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A diferencia de la casa de la familia Kim, YiFan vive en una casa moderna y casi totalmente automatizada, las luces se prenden solo con aplaudir y hay un control remoto para cada cosa en la casa, incluso la cerradura principal es un lector de huella digital y contraseña, no usan llaves por aquí.

—¿Y cuando llega Robotina?

YiFan sonríe y toma el equipaje de JunMyeon. —Sin mamá en casa, las cosas son...

—¡Guí Xián por el amor de Dios! —Jessica grita desde la cocina y un extraño olor comienza a esparcirse por la casa—¡¿Cómo demonios quemaste el espagueti si solo te pedí que lo movieras con una cuchara?!

—Si ya sabes que cocino de la mierda, ¿para qué me lo encargas?

—Oh...

—Va a ser un poco ruidoso—YiFan afirma—Pelean casi por todo, no siempre fueron así, pero, tu entiendes. Lo siento.

—No hay problema, creo que será divertido.

También en casa de los Wu, YiFan y JunMyeon compartirán habitación, y el mayor sonríe, pues es ahí dónde están sus recuerdos de su primera vez juntos.

—Aquí en casa no tengo muchas reglas, solo que si salgo avise donde estoy y si necesito que me traigan de vuelta a casa, por las mañanas Goo Noona viene a ordenar la casa y mamá cocina, solo cocina fideos y pollo—dice después de pensarlo mejor—Así que normalmente verás a Henry en la cocina.

—¿Tu chef australiano?

—Es canadiense, mamá lo trajo consigo.

—¿Y qué hay de los asuntos R18?

YiFan sonríe y cierra la puerta de la habitación. —Paredes aisladoras de ruido, mis padres odian mi música o cuando ChanYeol viene a cantar.

—Me gusta esta casa.

JunMyeon también sonríe y se quita la sudadera, YiFan lo toma de la cintura e inician un ansioso beso, están un poco (demasiado) necesitados, SooYoung siempre secuestraba a YiFan después del trabajo para alguna lección de embarazo o a saber que más, así que su contacto físico ha sido limitado.

Y el embarazo tiene a JunMyeon un poco más caliente de lo usual.

Así que empuja a YiFan hasta la cama y se sienta a horcajadas sobre él, jalándole el pelo para después besarle el cuello y colar sus manos por la remera, el menor hace lo mismo, pero en su pantalón, metiendo sus manos y acariciando el firme trasero de JunMyeon.

Comparten un beso más antes de que el castaño baje de la cama y se arrodille mientras desabrocha los pantalones del rubio, jadeando cuando tiene la casi formada erección de YiFan a su alcance, besa la zona por encima de la tela y se jala un tirón en el cabello y una mirada necesitada por parte de su novio.

Un suspiro deja la boca de YiFan cuando JunMyeon toma su miembro en su boca, lamiendo ansiosamente de arriba abajo, succionando el glande con algo de fuerza y generando un "boop" en cada nuevo movimiento, YiFan tira su cabeza hacia atrás, sujeta al mayor del cabello y pone un poco más de velocidad en sus succiones, en serio extraña su intimidad con JunMyeon.

—Ah, Jun...—YiFan levanta la cabeza para detener a JunMyeon, aun no quiere terminar—Jun ah... ¡Mamá!

—¿Eh?

YiFan no dice nada más, levanta rápidamente a JunMyeon del suelo y lo usa como escudo del violento sonrojo que atraviesa su rostro, así como de la desnudez de su parte inferior, JunMyeon no entiende que le pasa y voltea hacia la puerta, sintiendo la misma vergüenza que el menor.

Jessica está de pie en la entrada, recargada sobre la puerta y con el rostro totalmente carente de expresiones. —La cena está lista, pero Jun cariño...

—Puta madre—susurra el mencionado—¿En serio?

—Lávate las manos con mucho jabón y la boca con todo el litro de enjuague en el baño, por favor. Es más, voy a conseguirte otro litro.

La mujer se va y mientras YiFan decide si lanzarse de la ventana o no, JunMyeon está enojado. Lo interrumpieron y en serio quiere hacer el amor con su novio, su hijo también desea eso, que tenga el placer que se merece.

—J-Jun...

—Esto no puede seguir así, necesito que me cojas, pero ya...

JunMyeon obedece el pedido de Jessica, se lava las manos y la boca y sí, la señora Wu le ha traído otro enjuague bucal, pero el castaño no cree que sea para tanto, insiste en su punto de vista y el hecho de que el sexo no es nada antinatural en la vida, menos en la vida de dos adolescentes, uno de ellos embarazado.

—¿YiFan está enfermo? —Guí Xián pregunta ya sentado en la mesa—Es de color granada...

—Oh tu hijo está muy bien, solo está un poco acalorado.

JunMyeon y YiFan toman asiento, lejos de Jessica. —¿Acalorado? ¿Quieres que encienda el aire acondicionado Fan?

—Los encontré teniendo sexo oral en la habitación.

YiFan estampa su cabeza contra la mesa, JunMyeon rueda los ojos y Guí Xián detiene su cena. ­­—¿Y?

—¿Y?, si escuchaste, ¿cierto?, estaban...

—Nada que no hayan hecho antes, maldita sea Jessica, van a tener un bebé y exactamente donde crees que lo puso YiFan para que se empezara a dividir esa célula.

—¡Exacto! —JunMyeon aplaude, al fin alguien que entiende.

—Yo no estoy en contra de que tengan sexo—YiFan levanta la cabeza y JunMyeon sonríe—Pero tampoco es que quiera escucharlos todo el día o no ver a mi hijo porque sus necesidades fisiológicas son más importantes que nuestro tiempo de calidad.

—¿O sea que si podemos...

—No Wu YiFan—JunMyeon bufa, nadie entiende sus necesidades de embarazado—Pero podemos llegar a un acuerdo, elijan un día de los quedan de la semana.

—¿Eh?

—Que elijan un día, ya.

—Jueves.

—Bien, pues el jueves será de ustedes para hacer y deshacer lo que quieran—ambos jóvenes sonríen—Si prometen no manosearse de aquí y hasta ese día, ¿bien?

—¡Bien!

Hubieran dicho que no estaba bien.

No por YiFan, él está tranquilo repasando las lecciones que SooYoung le dio, más los sabios consejos del manual de buenos padres y escuchando algunas anécdotas de Guí Xián, esto de la paternidad prematura los está volviendo más cercanos.

Pero JunMyeon.

—¿Tienes calor Junmy?

—¿Puedo decirle unas cuantas cosas?

—Nada que me sorprenda cariño, eso es seguro.

—Es un ser diabólico y sin Satanás no existiera, tenga por seguro que usted sería la reina del Infierno.

—Nada que me sorprenda niño, nada. Guí Xián me dijo todo eso cuando me mudé a Canadá, me lo dice cada cierto tiempo de hecho.

JunMyeon solo suspira y sigue manteniendo distancia de YiFan, con ocho semanas de embarazo, finalmente ha llegado ese periodo dónde todo se relaciona al sexo, más de lo que ya lo hacía y posiblemente Jessica lo sabía, por eso les dio semejante trato, que sonaba bien hace dos días.

Es lunes y JunMyeon siente que va a meterse un pepino por el culo de la desesperación.

—¿Qué pasa si rompo el acuerdo?

—Habitaciones separadas.

—¿Solo eso?

—Vigilancia 24/7 y sin sexo en mi casa, aguanta dos días más Junmy, ¿eso es difícil?

—Sí, YiFan es realmente bueno en la cama...

—Por supuesto, se duerme donde sea y si no le da hambre sigue durmiendo a saber cuántas horas más.

JunMyeon se ríe. —No hablaba de eso, me refería a que es realmente bueno a la hora del sexo, no sé como lo hace, pero es como si supiera por donde...

—Tiene un GPS en el pene, obvio—JunMyeon vuelve a carcajearse—Conmigo ni te preocupes, es decir, ya superé el hecho de que mi bebé de 13 años ya es un joven de casi 17 y que va a tener un bebé por andar localizando ubicaciones con su GPS, así que, si quieres hablar de algo relacionado al tema sexual adelante, mientras Guí Xián no me saque de quicio.

Jessica no es un monstruo, bueno sí, pero no con JunMyeon, ha llenado más su guardarropa e incluso le empieza a decir como cuidar su piel con los cambios que se acercan, YiFan sigue repasando con Guí Xián algunas cosas que solo un médico puede explicar mientras Jessica y JunMyeon gastan su tiempo hablando de la infancia de YiFan.

Y cuando el jueves llega, Jessica cumple su palabra, llevándose a Guí Xián a algún concierto en cartelera, JunMyeon está algo nervioso y realmente no sabe porque si ya lo ha hecho antes.

YiFan está en la piscina, lo único que no descuida en vacaciones es su entrenamiento y actualmente está practicando un poco de estilo libre, JunMyeon se acerca al extremo que YiFan ha dejado atrás y jadea un poco, esta zona de la casa está un poco fría.

El rubio regresa por su mismo carril hasta el lugar del que salió, observa la silueta de JunMyeon y se quita los goggles. —Hey Jun, ¿qué sucede?

—¿Puedo entrar contigo?

—Seguro, entra...

YiFan jadea cuando JunMyeon deja caer su bata, sin nada de ropa que haya debajo, el castaño entra y sisea por lo frío del agua, pero lo deja pasar cuando el menor lo sujeta de la cintura e inmediatamente lo besa desesperadamente.

Su necesidad va más allá de su control y en solo minutos, JunMyeon está recargado contra las baldosas de la alberca y en su zona menos profunda, con sus piernas enredadas en la cintura de YiFan mientras este le besa el cuello y muerde el lóbulo de su oreja, ambos jadean cuando la penetración se vuelve una necesidad imperiosa.

El agua se agita a la par que YiFan embiste en el interior de JunMyeon, el pequeño castaño se aferra al barandal con una mano y con la otra tira del cabello del menor, gimiendo sonoramente porque necesitaba esto, necesitaba que YiFan le hiciera el amor y necesitaba perder la cordura.

Tal vez sea el embarazo o sencillamente es la verdad, pero JunMyeon enserio necesita a YiFan para lanzar su raciocinio por la borda, solo con él puede decir que alcanza a tocar la jodida Vía Láctea.

El orgasmo llega para los dos al mismo tiempo, ambos jadean y tratan de recuperar sus respiraciones, se sonríen como idiotas y saben que tienen el día entero para ellos.

Lo toman.

Y hacen el amor en lugares que seguramente ni Jessica ni Guí Xián querrán saber, tomando todo el día que se las concedido para no contenerse.

—Fannie, Junmy—Jessica entra a la habitación con una cajita en la mano—¿Todo bien ayer?

—Sip, de maravilla—YiFan está recostado sobre el regazo de JunMyeon mientras el castaño cambia los canales de la televisión—¿Por qué?

—Simple curiosidad, por cierto—se acerca hasta los jóvenes y le da la cajita a YiFan, es un CD—Espero que hayas cambiado el agua de la piscina después de que terminaran...

—Carajo...

—Hay cámaras Fan, si no entras a la Universidad creo que puedes subir videos a Red Tube.

—¡Mamá!

JunMyeon se echa en la cama a reír mientras YiFan empuja a su madre fuera de la habitación, totalmente sonrojado y avergonzado de que por segunda vez lo viera en ciertas situaciones que no necesitaba ver.

Y aunque las dos casas son cómodas, resulta que son su dulce hogar para ellos y por separado, simplemente no pueden vivir como una pareja allí.

Es demasiado vergonzoso.