Asahi ha conseguido llegar hasta los cuartos de final del senshuken después de arrollar a los equipos de Ichinose y Raizen con unos resultados aplastantes de 12-0 y 10-0. El nivel de sus jugadores ha superado los límites humanos, y ahora los diez héroes deben conocerse a sí mismos para explorar todas las posibilidades de las que puedan disponer.

Pero, ¿cómo han alcanzado semejante nivel?

Los diez héroes, cada uno reunido con sus respectivos seres queridos, han decidido contarles el infernal entrenamiento al que se han sometido en Isla Zero. Han comenzado fuerte con la conversación, quitándose las camisetas y dejando sus cuerpos al descubierto, y cada uno está cubierto de terribles heridas...

Fuutarou: El Baile del Dragón... Ese es el nombre que Glaolo-san le puso al entrenamiento al que nos sometieron. - empezó explicando.

Nariyuki: Bueno... Más que entrenamiento, diría que fue una masacre. - continuó el gafas.

Rentarou: Nos vimos obligados a poner a prueba nuestros límites... - continuaba el creador.

Naoya: Y nuestro valor y determinación también fueron puestas en juicio. - siguió el gladiador.

Shido: Pero aprendimos mucho. Y nos hicimos mucho más fuertes. - prosiguió el  destructor.

Subaru: Hemos podido reafirmarnos completamente. - seguía el muertes locas.

Ard: También hemos mejorado el uso de nuestras respectivas armas. - continua el mago.

Naofumi: Gracias a semejantes barbaridades... - proseguía el héroe del escudo.

Basara: ...Nos hemos superado a nosotros mismos. - añadió el renegado.

Rito: Y ahora somos capaces de hacer frente a cualquier adversidad. - dijo con una misteriosa confianza impropia de él.

Yotsuba: ¿Pero qué tipo de entrenamiento has hecho para acabar con semejantes heridas? - preguntó la coneja muy preocupada.

Fuutarou: Una barbaridad inhumana. - dijo mientras recordaba.

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Flashback - Hace una semana

Isla Zero - Tártaro

Glaolo, Flareleon, Berceo, Drake y Rei se disponían a empezar a entrenar a los diez héroes de Asahi. Iban a comenzar con el entrenamiento más duro, y posiblemente más letal al que se hayan enfrentado en sus vidas...

- "¿El Baile del Dragón?" - dijeron a la vez los diez jóvenes. 

Glaolo: Tranquilos. Aquí nadie va a bailar. Os vamos a hacer bailar, más bien. - dijo pícaro el senpai sabio.

Flareleon: Preparaos para mover el esqueleto... Je, je, je... - dijo el salvaje haciendo crujir los nudillos de sus manos.

Berceo: Tendréis que estar preparados para todo. - dijo el hechicero.

Drake: Para ser grandes jugadores, antes tendréis que ser grandes personas. - dijo el peliverde.

Rei: Os pondremos a prueba en todo. ¿Estáis a punto?

Llenos de determinación, los diez asintieron.

Glaolo: Entonces, sin más que decir...

Glaolo: ¡¡ESPÍRITU MIXIMAX!!

Glaolo repartió sus estadísticas con todos.

Glaolo: ¡No le tengáis miedo a la muerte y atacadnos con todo lo que tengáis! - dijo mientras esparcía su poder mágico por todo el Tártaro.

https://youtu.be/707iABxR-Dg

Glaolo: ¡Mundo Gélido! - usó un ataque para congelar todo el Tártaro, incluyendo la salida por el cráter de arriba.

Los cinco senpais liberaron sus propias auras.

Berceo: ¡Debéis haceros más fuertes tanto en cuerpo, como en mente, así como en espíritu! 

Flareleon: ¡Ayudaos de vuestras almas interiores para aprender a luchar! ¡Jaaaaaaaaa! - se dirió hacia los kouhais con el puño en alto.

- Uaaah! - esquivaron todos el puñetazo, quedándose de piedra al ver cómo un pedrusco ha sido pulverizado por el ataque del salvaje.

Flareleon: ¡Vamos a ir a saco, así que agarraos los pantalones! - dijo con una mirada sádica antes de atacar de nuevo, mientras no paraba de emitir chispas.

Durante un buen rato, los diez chavales no hacían más que huir de sus locos senpais que realmente parecían que querían matarlos. Esquivaban sus ataques uno tras otro...

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Flareleon arrinconó a Basara y a Naofumi en una colina del Tártaro.

Flareleon: ¡¡OVERDRIVE: RELÁMPAGO ESTRUENDOSO DEL DRAGÓN DEL TRUENOOOOOOOO!! - gritó emitiendo un poderoso vozarrón que emitía rayos. Naofumi y Basara se ocultaban del ataque tras unos peñascos congelados, que actuaban de barrera.

Flareleon: ¡¡Venga, que nos vais a ganarle a nadie sólo por ser más rápidos!! ¡¡Jutsu de Rayo: Flechas de Voltaje!! - atacó con flechas eléctricas algo molesto por la cobardía de los kouhai.

Naofumi: ¡¡Escudo Meteoro!! - usó su técnica para detener los ataques.

Flareleon: ¿Oh? ¡Si sabéis defenderos, dejad de huir y pelead como hombres! - dijo antes de aumentar la potencia de sus flechas, que se tornaron en lanzas.

Basara: ¡¡Brynhilde: Gravity Slash!! - atacó por arriba al salvaje.

Flareleon: ¡Je! - detuvo su ataque con su brazo. ¿Qué pasa? ¿Os hacía falta valor para usar vuestro auténtico poder? - dijo provocativo.

Basara: ¡Voy a hacer que te arrepientas de tus provocaciones! - dijo apuntando a Flareleon con decisión antes de atacarle a una velocidad divina.

Flareleon: Je... ¡A ver si es verdad! - dijo antes de moverse también a velocidad divina, enfrentándose a Basara.

Basara, apoyado por Naofumi, se enfrentó a Flareleon. El combate lucía parejo... bueno, hasta que empezó.

Flareleon cosió a Basara y a Naofumi a patadas, puñetazos y golpes mágicos brutales. El salvaje estaba loco a sus ojos. Naofumi redujo los daños con sus poderes defensivos, y con el tiempo aprendía a defender y defenderse mejor.

Basara atacaba mejor. Sus golpes eran cada vez más certeros, e incluso se permitía el lujo de atacar al salvaje con rocas, pateándolas como si fueran balones. Aunque para Flareleon, que le tiraran rocas era como si le arrojasen pelotas de goma. Después de varias horas de duelo, Flareleon finalmente decidió ponerse serio.

Flareleon: Bien... bien... Por fin comenzáis a usar vuestra auténtica fuerza, ¿eh?

Flareleon: ¡Ya va siendo hora de subir la dificultad! ¡Zekrom, Terravoltaje! - empezó a emitir rayos más fuertes. Ahora vais a ver... ¡Rayo Fusión! - atacó a los dos, rompiendo por completo sus defensas.

- ¡¡Aaaaaaaaaaaargh!! - Basara y Naofumi fueron bruscamente enviados contra los muros fríos.

Naofumi: Joder... Que bestia... - decía dolorido del golpe.

Basara: ¿Ese es el poder de su alma interior...? Tendremos que usar el de las nuestras... - decía igual de dolorido mientras se levantaba.

Naofumi: ¡Zygarde, Rompeaura! - invocó la habilidad de su alma, debilitando el aura voltaica del pelinaranja salvaje, sorprendiéndolo un poco.  ¡Milflechas! - el héroe del escudo emitió un aura verde e invocó varias flechas que atacaron a Flareleon.

Flareleon: ¡Vaya...! - dejó escapar mientras esquivaba el ataque.

Flareleon: ¡¡Muy bien, esto me gusta más!! ¡¡Ahora esto merecerá aún más la pena...!! ¡¡¡Os voy a volar en pedazos!!! ¡¡¡TRUENOOOOOOOOOOO!!!- dijo muy motivado antes de volver a lanzar más rayos con mucha más fuerza.

Naofumi: ¡¡¡Escudo Zero Triple!!! - creó tres escudos para defenderse del trueno. 

Naofumi: ¡¡Joder, este tío está loco!! - dijo alarmado mientras se defendía.

Basara: ¡Tranquilo, yo me ocuparé de él! - dijo con calma.

Basara: Giratina, Presión. - invocó la habilidad de su alma, lastrando un poco los movimientos de su oponente. Golpe Umbrío... - dijo desapareciendo de repente en la oscuridad.

Flareleon: ¡¿Qué te pasa, Naofurro?! ¡¿Es que sólo sabes defenderte?! ¡¿Es que no puedes atacar a nadie sin que tu novia te apoye?! ¡¿Y así pretendes protegerla?! ¡¿A ella a las que importan?! ¡¿O es que son tan débiles que deben depender siempre de ti para que les salves el culo?! - decía el pelinaranja más provocativo que nunca.

Naofumi: ¡Hijo de...! - se enfureció ante las palabras de su oponente. Tranquilo. - le dijo Zygarde de repente. No te dejes provocar. Eso es lo que quiere. - aconsejó a su portador.

Naofumi: (...) Vale... - se calmó. Ahora mismo, debo defender... ¡Proteger la portería y a mis amigos siempre ha sido mi trabajo! - dijo defendiendo con más determinación que nunca.

Flareleon: (No puedo sentir a Toujou... ¿dónde está?) - dijo mentalmente mientras trataba de localizar a Basara. No bajes la guardia, estás demasiado expuesto. - le aconsejó Zekrom a su alocado portador.

Basara: ¡Haaaah! - salió de repente de una brecha dimensional y atacó a Flareleon por sus pies, sorprendiéndolo más.

Flareleon: ¡¿Pero qué...?! ¡Agh! - el pelinaranja no pudo esquivar el ataque del renegado.

Flareleon: (Ha desaparecido y a vuelto a aparecer cuando era más necesario...) (Empleó a Iwatani como cebo para que me centrara sólo en él, y pudo atacarme cuando bajé la guardia...) (Así es como actúa un delantero inteligente... ¡muy bien!) - reconoció a los dos kouhai.

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Berceo acorraló a Rentarou y Naoya hasta un lago con una catarata congelada. El divino atacaba con fuego, viento y ataques terrestres.

Berceo: (Ahora mismo, debo cumplir con mi cometido.) (Si Glaolo está en lo cierto, el talento de estos chicos puede ser no sólo lo que necesita Japón, si lo que necesita todo el mundo.) - pensó el hechicero divino. (Queridas mías... dadme fuerzas, por favor.) - meditaba mientras pensaba en sus prometidas.

Berceo: Reshiram. Cuento contigo. - dijo a su alma interior. Adelante, compañero - respondió el hermoso dragón blanco.

Berceo: ¡¿Qué sucede, jeunes Roméos?! ¡¿Vais a huir?! ¡¿También huiréis de vuestras novias cuando haya una batalla que no podáis ganar?! ¡¡Mostrad un poco más de orgullo!! - dijo a los dos guerreros del amor decepcionado por su pasividad.

Rentarou: No es eso... ¡Berceo-sama usa muchos ataques diferentes! ¡Es muy difícil predecir lo que va a hacer a continuación! - dijo el guerrero de Venus agobiado.

Naoya: ¡Tenemos que estar atentos! - dijo sin dejar de mirar a su oponente.

Berceo: ¡¡El mundo no necesita hombres cobardes como vosotros!! ¡¡Las promesas vacías no serán perdonadas!! ¡Sol Cruel! - lanzó una gran bola de fuego.

Naoya: Fuego... ¡Entonces... quizás...! ¡¡Filo del abismo!! - creó pilares con forma de espadas que emergieron de la tierra, haciendo explotar la bola de fuego sin dar a nadie. ¿Así está bien, Groudon? - preguntó a su alma interior. Sí, buen movimiento. No le pierdas de vista. -aconsejó el Pokemon Continente a su portador.

Rentarou: Xerneas, ¿qué debería hacer? - preguntó el guerrero de Venus a su alma interior. Estate atento. El oponente se mueve por el aire. Una vez baje al suelo, quedará más expuesto a vuestros ataques. - aconsejó el Pokemon Creación al creador.

Rentarou: ¿Al suelo...? Pero si el cuerpo ya lo siento muy pesado... - decía oprimido por una gravedad algo más fuerte.

Berceo: Ah, se me olvidó contaros algo. - dijo con un tono más orgulloso.

Berceo: Antes de comenzar el "Baile", empleamos magia para aumentar aún más la gravedad en el Tártaro. Ahora mismo, la gravedad es cinco veces más fuerte de lo normal. Venga, chavales. Poneos vergas. - dijo a modo de advertencia mientras se tocaba la cabeza con el dedo.

Rentarou: ¡¿Puede usar magia para alterar la gravedad?! - no se la esperaba.

Naoya: ¡¿Hay algo que la magia no pueda hacer?! - preguntó a la desesperada.

Berceo: Yo te respondo: No. - respondió rápidamente. La magia no tiene límites. Consiste es hacer los sueños realidad. Es capaz de hacer hasta lo más absurdo que se le pueda ocurrir a cualquiera... ¡Por eso precisamente me encanta! - dijo contento mientras preparaba otro ataque.

Berceo: ¡¡Alas del Dragón del Cielo!! - lanzó un ataque de viento.

Rentarou: ¡¡Brillo mágico!! - emitió un brillo descomunal que lanzó unos rayos que anularon las ondas de viento cortante. Muy bien. ¡Usa ese ataque! - aconsejó Xerneas.

Rentarou: Naoya, prepárate bien. ¡Gravedad! - emitió unas ondas que aumentaron aún más la gravedad en el lugar donde se encontraban.

Berceo: ¡Agh...!  - la gravedad lo hace posarse sobre el suelo.

Rentarou: ¡Naoya, atácale! - dijo a su compañero.

Naoya: ¡¡Llamarada!! - lanzó una gran bola de fuego que se tornó en una estrella, y Berceo la recibió con una misteriosa sonrisa.

Para sorpresa de los dos kouhais, Berceo se comió la llamarada como si de cualquier comida se tratase, impactándolos mucho.

Berceo: Mala suerte. Habéis elegido al oponente más difícil. Soy un Dragon Slayer del Cielo, de la Tierra, del Sol y de las Estrellas. Es decir, los ataques de viento, de tierra, de fuego y estelares... no me afectan lo más mínimo. Puedo comérmelos sin ningún problema. - dijo confiado.

- (...) - tanto Rentarou como Naoya se sentían presionados por Berceo.

Berceo: Bien. Por respeto a vuestros sentimientos... os mostraré mi poder. ¡Haaaaaaaaaaaaaah! - se envolvió en unas llamas que, poco a poco, empezaron a descongelar el lago.

Rentarou: ¿Son cosas mías o empieza a hacer más calor aquí?

Naoya: ¡No es momento para hablar de pornografía! - dijo algo molesto.

Rentarou: ¡No es eso!

Berceo: ¡Mala elección bajando la guardia! ¡¡Reshiram, Turbollama!! - aumentó aún más la densidad de las llamas. ¡Llama fusión! - lanzó una bola de fuego aún más grande que la anterior.

Naoya: ¡Lanzallamas! - trataba de detener la bola de fuego con sus propio chorro de llamas.

Rentarou: ¡Fuerza lunar! - generó una bola de energía cósmica y la lanzó, anulando la Llama fusión, haciéndola explotar.

Berceo: Lo siento por ti, pero tus ataques no son demasiado eficaces durante el día. Pero incluso aunque fuese de noche, la luna no tendría tanta fuerza... ¡como para apagar el sol que llevo dentro! - dijo emitiendo aún más llamas.

Berceo: ¡Ni siquiera el más vasto de todos los océanos podría extinguir las sagradas llamas del Sol! - dijo con determinación.

Berceo: ¡Sun Ray! - lanzó varios rayos solares a sus oponentes.

Rentarou: ¡Geocontrol! - usó mientras agarraba a Naoya para aumentar sus defensas, haciendo que el ataque de Berceo no les hiciera apenas daño.

Rentarou: La gravedad aumentada no durará mucho... ¡Ya sé! ¡Campo de niebla! - creó una niebla que cubrió todo el lugar. Bien pensado, adelante, Rentarou. - dió Xerneas el visto bueno.

Berceo: ¿Niebla? Con mis ojos divinos, no podrán burlar mi vigilancia... - dijo confiado el divino. No te confíes. Esta niebla me resulta muy sospechosa... - advirtió Reshiram a su portador. ¿Sospechosa en qué sentido? Puedo devorarla ya que tiene propiedades estelares... - dijo antes de empezar a inhalar la niebla.

Rentarou: Ha picado... ¡Bruma explosiva! - usó un movimiento que hizo explotar la niebla, causando daño a Berceo.

Berceo: ¡Agh...! ¡¿Qué...?!

Naoya: ¡¡¡TERREMOTOOOOOOOOOO!!! - saltó y provocó un terremoto de un salto que agitó al divino y el terreno hasta los cimientos. Tanto que el lago y la cascada se descongelaron. Algunas rocas de la ladera se desprendieron del muro y estuvieron por caerle encima a Berceo, quien pudo partir varias con los puños, e incluso pulverizó una con los colmillos. Pero cuando dos más le iban a caer encima, Rentarou y Naoya saltaron al frente y las destruyeron de una patada.

Berceo: (Unos ataques certeros, eficientes y bien planeados...) (Y una defensa aguerrida y bien forjada que detiene cualquier amenaza...) (Una persona normal se hubiera acobardado y huido del desprendimiento sin poder hacer nada, pero ellos no han dudado en ayudarme...) (¡Fantástico!) - reconoció la valía de los dos chicos. 

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Rito, Nariyuki y Shido mantenían un acalorado combate aéreo contra Drake, cerca de la fosa congelada del Tártaro. El peliverde circunvuela libremente por los cielos, esquivando cualquier ataque de los kouhais mientras los atacaba desde el aire.

Drake: ¡Magia de Viento: Tormenta de Agujas de Aire! - lanzó miles de agujas de viento que cayeron como una lluvia sobre los tres.

Rito: ¡Gah! ¡Psíquico! - usó sus poderes para emplear varias rocas como escudo. Buena defensa. Aprende a usar mis cuatro formas para aumentar tus estadísticas según la situación. - dijo Deoxys a su portador. 

Shido: Parece empeñado en librar una lucha aérea. - dijo fijándose.

Nariyuki: Tendremos que bajarlo al suelo de alguna manera. No poder volar es una gran desventaja. - decía el gafas.

Drake: ¡Qué pasa, chavales! ¿No sentís el viento? - dijo animado.

Shido: ¿El viento? - no comprendía lo que decía.

Nariyuki: Algo de viento sopla, sí. - se percató.

Drake: Es por el efecto de la habilidad de mi compañero. ¡La Ráfaga Delta que traerá los sueños y las esperanzas al mundo! - dijo sonriente mientras danzaba por los cielos alegremente.

Drake: ¿Tenéis la voluntad necesaria para desafiar al mundo y proteger lo que os es más preciado? ¡Mostrádmelo aquí y ahora! - dijo envolviéndose en una aura verde mientras el viento empezaba a soplar con más fuerza.

Drake: ¡Rayquaza, atiende a mi ruego...! ¡Préstame tu fuerza! ¡Ayúdame a hacer realidad el sueño de mi hermano! - dijo rezando a su alma interior. ¡Que sea tu voluntad! - respondió el dragón celestial atendiendo a la petición de su portador.

Drake: ¡¡ASCENSO DRACO!! - el aura verde se intensifica y su cuerpo empieza a emitir una luz. Y envuelto en el poder de esa luz, carga contra sus oponentes mientras adopta la figura de un dragón volador.

- Uaaaaaaaaah! - los tres kouhais evitaron el ataque por los pelos.

Rito: ¡Qué ataque más potente...! - dijo algo impactado.

Nariyuki: Necesitamos una estrategia. - sugirió. Debéis llevarlo a vuestro terreno. Conozco bien a Rayquaza, nunca baja de los cielos. - aconsejó Kyogre a su portador. Pues tendremos que bajarlo de alguna manera... - decía Nariyuki pensando.

Shido: Yveltal, ¿estás pensando lo que yo? - preguntó a su alma interior. Sí... La mejor manera de ganar es llevando a tu oponente a tu terreno... O conocer el suyo lo suficiente como para destruirlo con sus propia estrategia. - sugirió el ave mortal a su portador. Exacto.

Shido: Chicos, este es el plan. Rito, tú y yo nos enfrentaremos a Drake-san en el aire. Tendremos que hacerlo caer, o al menos ralentizarlo. Nariyuki, una vez hayamos hecho una de las dos cosas, lo atacarás con todo lo que tengas. - explicó a sus compañeros.

Nariyuki/Rito: ¡Vale! - estuvieron ambos de acuerdo.

Rito: ¡Forma Ataque! - adoptó dicha postura antes de lanzarse al cielo.

Shido: Yveltal... ¡Aura oscura! - se envolvió en una aura siniestra antes de lanzarse a los cielos.

Drake: Vienen dos y uno se queda en tierra, ¿eh? No lo perderé de vista... - dijo con curiosidad.

Drake: ¡Muy valiente por vuestra parte venir a combatir a mi terreno...! ¡Pero ahora haré que os estrelléis de bruces contra el suelo! - dijo preparando un nuevo ataque.

Rito: ¡¡Psicoataque!! - cargó una bola de energía psíquica y la lanzó a su oponente, aunque Drake la esquivó fácilmente.

Drake: ¡Apunta bien, anda! ¿Mmm? - dijo antes de percatarse de que Shido le estaba atacando por detrás.

Shido: ¡Ala Mortífera! - estuvo por lanzar un rayo lleno de energía negativa.

Drake: ¡¡Vendaval!! - creó un huracán gigante que rechazó el ataque de Shido y se tragó al chico peliazul, haciéndole dar vueltas y vueltas.

Drake: ¡HIPERRAYO! - lanzó unos rayos de energía a Rito para fulminarlo, pero el pelinaranja psíquico los esquivó como pudo hasta que uno le golpeó en la cadera. 

Rito: ¡AGH! - Rito perdió el equilibrio y se estrelló contra la ladera del Tártaro. Agh... - se dolía hasta que su herida sanó, quedándole una cicatriz. Ten cuidado. Puedo regenerar cualquier parte de tu cuerpo excepto los órganos internos. - aconsejó Deoxys a su portador. Vale, gracias... - agradeció el pelinaranja.

Drake: No me contendré... ¡Carga dragón! - lanzó una carga envolviéndose en una aura con forma de dragón contra Rito. El pelinaranja se defendió con un escudo, pero fue derribado por el peliverde dragón. 

Shido: (¡Los vientos...!) (¡Claro!) ¡¡Vendaval!! - creó un huracán que contuvo a Drake.

Drake: (¡Hm!) ¿Creéis que podéis detenerme con viento a mí? ¡Y una porra! ¡Hah! - emitió una aura que disipó el viento que le envolvía.

Rito/Shido: ¡Nariyuki! - avisaron a su amigo.

Nariyuki: ¡¡Kyogre, Mar del Albor!! ¡¡PULSO PRIMIGENIO!! - el gafas invocó la habilidad de su alma interior y empezó a caer un diluvio. Y entonces, Drake fue golpeado por unos rayos de agua concentrados.

Drake: ¡Agh! ¡No puedo ver entre tanta lluvia...! - dijo un poco molesto. ¡Vendaval! - trató de disipar la tempestad con un huracán.

Shido: ¡Vendaval! - contrarrestó el huracán del peliverde con su propio huracán.

Drake: Je, je, je... ¡A esto lo llamo yo una batalla tormentosa! - dijo animado por el ambiente.

Nariyuki: ¡¡Rayo Hielo!! - lanzó un rayo frío que golpeó las piernas del peliverde.

Shido: ¡¡Onda ígnea!! - lanzó una onda de aire caliente por encima de la cabeza de Drake.

Drake: Frío por abajo, calor por arriba... ¿Qué pretenden...? - trataba de averiguar. Espera... ¿dónde está Yuuki? - se percató que no veía al pelinaranja.

Cuando quiso darse cuenta, Drake vió a Rito lanzándole un ataque.

Rito: ¡¡¡HIPERRAYO!!! - el pelinaranja lanzó un brutal rayo de energía a corta distancia a Drake, golpeándolo de lleno.

Drake: ¡Agh! - se dolía mucho del ataque.

Rito: ¡Gravedad! - usó un último ataque para ensartar a Drake en el suelo.

Drake: (Impresionante...) (Sus ataques han estado bien medidos...) (Muy precisos... exactos...) (Se han adaptado a las mil maravillas a la situación.) (Glaolo... ¡ellos son buenos, pero muy buenos de verdad!) - reconoció el talento y habilidad de los kouhai.

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En el techo del Laboratorio Zero, Subaru y Ard tenían en frente a Glaolo.

Glaolo: Denoto un gran poder en vuestro interior... - decía con los ojos cerrados mientras sentía las dos presencias del dúo. Ho-Oh y Lugia, los reyes de los cielos... Vosotros, que portáis el poder de sendas aves... ¡Mostradme vuestro poder! - dijo el peliblanco emanando un aire frío mientras habría lentamente sus ojos azul celeste refulgente.

Subaru: ¡Será un placer! - dijo poniéndose en posición de batalla.

Ard: Es un honor poder enfrentarnos a ti. - dijo también posicionándose para atacar.

Glaolo: Bien, pues... ¡Rozenkrone! - usó un hechizo con el que creó y lanzó unas zarzas de rosas hechas de hielo, formando una corona.

Subaru: ¡Fuego Sagrado! - creó una gran llama imbuida de poder sagrado al peliblanco, pero éste creó un escudo de hielo que la repelió parcialmente.

Ard: ¡Aerochorro! - creó y disparó un chorro de aire con el que trató de avivar la llama de su compañero, haciendo que el escudo de Glaolo se debilitase un poco.

Glaolo: Rugido... ¡del Dragón de Hielo! - lanzó un rugido con el que disipó la llama.

Subaru: ¡¿Ha congelado mi fuego...?! - no se lo esperaba.

Glaolo: No os toméis tantas confianzas... ¡Ni el sol es lo bastante ardiente como para atravesar mis paredes de hielo! - decía con seriedad y confianza.

Glaolo: ¡¡Kyurem, Mundo Gélido!! - cambió de postura y creó varias columnas de hielo que congelaban al paso.

Ard: ¡Es el mismo ataque con el que congeló el infierno! - advirtió.

Subaru: Ahora mismo, esa frase me parece graciosa. - dijo sonriendo un poco.

- ¡Hm! - esquivaban el invierno provocado por Glaolo como podrían, evitando las columnas de hielo congelantes. 

Glaolo: ¡Muy débil! - dijo con seriedad.

- ¿Eh? - los dos kouhais no entendían.

Glaolo: Vuestros ataques, vuestra determinación... ¡son demasiado débiles! - recriminó mientras cambiaba de postura y preparaba otro ataque de hielo.

Glaolo: ¿Creéis poder superar vuestras futuras adversidades con semejante falta de iniciativa? ¡Así no podréis vencer ni proteger a nadie! - dijo sin pelos en la lengua mientras creaba un cristal de hielo con sus manos.

Ard: Puedo sentir la determinación helada de Glaolo-san. Es extrañamente ardiente al mismo tiempo. - dijo el mago algo intrigado. Ten cuidado. El poder de ese chico es mucho mayor del que está mostrando ahora. - aconsejó Lugia a su portador. De acuerdo, gracias, compañero. - agradeció Ard.

Subaru: (Ni siquiera el fuego puede derretir su hielo... ¿Qué opciones tenemos?) - se preguntó a sí mismo mentalmente. Observa atentamente. El hielo siempre acaba tornándose en agua. - aconsejó Ho-Oh a su portador. Agua... Tal vez... - dijo teniendo una idea y acumulando llamas.

Subaru: ¡Ard, utiliza Aerochorro después de mi ataque! - pidió a su compi.

Ard: ¡Vale! - dijo estando de acuerdo.

Subaru: ¡¡¡LLAMA FINAL!!! - se envolvió en una llama gigante y la arrojó sobre Glaolo.

Glaolo: ¿Es que no aprendes? ¡Mundo Gélido! - dijo el peliblanco creando columnas de hielo.

Ard: ¡¡¡Aerochorro!!! - lanzó un chorro de aire que avivó aún más la Llama Final, extinguiendo las columnas de hielo de Glaolo.

Glaolo: ¡¿Pero qué...?! - se sorprendió por el efecto del ataque rival. Llama Final es capaz de descongelar cualquier tipo de hielo... - le dijo Kyurem a su portador. Ya veo... Una combinación bastante inteligente, debo reconocerlo... - reconoció el peliblanco.

Glaolo: Je. (Qué recuerdos...) (El viento ayuda al fuego a crecer y hacerse más fuerte... ¿no es así, Capitán Yamato, Kakashi-sensei... Sasuke...?) - pensaba mientras recordaba a los tres ninjas.

Glaolo: Bien. Por ahora, han pasado. - dijo sin más. Pronto veremos si pueden aguantar contra mi forma definitiva... - dijo sonriendo levemente.

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En el interior del Laboratorio Zero, en el Estadio Teracristal...

Como si de un favor del destino se tratase, Fuutarou estaba luchando contra Rei, su futuro cuñado. El pelirrojo le atacaba con todo su arsenal. 

Rei: ¡Deja de huir y atácame con todo lo que tengas! - advertía el pelirrojo al Frutas.

Fuutarou: ¡¿Cómo esperas que te ataque?! ¡Yo no sé pelear! - decía agobiado y nervioso mientras esquivaba.

Rei: ¿Qué excusas son esas? ¿Esperas proteger a mis hermanas tratando de evadir siempre el peligro? ¡Lo siento por ti, pero la vida no es tan benevolente como tú te crees! - dijo alzando su lanza y cambiando su forma.

Rei: ¡Lanza Espiritual Basquias! ¡Cuarta forma: Aumento! - la lanza se dividió en varias espadas pequeñas con las que atacó al Frutas.

Fuutarou: ¡Hm! ¡Hop! - trataba de esquivar los ataques como podía, pero gradualmente le empezaban a rozar. ¡Argh! - las miniespadas le dejaban cortes en el cuerpo y los brazos.

 Fuutarou: Tengo que encontrar una forma de contraatacar... ¡Ah! - pensaba el Frutas pero dejó de hacerlo cuando vió al pelirrojo venir para atacarle con su espada.

Rei: ¡Eres un cobarde! - decía con una expresión de seriedad y enfado en su rostro.

Fuutarou: ¡¿Pero qué tripa se te ha roto?! - preguntaba algo atemorizado por la agresividad de su futuro cuñado.

Rei: ¡¿Por qué elegiste a Yotsuba en aquella vez?! ¡¿Cómo te atreves a romperles el corazón a mis princesas?! - preguntó con enfado.

Fuutarou: ¡¿De qué estás hablando?! - no tenía idea de lo que estaba hablando el pelirrojo. ¡Estoy saliendo con las cinco! - respondió tratando de tranquilizar al pelirrojo.

Rei: ¡No tuviste el valor de desafiar a Haruba Negi para decidir tu destino y el de las demás! ¡Tomaste una decisión basándote únicamente en lo que viviste! ¡Desestimaste los sentimientos de las demás, y provocaste un daño muy difícil de reparar! ¡¿Tienes idea del dolor que siente una chica con el corazón roto?! - decía recriminando al Frutas mientras no paraba de atacarle.

Fuutarou: (¡¿Pero qué le pasa a Rei-san?!) (¡¿Por qué está tan enfadado?!) (Nunca en la vida le había visto así!) - trataba de comprender la situación sin éxito. ¡Intenta entender sus sentimientos! - le aconsejó Albion. La oscuridad de ese chico no es sólo suya. Es una oscuridad perteneciente a mucha más gente. - se percató Targaryen. ¿Oscuridad? Entonces... - el Frutas tuvo una idea, pero Rei lo acorraló poniéndole su espada izquierda al cuello.

Fuutarou: ¡Ah...! - se aterró al verse contra la espada y la pared. N-no serás capaz... - preguntó al pelirrojo presintiendo lo que va a hacer.

Rei: ¡Toma! Comparado con el dolor que le provocaste a las demás... ¡Esto no es nada! - dijo con determinación apuntando su espada derecha a...

Sin titubear ni un momento y con una mirada de furia, Rei apuñaló a Fuutarou. El pelirrojo le clavó su espada derecha en el corazón del Frutas, atravesando su cuerpo.

Fuutarou: ¡Argh...! - se dolió muchísimo por la puñalada, incluso después de que el pelirrojo retirase su espada de su cuerpo. Rei-san... ¿por qué...? - preguntaba mientras el pelirrojo ponía su mano sobre su herida, cerrándola con magia curativa.

Rei: (...) Lo lamento. Pero esto era necesario. Quiero que nunca olvides este dolor. - explicó el pelirrojo mientras atendía al Frutas. Si alguna vez haces algo que les rompa el corazón, así es como se sentirán, así es como les dolerá. - siguió explicando.

Rei: Tranquilo. No morirás. No te permitiré morir. Aún tienes que asumir la responsabilidad. ¿Recuerdas? - dijo el pelirrojo al Frutas, y éste se acordó enseguida al ver la expresión de su rostro.

El Frutas conocía aquellas palabras.

Miku: "Asume la responsabilidad." - el Frutas recordó aquellas palabras de la waifu suprema.

Fuutarou: (Rei-san, te pareces a tus hermanas más de lo que crees...) - supuso comparando al primogénito de los Nakano con sus hermanas quintillizas mientras el pelirrojo terminaba de sanar su grave herida.

Rei: Mis hermanas te quieren un montón, Fuutarou. Les has cambiado la vida para bien, y has conseguido que se enamoren de ti. Cuando vuelvas a mirar esta cicatriz, recuérdalo. Para que nunca olvides el dolor que puedes provocar a los demás con tus decisiones. - explicó al pelirrojo queriéndole grabar aquella sensación en su cuerpo.

Rei: Yo creo en ti, Fuutarou. Creo en el amor que sientes por mis hermanas. Por favor, no traiciones el que tienen ellas por ti. No permitas que nadie decida por vuestro destino - pidió el pelirrojo al Frutas.

Fuutarou: (...) Jamás haría algo así. - respondió determinado.

Fuutarou: Por supuesto que asumiré la responsabilidad. Yo amo a las cinco. - reafirmó.

Fuutarou: Conocerlas me ha cambiado la vida para bien a mí también. A veces pueden resultar un poco cargantes y algo difíciles de tratar, pero mientras las enseñaba, yo también aprendí de ellas. Aprendí a apreciar más a mis amigos, y aprendí a amar también. Ellas... esas quintillizas... probablemente conocerlas fue lo que más me enorgullece de mi vida hasta ahora. - empezó a expresarse con su cuñado, quien sonrió ligeramente.

Fuutarou: Y quiero seguir enseñándoles. Para que alcancen sus metas, para conocerlas mucho mejor, y para enamorarme más de ellas. Por que ellas son más que mis alumnas, más que mis amigas, y más que mis novias... son mis Diosas de la Victoria. - terminó de expresarse el Frutas.

Rei: (...) Parece que finalmente estás listo. - afirmó el pelirrojo. 

Fuutarou: ¿Eh? - no sabía lo que estaba diciendo.

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Después de las batallas, los cinco senpais volvieron a reunir a los diez kouhais en el Estadio Teracristal, más concretamente en el círculo central.

Glaolo: Es hora de la prueba final. - puso su mano sobre el suelo y accionó una palanca secreta, haciendo que el círculo central se hundiera como si fuera un ascensor.

Descendieron hasta llegar a una nueva caverna. Una caverna abisal cristalina, donde cristales luminosos rodeaban la vista.

https://youtu.be/f2z1gU-Z1vg

Glaolo: Bienvenidos a la Caverna Abisal Zero. 

- Vaya... - los kouhais se asombraron ante la vista.

Glaolo: En esta caverna... se oculta el mayor secreto del Grupo Zero. - dijo intrigando a los demás chavales.

Fuutarou: ¿El mayor secreto? Entonces, ¿no se supone que es algo que no deberíamos saber? - dijo con algo de mal rollo.

Glaolo: Confiamos lo suficiente en vosotros como para confiaros este secreto... Ya que os habéis ganado que comparta con vosotros mi gran ambición. - dijo con determinación.

Nariyuki: ¿Pero qué tiene que ver todo esto con el fútbol? - preguntó mientras caminaban.

Glaolo: Para empezar, ¿qué es el fútbol para vosotros? - hizo una pregunta a los chavales.

- ¿Eh? - los kouhai se sorprendieron por la pregunta.

Glaolo: Para mí, el fútbol es una pasión, un sentimiento. Es algo que podemos compartir con todo el mundo sin importar quienes sean. El fútbol es libertad, por eso lo amo.

Flareleon: El fútbol es lo que más me apasiona. Me lleva a enfrentarme a todo tipo de personas. Ya sean fuertes o débiles, cada persona es un mundo en sí misma. Conocerlas mientras pateas un balón, mientras le demuestras tu fuerza... Eso me hace muy feliz.

Berceo: Para mí, el fútbol no es que una a las personas, sino que une sus corazones. Cada toque de balón es como una melodía, ya puede ser una suave, una aguda o una grave. puedes hacerte una idea de cómo es la persona con sólo perseguir el balón con ella. Me gusta cómo se siente. 

Drake: El fútbol, precisamente me encanta porque podemos ser nosotros mismos. No tenemos que fingir ser quienes no somos cuando compartimos esta emoción, cuando desprendemos el mismo sudor, cuando derramamos las mismas lágrimas... El fútbol tiene algo mágico.

Rei: Gracias al fútbol, hemos podido conocer a muchas personas. Como a vosotros, por ejemplo. Bien, es cierto que en el mundo pueden haber confrontaciones y mucha controversia... Pero en el fútbol, esos espíritus pueden chocar y enfrentarse. Y de alguna manera, se acaban entendiendo al final. - explicaba haciendo felices a los kouhai.

Glaolo: Queremos atesorar esa sensación. Proteger esas sonrisas que produce la magia del fútbol. Nosotros, que formamos parte de la nueva generación, tenemos esa magia en nuestros pies, que en el mundo actual se considera perdida.

Glaolo: Yo... quiero acabar con todo ese sufrimiento. - dijo poniéndose serio.

Mientras hablaban, el grupo llegó a la estancia más profunda de la caverna. Una gran superficie plana que parecía un campo de batalla.

Glaolo: Aquí tendrá lugar vuestro juicio final.

Shido: ¿Juicio final...?

Glaolo: El secreto del que hablamos, en realidad, hace rato que podéis verlo. - dijo señalando a los cristales de la caverna.

Rentarou: ¿Los cristales? 

Glaolo: Estos cristales no son normales y corrientes. Absorben los restos de energía que los seres vivos emplean en su actividad diaria. Y eso no es todo, también son capaces de grabar el código genético de dichos seres vivos, es decir, el ADN, quedando cristalizado.

Glaolo: A estos minerales tan singulares... los hemos denominado como "Cristales Astrales".

- Cristales Astrales...

Glaolo: Y ahora... - se quitó su camiseta.

https://youtu.be/YwOC5PmH_zo

Glaolo: ¡Liberar sellos! - el peliblanco reveló siete cristales que tenía incrustados en su cuerpo.

Fuutarou: ¡¿Glaolo-san?! ¡¿Qué es eso?! - se preguntó con temor.

Glaolo: Con ayuda del Dr. Takamiya, hemos podido encontrar los Cristales Astrales que contenían mi ADN. La energía que he derrochado durante los tres años que estuvimos aquí... la he vuelto a recibir con esto. - dijo al mostrar sus cristales, que empezaron a brillar desde hace ya un rato. Entonces, el peliblanco empezó a ser envuelto en un extraño fulgor blanco.

Glaolo: Intentad atacarme. - pidió a sus kouhai después de poner la mirada muerta.

Los diez héroes de Asahi hicieron caso de la orden de Glaolo y le atacaron con las habilidades que recién acababan de despertar. Pero no conseguían ni rozar al peliblanco.

Glaolo: Es inútil. Mientras me encuentre en el estado de Ultrainstinto, yo no puedo ser tocado por los mortales. - explicó muy poco expresivo.

Fuutarou: ¿Ultainstinto...? - le sonaba aquel concepto.

Rentarou: Glaolo-san, acaso tú... ¿eres pariente de Son Goku?! - supuso de repente.

Naoya: ¡Eso explicaría muchas cosas! - dijo con su tono típico.

Glaolo: Pff... ¡JA, JA, JA, JA, JA, JA!  no pudo evitar partirse de risa.

Glaolo: Anda ya... Esto no es ningún anime... ¡Esto es real! - dijo alzando la mano para atacar.

Glaolo: Garra del Dragón de Hielo... - atacó en un instante varias veces, dejando múltiples heridas en los diez kouhai.

- Agh...! - se dolieron de aquellas heridas.

Glaolo: Con la magia de nuestro fútbol, pretendo llevar a Japón a la gloria absoluta. Tal como prometí en aquel entonces... - decía sin perder la expresión.

Glaolo: Pero para conseguir la paz, eso no será suficiente...

- ¿Eh? - los kouhai escuchaban a Glaolo mientras seguían atacándole sin éxito.

Glaolo: Quiero terminar con todas las guerras... Que todas las disputas se solucionen de la manera más sana y honesta posible... a través del deporte... Sobre todo el fútbol.

Glaolo: Quiero ser el hombre que salvará... a todo el mundo...

Glaolo: Salvar al mundo entero... con mi vida... con mi fútbol... siendo el mejor del mundo...

Glaolo: ¡¡¡ESE es mi verdadero sueño!!! - gritó lleno de determinación y furia mientras la luz que lo envolvía se hacía mucho más fuerte. ¡¡¡RUUAAAAAAARGH!!!

https://youtu.be/e74OYFED5Fw

La luz se disipó. Glaolo alcanzó una asombrosa transformación. Una aura refulgente lo envolvía. Y adquirió características de dragón.

Glaolo: ¡Esta es la prueba final del Baile del Dragón! ¡Si conseguís resistir mis ataques durante cinco minutos, o darme un único golpe, habréis ganado!

Glaolo: ¡¿Sois capaces de hacerme frente en mi forma definitiva?! ¡¡Esta es la forma completa del Ultrainstinto dominado!! - desafió a los kouhais.

Glaolo: Mis amigos también pueden participar en la batalla. Total, ¡no conseguiréis hacerme ni cosquillas! - estaba más desafiante que nunca.

Flareleon: ¡Venga, vamos, todos! - motivó a todos a unirse a la batalla.

Drake: ¡Glaolo, para! - avisó a su hermano.

Berceo: ¡Aún no controlas ese poder! - advirtió.

Fuutarou: ¡¿Cómo que no lo controla?!

Rei: Glaolo ha preparado esa forma para este entrenamiento. Quiere ver si esta nueva generación está verdaderamente a la altura de sus expectativas. Por que no sólo espera que conquistemos la cima del mundo del fútbol con él... ¡quiere que le ayudemos a salvar el mundo!

- Salvar... el mundo...! - sintieron una gran determinación en el peliblanco...

Berceo: Pero esto es malo... Glaolo no puede controlar el Ultrainstinto al completo por la cantidad de poder y de esfuerzo físico que conlleva mantenerlo. Después de todo, tanto su cuerpo como su mente piensan por libre, pero en la misma sintonía, y a la misma intensidad.

Berceo: ¡Tenemos que hacer algo antes de que se agote por completo!

Naofumi: ¡¿Y qué podemos hacer?! - preguntó alterado.

Glaolo: ¡¡¡TORMENTA DE ESPADAS DE HIELO!!! - con un zarpazo, creó varios cortes en frío.

Noafumi: ¡¡ESCUDO TRIPE ZERO...!!! ¡¡Argh...!!! - no pudo rechazar el ataque y recibió las cuchilladas frías.

- ¡¡¡ARGH!!! - los otros nueve de Asahi tampoco pudieron defenderse de los cortes de Glaolo, recibiendo varias heridas.

Glaolo: ¡¡¡Arte Secreto de Dragon Slayer!!! - acumuló una gran cantidad de frío y poder mágico.

Drake: ¡¿Es que quieres matarnos?! - preguntó aterrado por la cantidad de maná almacenada.

Rei: ¡¡Glaolo está usando todo su poder!! - 

Glaolo: ¡¡¡LIRIO DE HIELO: TORMENTA BLANCA DE METEORITOS!!! - invocó una lluvia de meteoros de nieve que no sólo iba a caer sobre la estancia, sino también por toda la Isla Zero y sus alrededores, previniendo la llegada de un invierno aún más fuerte.

Berceo: ¡¡¡Magia de Cuerpos Celestiales!! ¡¡Décima Estrella: Cassiopeia!! - creó un escudo para proteger a todos.

Berceo: Muchachos... Esta es la hora de la verdad... - dijo muy serio.

https://youtu.be/z_3GIcMqJGs

Berceo: Os haré la pregunta que llevo queriendo haceros desde hace ya mucho tiempo...

Berceo: Para proteger a vuestras novias... ¿estáis dispuestos a morir? - preguntó muy serio.

Después de cerrar los ojos por un momento, los diez respondieron uno por uno acerca de cada una, para al final, a la vez...

Naofumi: ¡Quiero ser más fuerte para proteger a Raphtalia, a Filo y a Melty! ¡Ahora mismo son mis únicas razones para vivir!

Rito: ¡Siempre me he odiado a mí mismo por ser un torpe y un inútil, siempre he sido el protegido! ¡¡Pero ahora quiero proteger yo a mis amadas!!

Basara: ¡¡Debo proteger a Mio, a Maria y a las demás!! ¡¡Hice una promesa, que las protegería... y al cumpliré!!

Subaru: Ya he muerto varias veces por mis amadas Emilia-tan, Rem-Rem y Ram-Ram... ¡¡Y por ellas, lo haré encantado las veces que sean necesarias!!

Ard: Yo también quiero ser más fuerte que nadie para poder proteger a las que amo... ¡¡quiero darles la vida de paz y felicidad con la que siempre soñaron!!

Shido: ¡Naturalmente daría mi vida por mis amadas novias! ¡Es gracias a ellas que tengo razones y alegría para vivir cada día! ¡Quiero protegerlas para siempre!

Naoya: ¡¡Sacrificaría mi vida y las mías siguientes por mis novias encantado de la vida!! ¡¡Por que sin ellas, la mía no tiene ningún sentido!!

Nariyuki: ¡¡SÍ!! ¡¡Protegeré a mis novias y a nuestro futuro!!

Rentarou: ¡¡¡Por descontado!!!

Fuutarou: ¡¡Esas cinco tontas son la razón por la que vivo...!! ¡¡Así que...!!

Rentarou: ¡¡Berceo-san, con respecto a tu pregunta, nuestra respuesta es...!!

- ¡¡¡POR SUPUESTO QUE SÍ!!!

Los diez héroes de Asahi empezaron a emitir unas luces refulgentes.

Berceo: (Tenemos más en común de lo que me imaginaba...) (Pues yo también tengo mis razones para vivir, por las que no puedo perder.) - pensó con una sonrisa.

Berceo: ¡¡Rugid!! ¡¡Entregad todo vuestro ser para detener este poder!! ¡¡¡UOOOOOOOOOOOOOOOOOH..!!! - brilló con fuerza, al igual que sus kouhais.

Toda la estancia brilló. La luz pura de los corazones de todos pudo cegar a Glaolo.

Glaolo: (Puedo sentir... ¡la gran voluntad de sus corazones!) - pensaba muy impresionado mientras no se daba cuenta de que su aura se estaba debilitando.

Glaolo: Yo... ¡¡¡SALVARÉ EL MUNDO AUNQUE ME CUESTE LA VIDA!!! - dijo lleno de determinación mientras volvía a atacar con el puño. Pero fue interceptado por otro puño, el del Frutas, quien había despertado la Dragon Force.

Fuutarou: Lo salvaremos. Juntos. - dijo antes de darle una bofetada al rostro del peliblanco.

Glaolo: ¿Eh...? - su aura se disolvió por completo. Y con ella, todo el poder mágico de la zona.

Fuutarou: Te hemos golpeado. La victoria es nuestra. - dijo con orgullo.

Glaolo, agotado, se desmayó.

Después de una batalla muy peligrosa, todos abandonaron la Caverna Abisal Zero y regresaron al Laboratorio Zero. Glaolo se recuperó después de dormir por varias horas.

Al día siguiente, se despertó y vió que los jugadores de Asahi también estaban en las cápsulas de recuperación. Le llamó el Dr. Takamiya, quien le pidió que mirase las medidas de los jugadores.

Los diez jugadores habían superado la media 90. Y sus parámetros habían sufrido una evolución inimaginable antes. Aunque también se percató de que los diez chavales habían sufrido varias heridas en sus cuerpos.

Al despertarse, era ya el último día. El previo a la inauguración al estadio nacional.

Berceo les preguntó a los chavales si querían algún cambio de imagen, y se lo dió a los que lo pidieron, dándoles un aspecto mejorado a su gusto.

Ese mismo día, Fuutarou retó a Rei a otro duelo, y esta vez, venció el Frutas.

Y antes de darles unos chándales por cortesía de Gojo Wakana, y unas medias para cubrir sus piernas. Glaolo les mostró a cada uno unas marcas especiales.

Glaolo: Estas marcas de garras os recordarán el valor que mostrasteis durante esta gran prueba. Ahora estoy más seguro que nunca... Vuestros sueños se harán realidad. Tenéis la fuerza necesaria para vencer a los más grandes, la determinación de nunca rendiros pese a la adversidad de las circunstancias, y tenéis la voluntad que uno necesita para atravesar los cielos.

Glaolo: Pronto volveremos a jugar juntos... y la próxima vez, será como compañeros de la selección japonesa de fútbol. - dijo con una sonrisa de confianza.

Fin del Flashback

Fuutarou: Y por eso, ahora... Estoy más determinado que nunca.

Las quintillizas miraron sonrientes a su novio. También estaban algo perdidas en sus músculos, bastante más desarrollados que antes.

Ichika: Se nota que ha sido duro. ¿Lo has pasado mal? - preguntó la onee-san.

Fuutarou: Hubieron momentos en los que me sentí agobiado. Glaolo-san y Rei-san me abrumaron más que nunca, pero ahora comprendo por qué y me siento muy orgulloso de lo que he vivido. - respondió sonriendo.

Nino: No me puedo creer que nuestro hermano te haya apuñalado. - dijo la tsundere molesta por la imprudencia del pelirrojo.

Fuutarou: No seas así. Él... precisamente gracias a él... he encontrado la fuerza que buscaba para haceros felices. Mi nueva determinación. - respondió haciendo que la tsundere se sonroje ante la resolución de su chico.

Miku: Fuutarou, ¿seguirás con nosotras aunque las cosas se compliquen muchísimo? - preguntó algo preocupada.

Fuutarou: Por supuesto que sí. Tengo que asumir la responsabilidad, ¿no? Además, sabiendo lo resueltas que estáis por estar con un tipo como yo... Sería insultante no responder de la misma manera. Nunca os abandonaré. Lo juro. - respondió el Frutas poniéndose la mano en el corazón, haciendo sonreír genuinamente a Miku.

Yotsuba: Fuutarou-san, ¿te arrepientes de habernos conocido? - preguntó de repente la coneja.

Fuutarou: Estás de broma, ¿no? Conoceros es lo mejor que me ha pasado en la vida. - respondió haciendo que la coneja se emocione y sonría mucho.

Itsuki: ¿Nos seguirás enseñando? - preguntó la pelirroja sonriendo.

Fuutarou: Por supuesto. Seguiremos aprendiendo, creciendo y avanzando. Pero siempre juntos. Los seis. - respondió el Frutas con mucha calma, ante la sonriente Itsuki.

Fuutarou: Ya hemos superado el primer año de preparatoria. Ahora me toca a mí culminarlo ganando el Torneo Nacional de Preparatorias.

- ¡Y desde luego que lo ganaremos! - dijeron a la vez los diez héroes de Asahi.

Después de una charla muy emocionante, cada héroe se relajó con sus novias el resto de la tarde. Y entonces, recibieron una noticia de Marca.

Fuutarou: (!) (No me lo puedo creer...) - no se creía lo que estaba leyendo.

Nino: ¿Qué pasa, Fuu-kun? - preguntó intrigada.

Fuutarou: Hoy Rei-san y Glaolo-san han jugado la ida de los octavos de final de la Champions League frente al Barcelona... Y han perdido...

- ¡¿Eh?! - las cinco no se lo creían.

Yotsuba: ¿Onii-chan ha perdido?

Miku: ¿Cómo va a perder teniendo a Glaolo-san como compañero?

Fuutarou: Al parecer, Glaolo-san tuvo que ser retirado por unas molestias. Y enfadado por ello, Rei-san agredió a un rival, ganándose una tarjeta roja.

Ichika: ¿Cuánto han quedado?

Itsuki: ¿Contra quien jugaban?

Fuutarou: Han perdido 4 a 2 frente al FC Barcelona. 

Yotsuba: ¿El equipo por el que fichó Yuiga-san?

Fuutarou: Sí... Y en ese equipo... También está el ídolo de Glaolo-san, Ozora Tsubasa. El líder de la generación de oro de Japón.

Fuutarou: (Esto no debe de gustarle nada...) - pensó en Glaolo.

Al día siguiente, todo el equipo de Asahi recibió un aviso. Ya saben contra quiénes jugarán los cuartos de final del senshuken: contra los representantes de Saitama: la preparatoria Busou.

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Y hasta aquí llega el capítulo 63!

SI les gustó, comenten y dejen su voto, que eso siempre me motiva a seguir escribiendo.

Vimos las consecuencias del infierno de entrenamiento que vivieron los jugadores de Asahi, recibiendo varias heridas y cicatrices en sus cuerpos.

Vimos cómo se enfrentaron a Flareleon, Berceo, Drake, Glaolo y Rei en batallas de los más encarnizadas, en las que despertaron los poderes de su alma interior.

Conocimos cuál es la verdadera ambición de Glaolo: salvar al mundo a través del fútbol, y alcanzando y dominando su habilidad más poderosa: la forma completa del Ultrainstinto.

Pudimos comprobar una vez más lo grande que es la determinación de los héroes por luchar para proteger a sus seres amados.

También supimos que el rival de Asahi en cuartos de final será la preparatoria Busou.

Y ahora, vamos a lo importante...

Les gustó?

quejas?

ideas?

sugerencias?

más harem?

más fútbol?

Sin más que decir, smell ya later.