- La persona que amas... ¿eh? - dijo Mael con seriedad - ¿Piensas que un poco más de poder y un superficial cambio de forma vas a poder hacerte la heroína delante de todos?

 - Mi padre no me ha prestado su poder para hacerme la heroína delante de todos, como bien dices - respondió ella seriamente - He dicho que vas a pagar por herirle.

 - Tu padre, dices... - Mael se acarició la barbilla interesado - Aquel que me robó el poder del Sol...

 - Aunque te lo robase, tú no podrías poseerlo ahora por los mandamientos que has engullido - contestó fríamente.

Más atrás, los otros dos arcángeles miraban la escena con sorpresa, acompañados por Elizabeth y Derieri.

 - ¿Esa chica también tiene el poder del Sol? - preguntó Tarmiel.

 - Aunque diga que es hija del humano que ahora lo posee, no se transmite por herencia genética - contestó Sarmiel.

 - No es un ángel, desde luego. No posee su aura, ni tiene las alas iguales que las nuestras, además de esas en la cabeza... y el mismo rostro y cabello que Elizabeth...

 - No es un falso ángel como pensáis - Elizabeth se giró mirándolos con seriedad - No imita mi rostro ni tiene el poder del Sol. Zoba es una verdadera mutante y ha absorbido la magia de este lugar que rebosa de nuestra energía para lograr esa forma. Zoba no es la hija de sangre de Escanor, pero ambos tienen un vínculo emocional y espiritual envidiable.

Mael, escuchando la conversación de Elizabeth, sonrió de lado mirando a Zoba.

 - Le llamas "padre" sin serlo en realidad... siendo un triste monstruo mutante seguramente te adoptase por pena... - dijo intentando desmoralizarla.

 - He vivido con personas como yo, en el sentido de que han sido criadas por personas que no son de su familia. La misma princesa Elizabeth ha sido criada por el rey Bartra, en esta vida, claro; Ban fue criado por un hombre-zorro que lo llegó a querer como a su propio hijo; o incluso mi mejor amiga Diane, que fue criada por la persona que la amaba - dijo echando un tranquilo vistazo a King - Ellos son personas felices y tienen valores únicos, por lo que si me comparas con ellos, es realmente un halago.

Mael la miraba frunciendo el ceño. Deseaba tomar el pequeño orgullo que tenía esa cría y pisotearlo, humillarla y hundirla. Pero Zoba no había terminado con él...

 - Además, tengo entendido que... - dijo acariciando con la yema de un dedo el borde de su escudo - que quien en realidad le daba pena a mi padre...eras tú.

Los dos arcángeles la miraron con los ojos más abiertos ante ese ataque de soberbia hacia el arcángel más fuerte, mientras que el resto abrieron un poco la boca sin creérselo. Hawk entró directamente en pánico y huyó hacia ellos.

 - ¡Está loca! ¡Está loca! ¡Sálvense quien pueda! ¡Mujeres y cerdos primero!

Gowther parpadeaba varas veces forzando a su ojo a ver mejor, pero sólo veía la mancha borrosa que era ahora Zoba para ella. La escuchaba bien y estaba asustado por ella. Zoba le miró también y le dedicó una sonrisa cariñosa que él no podía ver. Así que, el muñeco hizo algo que tal vez le sentara mal a Zoba, pero sólo iba a ser un momento, y lo necesitaba: leyó su mente. Y para su sorpresa, Zoba le estaba hablando.

 - "Gowther, no tengas miedo por mi, no te preocupes demasiado, estaré bien. Sólo quiero acaparar la atención de Mael para que a vosotros os de tiempo a recuperaros y que ideéis un plan para salvar a Mael de los mandamientos que lleva dentro. Así que quiero que use una gran cantidad de energía en mí... que absorberé y la usaré en su contra"

Gowther tragó saliva mirándola. Si ella iba a sacrificarse para que ellos meditaran un plan, debían ser rápidos.

*

Mientras, abajo, Merlín parecía más calmada mirando al cielo de brazos cruzados. A su lado, Escanor estaba apoyado en la pared callado.

 - Escanor... ¿no crees que le has dado demasiado poder? - preguntó ella sin mirarle.

Merlín notaba que la energía de Escanor descendió bruscamente, y que ahora volvía a aumentar gradualmente al ser medio día. Escanor la miró girando un poco su cabeza, y dio una pequeña sonrisa cerrando los ojos.

 - Nunca le daré suficiente, todo es poco para lo que merece. Ella sólo me ha pedido dos cosas en la vida... la primera de no irme a la guerra no pude cumplirla, y la segunda de aceptar que era pareja de Gowther me costó. Ella es mi hija y yo voy a darle todo lo que tengo y más.

Merlín dio una pequeña sonrisa de lado, y haciendo volar su capa, volvió dentro del salón.

*

Gowther apretó los labios con fuerza. Necesitaba pensar, y pensar algo rápido. No quería verlo, no quería que Zoba y Mael se peleasen. Todos juntos superaban el poder de Mael de sobra, pues los 150.000 de Zoba daban un buen empujón a su equipo. Fue en ese momento en que Gowther notó una fría mano demoníaca en su hombro. Derieri le miraba a su lado.

 - Vamos a salvar a Mael - dijo con seriedad - Transmite mis pensamientos a todos excepto a Mael, sé que puedes hacerlo.

 - Pero...

 - ¿Quieres que esa chica viva? Hazme caso.

Gowther le miró sorprendido cuando vio el plan de Derieri y se apresuró a comunicarlo a los demás. Zoba lo recibió y escuchó.

 - "Todos, debemos atacarle todos y mantenerlo distraído. Los dos arcángeles usarán su poder para mantener a Mael en la misma posición, y mientras Derieri ejecutará su combo de ataques sucesivos. En ese momento de desconcentración y quiebre mental, buscaré en sus recuerdos abriendo una brecha para buscar cómo extraer los tres mandamientos que lleva dentro"

Justo cuando Zoba analizaba el plan, Mael se lanzó a por ella, dándole tiempo sólo a reaccionar ocultándose tras su escudo. Mael propinó un fuerte golpe al león del escudo haciéndola retroceder volando del impacto. Justo después, King fue a por él para evitar que fuera tras Zoba. Unos brazos agarraron a Zoba en el aire mientras ella se estabilizaba con sus alas. Miró hacia atrás y encontró a Derieri mirándola.

 - Vaya... que ironía de la vida que ahora me salves tú... - dijo con una pequeña sonrisa - Y por lo que parece, no voy a ser la víctima de tu combo devastador de golpes esta vez...

 - Ahora me lo pensaría dos veces antes de golpearte - confesó ella con otra sonrisa también - Vamos, tenemos que conseguirlo.

Así, lanzaron sus ataques. La forma de avispero de Chastiefol creando varias cuchillas mezclada con unas plumas afiladas como agujas que lanzaba Zoba eran suficientes para que Mael se molestara, y mientras le frenaban, Derieri aparecía para darle fuertes golpes. Gowther mientras, se preparó para usar sus poderes y quebrar su mente.

Sarmiel y Tarmiel le apresaron con sus poderes para que Gowther siguiese buscando en su mente, y poco a poco, empezaba a leer la conversación que tuvo con Zeldris sobre ello. Mael dio un gruñido enfadado y vio sólo al muñeco en el suelo, concentrado en leer su mente.

- ¡Te tengo! ¡Estás indefenso! - dijo cayendo en picado hacia el muñeco.

- Que te lo has creído.

Zoba apareció diciendo eso delante de Gowther y extendió las alas de su cabeza, provocando una luz cegadora que hizo que Mael se tapara la cara con los brazos, y después ella le golpeó hacia un lado con el borde de su escudo. Gowther la miró impresionado. Ella flotaba en el aire con rostro serio, y parecía otra. Esta era más grande, más poderosa... pero incluso con el peinado de Elizabeth, los ojos anaranjados y aire de Escanor en su expresión, Gowther podía ver a su Zoba todavía. Ahí estaba, cuidando de su amor. Ella le miró con una sonrisa y se acercó lo suficiente a él para que pudiese verle mejor.

- Sigue Gowther, lo haces genial... - dijo sonriendo - No te preocupes por él, te protegeré.

Y dicho esto, alzó el vuelo para seguir golpeando a Mael. Gowther sonrió, y antes de seguir haciendo brechas en los recuerdos, dijo:

- Yo también... con mi vida...

Gowther sonrió y prosiguió su tarea de hacer brechas en la mente de Mael, pero un pensamiento de este se cruzó en su mente...

 - "¿Por qué?" - pensó Mael - "¿Por qué siempre me toca a mi sufrir? No importa lo que haga... nunca es correcto... siempre me toca pasarlo mal..."

Gowther apretó los labios y continuó su tarea, pero esos pensamientos hicieron a Mael enfadarse más y liberarse de la prisión a la que le sometían los arcángeles.

 - ¡Vuelvo a la carga! - anunció Derieri volando hacia él para seguir con el combo.

Derieri, tan concentrada en ir a por Mael, no se dio cuenta de la sonrisa de medio lado que escondía él. Sabía algo de lo que pocos se acordaban. Antes de ser impactado por el golpe de la demonio, Mael lanzó un ataque muy cerca de ella, que hizo que le atravesara el pecho a la chica rubia mientras daba un chillido. Ella cayó al suelo, mientras Mael empezaba a recitar un encanto que hacía que su mandamiento fuese para él.

 - ¡Pero...! - dijo Zoba mirando a la demonia caída - ¡Los demonios tienen 7 corazones!

 - ¡Derieri no! - dijo Gowther alzando la voz - ¡Sacrificó seis en la Guerra Santa!

Su mirada cambió a horror cuando comprendió que Derieri había muerto, y Mael estaba a punto de absorber su mandamiento. Apretó los dientes viendo como él seguía con su encantamiento, y que la energía que desprendía alrededor era horrible.

 - No, no le voy a dejar... ¡No le voy a dejar!

E impulsándose con sus seis alas, se lanzó hacia el cielo contra Mael, con un grito denegación de Gowther tras su espalda. Apretó el agarre de su escudo y el león dio un gruñido gutural mientras brillaba. Dio energía de su arma sagrada, su collar, y la traspasó a su escudo. Necesitaba un golpe explosivo para hacer que Mael interrumpa su unión con el mandamiento, y tenía el valor necesario para hacerlo.

El contacto con el escudo de poder que creaba Mael creó un ruido sordo cuando Zoba chocó con él con el león de su escudo, y mantuvo la fuerza. 

 - ¡Maldita sea! - King voló detrás de ella para intentar sumarse a su fuerza.

Sin embargo, no llegó a tiempo. Mael ganó la batalla y engulló el mandamiento, lanzando una enorme onda expansiva que quebró un poco el borde del escudo haciéndole una brecha, que la debilitó y mandó volando hacia el suelo.

Ella puso una mueca de dolor cayendo en el aire. Era un momento en el que todo pasaba muy lentamente. La brillante luz que envolvía a Mael desprendiendo energía, el frío del aire balanceando sus plumas, el leve gemido de dolor que emitió el león de su escudo... la tristeza que la envolvía de no haber podido detener a Mael... y saber que todo estaba perdido ya. Y tras todas estas tristezas, sólo podía pensar en una cosa...

 - Confiaste en mí... - susurró - Y te fallé... no pude detenerle, no soy suficiente... lo siento, papá...

Por el enorme viento que daba, Elizabeth se echó al suelo, y Hawk se agarró con las pezuñas al suelo chillando, pero terminó volando también. King cayó al suelo, seguido de Zoba, pero Gowther corrió hacia ella y se lanzó contra ella para evitar que estrellase contra el suelo abrazándola.

El muñeco levantó la cabeza para comprobar su estado. Ella estaba desmayada sobre él, y suspiró aliviado al ver que no se había hecho daño. Sin embargo, su brazo herido sí se terminó de romper y caer al suelo, pero no le importó mucho al muñeco.

Miró a su alrededor para ver a Hawk con un chichón de un choque, y a King desmayado unos metros más allá. Abrazó a Zoba con fuerza mirando a Mael cuando terminó su transformación. Vio que el arcángel ahora tenía muchísimo más poder que antes, llegando a superar los 200.000 puntos de energía.

 - No vas a ganar... - murmuró Gowther - Voy a salvarte, Mael... voy a enmendar mi error... voy a protegerla... por encima de todo.