La lluvia había parado. Pero Jungkook no tenía ganas de dejar la casa de Taehyung. 

De todas maneras Taehyung ya había arrancado el auto. Iba a dejar a Jungkook en la cuadra de la universidad y él volvería a su casa. Mientras tanto, Jungkook jugaba al Among Us en el celular de Taehyung, de nuevo. 

— Lo puedes instalar en la computadora. — le dijo Taehyung esperando que Jungkook llegara a su casa y se descargara el juego para que ya no le robara su bendito celular. 

A Jungkook casi se le escapa decir que no tenía computadora. Pues mal, tenía que impresionar a Taehyung. 

— Tengo dos computadoras, pero ambas están llenas de memoria. 

— Deberías hacer una limpieza de archivos basura entonces. — Taehyung dobló una esquina, ya casi llegaban a la cuadra de la institución. Jungkook había insistido en que no lo llevara hasta la puerta de su casa, o si no sería el fin del mundo — o comprar dos computadoras nuevas. 

— Je je... claro... 

— Hazme caso y borra todos los archivos innecesarios. 

Jungkook asintió con la cabeza y logró hacer una "doble kill" con su compinche amarillo. Luego de eso empezó el debate para descubrir al asesino y Jungkook dejó de prestar atención. 

"Si trabajo varios meses en la panadería de Vivian, podría llegar a comprarme un celular táctil que sea relativamente económico y así podré jugar este juego" 

Jungkook le devolvió el celular a Taehyung cuando ya estaban por llegar a la cuadra de la universidad. 

— Tae... — susurró jugando con sus dedos en su regazó.

— ¿Qué?

Jungkook tragó saliva. 

— Mañana.. ¿te gustaría ir a algún lado? si el día está bonito.

Taehyung estacionó el auto. 

— No, gracias — contestó y apagó la radio. 

Mierda, eso sí que había sonado seco. Pero en defensa de Taehyung él tenía que protegerse con una barrera. 

— Podríamos hacer un picnic. Creo que el clima va a mejorar, mira el cielo. 

— Lo siento, Jungkook tengo cosas que hacer. 

— Pero es domingo — dijo Jungkook de forma "aburrida" — nadie hace nada los domingos. 

— Bueno, yo sí. 

Jungkook hizo un pucherito. 

— ¿Entonces otro día, Tae? Cuando no estés ocupado. 

Taehyung miró hacia otro lado y cerró los ojos. Claramente Jungkook lo estaba invitando a salir de una manera muy sutil. Salir con alguien implicaba sentir dolor.

Jungkook estaba esperando una respuesta, pero Taehyung seguía mirando hacia otro lado. El menor se sintió un poquito mal por la indiferencia del contrario y abrió la puerta del auto. 

— N-nos... nos vemos el lunes, Hyung. 

Y cerró, habiendo esperado un "adiós" de Tae. 

Pero Taehyung tampoco le dijo nada. solo estaba ahí, escuchando a su corazón latir con esa fuerza de mil caballos. 

Jungkook desapareció por el camino y Taehyung siguió rumbo a su propia casa, sin dejar de pensar en toda la mierda de las relaciones amorosas y amistosas. 

¿Por qué Jungkook tenía que ser tan malditamente lindo? 

Y lo más importante... ¿Acaso había aparecido en la vida de Taehyung para arruinarle la consciencia? 

Efectivamente.