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Rei Nakano. Determinación inquebrantable

BONUS

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"Un caballero nunca falta a su palabra".

Esta frase la conoce bien un  joven pelirrojo, que desarrolló un sentido del deber y de la caballerosidad desde una edad temprana.

No tuvo una infancia fácil, pues su madre tan sólo podía trabajar de manera regular debido a su enfermedad, y él mismo tampoco podía trabajar por dos razones: porque era menor, y porque debía cuidar de sus cinco hermanas pequeñas.

Su vida tomó un rumbo trágico debido a la muerte de su madre y al daño psicológico que le causó a sus hermanas debido al shock que le produjo la pérdida de su progenitora. La culpa que pesaba sobre él era tan grande que incluso estuvo a punto de cometer suicidio.

Pero gracias a los amigos que hizo durante sus años de preparatoria, pudo salir adelante, obtener el perdón de sus hermanas, y comenzó a perseguir sus sueños con la misma ilusión que cuando era un niño.

La alegría que le produjo la restauración de su vínculo fraternal seguiría en aumento a su llegada a Inglaterra. Pues poco después de su llegada, el destino le concedió un singular encuentro con una hermosa joven llamada Minako Aino. Y comenzaron una relación de pareja después de ciertos acontecimientos.

La vida de Rei Nakano apenas acaba de comenzar.

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Al día siguiente de la partida de Fuutarou y compañía a Seúl...

Rei se encuentra con Glaolo y su equipo, el Manchester United, en su bus haciendo el recorrido desde Mánchester hasta Londres para su siguiente partido correspondiente a la Premier League. El pelirrojo dormitaba mientras esperaba la llegada, pero eso no era todo lo que hacía. Estaba meditando, reflexionando acerca de los acontecimientos sucedidos en los últimos meses.

Rei: Zzzzzzz.... - dormía plácidamente -

Glaolo: Está sobado... - se sorprendió un poco el peliblanco -

Wright: Mejor let's let him be. Ha trabajado duro en los entrenamientos. Llegará al partido full of energy. - sugirió el joven internacional inglés -

Glaolo: Muy bien. Aprovecharé para analizar el juego de nuestro rival: el Tottenham. Será mi primera vez en Londres, estoy deseando llegar - dijo tomando su tableta y ojeando -

Wright: Jugaremos varios partidos allí durante la temporada. No tardarás en acostumbrarte a moverte por allí. - afirmó el delantero -

Rei: (...) - seguía dormitando mientras se perdía en sus pensamientos -

Rei: (Ya ha pasado un tiempo.) (Finalmente, parece que he tomado las riendas de mi vida...) (Actualmente me siento bien, física y psicológicamente.) - se auto-analizaba -

Rei: (Tengo el trabajo de mis sueños... mi relación con mis hermanas vuelve a ser como era... y mi relación con Mina-chan va viento en popa....) - analizaba su situación sentimental -

Rei: (...) (Todavía me sorprende lo mucho que ha cambiado drásticamente la situación en apenas unos meses...) (Cuando llegué a la Preparatoria Zero, nunca me habría imaginado a mi mismo tan feliz y tranquilo...) - pensaba mientras recordaba -

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Flashback

Hace 3 años...

Preparatoria Zero - Campus central

Rei: (Al iniciar mi vida en la preparatoria, tenía la mente y el corazón hecho pedazos por la depresión.) (Cuando mi padre... Maruo-san, me contó la verdad tras la muerte de mi madre y me desmintió los rumores que oía, me rompí completamente...) (Había hecho daño a mis hermanitas, que son el mayor regalo que me han hecho jamás en la vida...) - recordaba los lamentos y arrepentimientos que sintió -

Rei: (Desde mi llegada, estuve yendo a un psicólogo.) (Necesitaba que alguien me escuchase...) (Pero siempre pensé en que el daño que causé era irreparable...) (Y cuando me contaron de la enfermedad que yo padecía, pues ni me molesté en alterarme.) (Pensé que sería mi justo castigo por la crueldad que cometí...) - recordaba con penuria -

Rei: (Aunque hiciera realizar mis sueños... aunque mi enfermedad tuviese cura...) (Por muchos títulos que ganase en mi carrera, ya nunca volvería a ver a mi madre ni a mis hermanas sonreír de nuevo...) (Lo único que quería... era proteger esas sonrisas... tan tiernas y gentiles...) - seguía recordando aquellos tiempos -

Rei: (Tenía claro que mi vida... ya no tenía sentido.) 

Rei: (Pero lo cobré de nuevo el día... en que le conocí a él.) (A Glaolo Shadeon...) - recordó el día en que conoció el peliblanco -

Rei: (Fue en mi primer día en la división de preparatoria, mi psicólogo era también el profesor encargado de mi aula, y él mismo me recomendó unirme al club de fútbol, que estaba en reconstrucción tras la graduación de los de Tercer Curso.)

El pelirrojo estaba saliendo de su aula cuando su psicólogo, el Dr. Hamazaki, le invitó a unirse al club, el sensei se encontraba junto a un chico de cabello blanco.

Dr. Hamazaki: Nakano... que diga, Thornblade-kun. ¿Te unirás al equipo de fútbol al final? - le preguntó curioso por la decisión del pelirrojo -

Rei: Ah. He estado tan perdido que últimamente he dejado de jugar. No creo que ayude demasiado que me una... - decía pesimista -

???: No importa que seas bueno o no. ¡Lo importante es que te diviertas! - le dijo un chico peliblanco -

Rei: ¿Tú eras...? Shadeon-kun, ¿no? - trataba de recordar el nombre de su compañero de clase -

Glaolo: Sí. Me llamo Glaolo Shadeon. ¿Cómo te llamas? - le preguntó su nombre -

Rei: Kai. Kai Thornblade. - le dijo su nombre falso -

Glaolo: Encantado de conocerte, Kai. Mis hermanos y yo hemos reunido a algunos compañeros de clase en el campo de fútbol para jugar un poco. ¿Te apuntas? - le invitó a jugar -

Rei: Mmm... Vale, pero sólo si me dejáis ser portero - dijo su condición -

Glaolo: ¡Sin problema! ¡Vamos! - tomó al pelirrojo de la mano y corrieron hacia el campo -

Rei: (Al principio, Glaolo me parecía un chico raro que simplemente le gustaba mucho el fútbol.) (Pero según iba jugando con él, empezaba a sentir un calor que llevaba años sin sentir.) - recordaba aquellas sensaciones -

Rei: (Aquel calor se hizo mayor mientras conocía a mis compañeros.) (A Brawl, a Jaspe, a Flareleon, a Berceo, a Drake...) (Hice nuevos amigos que minimizaron ligeramente las heridas de mi corazón.) - recordaba con regocijo -

Rei: (Nos convertimos en un equipo asombroso.) (Glaolo, Berceo y Tsukasa creaban magníficas jugadas.) (Flareleon, Drake y Jaspe metían goles escandalosos.) (Brawl mantenía a flote una defensa inexpugnable.) (Y yo me volví un cancerbero imbatible.)(Pudimos ganar a las Preparatorias Nankatsu y Toho en el Intercolegial, y nos coronamos campeones del torneo de verano.) - recordó su primer gran triunfo -

Rei: (La noche del día de la final, la escuela celebró una fiesta en nuestro honor.) (Habían acudido alumnos, profesores y algunos familiares.) (Pero yo no estaba de humor para celebraciones...) - recordaba aquella noche en la que caminaba bajo la luz de la luna -

Preparatoria Zero - montaña detrás del campus - camino al cedro

22.00 P.M

Rei: (Estaba orgulloso de haber ganado un torneo por primera vez en mi vida.) (Pero... me sentía vacío por no poder celebrarlo con mi familia.) (Además, mientras caminaba, veía la luna...) - seguía recordando -

Rei: (...) - caminaba en silencio por el sendero montañoso hacia el cedro-

Rei: (...) Hoy la luna también luce muy hermosa... - decía mientras observaba el satélite en su fase de luna llena-

Rei: (...) La luna... Itsuki... - observar la luna le hizo recordar a su hermanita más pequeña-

Rei: (...) - recordó también aquel fatídico día-

Rei: (No quiero volver a veros nunca más... ¡OS ODIO, MATRICIDAS!) - recordó la más grande crueldad que jamás ha contado -

Rei: Agh... - aquel doloroso recuerdo le hizo estallar en lágrimas-

Rei: Jamás pensé... que no tener a la familia en estos momentos... pudiera ser tan doloroso... - decía mientras se secaba las lágrimas -

Rei: ¿Cómo pude... ser tan... inmaduro...? Esas palabras... jamás debieron salir de mi boca... -decía con mucho arrepentimiento -

Rei: Por mucho que gane aquí... Por más títulos y reputación que gane... Nada cambiará el hecho de que soy un cobarde... Maldita sea mi estampa... -se maldecía a sí mismo -

Después de caminar por un rato entre lágrimas, el pelirrojo llegó al cedro, donde se encontró con su mejor amigo.

Glaolo: ¿Oh? - se sorprendió por su llegada -

Rei: ¡Ah...! - se secó las lágrimas que le quedaban antes de nada -

Rei: ¿Cómo es que no estás en la fiesta? ¿No te van los festejos, capitán? - preguntó intentando desviar la atención-

Glaolo: Necesitaba venir aquí en este momento. ¿Y qué hay de ti? - devolvió la pregunta-

Rei: ¿Eh?... - se sintió pillado-

Glaolo: Para haber ganado el Intercolegial y ser el mejor portero de la competición, no se te ve nada contento. ¿Te ha pasado algo? -preguntó con curiosidad-

Rei: N-no es nada. Lamento la interrupción, ya me voy - intentó irse -

Glaolo: Espera. Puedes quedarte. Así también le haces compañía -dijo sonriendo y ofreciendo gentilmente-

Rei: ¿Compañía a quien? Si aquí estamos solos, ¿no? - decía no viendo a nadie alrededor de ambos -

Glaolo: Solos no. Allí arriba, hay alguien más -señaló al cielo, más concretamente, a la luna, en su fase llena -

Rei: ¿Eh? ¿La luna? - la miraba algo incrédulo-

Glaolo: Hay noches en las que no hay estrellas alrededor de la luna llena. A mí me gusta situarme en lugares altos como este y hacer compañía a la luna, así no se siente sola. - decía plácidamente-

Rei: ¿Haces compañía a la luna creyendo que se siente sola? Je, je, suena raro, pero no es un mal plan. - le gustó la visión del peliblanco -

Los dos jóvenes se quedaron absortos mirando a la luna durante unos segundos. Hasta que Glaolo se animó a hablar.

Glaolo: ¿Qué te ocurre? ¿Porqué lloras? Nunca te había visto así de triste - preguntó al pelirrojo-

Rei: No es nada, en serio... Es sólo que... mientras veía a los demás celebrando con sus familias... sentí algo de morriña - confesó no del todo -

Glaolo: ¿Y porqué no invitaste a tus padres a venir? - preguntó-

Rei: (...) Mi padre tiene demasiado trabajo como para prestarme atención... - dijo una obviedad sobre Maruo -

Rei: Y... mi madre... murió el año pasado. Pronto hará un año desde su deceso. - dijo muy compungido -

Glaolo: (...) Lo siento mucho. - le dió sus condolencias-

Glaolo: ¿Y no tienes hermanos? Ya sabes que Flareleon, Berceo y Drake son mis hermanos, ¿no? - le recordó -

Rei: Sí. Me acuerdo. - respondió-

Rei: (...) Y bueno... Tengo cinco hermanas pequeñas. Son quintillizas. - confesó-

Glaolo: ¿Cinco hermanas quintillizas? Eso sí que es cantidad. ¿Y porqué no las has invitado? Estoy seguro de que a todos nos habrían caído bien. - aseguró sabiendo el buen rollo del equipo-

Rei: Y no lo dudo... Pero no es que no las invitara porque no quisiera... Es que no podía. -dijo deprimido-

Glaolo: ¿Por qué no? ¿Estás en malos términos con ellas? - no comprendía-

Rei: (...) Es... complicado... - dijo intentando no deprimirse más -

Glaolo: Kai. Cuando te sientas mal o tengas algún problema, no dudes en contármelo. Somos amigos, ¿no? - le dijo con empatía -

Rei: (...)  - no pudo decir nada, se le volvieron a saltar las lágrimas, lo que hizo que el peliblanco le pusiera la mano en el hombro -

Rei: Es una larga historia... - dijo secándose de nuevo las lágrimas -

Glaolo: Estoy contigo. Tómate tu tiempo, no tengas prisa, que no me voy a ir de aquí - le alentaba -

Rei: Para empezar... Yo no me llamo Kai Thornblade. Mi verdadero nombre es Rei Nakano. - confesó en primer lugar -

Rei le contó a Glaolo todo lo que le preocupaba. Su pasado, su difícil infancia, la muerte de su madre por enfermedad... así como su última conversación con sus hermanas...

Glaolo: (...) No has tenido una infancia nada fácil, ¿eh? - dijo comprensivo -

Rei: (...) Soy un cobarde... Me marché de casa avergonzado... Ya no tengo cara para volver a mirar a mis hermanas... - estaba claramente deprimido -

Glaolo: Vamos... Todos cometemos errores. Lo importante es lo que aprendemos de ellos. Además, siempre puedes ir y pedirles perdón. - reconfortaba al pelirrojo -

Rei: ¿Cómo voy a pedirles perdón si ya no quieren saber nada de mí...? - dijo desconsolado -

Glaolo: ¿Has vuelto a hablar con ellas desde entonces? - preguntó -

Rei: No... Probablemente me odian, por eso no quieren verme. De todas formas, tomé una decisión sobre aquello - dijo algo más calmado -

Glaolo: ¿Decisión? - se intrigó -

Rei: Quiero ganar los campeonatos escolares tres veces consecutivas. Si lo consigo, iré a ver a mis hermanas y les suplicaré perdón. Antes debo haberme vuelto lo bastante fuerte y maduro como para soportarlo todo - dijo determinado -

Glaolo: Es un buen objetivo. Por supuesto, ganaremos los campeonatos, tanto el Intercolegial como el Senshuken. Ya hemos ganado el primero una vez, coronaremos nuestro primer año alzándonos con el torneo más prestigioso a nivel escolar. - dijo al final del año -

Glaolo: Al final del año, nos harán escoger nuestra vocación. Mis hermanos y yo ya tenemos claro cuál escogeremos. ¿Y tú? - preguntó cambiando de tema -

Rei: Sí, lo tengo claro. Me convertiré... en un Caballero. - dijo decidido -

Glaolo: Caballero, ¿eh? - sonrió ante la voluntad  del pelirrojo -

Rei: Sí. Derrotaré a nuestros enemigos y protegeré a mis amigos. Como mi maestra... - dijo pensando en cierta mujer pelirroja vestida con armadura -

Rei: (Erza-sama...) (¡Seré un caballero tan fuerte como tú!) (¡Seré fuerte y protegeré todo lo que amo!) - pensó determinado mientras pensaba en su maestra -

Gracias al apoyo de Glaolo y sus compañeros, el pelirrojo supo salir hacia delante. Afrontando sus adversidades con vigor y valentía, volviéndose cada vez más disciplinado y estricto consigo mismo, y desarrollando una fortaleza que ningún otro alumno de preparatoria podría mostrar.

Al final de su año de preparatoria, fue citado por el doctor de la escuela, Shosuke Takamiya.

Rei: ¿Me ha hecho llamar, Takamiya-sensei? - preguntó al entrar en la enfermería -

Dr. Takamiya: Adelante, Rei-kun. - le invitó a entrar -

Rei: Ah... - se contrarió un poco al ser llamado por su verdadero nombre -

Dr. Takamiya: No te preocupes. Estoy al corriente de tu situación. Te he citado aquí para darte buenas noticias - dijo sonriendo -

Rei: ¿Buenas noticias? - se intrigó -

Dr. Takamiya: Conozco una cura para tu enfermedad - le soltó la bomba -

Rei: ¡¿Ah...?! ¡¿De verdad?! - se puso ansioso -

Dr. Takamiya: Así es. Es un proceso algo largo, pero si mis cálculos no me fallan, tu enfermedad debería estar completamente curada dentro de dos veranos - especuló con sus cálculos -

Rei: Dentro de dos veranos...

Dr. Takamiya: Después de un análisis de  sangre y celular, hemos detectado cuál es el efecto principal de tu enfermedad. La mitad de tus células se oxidan muy rápido, lo que te hace más vulnerable ante los efectos del cansancio. Pero por otra parte, la otra mitad de tus células se reproduce cinco veces más rápido que otras personas, por ello tu cansancio también desaparece más rápido. - analizaba -

Dr. Takamiya: Pero por este desequilibrio, hacer esfuerzos extremos puede resultarte mortal, esa es la razón por la que siempre te exigen no esforzarte demasiado. - concluyó -

Rei: Pues eso me parece más un punto débil que una enfermedad... Bueno, si ese tratamiento puede hacerme eliminar esa debilidad, pues me someteré a lo que sea - dijo decidido -

Dr. Takamiya: Me gusta ese espíritu. Bien, te explicaré en qué consiste el tratamiento.

Dr. Takamiya: En primer lugar, dentro de unos días, te someterás a una operación. te implantaremos un núcleo.

Rei: ¿Un núcleo? ¿Qué clase de núcleo? - se intrigó -

Dr. Takamiya: Tus células se reproducen tan rápido como se oxidan. Por ello, necesitas que tus células sanas crezcan en tu mitad mala. El núcleo que te implantaremos contendrá tus células, que te inyectaremos en períodos mensuales. Las células crecerán y se esparcirán por tu cuerpo, haciendo que poco a poco, tus células se oxiden más despacio. El objetivo el lograr que el proceso de oxidación se ralentice a la manera normal.

Dr. Takamiya: Tu cuerpo servirá de incubadora celular. - se lo resumió -

Rei: Mi cuerpo... Una incubadora... - empezó a sentir escalofríos -

Dr. Takamiya: Se hará más fuerte según te entrenes. La fase de incubación durará un año empezando desde el momento en que termine tu operación - explicó -

Rei: ¿Fase? - no comprendía -

Dr. Takamiya: El tratamiento de tu enfermedad pasa por tres fases: la incubación, la crisálida y la espiritualización.

Rei: Suena como una transformación de oruga a mariposa... No me convertiré en una mariposa de verdad, ¿no? - preguntó escéptico -

Dr. Takamiya: ¡Ja, ja, ja! Claro que no. Aunque sí que te sentirás como si te estuvieras transformando. Es un proceso de cambios en el que te convertirás en tu yo más fuerte. Este proceso eliminará tus debilidades y te permitirá despertar tu verdadero potencial - le convenció al chico - 

Rei: Mi verdadero potencial... - sintió ese deseo de volverse más poderoso -

Durante su segundo año de preparatoria, Rei continuó entrenándose y haciéndose más fuerte. Siguiendo las indicaciones del Doctor Takamiya y sus maestros, apoyándose en sus amigos, y convirtiéndose en el caballero más fuerte de su generación.

En su tercer año, su incubación terminó. Y entonces, comenzó la fase de la crisálida. En la que sus células terminaron de asentarse. El preludio de su espiritualización, la cura completa de su enfermedad... todo terminaría en aquel partido.

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Hace 4 meses...

Semifinales del Torneo Nacional Intercolegial - primer partido

Preparatoria Asahi vs. Preparatoria Zero

Rei: ¡Responde a mi voluntad y manifiéstate, Acheron! - sacó a su espíritu, comenzando la fase de espiritualización -

Rei había decidido poner fin a su vida en aquel partido. Destruirse a sí mismo junto con el odio que sus hermanas supuestamente sentían por él. En su forma espíritu, lucía exactamente como predijo el doctor Takamiya: como una mariposa recién salida del capullo. 

Después de una feroz escaramuza con Fuutarou y una tensa tanda de penaltis, el pelirrojo estuvo cerca de dejar este mundo cuando había decidido seguir viviendo. Pero finalmente, consiguió vencer a la muerte, y su enfermedad se curó por completo.

Como era de esperarse, pidió disculpas a sus hermanas completamente arrepentido. Después de una enternecedora conversación, las quintillizas Nakano perdonaron a su hermano mayor, y su vínculo fraternal se restauró.

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Rei consiguió fichar por el Manchester United, y partió a Inglaterra para comenzar su carrera como profesional. El caballero llegó a los Red Devils con la misma ilusión que cuando era un niño, deseando cumplir con sus sueños.

Poco después de su llegada, conoció a una joven llamada Minako Aino, quien resultó ser una Sailor Senshi, la guardiana del amor y la justicia: Sailor Venus.

A pesar de que la rubia bishoujo le dijo que no podían estar juntos por su maldición, el pelirrojo hizo una promesa de caballero. Juró que estaría a su lado y la protegería, hasta romper su maldición. Nunca perdería la esperanza de hacerla feliz.

Conmovida por la determinación del pelirrojo, Minako aceptó el corazón de Rei. Ambos comenzaron una relación de pareja.

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Un mes después...

Tras el gran partido entre la selección sub-20 de la UJF y el Real Japón...

Rei volvió a Japón acompañado de Minako para tomar parte en el partido.

Su entrada y sus palabras de ánimo y aliento, le dieron a los nuevos héroes la voluntad y el coraje para afrontar a aquellos grandes jugadores, así como su gran jugada, convirtieron al Caballero en una nueva supernova, situándolo entre los mejores jugadores del mundo.

Al día siguiente de la victoria del Real Japón, Rei y Minako regresaron a Inglaterra, pero claro, no sin antes despedirse de Fuutarou y de sus hermanas.

Rei: Tampoco hacía falta que vinierais de propio a despedirnos. - dijo modestamente -

Nino: No seas tonto. La última vez no pudimos siguiera decirte buena suerte. Esta vez, no te dejaremos ir sin dejarnos decirte algo - dijo algo mamona pero con razón -

Yotsuba: Buena suerte, onii-chan. ¡Veremos tus partidos siempre que podamos! - dijo alegremente -

Miku: Esfuérzate al máximo y disfruta - deseó la waifu a su onii-chan -

Itsuki: Pero nada de hacer locuras, ¿vale?  Que te conocemos - le dijo de forma maternal -

Rei: Lo sé, lo sé... Je, je... Cada día te pareces más a mamá. - dijo alegremente nostálgico -

Ichika: Recuerda que ella también te estará apoyando, desde allá donde quiera que se encuentre. No la hagas enfadar haciendo locuras, ¿eh? Que puede aparecerse ante ti en sueños y sermonearte... - dijo intentando darle repelús -

Rei: ¡Ja, ja, ja, ja...! Pues sí. Más me vale no hacer locuras - dijo risueño -

Minako: Rekkun, en unos minutos tendremos que embarcar - indicó el reloj a su novio -

Rei: Ya voy, Mina-chan. Fuutarou, me gustaría decirte algo en privado - pidió al frutas -

Fuutarou: El qué? - se intrigó -

Rei: Primero, quería darte nuevamente las gracias. Si puedo volver a hablar libremente con mis hermanas como antes, es gracias a ti. Por que salvaste mi vida y me convenciste de que debía seguir viviendo - expresó su agradecimiento-

Fuutarou: Por enésima vez, yo sólo jugué al fútbol. Y lo hacía por ellas. - expresó algo avergonzado -

Rei: Mis hermanas pueden llegar a ser un dolor de vez en cuando... pero aún así, te pido que seas paciente con ellas. Te lo pido como su hermano mayor - le pidió al Frutas -

Fuutarou: No te preocupes. Sí que son una molestia. Pero poco a poco me voy acostumbrando a ellas. Ya incluso se me hace extraño no verlas un día - dijo con sinceridad -

Rei: Eso es bueno. Pues como su hermano mayor... y como amigo... te pido un último favor... -dijo el pelirrojo poniéndole la mano en el hombro al Frutas -

Rei: Cuida de ellas por mí también, Fuutarou - le pidió con una sonrisa de confianza -

Fuutarou: (...) Descuida. Soy su profesor, me haré responsable de ellas - dijo con los pies sobre la tierra -

Rei: Me alegra oírlo. Gracias. Cuídate mucho. - se despidió del Frutas -

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Una vez resueltos todos los asuntos que tenían pendientes en su país, el caballero regresó a Inglaterra, determinado a perseguir sus metas y objetivos.

Y además, tenía una determinación extra, una que compartía con su amigo Glaolo: conseguir hacer del mundo un lugar mejor, un mundo de paz.

El pelirrojo continúa afrontando su día a día con una DETERMINACÍON INQUEBRANTABLE.

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Fin del Flashback

Rei continuaba dormitando hasta que Glaolo le despertó.

Glaolo: Rei. despierta. - lo sacudió ligeramente -

Rei: ¿Mmm? Uaaaaah... - bostezó plácidamente - 

Rei: ¿Ya hemos llegado? - preguntó algo adormilado -

Glaolo: Sí, pronto llegaremos al White Hart Lane - indicó -

Glaolo: ¿Estás bien? - preguntó -

Rei: Perfectamente. Estoy deseando jugar. ¡Vamos a llevarnos los 3 puntos a casa! - motivó a sus compañeros y a sí mismo -

- Sí! A por los 3 puntos! A defender el liderato! - los red devils se motivaron -

Rei: Glaolo. Fuutarou y los demás se están esforzando al máximo para pulir sus habilidades y defender el título de campeones de Asia. Como sus senpais, no podemos quedarnos atrás. ¡Vamos a terminar de consolidarnos como estrellas en Europa! - motivó determinado -

Glaolo: Así se habla! - chocaron puños -

Rei: (Pronto comenzará la Copa Asiática Sub-20 de la AFC.) - recordaba -

Rei: (Fuutarou...) (No pienso perderte de vista.) (Muéstrame tu determinación...) (¿Que tan lejos estás dispuesto a llegar para alcanzar tus metas y hacer realidad tus sueños?...) - se preguntaba -

Rei: (Tu respuesta me convencerá o no... acerca sobre si eres el indicado para ellas...) (Espero grandes cosas de ti, "Frutitas".) - pensaba del Frutas deseando ver lo grande que es su determinación y sus ambiciones -

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Bueno mis panas, hasta aquí llega este capítulo bonus.

Tenía pensado hacer este cap sobre rei antes de publicar el del primer partido de la selección, pero no pude por estudios. Pero bueno, ya está terminado y puesto antes del gran debut. No olviden pasarse.

Les gustó?

queja?

sugerencia?

Rei es un buen hermano?

Y un buen jugador?

Es todo un caballero?

Son buenos amigos él y el Frutas?

Veremos en el futuro más sobre este insólito dúo.

Sin más que decir, nos vemos!  



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