Bonito vestido (Aún más bonito por debajo)
"Bonitas tetas", murmura Louis.
Suelta los pechos de Harry, en su lugar, desliza las manos por la falda del vestido. "Bonito vestido también".
Una de sus manos se desliza bajo el vestido acariciando el muslo de Harry. De repente, toca el agujero de Harry. Harry jadea y hunde los dedos en los hombros de Louis.
"Y un coño muy bonito".
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N/T: Feliz semana santa jajajaj, disfrútenlo y no juzguen demasiado a Louis, son los 50's
Notas:
¡Gracias a todos los maravillosos lectores que dejaron felicitaciones y comentarios sobre el trabajo anterior en esta serie! Ustedes mantienen mis jugos creativos pervertidos fluyendo.
Esta serie está inspirada en el concepto de ama de casa de los años 50, y toda la ropa de Harry está inspirada en la moda de la época. Así que si quieres visualizar el atuendo de Harry, puedes buscar en Google "vestido rosa de ama de casa de los años 50" y te harás una idea de lo que estaba imaginando.
Por favor, lee las etiquetas: este fic contiene consentimiento dudoso debido al desequilibrio de poder y a que Harry no sabe mucho de sexo.
Este fic tiene un poco de trama junto con el porno. Espero que lo disfruten.
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Harry cierra los ojos un momento, recordándose con firmeza que Louis ya lo ha visto desnudo, ha tocado todo su cuerpo desnudo. No necesita ponerse nervioso.
Con una mano agarra con fuerza la toalla que lo envuelve y con la otra agarra el pomo de la puerta.
Entra tímidamente en el dormitorio. Louis está sentado en la cama, lleva gafas y lee el periódico. Está muy despeinado, con el pelo alborotado y la piel dorada a la luz de la mañana. Levanta la vista en cuanto Harry entra en la habitación.
"Um... ¿Alfa?"
"¿Hmm?"
"¿Qué... eh, qué quieres que me ponga?"
Louis deja el periódico y le hace señas a Harry con el dedo. Harry camina hacia el lado de la cama de Louis, tropezando con sus propios pies en el proceso.
Louis le toma de la barbilla y lo atrae hacia abajo para darle un beso. Harry lo abraza con entusiasmo, los ojos se le cierran y un pequeño sonido de felicidad sale de sus labios.
"Estás precioso así, corazón. Todo ruborizado por la ducha".
"Gr-gracias, Alfa".
Harry nunca había visto a Louis llevar gafas —ni siquiera sabía que Louis las necesitara— y no puede evitar encontrarlas intensamente atractivas. Le dan a Louis un aura sofisticada y autoritaria que le hace desear tumbarse y dejar que Louis lo posea. Se muerde el labio inferior y mira fijamente a los ojos de su alfa.
Louis posa una mano en la cintura de Harry, apretando una vez.
"Bueno, cariño, depende de lo que hayas traído", dice Louis, en respuesta a la pregunta de Harry. "Me encantaría que no llevaras nada".
Es la mañana siguiente a su boda y ya han tenido sexo dos veces, pero aun así las mejillas de Harry se calientan ante el tono sugerente de Louis.
"Yo, uh, bueno, me he traído ropa nueva. Pero si quieres que me desnude, podría...".
"Quiero que te sientas cómodo, cariño. No necesito que estés desnudo a menos que quieras".
"Bien, um," Harry baja la mirada para observar el dibujo del edredón, "Entonces creo que preferiría llevar ropa, Alfa. Si te parece bien".
"Me parece bien", confirma Louis. "Ahora dime qué cosas bonitas te has traído, ¿eh?". Le sonríe a Harry amablemente, Harry le responde con una sonrisa tímida.
"Bueno, antes de nuestra boda compré unos vestidos nuevos que son... más reveladores que los que tenía antes. No era apropiado que me los pusiera cuando no estaba apareado pero pensé que, ahora que estamos casados, estaría bien".
"Está más que bien", dice Louis, asintiendo con la cabeza.
Una pequeña chispa de alivio y emoción se enciende en el pecho de Harry. Le había hecho mucha ilusión elegir ropa nueva para él antes de la boda y está encantado con la idea de poder ponérsela. Realmente tiene al alfa más maravilloso.
"Gracias, Alfa", dice. Y luego, como no puede evitarlo cuando Louis es tan amable y está tan guapo, se inclina para darle un beso rápido en los labios. ¡No puede creer que pueda besar a su alfa, a su marido, así como así!.
Cuando se retira, Louis sonríe. "Un chico encantador", murmura. Harry prácticamente resplandece de felicidad. "Ahora dime, ¿qué vestidos nuevos te has comprado?"
"Tengo, um, uno amarillo, uno rosa y uno de lunares blancos y negros".
"¿Por qué no te pones el rosa para mí hoy, cariño?"
"Sí, Alfa. Me pondré el rosa".
"Buen chico. ¿Necesitas que te suba la maleta? Creo que ayer la dejamos en el salón".
"Oh, sí, por favor, Alfa".
Louis se levanta de la cama y de repente está justo contra Harry, sus caras casi tocándose. Lo único que los separa es la toalla que Harry aún sujeta alrededor de su cuerpo.
Louis sujeta la mandíbula de Harry y lo atrae hacia él en un beso. Es profundo y sensual, Harry suspira contra los labios de Louis, arqueando su cuerpo contra el pecho de Louis. Louis le pasa una mano por la cintura y lo abraza con fuerza.
"Bien", dice Louis, separándose finalmente, "te dejaré la maleta fuera del baño, ¿está bien?".
"Oh, gracias, sí".
Louis se pone los calzoncillos y se pasa una mano por el pelo. "Debes de tener algo más que esa maleta de pertenencias. ¿Dónde está el resto?"
"Mi madre me ha dicho que, para empezar, me traiga una sola maleta, así tendré menos trabajo durante la luna de miel. Tiene todo lo que necesito para estas dos semanas, al final de la luna de miel mi padre me traerá el resto de mis cosas".
Louis deja las gafas en la mesilla de noche y asiente. "Muy lista tu madre".
"Lo es, Alfa. Le diré que le has dicho eso, se pondrá muy contenta".
Louis se ríe con cariño. Abre la puerta del dormitorio, mirando por encima del hombro mientras sale al pasillo. "Ahora entra en el baño y vístete antes de que te arranque esa toalla y te folle otra vez. Pequeño provocador alardeando estar completamente desnudo bajo esa cosa".
Desaparece por el pasillo con una sonrisa burlona, dejando a Harry en el dormitorio sin más ropa que una toalla y ruborizado.
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Su primer desayuno juntos va de maravilla. Louis elogia con entusiasmo la comida que preparo Harry, lo que hace que se sienta satisfecho y orgulloso de sus habilidades. Antes de la boda sólo podían verse bajo supervisión, y habría sido bastante inapropiado para ellos hablar de las cosas de las que están hablando ahora. Cosas como su próximo celo.
"Normalmente un omega entra en celo unos siete días después de dejar de tomar sus supresores", dice Louis, "Ya que sus hormonas aumentan después de haber estado suprimidas durante tanto tiempo". Harry ya lo sabe, pero asiente igualmente. "Y el olor de una omega en celo desencadenará mi celo. Así que deberíamos sincronizar nuestros ciclos de ahora en adelante".
"Sí, Alfa. Dejé mis supresores el día de nuestra boda. ¿Está... está bien?"
"Eso es perfecto, cariño. ¿Y estás tomando anticonceptivos?"
"Sí, Alfa. Los tomo".
Harry tiene que bajar la cara para ocultar el calor que se extiende por sus mejillas. No está acostumbrado a hablar de temas tan privados tan abiertamente, y es un poco embarazoso.
"No me escondas la cara, corazón. Vamos, mira hacia arriba".
"Lo siento alfa".
Louis observa sus platos vacíos. "¿Por qué no limpias la mesa?"
"Si, Alfa." Harry obedientemente recoge los platos y cubiertos, llevando todos hacia la cocina. Los deja a un lado del fregadero y se toma un momento para sonreír. No lo puede creer —él es el omega de la casa, con pleno poder de su propia cocina y con el marido más perfecto que un omega pudiera pedir. Puede compartir su calor con su alfa, besarlo y usar bonitos vestidos también para su alfa.
Contempla el vestido que está usando ahora. Es un color rosa bebé, con un escote que podría ser muy escandaloso para un omega que no estuviera casado. Lo recorre con las manos, encantado. Esta termina en sus rodillas y no en sus tobillos, como todos los vestidos que usaba antes de casarse; hasta a tenido que comprar una nueva falda interior más corta para ponerse debajo.
Ha combinado su vestido con unos zapatos color crema con un bonito tacón y un collar de perlas el cual Louis le había regalado en una de sus citas supervisadas durante el periodo de cortejo. Se toca con cuídalo el cabello ya que lo había peinado con sus rizos brillantes después de ducharse. Parece que los rizos se han mantenido en su sitio.
Regresa al salón, inseguro de qué hacer ahora que el desayuno ha terminado, ¿Debería de sentarse otra vez en la mesa? ¿Debería preguntarle a su alfa que es lo que debe hacer ahora?
Por suerte, Louis le evita tener que quedarse de pie incómodamente. Su alfa le hace señas para que se acerque y le dice, recostándose en su silla; "Ahora, déjame ver tu vestido nuevo".
A Harry le late el corazón. "Si, alfa."
Se coloca frente a Louis, con su postura erguida y sus manos entrelazadas al frente. Sabe que luce muy bonito, pero aún así espera que Louis lo apruebe, que le guste que esté vestido así.
Louis separa los muslos y recorre con la mirada el cuerpo de Harry. Los ojos de Harry bajan hasta la entrepierna de su alfa y puede sentir como una pequeña oleada de excitación inesperada lo recorre. Rápidamente aparta los ojos. ¡Qué extraña sensación el saber cómo luce exactamente alguien debajo de la ropa!
"Gira para mi corazón."
Harry se gira y extiende un poco los brazos. Su vestido se ondea por encima de la falda interior, de una forma que hace que se sienta bonito y femenino. Se ríe ligeramente y vuelve a mirar a Louis.
"Absolutamente precioso", dice Louis. Harry prácticamente se ilumina ante el elogia, no puede evitar sonreír ampliamente. "Ven aquí."
Harry se coloca entre las piernas entreabiertas de Louis, lo suficientemente cerca como para que pueda tocarlo. Louis lo sujeta por la cintura y desliza ambas manos hacia arriba para tocarle los pechos. Harry inhala profundamente.
Las manos de Harry suben instintivamente y se posan sobre los hombros de Louis para poder apoyarse mientras Louis le acaricia los pechos. Siente que se está excitando, solo un poco.
"Bonitas tetas", murmura Louis. Suelta los pechos de Harry, en su lugar, desliza las manos por la falda del vestido. "Bonito vestido también". Una de sus manos se desliza bajo el vestido acariciando el muslo de Harry. De repente, toca el agujero de Harry. Jadea y hunde los dedos en los hombros de Louis. "Y un coño muy bonito".
Harry siente el calor de la mano de Louis a través de las bragas. Louis introduce su mano a través de sus bragas y el tacto hace que Harry sienta un cosquilleo en todo el cuerpo, haciéndolo soltar un gemido sueve y entrecortado. Mientras Louis está frotando su agujero, el movimiento de su brazo hace que su ropa emita su característico sonido.
"Puedo oler tu lubricante, omega." La voz de Louis es más ronca y grave de lo normal. Harry simplemente gime en respuesta, estando de pie en medio de la sala de estar, totalmente vestido mientras su alfa lo toca por debajo de su falda.
Harry puede oler la excitación de su alfa, un aroma intenso y amanerado que es totalmente embriagador. Louis mete un dedo en sus bragas para apartarlas.
Desliza sus dedos por la resbaladiza entrada de Harry e introduce dos dedos.
Harry chilla. Los dedos de Louis duelen, está muy adolorido por el primer apareamiento de la noche y los de esta mañana. De forma instintiva, aprieta con fuerza los dedos de Louis, tratando de detenerlo y que vaya más lejos.
Louis lo mira con el ceño fruncido. "¿Te duele, cariño?."
"Si alfa." Susurra Harry. "Lo siento mucho, yo sólo que, um, me duele mucho." Agacha la cabeza, decepcionado de sí mismo, de su propio cuerpo. Es el primer día de su matrimonio y el ya está fallando en ser bueno para su alfa.
Louis tararea pensativamente y saca los dedos de su interior. Harry da un respingo cuando los dedos le rozan incómodamente sus paredes.
"Bueno, cariño." Dice Louis retirando su mano de debajo del vestido de Harry. "Si tu dulce agujero está demasiado adolorido como para que me lo folle, ¿De qué otra forma vas a complacerme?."
Harry abre la boca y vuelva a cerrarla, inseguro. Está considerando decirle a Louis que debería de follarselo sin más — el alfa está en su derecho de hacerlo, claro—, pero Louis está realmente curioso, esperando por una respuesta adecuada y Harry preferiría sinceramente no tener nada dentro de él ahora mismo.
Harry recuerda todo lo que ha aprendido sobre el sexo en las últimas veinticuatro horas. "Podría... um, ¿podría chuparte la polla?. S-si eso te complacería, Alfa.
Louis levanta sus dedos, mojados con el lubricante de Harry y los coloca contra sus labios. Harry los chupa obedientemente, limpiando todo el lubricante de los dedos. Espera con inquietud la respuesta de Louis, ya que espera que lo que haya dicho sea lo correcto.
Louis permanece en silencio hasta que Harry haya limpiado todo el lubricante de sus dígitos y su expresión no revela nada. Retira los dedos de su boca y se limpia la saliva en el mantel.
"Si." Dice por fin y Harry suelta un pequeño suspiro de alivio. "Eso me complacería." Hace en gesto hacia suelo. "Entonces, de rodillas omega".
Harry se coloca de rodillas, con cuidado de no arrugar demasiado su vestido. Está muy agradecido con Louis por no follarlo cuando le duele; sabe que a muchos alfas simplemente no les importaría. Así que decide esforzarse al máximo para darle la mejor mamada posible a su esposo.
"Mi preciosa esposa", dice Louis suavemente, deslizando su mano por la mandíbula de Harry , inclinando su cara hacia arriba. "Bueno, adelante", dice tras una pausa. "Sácame la polla".
Harry se apresura a obedecer. Se tambalea un poco al intentar desabrochar el cinturón, Louis se limita a esperar pacientemente hasta que Harry le baja la cremallera de sus pantalones grises, dejando al descubierto los bóxers que lleva debajo.
Harry observa a Louis, mordiéndose el labio. No está muy seguro de que sigue después ya que sólo lo ha hecho una vez. Por suerte para el, Louis se apiada y se baja los bóxers, sacando su polla que ya se encuentra medio dura.
"¿Recuerdas de lo que hay que hacer, corazón?".
"Yo... creo que si alfa".
"Ponte a ello entonces, cariño".
Harry mira a Louis y la incertidumbre se apodera de su mente al darse cuenta de que está bastante fuera de su alcance. Louis no le da más instrucciones así que toma un pequeño respiro hondo y acerca los labios hacia la polla de Louis.
Comienza como Louis le había enseñado la noche anterior, con un pequeño y tímido beso en la punta. Luego empieza a lamer húmedamente a lo largo, recordando como eso hizo reaccionar positivamente a Louis en la noche anterior. La piel de Louis se siente caliente contra su lengua, su olor es fuerte y atractivo.
Harry lame la polla de su alfa hasta que está se encuentra completamente dura y húmeda por todas partes, la saliva se desliza hasta donde Louis está sujetando sin apretar en la base. Harry vuelve a mirar a Louis, mordiéndose el labio, temerosos de lo que viene a continuación. Louis levanta una ceja, expectante.
Harry toma la polla de su alfa a la boca y chupa.
"Ahí está, cariño", le tranquiliza.
Las palabras le confirman que va por buen camino y lo animan a introducir mas profundamente a Louis en la boca. Se hunde en la polla de Louis sin dejar de chupar. La mano de Louis abandona la base de su polla y se posa en el cabello de Harry, enredándose en sus rizos.
Louis no está guiando su cabeza como lo había hecho la noche anterior, está dejando que Harry decida el ritmo. Aún así, Harry recuerda lo que le había gustado a Louis y trata de repetirlo, subiendo y bajando con regularidad, chupando con firmeza. Tiene mucho cuidado de no tocar la polla de su alfa con los dientes.
"Mírame", le ordena Louis.
Harry deja de succionar y mira fijamente a su alfa, deteniéndose a medio camino de su polla.
Louis gruñe, claramente disgustado. A Harry se le encoge el corazón. Intenta apartarse y disculpase, inseguro de lo que ha hecho mal.
"Uh uh", dice Louis, apretando su mano en los rizos de Harry, presionándolo para que vuelva a bajar. "Sigue moviéndote, cariño. Vas a mirarme mientras me la chupas".
Louis le empuja aún más la cabeza hacia abajo y Harry se deja llevar obedientemente. La desaprobación de Louis permanece como un malestar físico en su estómago, incomodándolo. Continúa chupando a Louis, atento a que sus dientes no lo toquen mientras mueve la cabeza y al mismo tiempo mira fijamente a Louis. Es difícil intentar hacer tantas cosas a la vez. Desea complacer a su alfa ya que se siente nervioso después de haber hecho algo mal.
La habitación está en silencio, a excepción del sonido que hace Harry al estar chupando la polla de su alfa, húmedo y obsceno. Louis lo mira, con la mandíbula tensa y a respiración agitada. Harry espera que sea una buena señal de que esta complaciendo bien a su alfa.
Que espectáculo deben de estar haciendo: los dos completamente vestidos, Louis con pantalones y camisa mientras Harry se encuentra arrodillado con su bonito vestido rosa, con la cabeza metida entre las piernas de Louis. Esta hecho un desastre, saliva que le chorrea por la barbilla y la polla de Louis. Espera que no le importe.
"Buen chico". Murmura Louis. Deslizando su pulgar por los labios estirados de Harry.
Harry se siente aliviado. Los elogios de Louis le calman por la desesperación que siente por haberlo arruinado antes ya que le aseguran que está haciendo un muy buen trabajo. Siente una nueva sensación de energía y se empuja aún más sobre la polla de Louis hasta que tiene más de la mitad dentro de su boca.
"Joder", gruñe Louis, con los muslos tensos. "Me satisfaces muy bien".
De repente, las manos de Louis están en su nuca, sujetándolo. Harry abre los ojos ante el inesperado empujón. Mantiene su cuerpo dócil para que Louis lo pueda empujar aún más, hasta el punto que puede sentir la polla del alfa golpeando su garganta.
Se atraganta con fuerza.
"Eso es cariño", gruñe Louis, "Toma mi polla".
Harry se esfuerza por mantener los ojos abiertos, para seguir mirando a Louis como le ha indicado. Desea desesperadamente ser una buena esposa para Louis, quiere servirlo y complacerlo como a él le gusta. Pero no puede evitar que sus ojos se llenen de lagrimas, no puede evitar volver a atragantarse, a tener arcadas mientras lo sigue sujetando. Sus manos aprietan con fuerza los muslos de Louis.
Por fortuna, Louis le permite apartarse un instante.
Harry tose. "Lo siento alfa", dice. Le duele la mandíbula pero aparta el dolor de su mente.
Louis retira un mechón de cabello de la frente de Harry. "No pasa nada cariño, es bastante sexy oírte ahogarte así, luchando por tomar mi gran polla".
"Oh", dice Harry. Se siente un poco mejor sabiendo que aún así sigue complaciendo a su alfa, aunque no le resulte fácil meterse toda la polla de Louis hasta el fondo.
Rápidamente vuelve a chupar, sin dejar de mirar a Louis mientras sigue moviendo la cabeza.
Louis lo observa, su rica escénica esparciéndose en el aire que los rodea. Harry nota que la respiración de Louis es un poco más pesada, su pecho sube y baja visiblemente y sus mejillas están sonrojadas. No pasa mucho tiempo antes de que las caderas del alfa comiencen a moverse y sus labios emitan gemidos silenciosos.
"Dulce cosita", dice Louis, "Dios, estás tan... jodidamente... tan impaciente, ¿verdad?. Todo un chupapollas nato".
Harry emite un murmullo de asentimiento y toma la polla de Louis tan profundo que le dan arcadas. Louis hecha la cabeza hacia atrás con un gemido.
Una pequeña chispa de excitación se enciende en el pecho de Harry. Sabe que va a hacer que Louis se corra, va a conseguir darle placer a su alfa solo con su boca. Es emocionante el saber que él es el responsable de cada gemido que emite Louis.
Entonces las manos de Louis vuelven a posarse en su cabeza para mantenerlo quieto mientras comienza a follarle la boca. Harry pierde completamente el control del ritmo y hunde los dedos en los muslos de Louis para tratar de estabilizarse.
Se arrodilla, dócil y obediente, con la cabeza quita mientras su alfa usa su boca.
"Una pequeña, perfecta, esposa", gruñe Louis, marcando cada palabra en cada embestida. "Joder", gime, aumentando la velocidad.
Louis golpea el fondo de la garganta de Harry con cada embestida que da mientras Harry se atraganta cada vez, con los ojos llorosos. Trata de recordarse que debe de mantener el contacto visual, haciendo su mayor esfuerzo en mantener los ojos abiertos en cada embestida.
De repente, la sensación se detiene. Louis saca la polla de su boca y una línea de saliva conecta su polla con los labios de Harry.
Harry parpadea hacia su alfa, jadeando.
"Te voy a dar mi semen cariño". Louis comienza a acariciarse la polla delante de la cara de Harry, su mano se mueve tan rápido que es casi un desenfoque. "¿Lo quieres?.
"Si alfa". Recuerda lo que Louis le dijo la noche anterior, de cómo tragar la semilla de su alfa hará que su cuerpo se acostumbre y lo haga más receptivo en el futuro para el embarazo.
"Pídelo amablemente".
Mira fijamente a Louis con los ojos muy abiertos y unas lágrimas húmedas le recorren las mejillas. "Por favor alfa. Por favor, ¿puedo tener tu semen?.
"Joder", gime Louis con la cabeza hacia adelante.
Harry se remueve un poco sobre sus rodillas. Ahora que no tiene que enfocarse tanto en chupar la polla de Louis, se hace consciente de su propia excitación, un cálido cosquilleo en su interior. Su entrada gotea lubricante, al moverse puede sentir la humedad.
Louis golpea con la cabeza de su polla contra los labios de Harry y este, inmediatamente abre la boca, sacando la lengua.
"Pequeño chupapollas". Louis frota la punta de su polla contra la lengua de Harry. "Chúpala", le ordena.
Harry lo hace, cerrando los labios alrededor de la punta. Chupa la cabeza mientras Louis continúa masturbándose.
"Te daré mi semen y lo tragaras todo, ¿verdad cariño?.
Harry se aparta para decir, "si alfa".
"Buen chico", responde Louis.
Y entonces presiona la cabeza de Harry hacia abajo con las dos manos, más profundamente en su polla, más de lo que Harry nunca lo había hecho anteriormente. Harry se atraganta.
Cierra los ojos sin poder evitarlo, sorprendido por el repentino cambio de ritmo. Louis gruñe por lo alto, las caderas golpeando profundamente en la garganta de Harry mientras se corre.
Un momento después, Louis se retira, dejando que Harry supere su sorpresa, respire por la nariz y empiece a chupar. Succiona mientras las caderas de Louis se sacuden y el semen de Louis le cube la lengua, salado y amargo.
Louis se retira al final, de modo que su semen aterriza también sobre los labios de Harry.
"Que buen chico", dice Louis. Se acaricia la polla unas cuantas veces más antes de soltarla y echarse hacia atrás en la silla. Harry obedientemente se traga toda la semilla de su alfa.
El pulgar de Louis se desliza sobre sus labios, recogiendo el semen que hay para luego sumergirlo en la boca de Harry, para que este pueda chuparlo también.
"Eso es cariño, trágalo todo".
Saca el pulgar de la boca de Harry con un sonido húmedo y vuelve a meterse en los bóxers, arreglándose los pantalones.
"No puedo creer que vaya a tenerte", dice. Su voz está llena de adoración y eso hace que Harry se sienta orgulloso. Le gusta sentirse apreciado, le gusta sentir que es capaz de servir bien a su Alfa.
"Soy tuyo, Alfa".
Louis tararea. "Mi precioso omega. Tan bueno sirviendo a tu marido". Pasa un pulgar por la mejilla de Harry, con ternura. "Pero te estás olvidando de algo, cariño", advierte Louis. "¿Qué dices después de que te dé mi polla, hmm?"
"Oh- Gracias, Alfa", se apresura a decir Harry. "Gracias por dejarme tener tu polla".
Louis le sonríe con serenidad. "De nada". Louis le pasa una mano por el cabello y Harry cierra los ojos al sentirlo. "Ya puedes levantarte, cariño".
Cuando Harry se pone en pie, se asombra de lo adoloridas que tiene las rodillas. Endereza las piernas lentamente, con una ligera mueca de dolor. No debe de parecer muy elegante, pero Louis no dice nada, sólo espera a que esté bien erguido y lo acerca.
Harry se coloca entre los muslos abiertos de Louis y éste le mete una mano por debajo del vestido.
Los dedos de Louis se deslizan bajo las bragas de Harry para acariciar la humedad de su interior, impregnándose de su lubricante. "Tan mojado", murmura Louis. "Pareces tan inocente, pero sé lo obsceno que eres en realidad, ¿verdad? Mi pequeña zorra secreta".
Harry se sonroja al oír esas palabras. Son ciertas, como demuestra la cantidad de lubricante que ha producido, que delata lo ansioso que está por la polla de su Alfa. El roce de los dedos de Louis sobre su entrada es excitante. Louis tira de las bragas de Harry hacia abajo y caen hasta sus tobillos. Se las quita, aprensivo.
Louis vuelve a meterle los dedos bajo el vestido, pero esta vez va más allá y le introduce rápidamente dos dedos en su agujero.
Harry chilla y se agarra al hombro de Louis. Todavía le duele tener algo dentro; su agujero se siente en carne viva y le duele por haber sido estirado durante su primer apareamiento.
"¿Todavía te duele, mi amor?"
Harry asiente, bajando la cabeza. "Lo siento, Alfa", susurra.
Louis tararea pensativo. No parece demasiado disgustado por la incapacidad de Harry para cumplir plenamente sus deberes de esposa. En lugar de eso, saca los dedos de debajo del vestido de Harry y le lame el lubricante. Harry se sonroja violentamente.
"Bueno, cariño, puede que haya algo que pueda hacer para ayudarte", dice Louis, con una sonrisa maliciosa dibujándose en su cara. "Algo que aún no te he enseñado".
"Oh... está bien." Harry aprieta los muslos, mordiéndose el labio nerviosamente.
De repente, Louis se levanta y lo carga en brazos. Harry exclama y se agarra al cuello de Louis para apoyarse. Louis se ríe y lo deja con cuidado en el borde de la mesa del comedor.
"Normalmente haría que te desnudaras para esto. Pero me gusta mucho tu bonito vestido. Me pregunto..."
Louis se arrodilla.
Harry da un pequeño jadeo de asombro. Nunca había oído que un Alfa se arrodillara ante un Omega, pero Louis parece perfectamente satisfecho y sigue sonriéndole con complicidad.
Louis desliza una mano por la pierna izquierda de Harry, subiéndole el vestido y besándole suavemente la cara interior del muslo, justo por encima de la rodilla. El contacto de los labios de Louis con su piel sensible le provoca una oleada de excitación. El Alfa le besa la parte interior del muslo. Harry se muerde el labio inferior y se agarra con fuerza al borde de la mesa, su respiración se agita.
"Te duele tu entrada, ¿verdad amor?".
"S-si, alfa"
"Bueno, entonces, como tu Alfa, lo que tiene sentido es que yo..." agarra el muslo izquierdo de Harry y lo guía por encima de su hombro "lo bese de mejor forma".
Y entonces su cabeza se mete bajo las faldas de Harry -bajo el vestido y de la falda interior- y lame una franja húmeda sobre el agujero de Harry.
Un gemido involuntario sale de los labios de Harry. Sus piernas se cierran instintivamente, pero Louis le agarra los muslos, manteniéndolos abiertos.
Harry apenas puede creer que esto sea real; ¡su Alfa está debajo de su vestido! Su Alfa le está lamiendo el coño. Ni en un millón de años Harry habría imaginado una situación como ésta.
Las manos de Louis se deslizan hacia arriba desde sus muslos para agarrarle las caderas con fuerza, los dedos clavándose en la carne. Louis lo acerca al borde de la mesa, hacia su hábil boca.
Cada roce de la lengua de Louis enciende su sangre con una ardiente excitación. Harry se agarra con tanta fuerza al borde de la mesa que los nudillos se le ponen blancos. Louis mete la lengua en Harry, dentro de su coño, y Harry gime.
"Oh, Alfa... se siente bien, Alfa", gime Harry. "Gracias, gracias, p-por favor".
La habitación se llena de los húmedos sonidos de la boca de Louis sobre él, acompañados por el silencioso susurro de sus faldas con cada uno de los movimientos del Alfa. Dioses, Harry no va a poder volver a oír el crujido de sus faldas sin pensar en esto, en Louis bajo su vestido, proporcionándole un placer inimaginable.
Una de las manos de Louis se dirige a su polla omega, acariciándola con los dedos, jugueteando con ella. Las caderas de Harry se sacuden involuntariamente.
Louis sigue lamiéndolo, sigue jugando con su pequeña polla, sin descanso. Harry empieza a jadear y se le cierran los ojos. Siente que se acerca al orgasmo.
"Alfa, por favor, me-me puedo correr, por favor, por favor, Alfa, puedo-" Harry suelta un gemido agudo cuando Louis le aprieta la polla con fuerza.
Louis se retira de entre las piernas de Harry, saliendo de debajo de su vestido. El cabello del Alfa está despeinado, sus labios brillan con el lubricante de Harry, una sonrisa de satisfacción se dibuja en la comisura de sus labios.
"¿Te sientes bien, amor?".
De repente, la mirada directa de Louis hace que Harry se sienta algo tímido; la cara de Louis acaba de enterrarse entre sus piernas. Se siente más íntimo que todo lo que han hecho hasta ahora. "Sí, Alfa", murmura Harry, sonrojándose ferozmente. "Se siente muy bien. Gracias".
"De nada", dice Louis. Pasa sus manos por los muslos de Harry, empujando su vestido hacia arriba de modo que se amontona alrededor de su cintura. " Tienes un sabor divino".
" Oh, um, g-gracias", susurra Harry, atrapado en algún lugar entre la timidez y el placer.
Louis rodea la polla de Harry con los dedos y empieza a acariciarla. La habitación está en silencio, excepto por el sonido de las faldas de Harry y su respiración jadeante.
"Algunos Alfa no creen que esté bien que los maridos hagan esto. Piensan que es demasiado parecido a chupar pollas. Piensan que los omegas podrían confundirse y perder su sumisión natural, su deseo de servir a su Alfa", dice Louis. Mira a Harry críticamente. "Pero no estoy de acuerdo. No es como si yo fuera a poner mi boca en tu pequeña polla omega, ¿cierto?". Aprieta la polla de Harry con tanta fuerza que casi le duele, y Harry inhala bruscamente.
"No, Alfa", dice Harry.
"Sin embargo", continúa Louis, "es importante que recuerdes que no tienes derecho al placer. Tu deber es complacerme y servirme. No al revés".
"Sí, Alfa."
"Si pienso por un segundo que lo has olvidado, serás disciplinado". Louis le mira a los ojos, con firmeza. La advertencia en su voz es clara.
Harry asiente, mordiéndose tímidamente el labio inferior. Es consciente, de una manera abrumadora, del poder de Louis, de su autoridad. "Sí, Alfa. Lo comprendo".
"Bien. Buen chico", dice Louis, la intensidad de su mirada disminuye. "Estoy seguro de que no tendremos ningún problema con eso, ¿no?"
"No, Alfa. No-no lo tendremos".
Louis acaricia el agujero de Harry con el pulgar, extendiendo su humedad, y la respiración de Harry se entrecorta ante la sensación. La sonrisa juguetona de Louis vuelve.
"No tendrás esto a menudo, amor. Tendrás que ganártelo. ¿Entendido?"
"Sí, Alfa, lo entiendo".
"Te lo estoy dando hoy porque sé que los primeros apareamientos pueden ser difíciles para un omega, me has hecho sentir muy orgulloso con lo obediente que has sido, lo ansioso que estás por aprender a atenderme como es debido".
"Gracias, Alfa", susurra Harry, embargado por la emoción. Realmente tiene mucha suerte de tener un Alfa tan amable y comprensivo.
Louis le sonríe. "Puedes correrte cuando estés listo", dice, y vuelve a meterse bajo las faldas de Harry.
Harry gime fuerte cuando Louis vuelve a lamerlo. Una de las manos de Louis le agarra el muslo, manteniéndolo abierto, mientras la otra empieza a acariciarle la polla.
Está abrumado de sensaciones, con la combinación de la boca de Louis sobre él y los hábiles dedos de Louis jugando con su polla. Harry suelta un gemido, con el agujero apretándose a medida que se acerca su orgasmo.
Cierra los ojos cuando se corre.
Un sinfín de "gracias, Alfa, oh, gracias" sale de sus labios mientras Louis le lleva al orgasmo.
Louis sale de debajo del vestido, con las mejillas sonrosadas y la boca húmeda.
Le insiste a Harry para que se levante. Harry lo hace con las rodillas temblorosas y se sonroja al sentir el lubricante entre sus piernas; está tan mojado que tiene los muslos pegajosos.
Louis alisa el vestido de Harry. "Vamos a ponerte bonito y presentable otra vez, ¿eh?", le dice amablemente.
"Sí, Alfa", murmura Harry. Está un poco avergonzado por lo indecente que debe parecer, sonrojado y jadeante y con el inconfundible olor de su lubricante en el aire. Intenta notar si su cabello está fuera de lugar, pero no lo consigue. Está decidido a mirarse en un espejo en cuanto pueda.
Louis hace un gesto hacia la mesa. "Has hecho un desastre, Harry", dice.
Harry se vuelve y ve que su humedad está esparcida por toda la mesa del comedor. Su vergüenza no hace más que intensificarse. "Lo... lo siento, Alfa, lo... lo limpiaré, lo...".
"Shh, shh, amor, está bien", tranquiliza Louis, percibiendo claramente la angustia de Harry. Le acaricia la espalda con la palma de la mano. "Es normal, cariño. Mientras lo limpies todo no pasa nada, ¿está bien?".
"Bien, Alfa", susurra Harry.
Las manos de Louis le acarician el culo. Le sube el vestido y le toca el coño por detrás. Harry jadea.
"Dioses, estás muy mojado, ¿eh? Qué chico tan sucio". Le pasa los dedos por la humedad y Harry se estremece. "Tienes que quedarte así hasta que te diga que puedes limpiarte. Quiero que sientas lo sucio que estás a cada paso que das".
"Sí, Alfa".
Louis retira la mano del cuerpo de Harry, dejando que el vestido vuelva a su sitio. Lleva sus dedos cubiertos de lubricante a la boca de Harry. "Abre", le ordena.
Harry chupa obedientemente el lubricante de los dedos de Louis.
"Buen chico", murmura Louis. "Ahora, ¿por qué no limpias lo que has ensuciado en la mesa? Y tráeme una cerveza. Estaré en el salón".
"Sí, Alfa", dice Harry.
Louis le pasa un dedo por debajo de la barbilla y lo atrae hacia sí para darle un beso. Es dulce y casto, y tiene el sabor del lubricante de Harry. Harry se va a sonrojar durante el resto de su vida.
Louis desaparece en el salón. Harry se queda limpiando su lubricante de la mesa.
Se siente indecente, todo vestido con su mejor atuendo y sus bonitos taconcitos, mientras sus bragas yacen tiradas en el suelo y el lubricante le gotea por los muslos. A cada paso siente la humedad entre las piernas y se acuerda de lo que acaba de pasar. No puede creer que Louis hiciera algo tan generoso por él, que le permitiera placeres tan maravillosos.
Harry le trae la cerveza a Louis y se dirige al salón, mareado por el florecimiento del amor hacia su Alfa.
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Nota Autor:
¿estamos sintiendo el ambiente de ama de casa de los años 50? Yo sí, y me encanta. además, no sé por qué, pero me encantan las faldas interiores. por si te lo preguntabas, la falda interior de Harry en este fic está hecha de tafetán, y por eso hace un sonido como de susurro cuando se mueve.
gracias por leer (y gracias especiales por los comentarios y los elogios).
con amor, Wolfie
N/T: siéntete libre de marcar los errores ortográficos, quise traerlo lo mas pronto posible, lo corregiré en estos días!
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