distancia

diversas flores comenzaron a llegar.

El día en flores los convierte,

en la noche brillantes estrellas se ven;

pétalo por pétalo el botón va floreciendo

la esencia de la rosa brilla con lucidez.

Una sonrisa decora mi rostro

cuando recuerdos contigo inundan mi mente,

nada es mejor que haberte conocido

pasar horas hablando contigo.

¿Te cuento un secreto y no le dices a nadie?

Te quiero.