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༻~"el enano desfavorecido"~༺

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Entonces... ¿Ya no estas enojado, verdad? - la pelirroja sonrió apenada, tratando de que el mexicano la mirara de cara, interponiendose en su caminata de vez en cuando, pero teniendo que quitarse torpemente al notar que el castaño no pararía de caminar en linea recta aunque se le cruzara.

Por su lado, el mexicano solo pudo suspirar pesado, callado , como los últimos diez minutos que llevaba a un lado de la chica. No sabía con exactitud si externar que en definitiva estaba molesto aún. Lo que hizo su amiga sin siquiera tomar en cuenta su opinión lo tomó por sorpresa, ya que nunca creyó que Irla tuviera ese lado tan impulsivo y algo imprudente.

Aunque, por otro lado, tampoco podía guardarle rencor, sabía que su compañera lo hizo por querer ayudarle y verlo feliz.

-Me vas a dar tu porción de postre Brennan -

El escuchar su apellido le causo escalofríos a la pelirroja, podía jurar era la primera vez que su amigo le llamaba por su apellido en vez de su nombre.

-Si, claro. Pero no me hables así que me asustas- comenta completamente sincera, haciendo una mueca mientras se desviaba por un pasillo de la base para ir a comer, sin embargo frenó y tuvo que retroceder para quedar de nuevo a lado de México, quien no la siguió, sino, el se sigue derecho yendo a una dirección completamente distinta.

Irlanda suspira pesado y señala el pasillo -Oye íbamos a comer, ¿Por donde vas si el comedor está para allá? - espectante, se cruza de brazos.

México se gira a verla y ríe levemente -¿Piensas solo en comer a caso? Creí que yo era el tragón , zanahoria- comenta burlón, guardando sus manos en los bolsillos de su pantalón militar.

Lo que anteriormente era una mirada confusa se fue deformando a una sonrisa algo siniestra, México pudo relacionarla perfectamente como una película donde Irlanda es la típica maniática recién salida del psiquiatra -Dime zanahoria de nuevo y prometo que se me olvidará que eres mi amigo para volarte los -...-

México ni siquiera la dejaría acabar esa amenaza, le daba escalofríos de tan solo darse una idea de lo que era capaz Irlanda.

-¡Bien, Bien! Ya calma, wey- río nervioso -Tengo que ir con FBI antes, tal parece que mi servicio va a ser en la noche, me va a dar bien las instrucciones de lo que me toca hoy así que llegaré tarde a la comida, pero adelantate-

Irlanda entrecerró los ojos pero al final asintió, sin inmutarse de su lugar.

Quería, no, necesitaba preguntarle...

Una terrible necesidad...

Pero tampoco podía, o no se creía capaz, después de todo estaba casi segura que México no aceptó la idea de recibir ayuda del ruso.

Claro, México era orgulloso, se recordó viéndolo bien, ignorando que la miraba como si fuera una loca, y es que si alguien era terco y necio definitivamente ese era su amigo, obviamente no aceptaría que alguien se metiera en su vida privada, en su zona mas vulnerable. Entendía que México podía ser muy cerrado y reservado con esos temas pese a parecer un libro abierto de emociones explosivas y algo torpes. Si, lo comprendía pero aun así dudaba, había una minúscula duda donde cabía la posibilidad de que su castaño favorito haya aceptado aquel trato.

Pero...tampoco es que fuera a preguntar.

-¿Podrías explicarme por que me miras como asesina en serie a punto de cometer su movida maestra? Esto me está asustando wey, ni siquiera puedo moverme e ir con FBI por que siento que brincarás como gremblin a apuñalarme por la espalda-

Irlanda ni siquiera se ofendió, estaba lo suficientemente concentrada en morderse el labio y no preguntar nada.

-Eh, ¿Irla-..?-

-¿Aceptaste el trato?-

Después de aquellas tres palabras que, salieron torpemente y a una velocidad increíble, casi incomprensible, un silencio algo drástico se presentó, dándole tiempo a Irlanda de procesar lo que acababa de preguntar, evidentemente retractandose por no aguantar la curiosidad.

México lo procesó unos segundos, suspirando aliviado de que su amiga no se volvió loca y solo estaba tratando de contenerse a preguntar.

-Claro que si morra, ahora dejame ir con FBI que luego me va a chingar si no llego a tiempo-

Ahora la que lo procesaba era Irlanda, incrédula de lo que escuchó, pero a la vez alegre de que al fin diera un paso el mexicano.

-Oh, ¡Okey! Okey ve Meicsiceo- sonrie nerviosa y se va de ahí rápido al pasillo.

México, con cara de "que demonios dijo" solo se volteó y siguió su caminata.

-¿Me dijo Messi?- susurra genuinamente confundido, tratando de recordar el trabalenguas que la Irlandesa dijo, distrayéndose en el trayecto para la oficina de su superior.

-

Llegas dos minutos tarde-

La voz firme de su superior le causó escalofríos a quien se asomaba apenado desde la puerta, incapaz de meterse a la oficina de su Coronel después de aquella voz tan seria y evidentemente enojada por el retraso.

-¿Qué no vas a entrar soldado?-

-¡Si señor!-

Sin ninguna alternativa, entró resignado, viendo de reojo a alguien más sentado enfrente del escritorio del Coronel, no pudo prestar mucha atención ya que FBI lo miraba directo a los ojos, poniendo nervioso a México.

No hagas una pendejada, no hagas una pendejada.

Se repetía cual credo mentalmente, en un intento por no verle los ojos y mantenerse firme, dando repentinamente un saludo con la mano en su frente. -Disculpe el retraso, no sucederá de nuevo- aclara recto, esperando alguna orden...o castigo.

FBI solo suspiró, acostumbrado a la torpeza de su soldado. Aún no se acostumbraba a que aquel "enano desfavorecido" (como solía apodarlo en su mente) fuera uno de los mejores soldados en puntería y vuelo, casi igualando a un aspirante, y superando a otros más que, a simple vista, se podían catalogar fácilmente como mejor soldados que él.

-Sientate México, vamos a organizar sus servicios para que no se interpongan con sus entrenamientos o deberes. - dicho esto FBI se sentó en su silla, enfrente de México y de quien miraba en silencio y con una muy pequeña sonrisa de diversión al mencionado.

-Rusia, entiendo que entrenas hasta tarde, así que podemos recorrer un poco los horarios y en vez de que cocinen en la mañana, lo hagan una noche antes, así como asear la cocina, limpiar las gradas, acomodar los materiales....- empezó a hablar FBI, girando un cuadernillo con bastantes anotaciones, señalandose a si mismo las palabras para enlistar los deberes que, por castigo, haría Rusia y México.

Mientras el peliplatinado estaba tranquilo, poniendo atención, México sufría internamente, cada vez deslizándose mas en su asiento al ver la sarta de cosas que tendría que hacer.

En definitiva no iba a dormir en un buen tiempo. Y es que le acomodaba mas hacer esos deberes en la mañana, ya que solo los levantaban para calentar, un poco de ejercicio matutino, arreglarse con su uniforme y después desayunar. Perfectamente podía bañarse rápido y ya con ese tiempo de ganancia, hacer los demás deberes que le pusiera FBI. Pero en la noche, ese era su momento sagrado de poder al fin tocar su cama y dormir plácidamente.

-Em...señor - la voz algo insegura del mexicano al fin se hace presente, llamando la atención del Coronel y el soldado.

-Hable soldado-

-¿No podríamos acomodarlo en la mañana?- pregunta inseguro pero manteniendo la mirada en su superior -Es que siento que la carga de trabajo es mejor hacerla antes del día pesado y...- antes de que pudiera continuar con su explicación, el mayor lo interrumpió -Lo se México, para ti puede que sea bueno ese horario, sin embargo, Rusia tiene mas deberes tanto en el día como en la tarde, todos tienen la noche un poco mas libre a menos de que hagan guardia pero de eso me encargo yo, para que no la hagan por lo menos cuatro semanas-

Suspiró pesado, evitando gruñir molesto al ver que de reojo, el aspirante solo sonrió levemente de lado, seguramente satisfecho por que el coronel acomodo su horario.

Después de acordar con FBI los días que se turnarían y que días les tocaban ciertas actividades, al fin pudieron irse a comer.

México caminaba por el pasillo a lado de Rusia, mirándolo molesto sin importar que siguiera caminando a su lado. Por su parte, el contrario parecía mas tranquilo, ignorando la mirada asesina que quería clavarse en su costado, solo admirando los pequeños rayos de sol que entraban por los ventanales del pasillo.

Un carraspeo, dos, tres fueron los suficientes para que Rusia solo suspirara, riendo levemente sabiendo que México quería llamar su atención.

-¿Quieres un vaso de agua?-

México fingió reír, obviamente de la manera mas falsa posible para enfatizar que no le había causado nada de gracia.

-No gracias, quiero que me expliques por que no le dijiste a FBI que estaba bien en la mañana, ¡Yo voy a hacer casi todo! , lo justo es que me acomodara a mi el horario no a ti, poste de luz-

Rusia lo miró en silencio por unos segundos, y después caminó de nuevo hacindo que México lo siguiera casi al instante.

-Voy a hacer mi parte a menos de que esté cansado, y eso si, la cocina...lavarla y hacer el desayuno te toca a ti, es lo único que pido. Lo demás me encargo yo-

Aun no le parecía del todo justo a México, pero tampoco podía pedir mas, pues el trato original era que él hiciera todo.

-¿Estas de acuerdo?-

Resignado, contesta -si, esta bien. -

Rusia asiente volviendo a su aspecto tranquilo y sonriendo de lado, en silencio, disfrutando de la tranquilidad extraña que se había formado.

-Bueno. Yo me voy- aclara México listo para huir a la cocina, pero el Ruso lo sigue, evidentemente siendo también su hora de comida.

-Provecho México, nos vemos al rato-

-uhum claro wey- va por su bandeja, solo caminando rápido por el hambre que tenía.

Después de la comida, unos cuantos entrenamientos y ensayo de protocolo, al fin llegó la hora de dormir para casi todos, casi menos ambos tricolores que se dirigían a las gradas del campo, para poder trabajar en lo que se ganaron como castigo por haber peleado aquella vez.

Cada uno inmerso en su mundo, llega al punto acordado, teniendo que frenar uno enfrente del otro antes de chocarse entre si.

-Bueno México- sonriendo, el ruso dio una leve reverencia -A sus servicios, mañana empezaremos así que te quiero con la disponibilidad necesaria - aclara viéndolo directamente -Te ayudaré a conseguir a ese tal pecas-

-No es pecas , le digo el pecoso pero no le digas tu así, es Vergonzoso y extraño-

-Esta bien, no le diré así al cara de mapache-comenta burlón, reprimiendo una leve risa.

-¡Hey!-

Solo esperaba no resultara en una catástrofe total aquel plan que, tal parece, seria mañana mismo llevado a cabo.

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ᘛ𝐴𝑐𝑙𝑎𝑟𝑎𝑐𝑖𝑜𝑛𝑒𝑠:
ᘛ no es aclaración es dato, ayer (casi antier xd) fue el día de la armada mexicana y tenía ya casi acabado el capítulo pero por cosas de exámenes no pude terminarlo, en fin...mejor tarde que nunca, pero la idea era esa, hacer un cap especial por el día.

Por cierto perdón si hay algún error, pero como verán ya es algo tarde y se me hackearon los ojos x"d

Buenoo no tengo mas que decir que me sigan en Insta, que ahí hago dinámicas de preguntas, a veces pedidos de dibujos, o simplemente comento tonterías y garabatos X'3 pero estoy segura que sería divertido implementar datos curiosos, fannarts de dibujos y hasta spoilers pequeños de esta historia y la otra 👀
Bueno, si les interesa aquí mi nombre
>> collete_61 <<

Muchas gracias por leer 💕 esperemos no muera y pueda subir mas caps x")