— ¡Vamos, Harry, apúrate!

Grité por milésima vez desde la entrada, eso era una mala costumbre nuestra, Harry siempre se tardaba horas de horas admirándose en el espejo del baño, acomodando cada uno de sus rizos para que tengan "el volumen perfecto", según lo que él decía. Siendo sincero era desesperante, pero al final me encargaba de recordarle que teniendo el cabello como lo tuviera, él siempre se vería completamente hermoso, porque era así, muchas mujeres babeaban por él, cosa que ambos sabíamos y sin embargo él continuaba tratando de verse mejor.

Aunque esta vez estaba tardando un poco más, ya me encontraba listo para decirle las típicas palabras de cada día desde que nos mudamos a vivir juntos, o incluso antes. Me sorprendí cuando ante mí no encontré a mi chico bañado y listo para ir a clases, sino al mismo chico pero aún con simplemente sus bóxers rodeando esas perfectas caderas, con mis dedos todavía marcados en su piel ¿Cuándo fue la última vez que lo habíamos hecho? ¿Una semana o más? Mis marcas siempre quedaban más tiempo del debido porque él tenía la piel tan clara y altamente marcable.

—Louis, voy a tardar, apenas me levanto.

— ¿Y eso? ¿Por qué? —Intenté ignorar el tono tan normal como me lo dijo ¿Qué acaso pensaba perderse las clases o qué?

—Porque sí, Dios, me duele la cabeza ¿Puedes dejar de ser tan ruidoso? Solo ve a clases y ya.

—Siempre vamos juntos, no me trates como si no hubiera hecho esto absolutamente todas las mañanas.

—Sí, lo hiciste y te lo agradezco. —El cuerpo desnudo de Harry se apoyó contra el marco de su puerta, mientras él pasaba una mano por sus rizos desordenados. — Pero ya no somos novios ¿Recuerdas? Terminamos ayer, ya no tienes que hacer estas cosas. Somos amigos, como buen amigo puedes dejarme dormir otro rato y no preocuparte por mí como si fueras mi madre.

Es cierto, ayer terminé con Harry. Él ya no es más "mi chico" y yo no estoy obligado ni a esperarlo y a decirle lo hermoso que se ve cada día, como en los últimos años.

— ¿No has dormido bien?

—No, la verdad no, estuve haciendo la tarea de la tarde toda la madrugada.

—Bueno, le diré a tu profesor que te levantaste mal ¿Vale?

—Te lo agradecería.

Esta vez salí de la casa sin Harry, el primer día de semana en tres años que salía sin él, tomé el ascensor con una extraña sensación en mi pecho, la costumbre, supongo, es normal porque antes podía perderme mi clase entera gritándole a Harry, pero nunca abandonaba nuestro hogar sin que él esté a mi lado, tomándome la mano y empezando a hablarme sobre sonreír en las mañanas y que eso ayuda a que el día mejore.

Hoy él no sonreía, sé que cuando no duerme se suele volver un poco susceptible, pero siendo sincero, no me hubiera molestado continuar con esta tradición aunque ya no seamos pareja. Hoy tampoco iba a besarlo ¿Verdad? Como cada vez que nos despedimos antes de entrar a clases, ya no me lo encontraría en el almuerzo o le mandaría fotografías de mi profesor de curso para que él se asegure que no me salté las clases, aun estando en la Universidad continuábamos teniendo esa costumbre desde antes y ahora... Ya no más.

+

— ¡Louis! ¡Louis! ¡Oye, cuidado, idiota! ¡Looooouis!

A lo lejos observé a Niall corriendo desde el fondo del pasillo, golpeando a gente, insultando a otros, todo para llegar hasta mi casillero. Me encogí un poco puesto que a esa velocidad golpearía con fuerza, pero por suerte supo frenarse antes de caer encima de mí. Suspiré, feliz de no terminar en el suelo como otras veces que mi efusivo y chismoso amigo no controlaba sus ataques de adrenalina.

— ¿Y? ¿Cuál es el chisme ahora que andas tan emocionado?

Niall, al igual que Harry, había pasado desde la secundaria a la misma Universidad conmigo, así que ya conocía su personalidad lo suficiente y contaba con que me traía una noticia muy importante o no habría corrido como para una maratón, considerando que él no era fan de practicar deporte que no fuera el golf, quizás de verlos, no de hacerlos.

—Eso debes decírmelo tú, hoy Harry llegó muy tarde, cuando le pregunté porque no estaba contigo me dijo que habían terminado. No sé, hermano, pero estamos mayo y el día de los inocentes es en abril, no pueden bromear con alguien como yo, mis chismes siempre son de calidad ¿Puedes explicarle eso?

La forma como las palabras salían tan rápido de su boca no me sorprendió, pero sí que Harry le haya contado de esa manera que habíamos roto, venga, no esperaba que lleve el luto después de la relación ya que ni yo iba a hacerlo pero ¿Por qué decirlo tan pronto? De nuevo sentí un enorme fastidio al pensar en ello, antes ya habíamos tenido rumores como esos, nuestra relación era demasiado pública como para que alguien iluso no quisiera romperla, pero siempre terminaba besando a Harry frente a todos, casi follándole la boca. Sonreí al recordar los preciosos sonrojos que eso le causaba, y como me golpeaba después, gritándome pervertido o exhibicionista. Vamos, no iba a dejar que alguien pensara que lo mío ya no era mío, y él me pertenecía.

Pero Harry ya no era mío ¿No? No debía enojarme porque quiera terminar con ello, al final cuando accedió de esa manera tan rápida, comprendí que no era el único cansado del otro.

—Terminamos. —Murmuré, sin saber bien que causó que lo dije de un modo tan cauteloso.

— ¿Qué? —Sonreí con tristeza ante la clara sorpresa de Niall.

—Que terminamos, Ni.

+

Después de aguantar por largos minutos los gritos de sorpresa de Niall, me metí a mi salón de clases para la siguiente hora, ignorando lo condenadamente irritante que era hablar de mi ruptura con Harry, cosa extraña ya que yo había causado eso, pero después lo consideré normal, es decir ¿A quién le gusta hablar de su ex pareja? Claro, a resentidos sin vida pero yo no estaba enojado con Harry, quizás sí porque había dicho que terminamos, pero no tenía que estarlo ya que era verdad, fuera de eso no había razón ¡Oh vamos, Tomlinson! Ni tú entiendes lo que estás pensando.

Gruñí de pura impotencia cuando me senté e ignoré el dolor del golpe de mi trasero contra la madera, ni siquiera estaba consiente de mis actos, solo faltaba que me termine dando contra el escritorio o lo que fuera.

—Uh, alguien anda de mal humor.

Escuché una voz femenina y solo me hizo falta su risa burlona para reconocerla, era Madison, la verdad ni idea de cual fuera su apellido, nunca tuve buena memoria, incluso para aprender el apellido de Harry cuando recién lo conocí, liaba su apellido con peluquerías, a veces hasta le decía "Harry Stylist" y él solía reírse de mis pésimas y raras ocurrencias.

— ¿Qué pasa, Mad? —La miré e intenté poner la más sincera de mis sonrisas.

—Bueno, hablé con Niall antes de entrar al salón.

Ella subió una de sus piernas hasta que apoyó su muslo sobre la gran mesa compartida, era de esas largas, como en las Universidades famosas que salen en la televisión. Poco a poco se sentó sobre la madera y dejó que su falta se arrugue entre sus piernas, alzándose lo suficiente del lado externo de sus muslos como para observar el inicio de sus glúteos. Arquee una ceja, no recordaba la última vez que me había encontrado a mí mismo en un coqueteo tan desesperado.

Sonreí al pensar que Harry le diría un buen "Puta" a las chicas que hacen ese gesto, incluso me animé al memorizar su excesivo asco hacía muchas niñas, o sus escenas de celos cuando me encontraba pasando por el error el canal de algún desfile.

—Estás soltero ¿No? ¿Qué te parece sí, ahora que ya no tienes un novio del cual ocuparte, te acompaño a tu casa a hacer la tarea juntos?

—Aún no sabes ni que tarea nos dejaran. —Le sonreí instintivamente, retando un poco su desesperado juego.

—Pero la tarea siempre sale mejor cuando se hace con alguien más.

El tono seductor con el que me habló me dejó en claro que no, no íbamos a hacer tarea, pero ¿A quién le importaba? Yo ya estaba soltero ¿No? Un poco de sexo no me haría daño, menos considerando que había terminado con mi pareja de tres largos años debido a ello, ahora estaba obteniendo un poco de lo que deseaba y no iba a desaprovecharlo.

Llevé mi mano hasta la nuca de la rubia chica y la jalé hacía mí, parándome en ese momento para capturar sus delicados labios en un beso intenso, bajando la rudeza de mis actos al recordar que era una mujer y no un chico, no mi Harry, bueno, mi ex Harry.

Solo esperaba que a él nole moleste el hecho de que lleve a una mujer a mi habitación, al final la suyase encontraba al lado de la mía.