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No hay diferencia social


Narra Shaka:

Dos días después de la fiesta y aún no le había mandado ningún mensaje a Mu para que podamos tomarnos un café y hablar.

La verdad no sabía con qué excusa hablarle ni que decirle, no es que pueda reclamarle algo, salimos una sólo una vez.

Esto es mejor hablarlo con un amigo.

Salgo de mi consultorio y camino hasta la oficina de Camus. Toco su puerta y escucho un Adelante.

- Buenos días Dr. Monnier ¿Cómo se encuentra? - digo riendo.

- Buen día Dr. Kumar, a que se debe su grata visita.

- ¿Tienes tiempo para un café? - mira su reloj de pulsera.

- Sólo tengo 40 minutos, tengo que pasar por Shijima al colegio.

Una vez en la cafetería comenzamos a charlar.

- Camus, tu que me recomiendas ¿Voy a ver a Mu y pedirle explicaciones?

- No creo que estés en posición de pedir explicaciones.

- ¿Lo dices por lo que paso con Shura? - bajo mí rostro apenado.

- No, por Athena no, no tienes que sentirte avergonzado por lo que paso la otra noche. Tienes todo el derecho de acostarte con quien quieras, no tienes una pareja como tal - me siento aliviado por la compresión de mí amigo -con respecto a lo otro, vamos a lo mismo, no le puedes reclamar, no es tu pareja.. pero puedes ir a verlo, con alguna excusa, y hablas o si quieres ir más de frente ve y lo invitas de nuevo a salir. Si acepta está interesado.... Shaka tranquilo, no lo culpo que no haya ido a la fiesta, piensa, no es un ambiente al cual este acostumbrado supongo.

- Si, puede que tengas razón, pero a mí no me importa nuestras diferencias, no quiero salir con un tipo pedante, quiero alguien que me quiera como soy más allá de las apariencias. A mí me gusta el, quiero conocerlo, quiero que vea que hay más allá de un médico. Soy más simple de lo que piensan.

-Eso se lo tienes que expresar a el, hacerle saber que no te importa las apariencias, si no los sentimientos. Shaka tu eres una excelente persona con bellos sentimientos, solo expresalos, y sobre todo, pregúntele a donde le gustaría ir. Por favor no lo invites otra vez al teatro, no a todos les gusta.

- Si creo que se aburrió y solo fue cortés conmigo.

- Ve a verlo, habla con el, conócelo, estoy seguro que tu también le gustas. Ya acepto salir contigo. Demuéstrale que puedes adaptarte a todo.

- Tienes razón, pero no se me ocurre ninguna excusa tonta para ir... A lo sumo que rompa mí auto a propósito ... Mmm no mejor no, lo necesito, bueno no me queda otra que ir de frente.

El mediodía se acercó y era hora del almuerzo, me encontraba solo, se valiente Shaka me decía a mí mismo tomando valor para hablar con Mu.

Mejor rompo el auto, no quiero parecer desesperado. Fui hasta el estacionamiento y camine a donde estaba ubicado el auto. Agarro una piedra, miro para los lados asegurándome que nadie esté cerca, pensaran que soy un loco que rompo mí auto o aún peor un vándalo y llamen a la policía.

Con fuerza rompo con la piedra una de las luces delanteras. La alarma comienza a sonar y desesperado busco mis llaves para apagarla. Subo a mí auto y me dirijo al taller.

Narra Mu:

Mientras miraba el motor de un Ford Mondeo, pensaba si no ir a la fiesta había sido un error. Deje plantado al bello girasol y no me ha vuelto hablar, bueno yo tampoco le mande un mensaje, creo que es más por cobardía.

No quiero hacerme ilusiones con algo que no es para mí. Pertenecemos a mundos diferentes, tenemos gustos diferentes. Fui un tonto al pensar que tenía oportunidad.

Y de repente veo que su auto se estaciona en la puerta del taller.

Baja y se ve deslumbrante como siempre, irradiando esa luz que encandila mis ojos. Un ser perfecto y puro.

- Hola Mu, buenas tardes - veo como camina hacía mí esquivando todo a su lado, intentando no ensuciar sus caros pantalones blancos... ¿Quién viene a un taller con pantalones blancos? Solo el.

- Buenas tardes Dr. Kumar ¿Qué lo trae por aquí?

- Mu por favor solo llámame Shaka, no seas tan formal. Mira, algún bandido me ha roto la luz del auto ¿Tienes tiempo de arreglarlo? - ha, era solo eso, no ha venido a verme a mí.

- Si claro, pero me temo que no tengo disponible ese modelo, tendré que pedirlo... Shaka escucha, quería pedirte perdón por no acompañarte a la fiesta, me siento un estúpido por fallarte, solo que... tu eres tan perfecto y yo no soy nada - me desahogo apenado.

- Mu, por favor no digas eso, no tengo nada de genial. Tu ... tu eres asombroso, tu historia es de admirar - me quedé helado cuando menciono que me admiraba - me gustas, me gustas mucho. No me importa nuestras diferencias, me importa lo que podamos aprender de ellas - se acercó rápido a mí y me beso.

Me beso con intensidad aferrándose a mí cuerpo, su aroma dulce me envolvío por completo. Doy un respingo cuando siento sus manos colarse debajo de mí remera.

- Espera Shaka ... - no me dejaba hablar, sus besos eran intensos y su boca sabia anís.

Sus besos y suspiros me estaban volviendo loco, sumándole sus caricias. Me dejó llevar...
Tanteó como puedo, sin cortar aquel contacto, y apretó el botón del control remoto de la persiana del local para cerrarla.

Una vez asegurada nuestras intimidad, soy yo quién toma el mandó. Mientras lo beso lo voy guiando hasta arrinconarlo contra el Mondeo que estaba arreglando. Comienzo a devorar su boca mientras acarició su cintura. Bajo mis manos hasta posarlas en su hermoso culo. Sus jadeos entre beso me la ponen dura.

- Aaah Mu, quiero... quiero hacerlo... Aquí - suplicó excitado y yo solo podía obedecer.

El acaricia mí erección y yo apretó sus nalgas mientras devoro su cuello.

-No te das una idea las ganas de metértela que tengo - confieso lamiendo su cuello.

- ¿Y que esperas?

Devoro nuevamente sus labios mientras desabrochó y saco sus pantalones exponiendo aquel miembro despierto. Lo alzó para sentarlo en el capot del auto y lamo su erección húmeda por el deseo. Levanto mí vista y me deleitó con sus gestos de excitación.

- Acuéstate - le pido y el obedece.

Flexiono sus rodillas dejando esa estrecha entrada a mí disposición. La devoro con ansias, juego con mí lengua estimulándolo y el se retuerce gimiendo de placer. Mí otra mano toma su miembro mientras mí lengua no le da
tregua.

- Ah ah Aah .. por Buda Mu... Que bien lo haces sigue así - sus gritos y gemidos iban en aumento al igual que mí deseó por penetrarlo.

- No aguanto más, necesito metértelo.

Acercó mí dura verga a su entrada que estaba más que lista y de a poco me voy hundiendo en el con un gemido ronco por la sensación que ese cálido interior me estaba brindando.

- Que rico es estar dentro tuyo - jadeo una vez que mí miembro desaparece completamente en el.

Comienzo el vaivén deleitándome ver cómo mí erección entraba y salía de su cuerpo, el solo gemía sin control.

No podía creer que estaba poseyendo a tan perfecto ser, esto era como un sueño del que no quería despertar. Quería seguir unido a el.

Mis penetraciones se volvieron más profundas y rápidas, lo cogia sin control y el me pedía más.

Agarro su erección y empiezo a masturbarlo al ritmo de las estocadas. Quería que me bañe de su esencia, mientras yo disfrutaba sentir mí verga ser apretada por sus paredes.

- Aah Mu me vengo... - con un fuerte grito libera su caliente semen en mí mano y en su pecho.

Me inclino para limpiar con mí lengua aquel líquido saboreándolo.

Aceleró mis movimiento, sentía como la punta de mí verga se hinchaba aclamando liberarse dentro de el. Y así lo hago, doy una fuerte y profunda penetración metiendo toda mí longitud dentro suyo y con un grueso gemido lo llenó todo de mí.

No la quiero sacar de su interior, se siente muy rico y mí falo sigue erecto.

Lo jalo hacía mí bajadolo del capot. Lo doy vuelta y lo recuesto apoyando su pecho en el capot. Posa una de sus piernas en el guarda barro y yo aprovecho la posición para, con mis manos, separarle a un más las nalgas mientras me meto nuevamente en el.

Una vez dentro suyo completamente colocó mis manos en su cadera y comienzo mis estocadas frenéticamente sintiendo como su culo rebotaba con mí pelvis. El no para de gemir y gritar ni nombre.

Agarro su pelo con una mano y lo jalo hacia mí levantando un poco su cabeza para besarlo y susurrarle al oído lo mucho que me gustaba y excitaba, mientras no le doy tregua a su culo.

El se libera ensuciando el auto y yo dentro de el nuevamente.

Caigo sobré su espalda exhausto. Nuestras respiraciones eran agitadas.

- Tu culo me vuelve loco - comento mientras salgo de su interior una vez recuperado - podría cogértelo todo el día.

El ríe mientras se viste y yo hago lo mismo.

- Esto fue increíble... ¿Quieres venir a cenar está noche a mí casa?

- Me encantaría, pero está vez te deleitare yo con una comida. Cierro el taller a las 17hs, me baño y voy para tu casa ¿Qué te parece? -agarro su mano y la beso.

- Me gusta la idea - sonríe y luego besa mis labios - Tengo que seguir trabajando, te espero está noche.

Relajado por tremenda cogida me dispongo a seguir con mí trabajo. Miro el Mondeo chorreado con el semen de Shaka y rio, mejor lo limpio, no creo que al dueño le agrade.

El reloj marcó las 17hs y cierro el local para volver a mí casa.

Cruzo la puerta y encuentro a mí hermano Shion sentado en el sillón de la sala comiendo junto a su hijo Kiki.

- Hola familia , hermano ¿Estás anidando en ese sillón? - preguntó divertido.

- Si, y pienso parir a Okko aquí mismo - lo miro con asco imaginando la escena.

Se para y viene a mí lado

- Te noto diferente, tienes un brillo en los ojos y - huele a mí alrededor - tienes olor a sexo - sigue oliéndome - sexo duro y sucio, sexo con tu médico refinado - ríe de lado.

- Ya déjame en paz - me alejo con fastidio - está noche no me cuentes pará cenar - comunico y me voy a bañar.

Me arreglo con un estiló casual y salgo en mí moto con destino a la casa de mí bello girasol.

Una vez que llegó, estacionó mí moto en la entrada del garaje de su casa.

Tocó la puerta y el bello rubio abre con una radiante sonrisa. Me da la bienvenida con un dulce beso en los labios que saben a caramelo.

- Pasa mí amor... Perdona ¿Te molesta que te diga así? - pregunta apenado.

- Para nada, al contrario me encanta - contesto con una sonrisa.

Me da paso y me adentro a su casa.

- Compré todo lo que me dijiste por mensaje.

- Perfecto, ven hazme compañía mientras cocino - le ofrezco mí mano la cual toma gustoso dirigiéndonos hacía la cocina.

Una vez allí pongo manos a la obra mientras el me observa sentado desde la isla.

- ¿Quieres algo de tomar? - pregunta mientras camina hacía la heladera - tengo vino y cerveza.

- Cerveza está bien - respondo sin mirar mientras cortó las verduras. De repente siento que me abraza por la espalda y deja la botella de cerveza en la mesada. Me gusta esos gastos cariñosos de su parte. Deposita un beso en mí cuello.

- ¿Quieres ser mí novio? - pregunta de golpe mientras toma asiento y yo me atragantó con la cerveza que bebida en ese momento.

Giró mí cabeza hacía el para encontrarme con sus ojitos color cielo que me miran expectantes esperando con ilusión una respuesta.

- Novios... ¿Novios como una pareja formal? - preguntó sorprendido.

- Claro o ¿Hay alguna otra manera de ser novios? - me pegó mentalmente por mi pregunta estúpida - o ¿Solo quieres acostarte conmigo sin compromiso? - pregunta algo triste

- No, por supuesto que esto no es casual, lo siento, solo que, pensé que eso ya no se preguntaba y solo se daba con el tiempo.

- Perdóname, soy un estúpido, solo estoy nervioso y no quiero que me tomes por un cualquiera que se acuesta por qué si.

- No pienso eso, jamás lo pensaría, por lo poco que vi en ti se que no eres así - camino hasta quedar frente a el - me encantaría ser tu pareja mí bello girasol -tomo su mano y depósito un dulce beso en ella - Shaka, tu me haz gustado desde el día en que te vi entrar al taller y ser correspondido es un sueño para mí del cual no quiero despertar - besos sus labios tiernamente. El me regala la más bella sonrisas y sus cielos brillan con ilusión.

Mientras continuaba cocinando charlábamos muy amenamente conociéndonos más a fondo. Gustos de películas, música, deporte y comidas.
El me prometió que iría conmigo a comprar ropa casual para el y yo le prometí acompañarlo algún día a la ópera de París. Porque ambos estábamos dispuestos a compartir y acompañar al otro en sus gustos. Ir a catas de vino y boliches.

Por qué el amor no es solo sexo si no también se basa en poder disfrutar con tu pareja cada aspecto de la vida y enseñarse mutuamente lo que ambos son capaces de hacer y aprender juntos uno del otro.

Después de la cena terminamos nuestra noche enredados en la cama prometiéndonos amarnos con intensidad y luchar juntos contras las personas que piensen que no podemos estar juntos por ser diferentes.

Nada importa por qué yo lo admiro y se que el también lo hace.
Por qué nos amamos.
Por qué somos iguales.

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Aquí un nuevo capítulo.

La relación de Mu y Shaka ya comenzó.

Espero que le haya gustado. Sepan que me cuesta un poco escribir de ellos.

En el próximo capítulo volvemos con Camus.

Gracias por leer.

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