El ataque comenzó como estaba planeado. Superman, Wonder Woman, el Green Lantern Kilowog, Starfire, Katana y Robín, todos los héroes experimentados (excepto Starfire) que sabían cómo enfrentar sus miedos internos y luego encerrarlos para poder continuar con el trabajo, conformaron la primera línea, empujando deliberadamente hacia adelante de sus camaradas y acercándose a Parallax.

Parallax, al no sentir rastros tangibles de miedo en ninguno de ellos, trato de pasarlos por alto para buscar presas más fáciles en los demás, pero los seis de la primera línea no se lo permitieron. Sin la desventaja de que Parallax se alimentara de sus miedos, pudieron evitar que atacara a los otros héroes más vulnerables.

Parallax, sin embargo, solo parecía más viciosamente complacido por esto de una manera retorcida, como lo demostró la sonrisa aterradora en su rostro. Al descubrir que los seis líderes no le permitían alcanzar a los demás con el bloqueo de sus poderes, volvió toda la fuerza de sus formidables poderes únicamente sobre ellos, uno por uno.

Katana fue la primera en experimentar la influencia alucinante de Parallax. Las imágenes pasaron por su cabeza; vio a su marido, Takeo, y a su hermano Maseo peleando en una feroz batalla a muerte por ella; vio morir a sus hijos mellizos, envueltos en las llamas iniciadas por aquel duelo malogrado; revivió sus días de dolor y luto, y el horror de descubrir el poder de la Soultaker.

Kilowog fue el siguiente; Parallax lo obligó a recordar su gran terror cuando unos piratas espaciales llegaron a Bolovax y esclavizaron a su pueblo; dejándolo solo, asustado y horrorizado en un mausoleo de sus ancestros. Su claustrofobia secreta desde ese incidente también fue una ventaja para Parallax: el Señor del Miedo creó con su miedo una tumba estrecha que encerraba al Green Lantern.

Jason Todd también fue llevado de vuelta a su infancia. Recordó haber vivido en el Alleytown de Gotham en los años 90s, siempre temeroso de los mafiosos y criminales que le dieron a su barrio el apodo "No Man's Land". Recordó cómo cuando era niño, siempre agarraba su mochila con fuerza contra su pecho mientras caminaba a la escuela, y cómo la más mínima cara desconocida lo hacía correr hacia los callejones. Recordó haber estado aterrorizado de que la gente lo atacara, y el miedo que sintió cuando supo que su padre había sido asesinado por uno de los muchos ladrones que acechaban en el inframundo oscuro de la ciudad.

Wonder Woman fue llevada de regreso a 1967, cuando Steve Trevor recibió la orden de presentación para el servicio en la Guerra de Vietnam y ella comenzó a tener miedo de perderlo. Su preocupación por él entonces era grande, y el miedo que la abarco una vez más cuando fueron a cazar a Vándalo Salvaje, llego con toda su fuerza una vez más. Y luego más adelante, en 1990 cuando le detectaron cáncer a Steve; Diana nunca había estado más asustada en toda su vida.

Superman encontró su cabeza invadida por imágenes de todos los que más le importaban en su vida (Lois, Jimmy, Bruce, Martha Kent) que desbloquearon sus miedos siempre presentes y profundamente arraigados de que uno o todos ellos resultaron atacados por villanos por su culpa; o peor, lastimarse porque perdió el control de sus poderes. Parallax tampoco se contentó con detenerse allí: profundizó más, desenterrando los miedos de Clark al perder a Lois por culpa propia.

Starfire fue más fácil que los demás, la chica alienígena realmente tenía una voluntad de hierro, pero Parallax aún pudo desatar el pánico paralizante que la princesa aun tenia al escapar de la destrucción de su planeta.

Sorprendentemente los seis héroes, a pesar de vacilar se mantuvieron firmes, encontrando la fuerza para vencer a sus demonios internos una vez más y disipar las ilusiones que Parallax había creado. Pero su lapso momentáneo fue suficiente para que Parallax los pasara y siguiera a Chico Bestia, quien claramente estaba asustado, pero decidió ser valiente. En cualquier otra situación, su coraje hubiera sido encomiable, pero aquí cualquier cosa menos la valentía total significaba poder para Parallax. El miedo del cambiante Titán lo llamó, y un Hal Jordan con el aura amarillenta más grande que nunca se movió de acuerdo.

-¡Parallax!

El villano se volteo, sintiendo otro bocado mucho más tentador en la forma de la hechicera Zatanna. En su intento de distraerlo de Chico Bestia (y seguir el plan), ella había descartado su control habitual sobre sus emociones, y en su lugar permitió que todo lo que le asustaba y todo el miedo que sentía de los demás, indujera un regalo irresistible para Parallax.

Pero entonces otra persona se le puso en frente, y esa persona era madamas y nada menos que Cyborg, que puso todo su miedo para concentrarse en perder su humanidad y no regresar nunca a ser Víctor Stone. Cuando Parallax se distrajo de Zatanna por Cyborg, se dio cuenta de que algo andaba mal. Sin embargo, la cantidad de poder que había usado para romper las defensas de los seis delanteros significaba que tenía que reponerse e impulsado por la impureza amarilla que ardía en lo profundo, instintivamente buscó a quien fuera la mejor fuente, sin importar que se retrasara él de su alimentación. A pesar de todo su poder, Hal Jordan no era más que un esclavo de las propiedades de la fuente amarilla del miedo con la que se había fusionado, propiedades que hicieron que la fuerza cósmica buscara lo que fuera más beneficioso para su propósito.

Sin embargo, el antiguo Green Lantern tenía otra fuerza a su disposición: la voluntad, y una vez que se dio cuenta de lo que estaba sucediendo, controló sus inclinaciones instintivas y usó su intelecto para destruir el plan que había sido diseñado con tanto cuidado.

Parallax se negó a dejarse tentar por Flash (que deliberadamente recordaba el momento en que un rayo se mezcló con productos químicos y lo golpeó, y pensó que iba a morir) y en su lugar fijó su objetivo, una vez más en Zatanna. Se movió hacia ella con movimientos deliberados y se negó a ser distraído por los otros héroes, quienes hicieron todo lo posible por alejarlo.

Cuando quedó claro que su plan de distracción y evasión ya no funcionaba, Zatanna volvió a controlar sus emociones retorciéndose de golpe. Parallax gruñó levemente cuando la tentación del miedo de Zatanna casi se desvaneció, pero él sabía que estaba allí y no vaciló en su movimiento.

-Está bien, eso es todo – declaró Superman, elevándose en el aire hacia Zatanna. Cerca, Starfire y Cyborg hicieron lo mismo – A mi cuenta – dijo Clark – ¡Uno, dos... tres!

Los tres atacaron. Starfire desató un rayo continuo e ininterrumpido de energía solar pura de sus manos. Cyborg convirtió sus manos en cañones de plasma y le disparo a Parallax. Clark disparo su visión laser que literalmente ahuecó la nube malvada, bloqueando a Parallax de su presa. Zatanna vio su oportunidad y gritó:

-¡Azarath, Metrion, Zinthos!

Y un estallido de energía oscura de su cuerpo penetró la nube hacia el cuerpo de Hal Jordan.

Mientras otros héroes se unían, agregando sus propias ráfagas al ataque conjunto; Parallax siempre astuto, notó que mientras lo atacaban estaban bajando su guardia mental. No estaban pensando en sus miedos, pero como ya no estaban poniendo suficiente esfuerzo para bloquearlo, no necesitaron hacerlo. Con un rugido triunfal, Parallax se retorció, lanzando zarcillos oscuros en el cuerpo de cada héroe y absorbiendo cualquier rastro de miedo que pudiera encontrar.

Lucharon por controlar sus emociones. Para cuando lo lograron, Parallax se había reabastecido y más. Todos los héroes fueron lanzados con fuerza en diferentes direcciones mientras Parallax viajaba hacia el corazón de la ciudad; ahora los ciudadanos sabrían que una amenaza real y malévola se cernería sobre ellos y tendrían suficiente miedo para que él los agotara. Una vez que se hubiera alimentado de cada persona en esa ciudad, tendría suficiente poder para hacer suya a la Tierra.

Un ruido sordo se escuchó en los cielos y todos estuvieron sorprendidos cuando vieron al Flying Fox. Green Arrow miró hacia arriba acusadoramente cuando Batman y Nightwing aterrizaron.

-¿Dónde estabas? – exigió saber el arquero –

Batman no se dignó responder. Solo miró a su alrededor y dedujo:

-El plan no basta.

Flash solo resoplo ante la respuesta de Bruce.

-Ojala tengas algún plan – dijo Barry – Nos acaban de patear el trasero y ahora Parallax va a drenar a los ciudadanos.

-Será mejor que tengas una maldita razón para desaparecer – coincidió Diana, ignorando la mirada de advertencia que Nightwing le estaba enviando –

-Necesito mi espada – dijo Katana de repente – Parallax la tiró, debe ser una amenaza para él.

Los ojos de Batman se entrecerraron.

-¿Perdiste la Soultaker? – pregunto Batman –

-Así es.

Una luz parecía encenderse en la cabeza del Caballero Oscuro.

-Nuevo plan – anunció Batman. Sacó el anillo de Sinestro que había recogido en STAR Labs – Esto es en lo que estaba trabajando mientras peleaban – explicó el – Además de ser un arma también es un transportador dimensional, una combinación de tecnología extraterrestre y mágica. Entré en STAR Labs y lo recogí.

-¿Por qué STAR Labs tenia ese anillo? – Green Arrow interrumpió –

-No es importante en este momento – les dijo Kilowog – Todo lo que Batman dijo es correcto, pero solo puedes usar ese anillo si cumples ciertas características que lo aprueben.

-Yo lo usare... el anillo me hablo – respondió Batman –

-El amarillo es el poder del miedo... significa que tienes mucho miedo en tu corazón o que infliges miedo en el de los demás – concluyo Kilowog. Ante esto, Batman solo bajo la cabeza en señal de que sus sentimientos no eran del todo buenos –

-Como estaba diciendo, usare el anillo y enviare la firma dimensional de Parallax de vuelta a su prisión en Oa – continuó Batman – Cuando se active el transportador, tele transportará todo lo que se encuentre en su camino de regreso a la misma dimensión.

-En otras palabras, podemos enviar a Parallax de regreso de donde vino o incluso matarlo – resumió Kilowog –

-¿Dónde entra la espada de Katana en esto? – preguntó Robín –

-La Soultaker es la única arma que tenemos que podría funcionar contra Parallax – respondió Batman – Si Katana lo apuñala, la espada tomará su esencia y la absorberá e incluso podremos sacar al monstruo aquel de Hal Jordan. Katana puede liberar el alma de Parallax en el rayo transportador, y Parallax será encarcelado nuevamente.

-En el anillo – dijo Wonder Woman – ¿Qué le impide escapar de nuevo?

-Simple. El anillo será destruido. Yo personalmente me aseguraré de ello.

-Tenemos que sacar a Parallax de la ciudad – dijo Arrow – Si se vuelve demasiado poderoso, no hay forma de que nos acerquemos lo suficiente para apuñalarlo con la espada de Katana.

-Siempre que podamos encontrarla – intervino Nightwing –

Batman comenzó a dibujar en la arena con un palo.

-Lo llevaremos a los cielos. La mayoría de nosotros lo mantendremos ocupado allí mientras los demás buscan la espada de Katana. Cuando la encontremos, alguien puede tomarla y apuñalar a Parallax. Eso es todo lo que tenemos que hacer.

-Es más fácil decirlo que hacerlo – dijo Cyborg, dudoso –

-¿Tienes una mejor idea?

Superman suspiró.

-Está bien: Flash, Katana, Nightwing y Arrow buscarán la espada; el resto de nosotros lucharemos contra él en el cielo – concluyo Clark –

-No todos podemos volar, ya sabes – dijo Flash –

-Haremos algo – les prometió Zatanna – Tus flechas serán útiles, Oliver.

-¿Bien? – preguntó Superman, y entonces todos se miraron –Vamos.

Los héroes asintieron y se dispersaron para hacer su trabajo... y salvar el mundo. Batman se volteo para regresar a su avión, pero Superman lo detuvo con una mano en su hombro.

-Bruce. ¿Estás seguro de esto?

-No.