El resumen de la semana de Jungkook había sido este:

Esperar a que sea un nuevo día para ver a Taehyung y charlar con él. 

Esperarlo para volver a invitarlo a un picnic o algo por el estilo. 

Hacer la tarea. 

Trabajar en la panadería.

Volver a esperar a Taehyung. 

Comer

Dormir. 

Levantarse

Y volver a esperar a su Hyung. 

La semana había pasado como un caracol, ya era viernes y Jungkook no tenía ni una sola esperanza de que Taehyung apareciera sentado en ese banco. 

Pero cuando llegó a las puertas de la universidad, vio el Ferrari rojo. Jungkook entró a su aula con el corazón en la mano y allí lo vio sentado, Taehyung estaba durmiendo con la capucha tapándole toda la cara. 

Jungkook se sentó a su lado y le picó la pancita con un dedo, suavemente. Taehyung dijo un "Mmh" en respuesta. 

— Traje facturas del lugar en donde trabajo... — le dijo suavemente por si estaba muy dormido — están hechas de ayer. 

Jungkook desenvolvío el papel y le ofreció una medialuna rellena con dulce de leche. Taehyung abrió los ojos y negó con la cabeza. Entonces le ofreció una con dulce de membrillo y otra con crema pastelera y un pequeño durazno sobre la crema, pero Taehyung seguía negado con la cabeza. 

— Vamos, Hyung, no puedo comerme todo esto yo solo. 

— ¡Pues si tu no te lo vas a comer, yo sí! — dijo Lisa mientras se estiraba para tomar la medialuna rellena con dulce de leche. Luego dijo con la boca llena— Tae, te estas perdiendo de algo súper rico. 

— Sí, dijo Jungkook... este tipo de aperitivos dulces los venden en Argentina y otros países de Latinoamérica, Vivian lo aprendió de ahí cuando fue a visitar hace unos años. Tienes que probar, Hyung. — convino Jungkook. 

Pero él solo quería que su Hyung le prestara atención. 

Taehyung se quitó la capucha y accedió a comer la que tenía crema pastelera. Jungkook optó por un pastelillo con azúcar negra. 

— Sí, está bueno. — comentó Taehyung. 

Jungkook comió con él muy feliz, en parte porque Taehyung había vuelto y en parte porque ese mismo viernes recibiría otra parte de su dinero. Jungkook estaba muy alegre. 

Lisa se volteó para seguir con su tarea mega atrasada y Jungkook y Tae se quedaron "A solas".

— ¿Por qué no viniste estos días, Hyung?

— Estuve enfermo. — comentó desinteresado. 

Eso era una mentira. Taehyung esos días no había podido dormir bien porque no dejaba de pensar en la hermosa voz de Jungkook cantando la melodía de aquella canción. Tampoco podía dejar de pensar en que él lo había invitado a salir. 

¿Y si la vida le estaba dando la oportunidad otra vez?

Taehyung miró a Jungkook de reojo, el menor estaba sonriendo. 

— ¿Quieres ir a una fiesta hoy? — le preguntó Taehyung con su gruesa voz. 

A Jungkook casi se le sale el agua que estaba tomando por la nariz. 

De hecho, sí se le salió y Taehyung soltó la carcajada de su vida.

— Puedo... pasarte a buscar a tu casa. — ofreció Taehyung. 

Bien, eso era un paso adelante y sus manos temblorosas lo sabían. 

— Em... ¡Iré  a una fiesta contigo! pero mejor espérame aquí en la escuela. 

—¿Por que no quieres que te pase a buscar?

—Es que... —excusa rápida, Jungkook debía decir lo que fuera ¡Y rápido! — están remodelando cerca de mi casa, y hay muchas cosas por todos lados. Es peligroso para los autos. 

— Ah bueno... ¿te espero aquí entonces?

— Sí ¿A que hora es la fiesta?

Taehyung le tocó el hombro a Lisa. 

— ¿A que hora es la fiesta de Jackson?

Ella pensó por un momento. 

— Creo que a eso de las nueve. 

Taehyung miró a Jungkook esperando una respuesta. 

— Termino de trabajar a las ocho. — dijo Jungkook — te esperaré en la cuadra del otro día a eso de las nueve menos cuarto. 

— Bien. — dijo Taehyung anotándolo como recordatorio en su alarma. Jungkook miraba su celular con insistencia — ¿Among Us?

— Among Us. — confirmó Jungkook con una sonrisa mientras Taehyung le pasaba su celular.