CAPÍTULO 47:
mamá gallina
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El plan estaba en marcha y Janne en verdad tenía miedo por sus padres y lo que les pudiera pasar si Silver se enteraba de lo que tramaban. Pero ella no creía que eso sucedería.

─ Wow, queremos derrotar a Cobra Kai, no hacer que se vean como los malditos dioses del Marketing─ Janne comentó al mirar la campaña que sus padres planeaban

─ Lo sabemos, pero necesitamos hacerlo ver real─ Hazel habló─ ¿Te llevo al entrenamiento?

─ Está bien, Eli pasará por mi─ respondió tomando su mochila

─ Así que Eli─ dijo con una sonrisa pícara─ han estado muy juntos últimamente.

─ Basta─ dijo riendo. En ese momento tocaron el timbre─. Tengo que irme, nos vemos más tarde.

─ Adiós, te quiero─ besó su mejilla.

Cuando caminó hacia la puerta entendió que su madre tenía ciertas conductas que no le agradaban, a penas había salido con Eli un par de veces mientras que mencionaba más a Moon, la había llevado a su casa y se habían encerrado en su cuarto por horas y su madre sospechaba más de una relación con Eli.

─ ¿Qué pasa?─ Eli preguntó al verla callada.

─ Nada─ ella respondió sin muchas ganas.

Cuando se percataron que estaban solos, Eli tomó su cintura mientras Janne lo abrazaba por el cuello antes de besar dulcemente sus labios.

─ Realmente extrañé besarte─ el chico dijo al separarse con una boba sonrisa.

─ Estoy comenzando a acostumbrarme a esto─ comentó─ ¿Crees que deberíamos decirle a Demetri? Es nuestro amigo, quizá lo entendería.

─ Deberíamos preguntarle a Moon si está de acuerdo─ Dijo.

─ Tienes razón.

Caminaron entrelazados de la mano mientras debatían sobre cuál era el mejor personaje de Harry Potter. Lo que comenzó como una pregunta curiosa de Janne, terminó en casi una pelea a no ser porque habían llegado a Miyagi-do y Demetri los vio.

─ ¿Debería preocuparme por está pelea?─ cuestionó.

─ Dile que Harry es el mejor personaje de la saga─ Janne se quejó.

─ No lo es─ Ella lo fulminó con la mirada.

─ Si lo es, yo siempre tengo la razón─ le guiño un ojo antes de besar su mejilla e irse a calentar.

No tenían que preocuparse por las sospechas, siempre se comportaban cariñosos el uno con el otro.

Janne se sentó en el suelo mientras hacía estiramiento de piernas y veía instagram. Observó una historia donde se veía a Devon entrenando en el dojo de Cobra Kai. Janne frunció sus labios mientras apagaba su teléfono.

─ Hola─ alzó su vista encontrándose con Robby.

El chico llevaba una playera de rayas rojas y negras que resaltaba los músculos de sus brazos y un pants que le quedaba bien, su peinado lo hacía lucir más atractivo de lo normal. Sus ojos brillaban tal cual unas perlas bajo la cálida luz del sol.

─ Hola─ Respondió en breve mientras tragaba saliva y apartaba la vista.

Escucharon un silbido. Todos se acercaron a la plataforma donde Chozen se encontraba, Janne se colocó entre Robby y Anthony.

─ ¿Dónde están mi papá y Johnny?─ Sam preguntó algo desconcertada.

─ No están─ el hombre habló con dureza─. Hoy entrenan conmigo. ¡Atención! Saluden.─ Los adolescentes hicieron lo pedido─ Cobra Kai gana terreno, debemos prepararnos. Vengan─ Compartieron miradas confundidos─ ahora, vamos a aprender sobre Yanbaru Kuina.

─ ¿Qué es eso?─ Janne preguntó ladeando su cabeza

─ ¿Un movimiento secreto para degollar?─  Chris preguntó

─ No, es un pájaro. En español se le llama el rascón de Okinawa. En peligro de extinción, no pueden volar.

─ Por eso están en peligro─ Demetrio comentó con gracia.

─ ¿Esos son huevos reales?─ Miguel preguntó cuando vio al sensei sacar una caja de huevos.

─ No, me costaron baratos en el supermercado.─ respondió─ Tomen un huevo.

Janne estiró la mano para tomar dos de los que Sam había agarrado, se hizo hacia atrás chocando con Anthony.

─ Lo siento─ El menor se disculpó

─ Toma un huevo─ dijo sonriendo a lo que el chico le devolvió el gesto con algo de timidez.

─ Yanbaru Kuina debe proteger el huevo, de Kume Shuma habu, la serpiente venenosa─ Explico─ Ustedes deben hacer lo mismo─ volteó el reloj de arena.

─ ¿De quien lo protegemos?─ Robby preguntó

─ De mí─ sacó unas kamas para hacer unos movimientos con ellas─ ¡Vamos!─ dijo.

Entonces todos los adolescentes salieron corriendo.

Era extraño volver a un dojo.

Y Janne jamás pensó que estaría planeando cómo ocultar un huevo de un sensei loco con cuchillos.

Pero estaba ocurriendo y tenía una idea que era muy efectiva.

─ ¿Siempre cargas maquillaje?─ Robby preguntó al ver a Janne pintar una piedra con base para la piel y una brocha de sombras.

─ Mi mamá siempre me dice que lo cargue por alguna emergencia, ya sabes, es muy vanidosa─ Respondió sin voltearlo a ver─. Supongo que se lo debo agradecer a ella.

Sin preguntar, Robby tomó asiento junto a ella captando su atención.

Era casi como tener un deja vu de las veces en las que iban al parque a sentarse en el pasto a platicar por horas hasta que anocheciera. Sin quererlo, la mente de ambos los había llevado a aquellos momentos provocando una sonrisa nostálgica en sus labios.

─ ¿Cómo van las cosas con tu mamá?─ preguntó de repente a lo que Janne lo miró con incredulidad.

─ Bastante bien, supongo─ le restó importancia mientras seguía concentrada en su tarea.

El silencio se instaló de nuevo, Robby se movía nervioso e impaciente, respiró hondo antes de poder hablar.

─ Lo siento─ Robby dijo de repente─ por no leer la carta, tenía miedo de saber que tenía al interior. Una parte de mi pensó que habías escrito como Miguel te hacía sentir mejor o... No lo sé, muchas cosas. Pero después pensé que tú no serías capaz de eso. Y cuando la leí, me sentí un completo idiota por no haberlo hecho antes.

Janne no sabía qué decir. Se había quedado perpleja mientras sus mejillas se ruborizan, a esa altura le hubiera gustado que Robby jamás hubiera leído la carta. Pero había pasado y no había vuelta atrás.

─ Así que pensaste que pedirme perdón en medio del juego de la mamá gallina era una buena idea─ lo cuestionó. Y el chico se quedó en silencio─ Estoy bromeando. Fuiste mi primer novio y creo que hice demasiadas cosas mal pero lo importante es aprender de ellas, así que también lo siento. Ambos cometimos errores. Ahora tú tienes a Tory y yo...

─ Terminé con Tory─ soltó de pronto tomando por sorpresa a Jnne quien sintió como su corazón se acelera.

─ Oh, lo siento─ dijo con un poco de incomodidad.

─ Si...─ Robby pudo ver cómo Janne bajaba la mirada hacia sus manos donde no había rastro de alguna pulsera lo cual le hizo sentir un nudo en su estómago─... Supongo que ahora podemos ser amigos.

Estaban por romper la primera regla de una ruptura: No puedes ser amigo de tu ex si aún hay sentimientos de por medio. Y ellos no cumplían con eso.

Aunque lo negaran ambos podían sentir el palpitar acelerado de sus corazones cada que estaban cerca del otro con una llama ardiente en su pecho que se expande ante el cruce de sus miradas combinando el verde y el azul en una mezcla perfecta llena de un amor inconcluso.

─ Si, podemos ser amigos─ Janne respondió.

Entonces escucharon otro silbido. Su tiempo de planear la estrategia para proteger su huevo había terminado.

» Damas y caballeros, que comiencen los juegos del hambre...

─ Y que la suerte esté siempre de su lado─ Robby completó provocando que ambos comiencen a reír.

Aquello no pasó desapercibido por cierto chico de peinado mohicano quien miraba receloso a Robby quién de pronto llegaba con su rostro lindo a coquetear con su chica.

Eli hizo una mueca al ver un brillo que no había visto antes en los ojos de Janne.

─ Te dije que ese no era un buen lugar para esconderlo─ Janne comentó al ver a Robby subir a la plataforma haciendo un puchero.

─ Si, si, siempre tienes razón─ el chico dijo cruzando sus brazos sobre su pecho.

─ Sí y por eso mi hijo sigue vivo─ se encogió de hombros sentada de piernas cruzadas en el pasto.

Al poco rato Eli también subió a la plataforma junto a Anthony.

─ ¿Cómo te eliminó?─ Robby intentó hacerle plática.

─ Cállate─ Dijo mirándolo con frialdad cosa que llamó la atención de Janne─ No me hables

─ Si esto es por lo del mohicano, lo siento─ Keene habló─. Sabes que Cobra Kai te vuelve un idiota.

─ ¿Así que soy un idiota?─ lo retó

─ Veamos, nos atacaste a mí y a Sam en el centro comercial. Le rompiste el brazo─ volteó a señalar a Demetri─ Destrozaste el dojo, le rompiste la nariz a Janne.

─ Y yo traté de asfixiarlo─ Janne habló por lo alto deteniendo la pelea al ver la fuerte tensión que había entre ambos─. Todos fuimos unos idiotas.

─ Así que cállense por favor─ Demetri exclamó─ Podemos concentrarnos. Hay un loco que nos ataca con armas.

─ En realidad ataca a los huevos─ La chica comentó mirando la piedra en su mano fijamente─. Si lo piensan, técnicamente los huevos son menstruación de gallina.

Aquel comentario se ganó miradas llenas de asco por parte de todos los chicos sobre la plataforma.

Pronto Sam y Miguel salieron de la casita siendo seguidos por Chozen.

─ Todos fracasaron─ Dijo mirándolos

─ ¿Quién dice que fracasé?─ Janne lo retó poniéndose de pié─ Soy la mejor mamá gallina en el valle─ festejó.

Chozen se acercó y golpeó su mano con una kata lanzando la piedra pintada al suelo. Al ver qué no se rompió observó confundido.

» ¡Lo he engañado!─ festejo con alegría─ Soy la mejor madre─ hizo un baile. Pero al dar un paso hacia atrás sintió algo crujir bajo la suela de su zapato.─ Carajo─ murmuró

─ Mataste a tu hijo─ Chozen se burló.

Y con los brazos cruzados subió a la plataforma.

─ Te dije que esa no era una buena idea─ Robby la imitó burlándose de ella.

─ Genial, tenemos una segunda oportunidad para fracasar cómo padres.─ Janne dijo al ver un huevo nuevo en su mano.

─ Nos pateara el trasero de nuevo─ Mitch comentó.

Todos se dieron vuelta listos para volver a pensar en cómo esconder su huevo.

─ ¡No!─ Anthony los detuvo─ Esperen. Dijo que las serpientes nos derribaran uno por uno. ¿Verdad? Así como él nos derribó uno por uno─ todos lo observaban atentos─ ¿Y si no fuéramos  muchos individuos? ¿Y si estuviéramos..?

─ Juntos─ su hermana complemento.

─ Cómo un grupo de asesinato en un videojuego.

─ Incluso en el nivel 85 no puedes atacar el gran reino solo─ Demetri comentó.

─ Cierto, necesita un equipo. Y todos tienen un rol─ Eli agregó.

─ La única forma de ganar es trabajar juntos, como una unidad.

─ Brillante, LaRusso─ Janne dijo revolviendo el cabello del menor.

Colocaron todos los huevos en una canasta para subir a la plataforma y colocarse en hilera frente a ellos.

─ ¿Estamos seguros de poner todos los huevos en una canasta?─ Demetri cuestionó─ Se supone que no debes hacer eso.

─ Esto funcionará─ Anthony dijo.

─ No, no funcionará─ Janne dijo bajando la guardia─ Sam, préstame tu mochila, necesito algunas sudaderas.

─ ¿Qué vas a hacer?─ Miguel preguntó mirando a la chica.

─ Básicamente un nido, ponemos la canasta de huevos en la mochila de Sam y alrededor sudaderas para que no se muevan y sobrevivan─ Explicó.

─ Eso es mejor que una canasta─ Demetri dijo.

Escucharon un silbido anunciando el inicio del ataque.

─ ¡Ahí viene!─ Mitch exclamó asustado.

─ Cálmate, Aliento de Gorila─ Bert comentó.

─ Dejen de llamarlo así o voy a patearlos.─ Janne amenazó─ No dejen que se acerque─ ordenó mientras metía la canasta a la mochila.

Intentó hacer el nido lo más rápido que pudo, pronto Chozen apareció atacando a sus compañeros que lanzaban golpes y se defendían entre ellos. Cuando Janne terminó, cerró la mochila para entregársela a Anthony.

─ Mantente lejos y cuídalos─ le dijo.

Los chicos atacaban mientras Sam y Janne vigilaban al menor. Al ver qué Chozen había caído justo en frente de la mochila, Anthony la tomó haciéndose hacia atrás mientras las dos chicas salían al ataque.

Sam atacaba a la izquierda mientras Janne cubría la derecha, manejaban la situación perfecta. LaRusso tomó el brazo del sensei para que Mathews lanzará una patada hacia su pecho.

Sin embargo, Chozen se defendió lanzando a Sam contra Janne provocando que perdieran el equilibrio por el impulso y cayeran al suelo una sobre la otra. LaRusso ayudó a que su amiga se pusiera de pié al tiempo que Robby y Eli lanzan una patada hacia él.

Cuando el hombre se levantó vio a todos los adolescentes en posición de ataque. Intentó dar un paso al frente pero ellos se pusieron alerta.

─ La serpiente se da por vencida─ Dijo dando un saludo hacia los niños.

─ ¡Funcionó!─ festejaron y Janne chocó los cinco con Anthony que parecía muy feliz por haber sido útil con su plan.