01
Hospitality: los equipos y pilotos hacen más vida durante el fin de semana, donde tienen las habitaciones para descansar, y donde si tienes el honor de poder acceder como invitado o como prensa, los equipos suelen tener bebidas y comidas para sus trabajadores
Paddock: Es la zona en la que los equipos montan sus talleres, las instalaciones de los Hospitalities para recibir a los patrocinadores, invitados y a la prensa, en los circuitos europeos, los equipos transportan varios camiones que se transforman en lujosas instalaciones en las que el personal del equipo come, trabaja y lleva a cabo todas las labores relacionadas a la carrera.
————
Cuanto más el carro se acercaba a su destino, más personas se acumulaban en las calles. Caminaban hablando emocionadamente unos con otros, o mantenían una mirada preocupada en sus rostros buscando algo en sus bolsillos y carteras.
Suspiró.
Volver después de las vacaciones de casi tres meses siempre se le hacía difícil.
Recordaba, mientras mantenía su mirada fijamente en el paisaje que se reproducía por fuera de la ventana, como hace solo unos días se encontraba otra vez en su ciudad natal juntando con frente a una computadora y paseando por la playa de noche en compañía de Bam.
Cómo iba a extrañar esas noches de juego entre los dos, donde la paz inundaba su ser; y las cervezas, su sangre.
Ahora se encontraban volviendo a lo que era su ajetreada vida dentro de garajes y cámaras.
"Bebé, sentado." Ordenó con voz calmada.
Bam, su cachorro de Dóberman, se sentó en sus dos patas traseras, con la cola meneando de lado a lado y mirando ansiosamente lo que pasaba a las afueras de las fuertes puertas del coche.
Los periodistas se acumulaban a las entradas del Paddock, sus cámaras apuntando a cada carro que se estacionaba a las afueras; los flashes captando cada movimiento de los pilotos, celebridades y directores.
Otro suspiro salió de sus labios.
Esperaba no quedarse sin oxígeno si eso se volvía una costumbre.
Las cámaras y todos esos gallinazos, que se hacían llamar periodistas, eran lo más odiaba de su trabajo.
Si tan solo todo se reduciera a correr y ganar trofeos-
"Señor, ya llegamos."
"Vamos directo al Hospitality." Lincy habló desde el asiento de copiloto, haciéndole voltear la cabeza rápidamente para tratar de mirarla. "El director Kim te está esperando para dar unas indicaciones antes de las dinámicas del área de marketing"
La gerente volvió a mirar su tableta sin esperar una respuesta de su parte.
Jungkook volvió otra vez su vista a Bam. Verlo tratar de lamerse una de sus patas era más divertido que prestarle atención a lo que sea que hacía Lincy en su día a día.
Agarró fuertemente la correa del Dóberman y abrió la puerta.
Fuertes gritos se escucharon por todo el lugar, sonrió un poco y saludando con su mano se dirigió hacia la entrada de seguridad.
Buscó a tientas su pase, lo pudo sentir en el bolsillo de su pantalón, pero, segundos antes de sacarlo cambió de idea.
Todas esas personas querían obtener una foto interesante para las portadas de sus noticias. Entonces, porqué no darles algo?
Dejó su agarre de la correa de Bam y le hizo gestos para que pasara hacia el Paddock. Una vez vio que lo hizo, dio unos pasos hacia atrás.
Tomó impulso y saltó.
Pasó con bastante gracia por arriba del control de seguridad, y al aterrizar dentro de lo que igualmente se podía considerar el Paddock, volteó hacia las cámaras e hizo una reverencia bastante pronunciada.
Qué bueno que los de seguridad lo conocían. Era muy joven para enterarse físicamente a lo que le hacían a los locos que se imponían tratando de pasar los límites.
"Buen regreso." Lincy le dijo una vez la alcanzó.
...
El camino al Hospitality de Red Bull fue bastante tranquilo, agradecía haber llegado lo suficientemente temprano antes que los fanaticos inundaran los pasillos tratando de que les firmara algo.
Lamentablemente, tampoco pudo encontrarse con otro piloto. Sin embargo, ya tendría mucho de ellos una vez la temperada se ponga en marcha — Algo que en teoría ya había empezado, pero el punto seguía allí.
"Ya llegó Kim?" Se atrevió a preguntar cuando se encontraban atravesando las puertas del Hospitality.
Lincy despegó la mirada de su tablet y volteó a verlo, aún caminando bastante rápido hacia donde se encontraban las oficinas.
"No." Su voz era tranquila, pero ya podía escuchar los matices de estrés que cargaba desde el momento en el que se encontraban de vuelta al trabajo. "Le dijimos que llegara un poco más tarde. Tú tienes esta conferencia con el directo; Kim podía llegar después, no queríamos hacerlo esperar tanto. Ya está suficientemente estresado, es mejor que descanse lo más que pueda."
Asintió en comprensión.
Apretó los labios, la chica le abrió amablemente la puerta de la oficina, y entró completamente hacia dónde su jefe se encontraba.
"Oh! JeongGuk!" Espetó el hombre como saludo.
"Nam!"
Lo vio dar unos pasos hacia el frente y reír suavemente.
NamJoon vestía una camisa beige con los primeros botones abiertos, dándole un aire casual; pantalones de vestir marrones y... sandalias.
JeongGuk quería reír por esa imagen tan poco seria del que supuestamente era su jefe, que pesar de ya pasar los cuarenta, se encontraba buena forma; ya quisiera él estar así en su vejez.
"Ya empezó la temporada, chico, ten un poco más de respeto." El hombre le extendió la mano y no le quedó de otra que aceptar ese saludo con una queja.
"¿Dónde quedaron los abrazos, ah?"
"En Mónaco, Febrero 2024." Bromeó su jefe, dirigiéndose hacia su escritorio para iniciar con la pequeña reunión.
"Así que... para que me llamaste?" Jugó con uno de los anillos de su mano izquierda, esperando la respuesta del otro.
"¿Porqué no lo haría? Eres mi piloto favorito de la parrilla" Nam tomó asiento y él optó por imitarlo. "¿Cómo ha estado andando el carro en las prácticas?"
"Parece ir todo bien." Respondió dándole una mirada casi aburrida. "Tenemos buen ritmo, el agarre está funcionando como se debe- Ferrari parece haber hecho buenos cambios también."
"Las estadísticas de las practicas también indican que el coche está respondiendo bien." Una sonrisa tranquilizadora se formó en la cara del señor. "Ferrari siempre ha tenido ese ritmo, Gguk; sin embargo, la suerte nunca está de su lado en las carreras."
Oh.
Obviamente, JeongGuk entendía a que se refería. El equipo Italiano siempre la cagaba de alguna forma u otra cuando sus pilotos ya estaban corriendo en pista para ganar.
"Me sorprende es que Crovetto haya alcanzado el podio con esa chatarra." Bufó tenso. "¿Crees que-"
"Nah." El hombre desestimó la declaración no dicha con indiferencia, recostándose en su silla y moviendo la mano de lado a lado como si estuviera espantando una mosca.
"Pura suerte." Declaró tras unos segundos en silencio. "Min quedó decimo. Puede que en las prácticas le haya ido bien, pero todos aquí sabemos que los demás equipos no toman nada en serio eso. Finn es el único inepto que manda a sus pilotos a correr como si ya estubieran en el campeonato; ya todos sabemos sus datos en este momento, la Quali solo nos lo confirmó"
Hizo un sonido de entendimiento y un poco más relajado se pudo cómodo en su silla — O tanto como podía en ese duro lugar, debería mandar una queja para que compren mejores reposadores de trasero.
"Tenemos el mejor carro actualmente." Casi podía escuchar un tono engreído en la voz del mayor. " Mercedes sigue con el poco rendimiento que tuvieron a finales del año pasado, tenían todo para perder pero-"
El hombre frente suyo frunció el ceño y arrugó la nariz como si oliera algo podrido.
Creía estar viendo como nuevas canas se formaban en la cabeza de su jefe. Mercedes era un tema delicado para él, mucho más con lo qué pasó el año pasado.
Para mediados de temporada de 2023, Red Bull había alcanzado un balance casi celestial entre el carro y las habilidades de sus pilotos — En especial la de él — Sin embargo, y muy lamentablemente, las peleas entre él y su compañero de equipo dentro de pista fueron lo que malograron todo.
Schuber no está satisfecho con lo que el equipo de Red Bull esperaba de él: bajar la cabeza y hacer su papel de defensa a la perfección. El alemán no estaba de acuerdo con jugar el papel de segundo asiento que le habían dado, Schuber quería luchar por grandes victorias, más aún viendo el cohete que poseía como monoplaza.
Terminaron saboteándose entre ellos, y casi no ganando.
Una verdadera lástima...
Para Schuber, porque lo botaron.
"Cómo sea, pronosticamos un P1 y P2 para ti y Kim. Va a ser fácil fácil adelantar, aunque no lo necesitas. Vamos a tener un gran regreso, Gguk"
Su jefe se puso de pie y abrió el mini refrigerador que mantenía en una esquina. Sacó dos latas de Red Bull y le extendió una.
Un clásico.
"¿Quieres?"
...
"¿Cuál es su canción favorita actualmente?"
La pantalla frente a ellos brillaba y parpadeaba mostrando la pregunta que debían responder.
El equipo de marketing lo había arrastrado entre habitaciones para empezar con las promociones de la marca en el momento en el que su nuevo compañero de equipo había llegado al Paddock.
"¡Muéstrenos sus respuestas!" La encargada del proyecto anunció — Ya no recordaba su nombre, pero parecía bastante joven.
Desplazó su mirada hacia la persona a su costado. El francés estaba mirando fijamente a una de las cámaras y sonreía ampliamente, mostrando el carisma que lo caracterizaba.
Al menos las promociones iban a resultar fáciles de hacer.
Tranquilamente, su compañero señaló su respuesta haciendo que la cámara se acercara mucho más para captar la letra garabateada en el costado de su pizarra de mano.
Love over and over again - switch
Él procedió a hacer lo mismo.
Reminder - The weekend
"¡Wow! Son muy diferentes." Exclamó la misma chica dándoles una sonrisa y riéndose bajito.
"Debo enseñarte los clásicos"
JeongGuk sintió una mano fría en su hombro, se enfrentó a la persona que estaba a su costado. Se arrepentía de dejar su chaqueta en la habitación de piloto hace casi una hora; ya empezaba a hacer frío.
"Yo debería enseñarte algo moderno."
Anciano
El chico se rio abiertamente y volvió a mirar a la cámara para contestar la próxima pregunta que les iban a lanzar.
El proyecto del día consistía en responder preguntas fáciles y hasta cierto punto personales, para así conocerse un poco más entre ellos. Los fans iban a estar encantados de ver un poco de lo que iban a tratarse sus interacciones por el resto de la temporada.
Conocía un poco de Kim TaeHyung, — Lo había tenido que ver si o si en la reunión de principio de temporada y los últimos dos días en pista cuando merodeaba por el Hospitality — pero, no habían hablado directamente más de cinco palabras seguidas.
Eso no se le podía considerar siquiera una conversación.
"JeongGuk" La voz gruesa lo sacó de su estupor. "Faltas tú." Le señaló amablemente.
Una nueva pregunta brillaba parpadeante en la pantalla.
"¿Cómo consideras tu estilo?"
Se apuró en escribir casi ilegiblemente su respuesta en lo que escuchaba lo que su compañero explicaba de sí mismo.
"Creo que mi estilo se podría considerar clásico."
Me recuerdas a mi abuelo, pero americanizado.
Bueno, en teoría sería europeizado.
"Ya debieron haberme visto hoy en la tarde cuando llegué, llevaba una camisa morada y pantalones de vestir grises. Puede que muchos lo sientan incomodo, pero personalmente me siento a gusto con ello."
Minutos antes, los dos habían tenido que cambiarse con la mercancía de Red Bull y guardar sus pertenencias en sus habitaciones privadas para que no se perdieran.
"Bueno, pues, yo considero el mío como un estilo cómodo." Dijo señalando con suficiencia su pizarra.
"Edgy es un mejor término" Un murmuro llego a sus oídos.
Edgy...? Él no era-
"Si quieren simplificar las cosas, háganle caso al señor aquí." Bromeó apuntando con sus palmas estiradas al francés. "Sus tantos años en este mundo le han dado bastante conocimiento."
Kim TaeHyung lo miró boquiabierto por unos segundos por su arrebato bromista — Ya díganle payaso, por favor — y cuando se recuperó de la sorpresa, boqueó exageradamente para dar un buen espectáculo a la cámara.
.
Pronto, la actividad terminó y el equipo de marketing les permitió irse a alistarse antes de la carrera.
"Espero nos llevemos bien"
El parisino alzó su mano para compartir un apretón a la antigua. Se encaminaban a la salida de la habitación de grabación una vez ayudaron a recoger algunas cosas esparcidas por el lugar.
Flashbacks de Harry Potter le vinieron a la cabeza.
Le aceptó el apretón desinteresadamente.
Crearse una enemistad de siete años podría entorpecer sus planes de convertirse en campeón del mundo.
...
Su garaje estaba rebosando de cosas tiradas y personas estresadas dando vueltas de un lado a otro. Los gritos de los fans y las celebridades que habían llegado a visitar el lugar lo estaban alterando.
Así que decidió escaparse del lugar.
Corriendo silenciosamente, se escabulló hacia la salida del garaje y cruzó callejones tras callejones para lograr su objetivo de llegar al territorio de Ferrari. Cruzó la puerta con tranquilidad y rezó para que los ingenieros de la escudería Italiana estén lo suficientemente atareados para que no le presten atención.
Sus rezos funcionaron.
A unos pasos de él se encontraba un hombre alto y casi calvo por estarse jalando los pelos de estrés.
¡Uf! La edad te hacía demente.
Negando con la cabeza y ocultando una carcajada se tiró a la espalda de dicho hombre.
"QUE-" Un gritó escapó de su victima. "¿Quién dejó entrar a una rata?"
"¡Oye!" Se quejó bajándose de su espalda — El pobre ya le debía estar empezando con los dolores de huesos, tenía que ser una mejor persona y pensar en la salud de los ancianos.
"Ya ni me dejan preocuparme en paz.." Lo agarraron del cuello; haciéndole una llave, y con el otro puño le frotó cabello. "Tú, maldito niño, deberías estar estropeando tu garaje. Voy a hablar con el director Kim para que te pongan una correa."
"¡Suelta! ¡Suelta! Me costó arreglar mi cabello para que me estorbe la vista." Se quejó tragándose un puchero.
El Italiano lo soltó a regañadientes y murmurando insultos — JeongGuk podía apostar su ultimo trofeo a que eran insultos — en italiano.
"¿Qué haces acá, mocoso?" El italiano le preguntó mientras se sacaba los guantes que traía.
"Voluntariado para ancianos." Contraatacó con voz burlona.
"¿Solo te falta esa medalla para poder graduarte de los niños exploradores?"
"Mi garaje está inhabitable" se quejó, ignorando deliberadamente la burla del mayor.
"Qué bueno que tengas que vivir alli"
"Ajá" Espetó irritado. "Qué buen chiste, hyung"
"Hyung" El hombre pronunció torpemente "'hermano' ¿Verdad?"
"Si." Desestimó con un movimiento de mano. "O prefieres que te diga ajussi, Jinnie"
Un suspiro frustrado salió de los labios del Italiano. "Sabes que mi coreano está tan estropeado como tus botitas de la suerte. ¿Ajussi qué era?"
"Ya mejor ni lo intentes. ¡Y mis botas están bien!" Se quejó.
"Mocoso, vamos a ir a comprar una nuevas saliendo de aquí, esta bien?" Jin le puso una mano el hombro en señal de falso apoyo. "No puedo creer que Red Bull tenga para gastarse en una piscina movible y no en unas botas para su conductor. Debo hablar seriamente con el director."
Vio como el mayor se apoyaba en la encimera y acomodaba ordenadamente sus zapatos en uno de los compartimentos que tenían instalados. Procedió a sacar un par de botas rojas y los guantes que se había sacado hace unos minutos.
"Te daría estos, pero no eres mi talla." Le dijo con falsa tristeza. "Ahora vete, no quiero a tus Red Bulls merodeando por acá buscándote."
Se quejó elocuentemente, con muchas ganas de hacer una pataleta con tal de no volver a su propio garaje; sin embargo, el anciano enfrente suyo tenía razón y que lo vayan a buscar era igual a una regañada de diez minutos de Nam.
Nada bonito.
...
Los sonidos de los motores encendiéndose le hacían casi imposible escuchar las instrucciones de uno de sus ingenieros. Varios mecánicos estaban rodeando su monoplaza ajustando piezas y sacando la protección de las llantas.
Desde su posición solo podía ver el alerón delantero del Ferrari de Jin; mucho menos podía ver al piloto adentro.
Poco a poco, las personas dentro de la pista fueron desapareciendo, solo quedando los carros en fila esperando la señal para avanzar.
Las manecillas del reloj se juntaron unos segundos después, dándoles la señal para calentar las llantas.
Avanzó dando zigzags y bloqueándole el paso al Italiano solo para molestarlo. Desde los retrovisores veía fácilmente la segunda línea de carros que venían detrás de él: Crovetto y Steiner.
Una vez completo la vuelta y se estacionó de nuevo en su posición de arranque, — El primero de todos, liderando como siempre — las luces de los grandes semáforos se prendieron de rojo.
Cuando se apagaran debía acelerar y la carrera empezaba seriamente.
Giró su cabeza para poder captar la figura de Jin lo mejor que podía. El italiano se estiró en su asiento cuando sintió su mirada en él, y tras un instante le sacó el dedo medio.
Las luces se apagaron y los autos arrancaron.
Agradecía sus reflejos cada día, de eso no cabía duda. Sin ellos no hubiera tenido ni la más mínima oportunidad de haber detenido la salida perfecta del anciano italiano que se hacía llamar su amigo.
El Ferrari de Jin se posicionó junto a su lado en la primera recta y dio todo de sí por no frenar en la primera curva para no perder ni un milisegundo menos.
Sus llantas casi se rosaban pero el Italiano bajo la velocidad en el último momento, temiendo al mínimo toque que los autos pudieran tener.
El que no arriesga no gana.
Y Jeon JeongGuk siempre gana.
Volvió a tomar tomar el liderazgo y aceleró.
"Buen trabajo en mantener la posición." Lo felicitaron mediante la radio.
"Gracias, compañero."
"Bandera amarilla" Le advirtieron tras unos segundos de silencio. "No parece ser tan grave, uno de los Hass y un Aston Martín tuvieron un toque. Deben quitar la bandera en unos segundos más."
El primera vuelta por la pista no tuvo más incidentes de su parte — No podía hablar por los demás que se estaban matando en la parte de atrás.
"Benedetti a un segundo. Estás teniendo buen paso."
"Lo sé."
Cada cierto tiempo le ganaba la curiosidad y cuando la pista estaba recta echaba un vistazo a sus retrovisores tratando de ver qué es lo que estaba pasando a sus espaldas.
"Crovetto a 0,4 detrás de ti. Acaba de sobrepasar a Benedetti"
"No hay problema."
Una vez más echo un vistazo y el carro rojo de su amigo ya no estaba a la vista, siendo reemplazado por el celeste y negro del Mercedes.
"¿Actualización?" Preguntó pasadas unas vueltas en total silencio.
"Crovetto, Benedetti y Kim están batallando por la segunda posición. Min parece tener velocidad en algunas curvas, pero su tiempo está cayendo."
"Ok-" Titubeó un poco antes de decir lo siguiente que tenía en mente "¿Quién de ellos va ganando?"
Escuchó una pequeña risa por la radio — Una muy mal disimulada.
"Benedetti tiene más velocidad, pero Crovetto ha tomado la delantera durante ya varias curvas" Le respondieron.
Jason y él no acostumbraban a mantener largos intercambios mediante la radio, sin embargo, se sentía fuera de lugar estar tan callado durante tanto tiempo seguido. Debian ser las vacaciones lo que le habían estropeado la configuración preestablecida
JeongGuk solo emitió un sonido como respuesta — Esa curva en particular estaba más complicada y pensar que decir le tomaba mucho proceso de pensamiento.
"Kim acaba de ganar la segunda posición." Anunció Jason. "Prepárate para los boxes, porque en la próxima vuelta entras tú."
"Entendido." Afirmó. "No veo ningún carro detrás."
"Estas a más de treinta segundos adelante de todos los demás." JeongGuk casi podía escuchar la sonrisa de su ingeniero.
En la próxima vuelta, se preparó para no seguir de largo y esta vez, tomar el desvío hacia los pits o boxes; el lugar donde los ingenieros , mecánicos y estrateguitas se encontraban, listos para cambiar llantas y arreglar algo de último momento. - Esa última parte solo lo hacían los mecánicos.
Varias personas, con cascos y camisetas de Red Bull lo esperaban ya listos con llantas y destornilladores eléctricos a mano para cambiar los neumáticos en, con suerte, menos de dos segundos.
Tuvo que reducir su velocidad para no correr el riesgo que causar un accidente a alguno de los tontos que se pasaban como inmortales por la pista, para después estacionarse en el lugar asignado para el intercambio.
Le dieron la orden de avanzar y no lo pensó dos veces antes de hacerlo.
...
"Solo falta esta vuelta y ya se acabó."
"Amigo, esto parece sacado de un juego." Le dijo con voz burlona. "Estoy pasando a Relish ahora mismo. Ya no se si soy ultimo o primero."
"Le llevas casi veinte segundos a Kim. Esto parecía un juego desde antes de entrarás a los pits"
JeongGuk dejó salir una risa bastante fuerte y movió la cabeza de lado a lado.
¿Hacer alguna maniobra ahora mismo sería muy arriesgado?
"Cuando me demorará hacer una donut?"
"Con total respeto," La voz seria de Jason se escuchó por la radio, "No te atrevas a hacer una tontería ahora mismo." El ingeniero hizo una pausa antes de añadir. "Te lleva menos de quince segundos, la última vez que lo comprobamos"
Pocos segundo después ya había completado con facilidad la última de las vueltas de la carrera.
"Fue muy profesional, Gguk." La voz de Nam fue escuchada por la radio en el momento que pasó la línea de meta. " Un gran inicio de temporada."
"Fue una gran carrera, eso fue increíble. P1 y P2 es algo fantástico." Decidió decir más formalmente — Sabía que estaban pasando esta conversación a todo el público en el momento y hacerle el favor a su jefe de comportarse con respeto hacia él sería lo mejor.
Aún quería seguir teniendo la posibilidad de elegir la mejor habitación de hotel.
...
Estacionó la monoplaza en el cartel dedicado para el primer puesto. Saco con cuidado el volante para tener espacio para salir del coche y como un gran campeón que era, se subió encima de la máquina solo para tomar mas impulso y dar un gran salto en señal de celebración.
Sintió un palmaditas en su espalda y un golpe amistoso en su hombro antes de poder registrar el cabello marrón ruloso de su nuevo compañero de equipo al lado suyo.
"Felicidades, amigo." Kim le dijo con una sonrisa. "Eso fue increíble."
"¡Felicidades a ti!" Le respondió dándole un abrazo a medias y sonriendo en grande "P2 es magnífico."
"Es lo mínimo que podía hacer." El francés se excusó avergonzado mientras se secaba el sudor con una de las toallas que le habían dado. "¡Tener veinte segundos de delantera es sacado de un sueño! ¡Esas eran vueltas perfectas tras vueltas perfectas!"
"De hecho, me salí de pista en la curva trece." Se agarró la parte trasera de su cuello al admitir su error hacia alguien más. TaeHyung le dio una mirada poco impresionada por unos segundos, parecía que se quería reír al instante después.
Su cabello estaba echo un desastre, sus rulos apuntaban a todas las direcciones y estaban un poco mojados por el sudor que salía de su cuerpo. Tenía los ojos brillantes por la adrenalina y sus pasos eran cansados en su camino hacia la 'sala de enfriamiento' para descansar antes de la entrega de premios.
JeongGuk no quería imaginarse como se veía el mismo.
"¡Mocoso!"
Volteó rápidamente con todo su cuerpo, pero no fue lo suficiente rápido — mira la ironía — para salir del camino antes que su rival o amigo — depende el día que se lo preguntaras — se estrellara contra él en un abrazo brusco.
"¡Ya no hay felicitaciones en estos días!" Se quejó el mayor. "Ya no los educan como antes."
El italiano procedió a frotar su cabello sudoroso en la cara del otro sin dejarlo ir del abrazo.
Mientras se quejaba y lloriqueaba tratando de zafarse de su opresor, JeongGuk escuchó como su compañero de equipo se reía libremente de ellos.
"Felicidades, SeokJin. Me diste una buena batalla." Interrumpió, el otro RedBull, el ataque que el conductor de Ferrari estaba ejerciendo.
"Nah. P2 con un carro con el que no estás acostumbrado en lo más mínimo es para felicitar"
"Gracias." TaeHyung le respondió avergonzado.
.
"Chicos, ya deben subir para dar los premios." La puerta había sido abierta por un asistente, que esperaba pacientemente a que terminen de agarrar que habían dejado tiradas, para guiarlos al podio.
"¡SeokJin Benedetti!" Anunciaron mediante el micrófono e inmediatamente Jin salió hacia las cámaras para que le otorgaran su trofeo de tercer puesto y posicionarse en su lugar asignado del podio.
Un suspiro tembloroso llamó su atención.
"¿Pasa algo?" Preguntó genuinamente curioso a su compañero.
"Nervios." El piloto le respondió con un atisbo de sonrisa asomándose para no preocuparlo. "Pasa cada que estoy allá arriba."
"Ah..." Pensó un poco en que decirle antes de seguir la mini conversación que estaban manteniendo. "También me pasa, a veces." Le aseguró "Me mantiene tranquilo ver la cara de tonto que se carga Jin, o como Na- el director Kim agarra su teléfono cuando intenta grabar el momento."
"¿La forma que agarra su teléfono?" Inquirió el Francés incrédulo.
"Lo agarra como un abuelo. Solo cuarenta pero tan desactualizado como un mono." Trató de distraer a su compañero a costa de su jefe, lo que funcionó ya que el otro se rio.
"¡TaeHyung Kim!"
Intercambiaron miradas por unos instantes, el otro dio un suspiro y se encaminó al podio.
No tuvo que esperar mucho antes que lo llamaran a él mismo.
"¡JeongGuk Jeon!"
Las luces casi lo cegaron y el ruido era invasivo, pero con el trofeo frío en sus manos no pudo evitar que un solo pensamiento y presentimiento se apoderara de su cabeza.
Esta temporada iba a ser entretenida.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro